Submarinos del Eje en la Costa Oeste de los Estados Unidos
- atticus1973
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Submarinos del Eje en la Costa Oeste de los Estados Unidos
Me gustaría tener información acerca de la actividad de submarinos del Eje en California y en los estados de la Costa Oeste de Estados Unidos.
Gracias.
Gracias.
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- General de División
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Casi nula. Hubo un curioso ataque aéreo protagonizado por un avión lanzado desde un submarino del que nadie llegó a darse cuenta (algún vecino de la zona dijo haber visto un avión japonés, pero las autoridades le debieron recomendar que tomara menos anís en el desayuno), un proyecto de atacar el Canal de Panamá de la misma manera… nada militarmente real. Eso sí, se mantuvo una vigilancia bastante fuerte por si acaso. El resto de eje (Alemania e Italia) actuaron en el Atlántico salvo algún submarino alemán que hizo la travesía hacia Japón y en cualquier caso no tengo noticia de que ninguno intentara operar en el Pacífico.
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- Sargento Segundo
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Hubo dos intentos alemanes de infiltrar comandos en EEUU, pero ambos fracasaron. En la costa del Pacífico, como bien ha dicho Japa, sólo hubo algunas acciones aisladas.
Un enlace de la wikipedia sobre ataques a suelo estadounidense durante la SGM (en inglés):
http://en.wikipedia.org/wiki/Attacks_on_North_America_during_World_War_II
Un enlace de la wikipedia sobre ataques a suelo estadounidense durante la SGM (en inglés):
http://en.wikipedia.org/wiki/Attacks_on_North_America_during_World_War_II
La violencia es el último recurso del incompetente
Isaac Asimov
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- urquhart
- General de Ejército
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Hola a todos:
tal vez no tenga mucho que ver con el hilo, pero entraría en el concepto de posible presencia de fuerzas del eje en lugares remotos.
En 1942 existía cierta preocupación por parte del Imperio Británico, concretamente de Sudafrica, de la posibilidad del establecimiento de fuerzas aeronavales japonesas en Madagascar, colonia francesa leal a Vichy, del mismo modo que había ocurrido en Conchincina. Esta preocupación, junto a cierta preocupación británica a un "coup de force" gaullista, llevaron a la ocupación británica de la Isla, inicialmente del soberbio puerto de Diego Suarez (07-05-42). Hasta septiembre de 1942 no se complataría la total ocupación.
Debemos recordar que un Crucero Auxiliar Alemán, minó aguas australianas y bombardeó las instalaciones mineras de Nauru, en el Pacífico.
Saludos.
ah, tampoco debemos olvidarnos de las bases en la Antártida.
tal vez no tenga mucho que ver con el hilo, pero entraría en el concepto de posible presencia de fuerzas del eje en lugares remotos.
En 1942 existía cierta preocupación por parte del Imperio Británico, concretamente de Sudafrica, de la posibilidad del establecimiento de fuerzas aeronavales japonesas en Madagascar, colonia francesa leal a Vichy, del mismo modo que había ocurrido en Conchincina. Esta preocupación, junto a cierta preocupación británica a un "coup de force" gaullista, llevaron a la ocupación británica de la Isla, inicialmente del soberbio puerto de Diego Suarez (07-05-42). Hasta septiembre de 1942 no se complataría la total ocupación.
Debemos recordar que un Crucero Auxiliar Alemán, minó aguas australianas y bombardeó las instalaciones mineras de Nauru, en el Pacífico.
Saludos.
ah, tampoco debemos olvidarnos de las bases en la Antártida.
Tempus Fugit
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- Suboficial
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Creo haber leído que los japoneses tenían en mente la idea de provocar incendios forestales en EEUU lanzando globos de hidrógeno desde submarinos. Es decir, la idea era ésta:
Submarinos japoneses se acercarían a la costa oeste de EEUU y lanzarían globos de hidrógeno con la esperanza de que llegaran hasta zonas boscosas, se estrellaran y provocaran incendios forestales. Lo que no recuerdo es si llegaron a lanzar alguno de estos globos incendiarios o la cosa quedó en un simple proyecto.
