Los Panzer alemanes: detrás del mito
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- Cabo
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Creo que ya se ha comentado en este foro,pero lo voy a decir.En mi opinion,Model era un gran comandante en operaciones de defensa,pero algo menos en ofensivas.Yo creo que se equivoco en las operaciones en su sector.Jamas logro una penetracion importante de las lineas enemigas en su parte de la ofensiva.Se dice,que no tenia medios blindados suficientes,yo no lo veo asi.Un saludo.
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KURSK
Para occidente, la batalla de Kursk estuvo durante décadas en el limbo de la historia; los historiadores anglosajones apenas reseñaban los combates del arco de Orel-Kursk, centrando la guerra en el frente oriental en los momentos de Moscú y Stalingrado. De ese modo se centraban en la campaña de Normandía, convirtiéndola en el eje decisivo de la victoria aliada, y no volvía a mencionarse al ER hasta el paso del Vístula y la caída de Berlín. Eso no cambió hasta los primeros 80, cuando la atención de los estudiosos se centró por fin en la URSS. A raíz de ello la situación se desplazó al otro extremo y se generó un enorme volumen de mitología en torno a Ciudadela y sus consecuencias. Es a partir de los primeros 90, con el acceso a los archivos soviéticos, cuando se han podido empezar a desmontar parte de las leyendas surgidas en torno a ese enfrentamiento a la vez que se desmoronaba buena parte de la mitología alemana en torno al conflicto, (como la parte que culpaba de todas las calamidades a un Hitler irracional y babeante que echaría espumarajos por la boca mientras daba órdenes a sus generales, o la de la Wermatch inocente y de blancas manos que jamás supo nada de las atrocidades nazis)
Afortunadamente hoy es posible contrastar bastante documentación sobre el tema y presentar un cuadro razonable de los combates de julio del 43. A medida que avance el tema iré tocando algunos de los mitos más recurrentes de Kursk, y viendo qué queda al revisarlos con seriedad.
EL FRACASO DEL IX EJÉRCITO
Uno de los mitos, probablemente el más extendido, presenta los combates en torno al saliente como un dantesco choque de masas acorazadas. Sin embargo los combates entre carros fueron escasos, y estuvieron más bien centrados en el avance del II PzKorp SS. Por el contrario, en los combates al norte del saliente fueron la excepción antes que la regla: el ER se apoyó sobre todo en la infantería y la artillería, y fueron los infantes los que finalmente detuvieron a las fuerzas de Model.
5 DE JULIO
Como vimos, la madrugada del 5 de julio la artillería sovietica se adelantó al asalto alemán. La eficacia del tiro soviético fue mediana y las fuerzas de Model no sufrieron demasiadas bajas, pero el duelo artillero entablado a continuación obligó a demorar el asalto alemán varias horas, que las fuerzas del IX aprovecharon para reagrupar sus puntas de asalto, desorganizadas en la granizada soviética.
En el aire se produjeron combates muy duros, que en su conjunto fueron ganados por la LW gracias a la red de radar Freya que permitió a los aviadores de la VI LF. Los pilotos alemanes se hicieron con la superioridad local y la mantuvieron varios días, aunque tras reponerse del golpe inicial la VVS les disputó el cielo casi hora tras hora.
Hacia las 5,30 de la madrugada las primeras tropas alemanas, del XXIII Cuerpo se lanzaron contra las posiciones situadas entre el 13º y el 48º ejércitos del Frente Central. El objetivo era alcanzar lo antes posible la zona en torno a Maloarkhangelsk, aunque el ataque cumplía sobre todo una función distractoria, mientras se preparaba el golpe principal. Debido a ello las fuerzas asaltantes no llevaban apenas apoyo blindado, aparte de algunas baterías de stugs, EL avance se volvió enseguida una agonbía para la infanterñia alemana y el empuje inicial se vio frenado apenas a 1,5 km de las posiciones iniciales.
Por contar el asalto principal tuvo un buen inicio, El plan de Model era abrirse camino con un fuerte asalto de la 20ª PzDiv y la 6ª InfDiv infantería apoyada por el 505 sPzAbt y un batallón del 656 regimiento de PzJg (ferdinands). Model confiaba en que se abrieran paso con la suficiente contundencia como para lanzar al día siguiente a la 2ª PzDiv como refuerzo a fin de aprovechar el éxito. De este modo esperaba conservar intacta su fuerza acorazada el mayor tiempo posible, quizás temiendo que las fuerzas del ER situadas frente al saliente de Orel (guarnecido por el 2ª PzArm) se lanzaran al asalto y le embolsaran contra las fuerzas del Frente Central.
Lo que no previó Model es que el punto crucial de la batalla se iba a dar ese primer día, porque el avance del 505 zPzAbt superó sus espectativas y arrolló las posiciones de la 15ª división de fusileros tomando Butyrky y la 20ª PzDiv había logrado hacerse con las posiciones soviéticas en Bobrik y la 6ª InfDiv, en el falco izquierdo, avanzaba bajo la cobertura de los Tiger del 505 y los ferdinand hacia las posiciones de Ponyri, amenazando con partir en dos el dispositivo de defensa de Rokossovsky. Si en ese momento la 2ª PzDiv hubiera estado lista para reforzar el asalto es probable que se hubiera logrado la penetración, pero no era así y el esfuerzo de las tropas que encabezaron el combate iba a ser a la postre baldío.
Rokossovsky reaccionó a toda prisa y mandó dos brigadas CC, una de artillería de campaña y una de morteros para reforzar las posiciones amenazadas mientras el 27ª regimiento acorazado de Guardias lanzaba un feroz contraataque. Las fuerzas restantes de la 15ª de fusileros lucharon por cada palmo del terreno sin ceder al pánico.
Un segundo avance contra Alexandrovka por parte de la292 InfDiv avanzó bien con el apoyo de dos compañías de ferdinands, pero los fusileros del ER lograron frenar a la infanter´ñia alemana y los cazacarros quedaron aislados de sus tropas de cobertura. Igualmente al oeste del asalto principal las fuerzas de la 258ª InfDiv habían sido frenadas casi en seco hacia Muravi.
Sólo en el centro del dispositivo alemán se había logrado un avance considerable, pero a costa de fuertes pérdidas. Sobre todo por los campos de minas. EL desgaste del 505 sPzAbt era alto, y aunque los tigres dañados por las minas podían recuperarse y repararse el tiempo corría contra los alemanes. Para la infantería intentar cubrirse del feroz fuego de las posiciones soviéticas en los campos crecidos había sido inútil porque el cereal estaba sembrado de minas que habían pasado inadvertidas a la observación aérea. A mediodía las fuerzas asaltantes estaban agotadas. Las unidades de ingenieros sufrieron muchas bajas mientras trataban de limpiar caminos para los panzer a través de las minas. Sin apoyo de la infantería, los ferdinands que avanzaban hacia Alexandrovka se veían ahora atacados por los soldados soviéticos que lograron inmovilizar y destruir varios de los pesados cazacarros.
La infantería soviética se aferraba al terreno como si les hubieran clavado ahí, Los blindados pasaban sobre trincheras aparentemente vacías pero cuando se alejaban los fusileros descargaban un diluvio de balas sobre los granaderos que les seguían o se lanzaban sobre la espalda de los carros alemanes con minas, botellas de gasolina, lanzallamas…Los panzer y stugs retrocedían para abrir paso a la infantería y el proceso volvía a repetirse en la siguiente posición, y así metro a metro, imponiendo un desgaste tremendo a las tropas germanas. Incluso las tropas de ingenieros del ER fueron capaces de plantar nuevos campos de minas casi en las narices de los avances alemanes.