Submarinos japoneses se acercarían a la costa oeste de EEUU y lanzarían globos de hidrógeno con la esperanza de que llegaran hasta zonas boscosas, se estrellaran y provocaran incendios forestales. Lo que no recuerdo es si llegaron a lanzar alguno de estos globos incendiarios o la cosa quedó en un simple proyecto.
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- Soldado Primero
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- Registrado: 03 Abr 2004, 20:10
- Ubicación: Zaragoza
Creo recordar que a finales del 44, envíaron varios miles de esos globos y aunque casi todos se perdieron en el mar, hubo uno que explotó (causando algún daño en la subestación de suministro de electricidad), en la planta en la que se estaba construyendo la bomba atómica que luego arrasaria Nagasaki
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- Sargento Segundo
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- Registrado: 13 Jul 2004, 12:37
El lanzamiento de globos incendiarios contra los EEUU fue llamada en código operación Fu Go.
http://en.wikipedia.org/wiki/Balloon_bomb
http://en.wikipedia.org/wiki/Balloon_bomb
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Isaac Asimov
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- atticus1973
- Recluta
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- Registrado: 01 Sep 2004, 13:13
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Quiero agradecer todas vuestras respuestas, no sé por qué había oído o leído algo sobre submarinos japoneses en la bahía de San Francisco o en las playas de Santa Mónica. Por otra parte sobre los ataques con globos aerostáticos encontré este extracto en una página argentina:
"Al desarrollarse el penúltimo año de lucha de la Segunda Guerra Mundial, el 4 de noviembre de 1944, un buque de la Armada de los Estados Unidos halló, flotando en el océano, cerca de las costas americanas del Pacífico, un gran trozo de tela hecha jirones. Cuando se procedió a subirla a bordo se descubrió que llevaba atada una carga de considerable peso. En el momento que ascendían la tela al navío, la misteriosa carga se precipitó hacia el fondo del mar.
Sólo se consiguió la tela que, evidentemente, había pertenecido a un globo. El hecho de que Ilevara inscripciones en japonés fue suficiente para poner en sobre aviso a los mandos norteamericanos, quienes creyeron que los nipones estarían utilizando nuevas y extrañas formas de agresión. Ese mismo día, el general Wilbur, del ejército de los Estados Unidos, recibió el primer informe sobre el descubrimiento.
Transcurrieron dos semanas hasta que se encontraron, también en el mar, los restos de otro globo. En breve tiempo se descubrió un tercero semiquemado en Montana.
A partir de estos hallazgos, los militares estadounidenses se percataron del peligro que podía representar esta inédita modalidad de guerra puesta en práctica por el enemigo; táctica que consistía en el bombardeo del territorio americano haciendo uso de globos impulsados por el viento. Se calculaba la posibilidad de un ataque japonés a gran escala mediante globos cargados de explosivos. No se equivocaban en sus temores y sospechas los generales norteamericanos.
En breve se encontraron aproximadamente doscientos globos destrozados en el noroeste del Pacífico y en el oeste de Canadá. Trozos de setenta y cinco, fueron hallados en otras regiones o sacados de las aguas del océano. Los fogonazos divisados en el cielo durante la noche evidenciaban que cien, más o menos, habían explotado en el aire.
El viento resultó un inesperado aliado de los nipones pues transportaba los globos desde las islas del archipiélago del Japón hacia Alaska, el oeste americano e, inclusive, a México.
Ante la posibilidad de un ataque de envergadura, el general Wilbur solicitó de inmediato el apoyo de los organismos gubernamentales en su totalidad. Los globos japoneses aún no habían ocasionado ninguna víctima, pues todos los que habían sido arrastrados por los vientos al continente americano habían caído en el mar o en zonas rurales. Sin embargo se pensaba, no sin razón, que tarde o temprano se precipitarían sobre las populosas ciudades.