Al final del día las tropas alemanas sólo habían logrado penetrar 7-8 km en el dispositivo soviético. Las bajas eran altísimas: casi 20000 hombres, aunque en su mayoría heridos. Lo peor, la ocasión de romper de forma directa a través de las líneas soviéticas había pasado y ahora las fuerzas de refuerzo del ER se preparaban para los combates del día siguiente. SIn embargo Model se mostraba optimista en sus informes, ya que el combate había sido durísimo pero creía que al día siguiente se lograría la ruptura.
Para occidente, la batalla de Kursk estuvo durante décadas en el limbo de la historia; los historiadores anglosajones apenas reseñaban los combates del arco de Orel-Kursk, centrando la guerra en el frente oriental en los momentos de Moscú y Stalingrado. De ese modo se centraban en la campaña de Normandía, convirtiéndola en el eje decisivo de la victoria aliada, y no volvía a mencionarse al ER hasta el paso del Vístula y la caída de Berlín. Eso no cambió hasta los primeros 80, cuando la atención de los estudiosos se centró por fin en la URSS. A raíz de ello la situación se desplazó al otro extremo y se generó un enorme volumen de mitología en torno a Ciudadela y sus consecuencias. Es a partir de los primeros 90, con el acceso a los archivos soviéticos, cuando se han podido empezar a desmontar parte de las leyendas surgidas en torno a ese enfrentamiento a la vez que se desmoronaba buena parte de la mitología alemana en torno al conflicto, (como la parte que culpaba de todas las calamidades a un Hitler irracional y babeante que echaría espumarajos por la boca mientras daba órdenes a sus generales, o la de la Wermatch inocente y de blancas manos que jamás supo nada de las atrocidades nazis)
Afortunadamente hoy es posible contrastar bastante documentación sobre el tema y presentar un cuadro razonable de los combates de julio del 43. A medida que avance el tema iré tocando algunos de los mitos más recurrentes de Kursk, y viendo qué queda al revisarlos con seriedad.
EL FRACASO DEL IX EJÉRCITO
Uno de los mitos, probablemente el más extendido, presenta los combates en torno al saliente como un dantesco choque de masas acorazadas. Sin embargo los combates entre carros fueron escasos, y estuvieron más bien centrados en el avance del II PzKorp SS. Por el contrario, en los combates al norte del saliente fueron la excepción antes que la regla: el ER se apoyó sobre todo en la infantería y la artillería, y fueron los infantes los que finalmente detuvieron a las fuerzas de Model.
5 DE JULIO
Como vimos, la madrugada del 5 de julio la artillería sovietica se adelantó al asalto alemán. La eficacia del tiro soviético fue mediana y las fuerzas de Model no sufrieron demasiadas bajas, pero el duelo artillero entablado a continuación obligó a demorar el asalto alemán varias horas, que las fuerzas del IX aprovecharon para reagrupar sus puntas de asalto, desorganizadas en la granizada soviética.
En el aire se produjeron combates muy duros, que en su conjunto fueron ganados por la LW gracias a la red de radar Freya que permitió a los aviadores de la VI LF. Los pilotos alemanes se hicieron con la superioridad local y la mantuvieron varios días, aunque tras reponerse del golpe inicial la VVS les disputó el cielo casi hora tras hora.
Hacia las 5,30 de la madrugada las primeras tropas alemanas, del XXIII Cuerpo se lanzaron contra las posiciones situadas entre el 13º y el 48º ejércitos del Frente Central. El objetivo era alcanzar lo antes posible la zona en torno a Maloarkhangelsk, aunque el ataque cumplía sobre todo una función distractoria, mientras se preparaba el golpe principal. Debido a ello las fuerzas asaltantes no llevaban apenas apoyo blindado, aparte de algunas baterías de stugs, EL avance se volvió enseguida una agonbía para la infanterñia alemana y el empuje inicial se vio frenado apenas a 1,5 km de las posiciones iniciales.
Por contar el asalto principal tuvo un buen inicio, El plan de Model era abrirse camino con un fuerte asalto de la 20ª PzDiv y la 6ª InfDiv infantería apoyada por el 505 sPzAbt y un batallón del 656 regimiento de PzJg (ferdinands). Model confiaba en que se abrieran paso con la suficiente contundencia como para lanzar al día siguiente a la 2ª PzDiv como refuerzo a fin de aprovechar el éxito. De este modo esperaba conservar intacta su fuerza acorazada el mayor tiempo posible, quizás temiendo que las fuerzas del ER situadas frente al saliente de Orel (guarnecido por el 2ª PzArm) se lanzaran al asalto y le embolsaran contra las fuerzas del Frente Central.
Lo que no previó Model es que el punto crucial de la batalla se iba a dar ese primer día, porque el avance del 505 zPzAbt superó sus espectativas y arrolló las posiciones de la 15ª división de fusileros tomando Butyrky y la 20ª PzDiv había logrado hacerse con las posiciones soviéticas en Bobrik y la 6ª InfDiv, en el falco izquierdo, avanzaba bajo la cobertura de los Tiger del 505 y los ferdinand hacia las posiciones de Ponyri, amenazando con partir en dos el dispositivo de defensa de Rokossovsky. Si en ese momento la 2ª PzDiv hubiera estado lista para reforzar el asalto es probable que se hubiera logrado la penetración, pero no era así y el esfuerzo de las tropas que encabezaron el combate iba a ser a la postre baldío.
Rokossovsky reaccionó a toda prisa y mandó dos brigadas CC, una de artillería de campaña y una de morteros para reforzar las posiciones amenazadas mientras el 27ª regimiento acorazado de Guardias lanzaba un feroz contraataque. Las fuerzas restantes de la 15ª de fusileros lucharon por cada palmo del terreno sin ceder al pánico.
Un segundo avance contra Alexandrovka por parte de la292 InfDiv avanzó bien con el apoyo de dos compañías de ferdinands, pero los fusileros del ER lograron frenar a la infanter´ñia alemana y los cazacarros quedaron aislados de sus tropas de cobertura. Igualmente al oeste del asalto principal las fuerzas de la 258ª InfDiv habían sido frenadas casi en seco hacia Muravi.
Sólo en el centro del dispositivo alemán se había logrado un avance considerable, pero a costa de fuertes pérdidas. Sobre todo por los campos de minas. EL desgaste del 505 sPzAbt era alto, y aunque los tigres dañados por las minas podían recuperarse y repararse el tiempo corría contra los alemanes. Para la infantería intentar cubrirse del feroz fuego de las posiciones soviéticas en los campos crecidos había sido inútil porque el cereal estaba sembrado de minas que habían pasado inadvertidas a la observación aérea. A mediodía las fuerzas asaltantes estaban agotadas. Las unidades de ingenieros sufrieron muchas bajas mientras trataban de limpiar caminos para los panzer a través de las minas. Sin apoyo de la infantería, los ferdinands que avanzaban hacia Alexandrovka se veían ahora atacados por los soldados soviéticos que lograron inmovilizar y destruir varios de los pesados cazacarros.
La infantería soviética se aferraba al terreno como si les hubieran clavado ahí, Los blindados pasaban sobre trincheras aparentemente vacías pero cuando se alejaban los fusileros descargaban un diluvio de balas sobre los granaderos que les seguían o se lanzaban sobre la espalda de los carros alemanes con minas, botellas de gasolina, lanzallamas…Los panzer y stugs retrocedían para abrir paso a la infantería y el proceso volvía a repetirse en la siguiente posición, y así metro a metro, imponiendo un desgaste tremendo a las tropas germanas. Incluso las tropas de ingenieros del ER fueron capaces de plantar nuevos campos de minas casi en las narices de los avances alemanes.
Al final del día las tropas alemanas sólo habían logrado penetrar 7-8 km en el dispositivo soviético. Las bajas eran altísimas: casi 20000 hombres, aunque en su mayoría heridos. Lo peor, la ocasión de romper de forma directa a través de las líneas soviéticas había pasado y ahora las fuerzas de refuerzo del ER se preparaban para los combates del día siguiente. SIn embargo Model se mostraba optimista en sus informes, ya que el combate había sido durísimo pero creía que al día siguiente se lograría la ruptura.
Última edición por japa el 18 May 2007, 13:49, editado 1 vez en total.
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6 DE JULIO
El segundo día de combates amaneció bien para los alemanes. dos brigadas acorazadas soviéticas se lanzaron al contraataque, pero la LW y la artillería germana lograron desorganizar el asalto que en vez de una embestida concentrada llegó a las lineas alemanas espaciadamente. Los 16 Tigers operativos del 505 barrieron a las fuerzas asaltantes sin dificultades, eliminando casi 50 carros soviéticos en apenas diez minutos. Los carros soviéticos supervivientes se retiraron: sólo habían logrado ganar algo de tiempo para los soldados que se fortificaban más al sur, y a un precio atroz. Sólo la artillería del ER logró mantener a raya a las fuerzas que se lanzaron en persecución de los carros derrotados.
Los combates iban a centrarse en torno a las posiciones de Olkhovatka y la colina 274, la mayor altura de la zona, desde la que los soviéticos iban a frenar todos los ulteriores avances alemanes. El 505 reforzó el asalto de las dos PzDiv de refresco mandadas por Model, la 2ª y la 9ª, mientras la 18ª encabezaba el ataque hacia Ponyri y las tropas de la 216ª InfDiv y la 78 de asalto, apoyadas por dos batallones de stugs, se lanzaban hacia Maloarkhangelst.
La resistencia de las tropas soviéticas fue demasiado para los asaltantes. Una y otra vez los blindados alemanes se lanzaron al asalto y una y otra vez fueron rechazados. Las brigadas de artillería del ER y la brigada de morteros equipada con Katiushas fueron vitales en esas horas de batalla, concentrando un fuego devastador sobre los avances alemanes. Pese al dominio de la LW los aviones de la VVS se lanzaban una y otra vez contra las fuerzas atacantes (según palabras de un testigo alemán, jamás había visto semejante concentración de aviones soviéticos).
Un nuevo contraataque acorazado, esta vez por parte del XIX cuerpo acorazado, se lanzó contra las fuerzas en torno a Olkhovatka. De nuevo los cañones de largo alcance de los tigres y la rápida actuación de la LW frenó el asalto con grandes pérdidas. Ese día el 505 sPzAbt se había cobrado casi un centenar de carros soviéticos entre T-34 y T-70.
Sin embargo el balance del día era descorazonador para los alemanes. las bajas ascendían ya a más de 25000 y el segundo día de combates sólo había aportado un par de kilómetros en los puntos más fáciles. Ahora, al caer la noche, unidades aisladas de panzer eran atacadas por los fusileros del ER y sus tripulaciones pasarían horas de angustia mientras esperaban que la mañana trajera refuerzos. Las pérdidas de carros por minas y averías eran muy altas. El 505 apenas podía reunir una compañía de tigers. La mayoría de los carros eran reparables y se esperaba la inmediata llegada de otra compañía (el batallón había iniciado la batalla incompleto) pero la lucha de ese día no presagiaba nada bueno.
7 y 8 DE JULIO
En los siguientes días Model lanzó sus ataques de froma más amplia, tratando de flanquear la dura resistencia de Olkhovatka. La 18ª PzDiv más la 292 y 86 InfDiv se lanzaron contra el pueblo de Ponyri. Los defensores igualaron e incluso superaron la determinación de sus camaradas al oeste. Campos de minas, carros enterrados hasta la torreta, apoyo artillero desde casi todas als direcciones posibles… las fuerzas de Model se vieron arrastradas a una lucha callejera en un espacio asombrosamente pequeño, combatiendo por la escuela, la torre de agua, la estación…Ponyri fue la tumba de la ofensiva alemana y fue justamente bautizado como "El pequeño Stalingrado"
Las tropas soviéticas se movían tras las líneas reagrupándose para reforzar de nuevo la colina 274. Model no se había olvidado de su flanco derecho y de nuevo lanzó el día 7 a la 2ª PzDiv contra Olkhovatka apoyada por la 9ª PzDiv más la 4ª PzDiv (de su reserva acorazada). Durante el día 8 los combates arreciaron en torno a la colina 274 y Ponyri. De las seis PzDiv de Model, ya estaban luchando cinco,
9 AL 11 DE JULIO
Los combates se sucedieron de forma similar los tres siguientes días de la batalla. El 11 de julio finalmente la colina 274 y Pnyri estaban en manos alemanas, pero era un triunfo ridículamente pequeño para el tremendo castigo que había sufrido el IX Ejército. Las tropas de Model estaba exhaustas, y sus unidades acorazadas habían sido diezmadas. EL terreno estaba en manos alemanas y la mayoría de los carros podían ser recuperados y reparados, pero la posición táctica de las tropas alemanas era ahora una verdadera pesadilla. Lo que Model había tratado de evitar, la amenaza de un envolvimiento, aparecía ahora como una sombra ominosa sobre el horizonte.
Model se preparó para la defensa. El 505 fue retirado de primera línea para reagruparse y reponer pérdidas. Sólo se habían perdido en combate cinco Pz VI, pero los demás estaban muy desgastados y necesitaban una frenética puesta a punto. El 505 pasó a ser el núcleo de la reserva defensiva del IX ejército.
Las tropas de infantería, tras seis días de batalla, estaban al límite de sus fuerzas. El gasto en combustible y municiones había superado todas las previsiones. Aún más grave, la LW había perdido el dominio del aire: ahora la VVS se enseñoreaba del espacio aéreo.
El IX ejército no podía dar un paso más: Model había fracasado.
El segundo día de combates amaneció bien para los alemanes. dos brigadas acorazadas soviéticas se lanzaron al contraataque, pero la LW y la artillería germana lograron desorganizar el asalto que en vez de una embestida concentrada llegó a las lineas alemanas espaciadamente. Los 16 Tigers operativos del 505 barrieron a las fuerzas asaltantes sin dificultades, eliminando casi 50 carros soviéticos en apenas diez minutos. Los carros soviéticos supervivientes se retiraron: sólo habían logrado ganar algo de tiempo para los soldados que se fortificaban más al sur, y a un precio atroz. Sólo la artillería del ER logró mantener a raya a las fuerzas que se lanzaron en persecución de los carros derrotados.
Los combates iban a centrarse en torno a las posiciones de Olkhovatka y la colina 274, la mayor altura de la zona, desde la que los soviéticos iban a frenar todos los ulteriores avances alemanes. El 505 reforzó el asalto de las dos PzDiv de refresco mandadas por Model, la 2ª y la 9ª, mientras la 18ª encabezaba el ataque hacia Ponyri y las tropas de la 216ª InfDiv y la 78 de asalto, apoyadas por dos batallones de stugs, se lanzaban hacia Maloarkhangelst.
La resistencia de las tropas soviéticas fue demasiado para los asaltantes. Una y otra vez los blindados alemanes se lanzaron al asalto y una y otra vez fueron rechazados. Las brigadas de artillería del ER y la brigada de morteros equipada con Katiushas fueron vitales en esas horas de batalla, concentrando un fuego devastador sobre los avances alemanes. Pese al dominio de la LW los aviones de la VVS se lanzaban una y otra vez contra las fuerzas atacantes (según palabras de un testigo alemán, jamás había visto semejante concentración de aviones soviéticos).