Se alertó a los guardabosques sobre el peligro y se les requirió que remitiesen a las autoridades militares más cercanas cualquier trozo de globo u otras partes de sus mecanismos que fuesen encontrados.
Antes de continuar, veamos cómo surgió, en el Japón, la idea -tan maquiavélica y a la vez revolucionaria- de cómo agredir a los Estados Unidos, en tiempos en que ningún avión tenía la autonomía suficiente como para volar de Japón al continente americano.
El proyecto en cuestión nació cuando, en 1932, el profesor Nakayama, del Observatorio Meteorológico de Takao, en Formosa, descubrió una corriente atmosférica de gran altitud que circulaba desde las islas del Japón hasta la costa oeste de Canadá y de los Estados Unidos. Nakayama la bautizó: el Jet-Stream.
Una década después, el doctor Fujiwara, que meditaba alguna manera de bombardear a los americanos en su propio suelo, sugirió que se aprovechara la corriente de aire del ]et-Strecim para lanzar globos provistos de bombas.
Luego de estudiar la velocidad del jet-Stream y las características meteorológicas de los Estados Unidos en las diferentes épocas del año, Fujiwara expidió el siguiente memorándum a las autoridades militares: “Durante la estación del verano, en la época en que el jet-Strecim tiene poca intensidad, un globo precisaría entre una semana y diez días para sobrevolar el Pacífico. La cantidad de globos que llegarían a su objetivo no pasarían del 20 por ciento de los lanzados”.
“En el invierno -proseguía el informe- el trayecto no requeriría más que dos o tres días y podría evaluarse en un 60 ó 70 por ciento el número de globos que llegarían a su objetivo. El problema consiste en que durante la estación invernal la nieve no permitiría la propagación de incendios” (...) “Consideramos prácticamente imposible el lanzamiento durante el otoño y la primavera”, finalizaba el informe.
Las sugerencias de Fujiwara tuvieron éxito. El ejército japonés fabricó un modelo de globo que fue denominado “A”, y la Armada otro, llamado “B”. A decir verdad, ambos tipos eran análogos y tan sólo era diferente su fabricación.
Al cabo de poco tiempo comenzó a escasear el hielo y el konnyciku (pasta gelatinosa de la cocina japonesa) en Tokio. Esto sucedía porque dicho elemento culinario se usaba como cola para pegar la envoltura de los globos. En cuanto al hielo, era utilizado para fabricarlos a 55 grados bajo cero, que era la temperatura que soportaría en la alta atmósfera durante su trayecto.
El ejército japonés se interesó por el plan con mucha más decisión que la marina. Cuando finalizó la contienda, el ejército había lanzado 9.000 globos de su tipo “A”, mientras que la Armada Imperial sólo había arrojado 300 de su modelo “B”.
Con un diámetro de diez metros, los globos se desplazaban a una altura que oscilaba entre los 9.000 y los 11 .000 metros, desarrollando una velocidad de 30 a 32 kilómetros por hora. Cada uno llevaba un mecanismo que hacía detonar, de manera automática, una bomba incendiaria y otras de fragmentación.
En diciembre de 1 944, basándose en los escasos restos hallados, los peritos norteamericanos habían diseñado en planos una reconstrucción hipotética del ingenio enviado por los nipones. Se mandaron trozos de globos al Observatorio de Investigaciones Navales, en Washington, como también al Instituto Tecnológico de California. Los estudios evidenciaron que la envoltura de los globos era fabricada con varias capas de papel pergamino de regular grosor que se pegaban entre sí con cola vegetal. Los técnicos comprobaron que esta aparente fabricación casera resultaba más idónea para retener el hidrógeno en el globo que las mejores telas recauchutadas producidas por la industria en los Estados Unidos.
Los geólogos que estudiaron la arena contenida en las bolsas de lastre señalaron cinco lugares en el Japón, de donde muy probablemente provendría. Se pidió a la Fuerza Aérea que fotog rafiara dichas áreas. En las fotos de una de estas zonas podía observarse una planta industrial alrededor de la cual se veían esferas de color gris, lo que se interpretó como la presencia de globos. Al poco tiempo se hallaba un globo gris sobrevolando 1 as inmediaciones de una ciudad del oeste de los Estados Unidos.