Un nuevo contraataque acorazado, esta vez por parte del XIX cuerpo acorazado, se lanzó contra las fuerzas en torno a Olkhovatka. De nuevo los cañones de largo alcance de los tigres y la rápida actuación de la LW frenó el asalto con grandes pérdidas. Ese día el 505 sPzAbt se había cobrado casi un centenar de carros soviéticos entre T-34 y T-70.
Sin embargo el balance del día era descorazonador para los alemanes. las bajas ascendían ya a más de 25000 y el segundo día de combates sólo había aportado un par de kilómetros en los puntos más fáciles. Ahora, al caer la noche, unidades aisladas de panzer eran atacadas por los fusileros del ER y sus tripulaciones pasarían horas de angustia mientras esperaban que la mañana trajera refuerzos. Las pérdidas de carros por minas y averías eran muy altas. El 505 apenas podía reunir una compañía de tigers. La mayoría de los carros eran reparables y se esperaba la inmediata llegada de otra compañía (el batallón había iniciado la batalla incompleto) pero la lucha de ese día no presagiaba nada bueno.
7 y 8 DE JULIO
En los siguientes días Model lanzó sus ataques de froma más amplia, tratando de flanquear la dura resistencia de Olkhovatka. La 18ª PzDiv más la 292 y 86 InfDiv se lanzaron contra el pueblo de Ponyri. Los defensores igualaron e incluso superaron la determinación de sus camaradas al oeste. Campos de minas, carros enterrados hasta la torreta, apoyo artillero desde casi todas als direcciones posibles… las fuerzas de Model se vieron arrastradas a una lucha callejera en un espacio asombrosamente pequeño, combatiendo por la escuela, la torre de agua, la estación…Ponyri fue la tumba de la ofensiva alemana y fue justamente bautizado como "El pequeño Stalingrado"
Las tropas soviéticas se movían tras las líneas reagrupándose para reforzar de nuevo la colina 274. Model no se había olvidado de su flanco derecho y de nuevo lanzó el día 7 a la 2ª PzDiv contra Olkhovatka apoyada por la 9ª PzDiv más la 4ª PzDiv (de su reserva acorazada). Durante el día 8 los combates arreciaron en torno a la colina 274 y Ponyri. De las seis PzDiv de Model, ya estaban luchando cinco,
9 AL 11 DE JULIO
Los combates se sucedieron de forma similar los tres siguientes días de la batalla. El 11 de julio finalmente la colina 274 y Pnyri estaban en manos alemanas, pero era un triunfo ridículamente pequeño para el tremendo castigo que había sufrido el IX Ejército. Las tropas de Model estaba exhaustas, y sus unidades acorazadas habían sido diezmadas. EL terreno estaba en manos alemanas y la mayoría de los carros podían ser recuperados y reparados, pero la posición táctica de las tropas alemanas era ahora una verdadera pesadilla. Lo que Model había tratado de evitar, la amenaza de un envolvimiento, aparecía ahora como una sombra ominosa sobre el horizonte.
Model se preparó para la defensa. El 505 fue retirado de primera línea para reagruparse y reponer pérdidas. Sólo se habían perdido en combate cinco Pz VI, pero los demás estaban muy desgastados y necesitaban una frenética puesta a punto. El 505 pasó a ser el núcleo de la reserva defensiva del IX ejército.
Las tropas de infantería, tras seis días de batalla, estaban al límite de sus fuerzas. El gasto en combustible y municiones había superado todas las previsiones. Aún más grave, la LW había perdido el dominio del aire: ahora la VVS se enseñoreaba del espacio aéreo.
El IX ejército no podía dar un paso más: Model había fracasado.
- Von Kleist
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Buenas
Es lo que tiene el asalto a posiciones fortificadas; si se presenta una oportunidad de ruptura, el atacante debe estar preparado para aprovecharla inmediatamente. Dicha oportunidad se presentó el mismo dia 5, pero el conservadurismo de Model hizo que no pudiera aprovecharse la situación de colapso temporal de las defensas rusas. Y después de eso, los rusos se repusieron. Si los panzer hubiesen podido salir a terreno abierto durante la jornada del 5, quien sabe que habría podido pasar.
Saludos
El IX ejército no podía dar un paso más: Model había fracasado.
Es lo que tiene el asalto a posiciones fortificadas; si se presenta una oportunidad de ruptura, el atacante debe estar preparado para aprovecharla inmediatamente. Dicha oportunidad se presentó el mismo dia 5, pero el conservadurismo de Model hizo que no pudiera aprovecharse la situación de colapso temporal de las defensas rusas. Y después de eso, los rusos se repusieron. Si los panzer hubiesen podido salir a terreno abierto durante la jornada del 5, quien sabe que habría podido pasar.
Saludos
-
- General de División
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Uno de los lugares comunes sobre Kursk es que la batalla estaba decidida antes de comenzar, hicieran lo que hicieran los alemanes, pero la realidad es diferente. El ER no tenía en ese momento una superioridad abrumadora: sólo la tenía en artillería, donde cuadruplicaba e incluso quintuplicaba en algunos sectores a los alemanes, pero en carros, por ejemplo, la relación era de 1 a 1'4. ¿Podrían haber logrado los alemanes una victoria decisiva? es dudoso, ya que no había un verdadero objetivo estratégico en Ciudadela, pero sí podían haber causado pérdidas al ER lo bastante graves como para que se el frente hubiera quedado estabilizado al menos en lo que quedaba de año. Pero para ello hubieran sido necesario que se cumplieran los objetivos tácticos de la operación, y como podemos ver el IX ejército ni siquiera logró algo parecido a una ruptura.
¿Ese resultado es atribuible en exclusiva a uno de los dos bandos? No. Model cometió varios errores en su planificación. El más grave fue adoptar un despliegue inicial demasiado rígido: al situar la reserva acorazada lejos de la línea de frente no pudo reaccionar a tiempo cuando la ocasión crítica se produjo antes de tiempo. Un segundo error fue no concentrar adecuadamente la fuerza y dispersarla durante los combates. El único momento en que se luchó con fuerzas concentradas fue el primer día en el sector central del avance (la 20ª pánzer, el 505 sPzAbt y un batallón de ferdinands) y entonces sí hubo progresos, pero enseguida el esfuerzo acorazado se dispersó. En vez de concentrar en días siguientes sus fuerzas acorazadas Model comprometió dos PzDiv a Ponyri y otras dos a la colina 274. No sólo no se lograron los objetivos con rápidez (sólo el día 11 lograron los alemanes dominar parcialmente ambos puntos) sino que las fuerzas atacantes sufrieron un fuerte desgaste. Se puede entender la prudente disposición de la fuerza de Model el primer día de combates, pero no la falta de flexibilidad operativa y mucho menos la ausencia de concentración, ya que esos conceptos eran la base misma de la acción de las fuerzas Panzer, y Model no era un recién llegado a la Panzerwaffe.
Pero además por parte soviética las cosas se hicieron de otro modo: un punto que ha sido pasado por alto usualmente es que el ER no sólo había logrado reconstruir su fuerza en 1943 sino que además había creado una estructura de mando mucho más flexible que la que tenía en 1941, y aunque a nivel téctico las tropas soviéticas aún estaban bastante por detrás de los alemanes, a nivel operacional habían mejorado muchísimo. Eso permitió mover las fuerzas en el frente con mucha más agilidad que los alemanes y reforzar con celeridad los puntos amenazados del dispositivo. Las unidades de artillería, sobre todo, fueron la clave de la derrota alemana. Las baterías de campaña respondieron con una contundencia tremenda a las necesidades de las fuerzas de primera línea, gracias a los observadores de avanzada y las posiciones elevadas.
La imagen de los choques acorazados se cae por su propio peso en las luchas del norte del saliente. Los contraataques acorazados soviéticos fueron puntuales y en general fueron frenados a poco de comenzar con grandes pérdidas. Por el contrario, fue la infantería del ER la que llevó el peso de la batalla contra los blindados. Un oficial del 505 comentaba tras la batalla que las medidas del ER de cara a familiarizar a sus hombres con la lucha CC habían sido tremendamente exitosos. No hubo pánico ante los avances acorazados. Incluso las fuerzas de la 15ª de fusileros resistieron a pie firme frente a los Tigers y los supervivientes lograron replegarse en buen orden y sin dejar de luchar. Las tropas se lanzaban una y otra vez sobre los carros enemigos y aunque no lograran destruirlos sí que producían suficientes daños como para obligar a reparaciones. Los Ferdinand sufrieron bastante cuando fueron aislados de su infantería de apoyo y el 656 sufrió pérdidas muy fuertes, casi un 30% de sus vehículos destruidos o inutilizados. Sólo el hecho de que las fuerzas alemanas se mantuvieran sobre el terreno conquistado permitió recuperar muchos de los carros dañados, lo que redujo las pérdidas materiales.
Pero las pérdidas humanas también eran graves y dificilmente recuperables. El IX ejército sufrió entre el 6 y el 11 de julio unas 50.000 bajas. El ER tuvo más pero eran recuperables. Además la capacidad ofensiva de los soviéticos en torno al saliente de Orel se mantenía intacta, y eso iba a notarse de inmediato.
¿Ese resultado es atribuible en exclusiva a uno de los dos bandos? No. Model cometió varios errores en su planificación. El más grave fue adoptar un despliegue inicial demasiado rígido: al situar la reserva acorazada lejos de la línea de frente no pudo reaccionar a tiempo cuando la ocasión crítica se produjo antes de tiempo. Un segundo error fue no concentrar adecuadamente la fuerza y dispersarla durante los combates. El único momento en que se luchó con fuerzas concentradas fue el primer día en el sector central del avance (la 20ª pánzer, el 505 sPzAbt y un batallón de ferdinands) y entonces sí hubo progresos, pero enseguida el esfuerzo acorazado se dispersó. En vez de concentrar en días siguientes sus fuerzas acorazadas Model comprometió dos PzDiv a Ponyri y otras dos a la colina 274. No sólo no se lograron los objetivos con rápidez (sólo el día 11 lograron los alemanes dominar parcialmente ambos puntos) sino que las fuerzas atacantes sufrieron un fuerte desgaste. Se puede entender la prudente disposición de la fuerza de Model el primer día de combates, pero no la falta de flexibilidad operativa y mucho menos la ausencia de concentración, ya que esos conceptos eran la base misma de la acción de las fuerzas Panzer, y Model no era un recién llegado a la Panzerwaffe.
Pero además por parte soviética las cosas se hicieron de otro modo: un punto que ha sido pasado por alto usualmente es que el ER no sólo había logrado reconstruir su fuerza en 1943 sino que además había creado una estructura de mando mucho más flexible que la que tenía en 1941, y aunque a nivel téctico las tropas soviéticas aún estaban bastante por detrás de los alemanes, a nivel operacional habían mejorado muchísimo. Eso permitió mover las fuerzas en el frente con mucha más agilidad que los alemanes y reforzar con celeridad los puntos amenazados del dispositivo. Las unidades de artillería, sobre todo, fueron la clave de la derrota alemana. Las baterías de campaña respondieron con una contundencia tremenda a las necesidades de las fuerzas de primera línea, gracias a los observadores de avanzada y las posiciones elevadas.
La imagen de los choques acorazados se cae por su propio peso en las luchas del norte del saliente. Los contraataques acorazados soviéticos fueron puntuales y en general fueron frenados a poco de comenzar con grandes pérdidas. Por el contrario, fue la infantería del ER la que llevó el peso de la batalla contra los blindados. Un oficial del 505 comentaba tras la batalla que las medidas del ER de cara a familiarizar a sus hombres con la lucha CC habían sido tremendamente exitosos. No hubo pánico ante los avances acorazados. Incluso las fuerzas de la 15ª de fusileros resistieron a pie firme frente a los Tigers y los supervivientes lograron replegarse en buen orden y sin dejar de luchar. Las tropas se lanzaban una y otra vez sobre los carros enemigos y aunque no lograran destruirlos sí que producían suficientes daños como para obligar a reparaciones. Los Ferdinand sufrieron bastante cuando fueron aislados de su infantería de apoyo y el 656 sufrió pérdidas muy fuertes, casi un 30% de sus vehículos destruidos o inutilizados. Sólo el hecho de que las fuerzas alemanas se mantuvieran sobre el terreno conquistado permitió recuperar muchos de los carros dañados, lo que redujo las pérdidas materiales.
Pero las pérdidas humanas también eran graves y dificilmente recuperables. El IX ejército sufrió entre el 6 y el 11 de julio unas 50.000 bajas. El ER tuvo más pero eran recuperables. Además la capacidad ofensiva de los soviéticos en torno al saliente de Orel se mantenía intacta, y eso iba a notarse de inmediato.
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En esta página se puede ver un listado de todos los Ferdinands destruidos en Kursk:
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_ ... rsk_43.htm
Como menciona japa, la mayoría de las pérdidas fueron causadas por minas y artilleria. Vean el efecto de la artilleria sobre el Ferdinand de abajo:
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_43/731-01.jpg
Le ha arrancado un trozo de coraza frontal.
Una cosa por la que se puede criticar a los rusos es cierto retraso en introducir tanques más potentes. Tras Barbarroja se cancelaron muchos proyectos para concentrarse en la producción de modelos en servicio. Durante Kursk los rusos trabajaban en un T-34 mejorado, pero que montaba un cañón de 76.2mm, claramente ineficaz frente a los últimos carros alemanes.
En fin, cuesta creer que sólo se desplegase el Su-152, y se mantuviesen los T-34 y KV-1, con cañones y disposiciones de torretas claramente inferiores a los modelos alemanes.
Saludos.
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_ ... rsk_43.htm
Como menciona japa, la mayoría de las pérdidas fueron causadas por minas y artilleria. Vean el efecto de la artilleria sobre el Ferdinand de abajo:
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_43/731-01.jpg
Le ha arrancado un trozo de coraza frontal.
La imagen de los choques acorazados se cae por su propio peso en las luchas del norte del saliente. Los contraataques acorazados soviéticos fueron puntuales y en general fueron frenados a poco de comenzar con grandes pérdidas.
Una cosa por la que se puede criticar a los rusos es cierto retraso en introducir tanques más potentes. Tras Barbarroja se cancelaron muchos proyectos para concentrarse en la producción de modelos en servicio. Durante Kursk los rusos trabajaban en un T-34 mejorado, pero que montaba un cañón de 76.2mm, claramente ineficaz frente a los últimos carros alemanes.
En fin, cuesta creer que sólo se desplegase el Su-152, y se mantuviesen los T-34 y KV-1, con cañones y disposiciones de torretas claramente inferiores a los modelos alemanes.
Saludos.