¡La hipótesis había sido confirmada!
Un piloto norteamericano fue enviado con la misión de capturar ese globo. El aviador decidió empujarlo hacia el campo propulsándolo con las ráfagas de aire que producía su motor a hélice. Los golpes de aire hicieron que el globo perdiera hidrógeno, cayendo lentamente a tierra. Los mecanismos que tenían por fin producir la detonación de los explosivos no funcionaron.
¡Un globo japonés intacto había caído en manos del ejército de los Estados Unidos!
El globo coincidía a grandes rasgos con los diseños que se habían efectuado basándose en deducciones. El ejército descubrió que cada globo estaba provisto de 30 bolsitas que contenían 3 kilogramos de arena cada una. Cumplían ¡a función de lastre. Iban cayendo de a una por un mecanismo guiado por un barómetro, el cual las soltaba cuando el globo volaba por debajo de los 9.300 metros. También estaba provisto de un aparato automático que abría una válvula de escape para el hidrógeno cuando el globo superaba los 11.000 metros.
Cada globo transportaba de 3 a 4 bombas de fragmentación de 15 kilogramos y una incendiaria. Los explosivos estaban controlados por un mecanismo que los arrojaba después de que todas las bolsas de arena hubieran sido lanzadas. Había otro aparato que tenía la función de provocar la explosión del globo, luego de que hubiesen sido arrojadas las cargas mortales. El hecho de que este dispositivo no funcionara en ciertos globos permitió a los americanos incautarse de algunos intactos.
Asimismo, los japoneses lanzaban un globo “guía sin bombas”, provisto de un aparato que emitía señales de radio para indicar a la base en Japón si el itinerario era correcto.
Luego del estudio de los globos capturados y de su contenido, los norteamericanos se dieron cuenta de que eran las bombas incendiarias las que representaban el más grave peligro para ¡a nación. En la época de verano indudablemente producirían incendios forestales. Por consiguiente, se organizaron tropas de paracaidistas para que colaboraran con los guardabosques y bomberos. Sin embargo, silos ataques hubieran sido en gran escala, esta movilización no hubiera servido de mucho. Además, considerando ¡a posibilidad de que los japoneses lanzaran globos provistos de preparados bacteriológicos con el fin de propagar epidemias, tanto humanas como del ganado o de las cosechas, se tomaron los debidos recaudos movilizando médicos, veterinarios y agrónomos. Se formaron equipos de descontaminación y se almacenó -en lugares claves- desinfectantes, medicamentos y máscaras antigás. A la vez se requirió a los ganaderos y agricultores que informasen acerca de cualquier síntoma de enfermedades inusuales en el ganado o sembradío.
Para que los japoneses no tuvieran ningún conocimiento de los resultados obtenidos con su ataque mediante globos, los medios de difusión americanos y canadienses fueron persuadidos de que no mencionasen jamás cualquier noticia referente a los globos nipones.
Si bien en el Japón no se enteraban de sus propios éxitos, este silencio de la prensa y la radio impedía que el pueblo americano tomase conocimiento del peligro que lo amenazaba. En cierta oportunidad, un grupo de chicos que iban de excursión encontraron uno de los globos caídos. Sin conocer el mortal peligro al que estaban expuestos, lo arrastraron para llevárselo. Las bombas explotaron muriendo cinco niños y una mujer. La prensa no publicó nada de lo ocurrido. Su silencio fue total.
De pronto -a fines de abril de 1 945- finalizó la caída de globos en Estados Unidos. Transcurrieron días, meses; hasta que por fin terminó la guerra. ¿Por qué razón había cesado el ataque, cuando era evidente que, de continuar, hubiera provocado grandes desastres?