- Von Kleist
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Buenas
Y muy pocas bajas de los Elephants y Tigers fueron irremplazables. Muchos de los carros podían repararse y volverse a lanzar al combate. Lo cual demuestra que si Model hubiera concentrado adecuadamente sus medios, la pinza norte de Ciudadela pudo haber obtenido un éxito táctico equivalente al que Hoth logró en el lado sur del saliente.
Saludos
Como menciona japa, la mayoría de las pérdidas fueron causadas por minas y artilleria.
Y muy pocas bajas de los Elephants y Tigers fueron irremplazables. Muchos de los carros podían repararse y volverse a lanzar al combate. Lo cual demuestra que si Model hubiera concentrado adecuadamente sus medios, la pinza norte de Ciudadela pudo haber obtenido un éxito táctico equivalente al que Hoth logró en el lado sur del saliente.
Saludos
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Visitando el enlace posteado por alejandro_, no puedo dejar de quedarme con la boca abierta con los leñazos que llegaron a recibir algunos de ellos
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_43/122-04.jpg
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_43/323-02.jpg
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_ ... 653-02.jpg
Por otro lado, he observado el detalle que la mayoría de los Ferdinands fotografiados presentan la (que supongo yo) escotilla de emergencia abierta, como por ejemplo aquí:
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_43/624-06.jpg
Y quizás suene como una cuestión banal y absurda, ¿pero las escotillas de emergencia (en caso que lo fuesen) de los Ferdinands funcionaban con algún tipo de explosivo que hacia detonar la escotilla o similar desde el interior del vehículo? Porque yo no he visto ni rastro de las mismas en las fotografías, quedando sólo el hueco (quizás los pies de foto escritos con alfabeto cirílico sean esclarecedores, pero yo no sé traducirlos ni transcribirlos )...
Un saludo,
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_43/122-04.jpg
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_43/323-02.jpg
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_ ... 653-02.jpg
Por otro lado, he observado el detalle que la mayoría de los Ferdinands fotografiados presentan la (que supongo yo) escotilla de emergencia abierta, como por ejemplo aquí:
http://grayknight.narod.ru/Ferds_Kursk_43/624-06.jpg
Y quizás suene como una cuestión banal y absurda, ¿pero las escotillas de emergencia (en caso que lo fuesen) de los Ferdinands funcionaban con algún tipo de explosivo que hacia detonar la escotilla o similar desde el interior del vehículo? Porque yo no he visto ni rastro de las mismas en las fotografías, quedando sólo el hueco (quizás los pies de foto escritos con alfabeto cirílico sean esclarecedores, pero yo no sé traducirlos ni transcribirlos )...
Un saludo,
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No era tanto una escotilla de emrgencia sino un evacuador de vainas (a través de un ventanuco en medio de la puerta cilíndrica), aunque en un apuro la tripulación podría haber salido por ahí. De hecho era el punto más vulnerable a un ataque de infantería ya que si te pillaban en el momento de sacar una vaina y tenían un lanzallamas adios muy buenas, y era lo que intentaban forzar para meter dentro un par de granadas, así que es normal que no quede nada: seguramente lo volaban una vez inmobilizado el carro y a otra cosa mariposa
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No era tanto una escotilla de emrgencia sino un evacuador de vainas (a través de un ventanuco en medio de la puerta cilíndrica), aunque en un apuro la tripulación podría haber salido por ahí.
Tambien venía muy bien para cargar la munición. De todas maneras los Ferdinands tenían un error garrafal: carecían de ametralladora. En Kursk muchas veces quedaban aislados de la infanteria y los rusos les atacaban con lanzallamas o minas. Muchas tripulaciones desesperadas intentaban defenderse disparando a traves del cañón con una ametralladora o lo que tuvieran.
Tras la batalla fueron reenviados a Alemania, donde se les instaló una ametralladora.
Y muy pocas bajas de los Elephants y Tigers fueron irremplazables. Muchos de los carros podían repararse y volverse a lanzar al combate.
Si, pero algunos estaban bastante dañados. Los alemanes tenían una definición muy flexible de "vehículo dañado". Si lo era ligero es que se podía reparar en los talleres del frente, daños graves significaba que debían de ser enviados de vuelta a casa para repararlos. Kursk se decidió en unos días, y para el 18 de Julio los alemanes tenían 399 tanques en reparación, y habían perdido completamente otros 191.
Esto lo olvidan muchos amantes de los Tigres, que consideran que un Tigre-I que es enviado 8 meses a casa para ser reparado es tan solo un vehículo dañado.
Por cierto, se debería haber pensado en algún vehículo de reparación para evitar situaciones como ésta:
http://modelforum.upce.cz/forum/download.php?id=86040
Saludos.
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- Cabo Primero
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Nunca he entendido la mentalidad de Model durante ciudadela. Estaba claro que lo que iba a hacerse era una especie de Blizkrieg pero mucho mas difícil. El enemigo sabia por donde iban a atacar, y se había preparado a conciencia, pero aun así no dejaba de ser una operación de ruptura y embolsamiento, y si algo sabia el Heer era que para lograr una ruptura debes lanzar todo lo que tengas a la vez y cuanto antes mejor, porque si no das tiempo a que se distribuyan las reservas en profundidad. Esta claro que si pierdes todos tus panzers no vas a poder enfrentarte a las reservas enemigas, pero que mas te da eso si no consigues romper la línea de defensa.
Si lo que quería era reservar sus panzers, podía haber formado con ellos una segunda línea de cuña, tras los stugs, Tigers y Ferdinands, pero no menos de 2 o 3 Div. panzers debía haber lanzado al combate el primer día.
Un saludo.
Si lo que quería era reservar sus panzers, podía haber formado con ellos una segunda línea de cuña, tras los stugs, Tigers y Ferdinands, pero no menos de 2 o 3 Div. panzers debía haber lanzado al combate el primer día.
Un saludo.
Amor es rey tan grande...
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alejandro_ escribió:Tambien venía muy bien para cargar la munición. De todas maneras los Ferdinands tenían un error garrafal: carecían de ametralladora. En Kursk muchas veces quedaban aislados de la infanteria y los rusos les atacaban con lanzallamas o minas. Muchas tripulaciones desesperadas intentaban defenderse disparando a través del cañón con una ametralladora o lo que tuvieran.
Tras la batalla fueron reenviados a Alemania, donde se les instaló una ametralladora.
Tengo yo mis dudas. La ametralladora frontal apenas cubría unos 45º a ambos lados del eje del carro, con lo que la infantería solo tenía que dejarlos pasar para atacarles.
Aunque claro, siempre mejor algo que nada.
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Luego veremos el análisis que hicieron los soviéticos del Ferdinand tras Kursk. Pero vamos con el Grupo de Ejércitos Sur.
EL FRENTE SUR: VICTORIAS INÚTILES
El avance del ejército alemán en la parte sur del saliente fue muy diferente al del IX ejército, tanto en su ejecución y medios como en los resultados inmediatos. A la postre, sus esfuerzos serían tan inútiles como los de sus compañeros del norte.
El ataque del Grupo de Ejércitos Sur iba a realizarse mediante tres puntas acorazadas; las dos primeras las formaría el IV PzArm de Hoth: el XLVII PzKorp debía lanzarse casi directamente hacia el norte, en dirección a Oboyan, y el II SS PzKorp debía atacar a su derecha, a medio camino entre el XLVIII y la ciudad de Belgorod, para unir ambas puntas de ataque en torno a Choyan, tras el río Psel, a medio camino de Kursk, para luego continuar avanzando hacia el norte y reunirse en Kursk con el IX ejército de Model. La tercera punta la formaría el Destacamento Kempf, que debía iniciar su ataque al este de Belgorod, atravesando el río Donetz, y virar hacia el norte para cubrir el flanco oriental de las fuerzas de Hoth avanzando hacia Prohorovka. Una vez rebasados los tres primeros anillos de defensas soviéticos se lograría suficiente espacio táctico como para maniobrar y aniquilar a todas las fuerzas enemigas presentes.