El general Wilbur logró develar el misterio cuando, luego de firmado el armisticio, viajó al Japón. Allí tuvo oportunidad de dialogar con el general Kusabc,, quien había estado encargado de dirigir el ataque mediante globos. Kusabciv explicó al militar norteamericano que en total se habían lanzado 9.000 globos, considerando el ejército japonés que al menos el 1 0 por ciento de los mismos llegarían al continente americano. Los primeros globos que atravesaron sin novedad el Pacífico fueron lanzados el 1 de noviembre de 1944. Los mandos japoneses se enteraron del globo que cayó en Montana. Sin embargo constataron con asombro el silencio de los periódicos y de la radio americana.
Al tener noticias únicamente del arribo a los Estados Unidos de un solo globo, el Estado Mayor japonés comenzó a desaprobar el plan de Kusaba. Los superiores le expresaron que la idea había sido buena, pero en la realidad se había revelado un fracaso. El argumento más decisivo que presentaban los mandos consistía en que se estaban despilfarrando las reservas de hidrógeno y de los demás materiales, cuando precisamente el Japón se encontraba exhausto de reservas. Todo este esfuerzo -decían- se desperdiciaba en un ataque que no daba fruto alguno.
Por último, a fines de abril de 1 945, se ordenó al general Kusaba detener definitivamente los lanzamientos. El mando superior le reprochó: “Sus globos no han llegado a los Estados Unidos. Si hubieran llegado, la prensa daría noticias de ello. Los yanquis no pueden estar tanto tiempo callados”.
¡Qué equivocados estaban los altos oficiales del Mikado! Las causas del fracaso no eran atribuibles al general Kusaba sino a que las nevadas de invierno en Norteamérica imposibilitaron el incendio de bosques. Si el ataque con globos hubiera continuado hasta el verano, cuando las zonas boscosas del oeste se encuentran secas, y silos nipones hubieran sostenido la cantidad de 1 00 lanzamientos por día, como lo hicieron en marzo de 1945, quizás hubieran producido una gran catástrofe de destrucción y pánico. Por último, el silencio de ¡a prensa fue la jugada psicológica maestra que cumplió su cometido a la perfección, haciendo fracasar todo el plan japonés".
Fuente Consultada: "Los Sucesos Más Insólitos" de Herry B. Lawfort
"Al desarrollarse el penúltimo año de lucha de la Segunda Guerra Mundial, el 4 de noviembre de 1944, un buque de la Armada de los Estados Unidos halló, flotando en el océano, cerca de las costas americanas del Pacífico, un gran trozo de tela hecha jirones. Cuando se procedió a subirla a bordo se descubrió que llevaba atada una carga de considerable peso. En el momento que ascendían la tela al navío, la misteriosa carga se precipitó hacia el fondo del mar.
Sólo se consiguió la tela que, evidentemente, había pertenecido a un globo. El hecho de que Ilevara inscripciones en japonés fue suficiente para poner en sobre aviso a los mandos norteamericanos, quienes creyeron que los nipones estarían utilizando nuevas y extrañas formas de agresión. Ese mismo día, el general Wilbur, del ejército de los Estados Unidos, recibió el primer informe sobre el descubrimiento.
Transcurrieron dos semanas hasta que se encontraron, también en el mar, los restos de otro globo. En breve tiempo se descubrió un tercero semiquemado en Montana.
A partir de estos hallazgos, los militares estadounidenses se percataron del peligro que podía representar esta inédita modalidad de guerra puesta en práctica por el enemigo; táctica que consistía en el bombardeo del territorio americano haciendo uso de globos impulsados por el viento. Se calculaba la posibilidad de un ataque japonés a gran escala mediante globos cargados de explosivos. No se equivocaban en sus temores y sospechas los generales norteamericanos.
En breve se encontraron aproximadamente doscientos globos destrozados en el noroeste del Pacífico y en el oeste de Canadá. Trozos de setenta y cinco, fueron hallados en otras regiones o sacados de las aguas del océano. Los fogonazos divisados en el cielo durante la noche evidenciaban que cien, más o menos, habían explotado en el aire.
El viento resultó un inesperado aliado de los nipones pues transportaba los globos desde las islas del archipiélago del Japón hacia Alaska, el oeste americano e, inclusive, a México.