Hoth modificó a finales de junio este planteamiento estratégico ya que los informes de la observación aérea y las escuchas radiofónicas le permitieron deducir que la reserva estratégica soviética iba a concentrarse más al oeste de lo que habían previsto y era muy posible que se viera atacado de flanco en el momento de asaltar las posiciones del ER en el río Psel, una situación táctica demasiado peligrosa ya que estaría en una estrecha franja de terreno entre el Psel y el Donetz lo que impediría un avance rápido para salir de la trampa y negaría la necesaria movilidad táctica para enfrentarse al asalto enemigo, así que decidió modificar la ruta de avance. El IV PzArm llevaría a cabo las primeras fases de la ofensiva de acuerdo a lo previsto pero antes de alcanzar el Psel los dos PzKorp virarían hacia el este para dirigirse directamente a Prohorovka para enfrentarse ahí con la reserva acorazada soviética en posición ventajosa y terreno de su elección, mientras el destacamento Kempf cerraba la tenaza sobre las fuerzas soviéticas desde el este. De este modo esperaba aniquilar a la mayor parte de las fuerzas acorazadas soviéticas entre el 11 y el 15 de julio y retomar su ruta hacia el encuentro con Model en Kursk. Eso tira por tierra la idea tantas veces expuesta de que la batalla de Prohorovka fue un golpe soviético que cortó por sorpresa el avance alemán: Hoth contaba con que los combates tendrían lugar precisamente allí, y avanzó en esa dirección deliberadamente por considera que esa era la mejor opción táctica. Manstein aprobó las modificaciones propuestas por Hoth antes de que Ciudadela tuviera su fecha de ejecución decidida.
Aquí podemos ver ya una de las diferencias más importantes con las operaciones del IX ejército. Al contrario que Model, Hoth no se atuvo ferreamente a los planes establecidos sino que tuvo suficiente visión como para modificarlos en base a las informaciones sobre la fuerza soviética. Como veremos la flexibilidad operativa se mantendría durante los combates para evitar situaciones peligrosas ya que Hoth previó diversos movimientos en función de lo que fuera sucediendo durante el avance y no verse sorprendido.
Así pues, el 4 de julio los tres grupos acorazados estaban desplegados en sus posiciones de partida, con el XLVII PzKorp de Knobelsdorff en el flanco izquierdo del asalto, el II SS PzKorp de Hausser en el centro del dispositivo y el Destacamento de Kempf en el flanco derecho. El LII Cuerpo del general Ott debía amagar una finta hacia el Psel para atraer fuerzas enemigas y luego iría desplegándose en el flanco izquierdo del avance del XLVII.
El mismo 4 de julio la infantería del IV PzArm inició una serie de ataques preliminares a fin de facilitar el asalto acorazado que debía romper el frente enemigo. Una serie de tormentas torrenciales obstaculizó mucho los movimientos alemanes, sobre todo en el area del XLVII PzKorp. Las unidades de granaderos de la GrossDeustchland consiguieron alcanzar sus objetivos, pero las de la 3ª PzDiv no, lo que ralentizaría el avance inicialde las fuerzas de Knobelsdorf. En el sector del II SS PzKorp las lluvias fueron menos intensas y las tropas de avanzada aseguraron varios pasos de gran importancia, lo que facilitaría mucho la penetración inicial.
El LII cuerpo se vio enfrentado en su asalto lateral a una resistencia enemiga muy superior a lo previsto y se replegó rápidamente tras sufrir fuertes pérdidas.
Tras esos movimientos preparatorios, sólo parcialmente exitosos, todo estaba listo para que se iniciase la ofensiva.
EL FRENTE SUR: VICTORIAS INÚTILES
El avance del ejército alemán en la parte sur del saliente fue muy diferente al del IX ejército, tanto en su ejecución y medios como en los resultados inmediatos. A la postre, sus esfuerzos serían tan inútiles como los de sus compañeros del norte.
El ataque del Grupo de Ejércitos Sur iba a realizarse mediante tres puntas acorazadas; las dos primeras las formaría el IV PzArm de Hoth: el XLVII PzKorp debía lanzarse casi directamente hacia el norte, en dirección a Oboyan, y el II SS PzKorp debía atacar a su derecha, a medio camino entre el XLVIII y la ciudad de Belgorod, para unir ambas puntas de ataque en torno a Choyan, tras el río Psel, a medio camino de Kursk, para luego continuar avanzando hacia el norte y reunirse en Kursk con el IX ejército de Model. La tercera punta la formaría el Destacamento Kempf, que debía iniciar su ataque al este de Belgorod, atravesando el río Donetz, y virar hacia el norte para cubrir el flanco oriental de las fuerzas de Hoth avanzando hacia Prohorovka. Una vez rebasados los tres primeros anillos de defensas soviéticos se lograría suficiente espacio táctico como para maniobrar y aniquilar a todas las fuerzas enemigas presentes.
Hoth modificó a finales de junio este planteamiento estratégico ya que los informes de la observación aérea y las escuchas radiofónicas le permitieron deducir que la reserva estratégica soviética iba a concentrarse más al oeste de lo que habían previsto y era muy posible que se viera atacado de flanco en el momento de asaltar las posiciones del ER en el río Psel, una situación táctica demasiado peligrosa ya que estaría en una estrecha franja de terreno entre el Psel y el Donetz lo que impediría un avance rápido para salir de la trampa y negaría la necesaria movilidad táctica para enfrentarse al asalto enemigo, así que decidió modificar la ruta de avance. El IV PzArm llevaría a cabo las primeras fases de la ofensiva de acuerdo a lo previsto pero antes de alcanzar el Psel los dos PzKorp virarían hacia el este para dirigirse directamente a Prohorovka para enfrentarse ahí con la reserva acorazada soviética en posición ventajosa y terreno de su elección, mientras el destacamento Kempf cerraba la tenaza sobre las fuerzas soviéticas desde el este. De este modo esperaba aniquilar a la mayor parte de las fuerzas acorazadas soviéticas entre el 11 y el 15 de julio y retomar su ruta hacia el encuentro con Model en Kursk. Eso tira por tierra la idea tantas veces expuesta de que la batalla de Prohorovka fue un golpe soviético que cortó por sorpresa el avance alemán: Hoth contaba con que los combates tendrían lugar precisamente allí, y avanzó en esa dirección deliberadamente por considera que esa era la mejor opción táctica. Manstein aprobó las modificaciones propuestas por Hoth antes de que Ciudadela tuviera su fecha de ejecución decidida.
Aquí podemos ver ya una de las diferencias más importantes con las operaciones del IX ejército. Al contrario que Model, Hoth no se atuvo ferreamente a los planes establecidos sino que tuvo suficiente visión como para modificarlos en base a las informaciones sobre la fuerza soviética. Como veremos la flexibilidad operativa se mantendría durante los combates para evitar situaciones peligrosas ya que Hoth previó diversos movimientos en función de lo que fuera sucediendo durante el avance y no verse sorprendido.
Así pues, el 4 de julio los tres grupos acorazados estaban desplegados en sus posiciones de partida, con el XLVII PzKorp de Knobelsdorff en el flanco izquierdo del asalto, el II SS PzKorp de Hausser en el centro del dispositivo y el Destacamento de Kempf en el flanco derecho. El LII Cuerpo del general Ott debía amagar una finta hacia el Psel para atraer fuerzas enemigas y luego iría desplegándose en el flanco izquierdo del avance del XLVII.
El mismo 4 de julio la infantería del IV PzArm inició una serie de ataques preliminares a fin de facilitar el asalto acorazado que debía romper el frente enemigo. Una serie de tormentas torrenciales obstaculizó mucho los movimientos alemanes, sobre todo en el area del XLVII PzKorp. Las unidades de granaderos de la GrossDeustchland consiguieron alcanzar sus objetivos, pero las de la 3ª PzDiv no, lo que ralentizaría el avance inicialde las fuerzas de Knobelsdorf. En el sector del II SS PzKorp las lluvias fueron menos intensas y las tropas de avanzada aseguraron varios pasos de gran importancia, lo que facilitaría mucho la penetración inicial.
El LII cuerpo se vio enfrentado en su asalto lateral a una resistencia enemiga muy superior a lo previsto y se replegó rápidamente tras sufrir fuertes pérdidas.
Tras esos movimientos preparatorios, sólo parcialmente exitosos, todo estaba listo para que se iniciase la ofensiva.
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5 DE JULIO: DESTACAMENTO KEMPF
Kempf esperaba poder atravesar al menos los dos primeros dispositivos de defensa soviéticos durante el primer día. Sobre las 2'30 de la madrugada las fuerzas del Destacamento iniciaron el paso de Donetz, sin apoyo de la LW (que estaba concentrada en apoyar al IV PzArm) pero con una fuerte pantalla artillera. Pese a las inevitables fricciones (Goering había exigido que los regimientos de Flak mantuvieran su mando independientemente del Heer) el apoyo de los 88 fue decisivo en esos primeros momentos. Las fuerzas Flak se dispusieron en tres escalones de avance tras las puntas del destacamento, el primero para batir directamente los puntos fuertes del dispositivo soviético, el segundo concentraba su fugo para frenar los contragolpes enemigos junto a la artillería de campaña del Heer y el tercero, además de apoyar a la artillería, cubriría la defensa antiaérea del Destacamento (además de las piezas de 88 los tres regimientos alineaban casi 900 cañones AA de calibres inferiores).
Recordemos que el Destacamento Kempf estaba formado por tres cuerpos de ejército, el III PzKorp del general Speider, el IX Cuerpo de Rauss y el XLII Cuerpo del general Mattenklott. El III PzKorp llevó a cabo la maniobra principal de ruptura en la zona de Gorodische y desde la cabeza de puente que mantenía la 168ª InfDiv al este de Belgorod. A su asalto siguieron los cruces realizados por las fuerzas de Rauss. El XLII, por su parte, llevó a cabo un amago distractorio al sur del río Neshegol (un afluente del Donetz que dividía en dos la zona de frente asignada al Destacamento Kempf) y cubrió con su artillería el asalto del IX Cuerpo.
El avance inicial fue rápido ya que la eficacia de la barrera artillera alemana contra las primeras posiciones del ER había sido muy alta. La resistencia se endureció repentinamente a 4-5 km del río, con duros combates defensivos, continuos contraataques y un fuerte asalto por parte de los aviones del VVS, que fue repelido gracias a la densa concentración de artillería AA.
La mayor amenaza para el avance se produjo cuando las fuerzas del IX Cuerpo fueron asaltadas de flanco porunidades acorazadas, que fueron repelidas gracias a los 88.
El III PzKorp tuvo algunos problemas en el asalto inicial. Las 7ª y 19ª PzDiv lograron cruzar y avanzar pese a la fuerte resistencia, pero la 6ª PzDiv y la 168 InfDiv se vieron frenadas al noroeste de Belgorod lo que iba a desequilibrar el avance del Destacamento y producir un estrechamiento de su penetración. Más adelante veremos las consecuencias. De momento, los retrasos producidos implicaban que tan sólo el primer cinturón defensivo soviético fue atravesado en ese primer día de combates.
Sólo una consideración antes de pasar al II SS PzKorp. El 503 sPzAbt no fue utilizado de forma concentrada, ya que Kempf consideraba que sus PzDiv no tenían suficiente fuerza para la ruptura inicial, así que las PzDiv 7ª y 19ª recibieron una compañía de 12 Tigers cada una como apoyo quedando el 503 reducido a una compañía más la fuerza de apoyo del HQ (24 Tigers) desplegada como apoyo al mando de artillería.
Kempf esperaba poder atravesar al menos los dos primeros dispositivos de defensa soviéticos durante el primer día. Sobre las 2'30 de la madrugada las fuerzas del Destacamento iniciaron el paso de Donetz, sin apoyo de la LW (que estaba concentrada en apoyar al IV PzArm) pero con una fuerte pantalla artillera. Pese a las inevitables fricciones (Goering había exigido que los regimientos de Flak mantuvieran su mando independientemente del Heer) el apoyo de los 88 fue decisivo en esos primeros momentos. Las fuerzas Flak se dispusieron en tres escalones de avance tras las puntas del destacamento, el primero para batir directamente los puntos fuertes del dispositivo soviético, el segundo concentraba su fugo para frenar los contragolpes enemigos junto a la artillería de campaña del Heer y el tercero, además de apoyar a la artillería, cubriría la defensa antiaérea del Destacamento (además de las piezas de 88 los tres regimientos alineaban casi 900 cañones AA de calibres inferiores).
Recordemos que el Destacamento Kempf estaba formado por tres cuerpos de ejército, el III PzKorp del general Speider, el IX Cuerpo de Rauss y el XLII Cuerpo del general Mattenklott. El III PzKorp llevó a cabo la maniobra principal de ruptura en la zona de Gorodische y desde la cabeza de puente que mantenía la 168ª InfDiv al este de Belgorod. A su asalto siguieron los cruces realizados por las fuerzas de Rauss. El XLII, por su parte, llevó a cabo un amago distractorio al sur del río Neshegol (un afluente del Donetz que dividía en dos la zona de frente asignada al Destacamento Kempf) y cubrió con su artillería el asalto del IX Cuerpo.
El avance inicial fue rápido ya que la eficacia de la barrera artillera alemana contra las primeras posiciones del ER había sido muy alta. La resistencia se endureció repentinamente a 4-5 km del río, con duros combates defensivos, continuos contraataques y un fuerte asalto por parte de los aviones del VVS, que fue repelido gracias a la densa concentración de artillería AA.
La mayor amenaza para el avance se produjo cuando las fuerzas del IX Cuerpo fueron asaltadas de flanco porunidades acorazadas, que fueron repelidas gracias a los 88.
El III PzKorp tuvo algunos problemas en el asalto inicial. Las 7ª y 19ª PzDiv lograron cruzar y avanzar pese a la fuerte resistencia, pero la 6ª PzDiv y la 168 InfDiv se vieron frenadas al noroeste de Belgorod lo que iba a desequilibrar el avance del Destacamento y producir un estrechamiento de su penetración. Más adelante veremos las consecuencias. De momento, los retrasos producidos implicaban que tan sólo el primer cinturón defensivo soviético fue atravesado en ese primer día de combates.
Sólo una consideración antes de pasar al II SS PzKorp. El 503 sPzAbt no fue utilizado de forma concentrada, ya que Kempf consideraba que sus PzDiv no tenían suficiente fuerza para la ruptura inicial, así que las PzDiv 7ª y 19ª recibieron una compañía de 12 Tigers cada una como apoyo quedando el 503 reducido a una compañía más la fuerza de apoyo del HQ (24 Tigers) desplegada como apoyo al mando de artillería.
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