Ante la posibilidad de un ataque de envergadura, el general Wilbur solicitó de inmediato el apoyo de los organismos gubernamentales en su totalidad. Los globos japoneses aún no habían ocasionado ninguna víctima, pues todos los que habían sido arrastrados por los vientos al continente americano habían caído en el mar o en zonas rurales. Sin embargo se pensaba, no sin razón, que tarde o temprano se precipitarían sobre las populosas ciudades.
Se alertó a los guardabosques sobre el peligro y se les requirió que remitiesen a las autoridades militares más cercanas cualquier trozo de globo u otras partes de sus mecanismos que fuesen encontrados.
Antes de continuar, veamos cómo surgió, en el Japón, la idea -tan maquiavélica y a la vez revolucionaria- de cómo agredir a los Estados Unidos, en tiempos en que ningún avión tenía la autonomía suficiente como para volar de Japón al continente americano.
El proyecto en cuestión nació cuando, en 1932, el profesor Nakayama, del Observatorio Meteorológico de Takao, en Formosa, descubrió una corriente atmosférica de gran altitud que circulaba desde las islas del Japón hasta la costa oeste de Canadá y de los Estados Unidos. Nakayama la bautizó: el Jet-Stream.
Una década después, el doctor Fujiwara, que meditaba alguna manera de bombardear a los americanos en su propio suelo, sugirió que se aprovechara la corriente de aire del ]et-Strecim para lanzar globos provistos de bombas.
Luego de estudiar la velocidad del jet-Stream y las características meteorológicas de los Estados Unidos en las diferentes épocas del año, Fujiwara expidió el siguiente memorándum a las autoridades militares: “Durante la estación del verano, en la época en que el jet-Strecim tiene poca intensidad, un globo precisaría entre una semana y diez días para sobrevolar el Pacífico. La cantidad de globos que llegarían a su objetivo no pasarían del 20 por ciento de los lanzados”.
“En el invierno -proseguía el informe- el trayecto no requeriría más que dos o tres días y podría evaluarse en un 60 ó 70 por ciento el número de globos que llegarían a su objetivo. El problema consiste en que durante la estación invernal la nieve no permitiría la propagación de incendios” (...) “Consideramos prácticamente imposible el lanzamiento durante el otoño y la primavera”, finalizaba el informe.
Las sugerencias de Fujiwara tuvieron éxito. El ejército japonés fabricó un modelo de globo que fue denominado “A”, y la Armada otro, llamado “B”. A decir verdad, ambos tipos eran análogos y tan sólo era diferente su fabricación.
Al cabo de poco tiempo comenzó a escasear el hielo y el konnyciku (pasta gelatinosa de la cocina japonesa) en Tokio. Esto sucedía porque dicho elemento culinario se usaba como cola para pegar la envoltura de los globos. En cuanto al hielo, era utilizado para fabricarlos a 55 grados bajo cero, que era la temperatura que soportaría en la alta atmósfera durante su trayecto.
El ejército japonés se interesó por el plan con mucha más decisión que la marina. Cuando finalizó la contienda, el ejército había lanzado 9.000 globos de su tipo “A”, mientras que la Armada Imperial sólo había arrojado 300 de su modelo “B”.
Con un diámetro de diez metros, los globos se desplazaban a una altura que oscilaba entre los 9.000 y los 11 .000 metros, desarrollando una velocidad de 30 a 32 kilómetros por hora. Cada uno llevaba un mecanismo que hacía detonar, de manera automática, una bomba incendiaria y otras de fragmentación.
En diciembre de 1 944, basándose en los escasos restos hallados, los peritos norteamericanos habían diseñado en planos una reconstrucción hipotética del ingenio enviado por los nipones. Se mandaron trozos de globos al Observatorio de Investigaciones Navales, en Washington, como también al Instituto Tecnológico de California. Los estudios evidenciaron que la envoltura de los globos era fabricada con varias capas de papel pergamino de regular grosor que se pegaban entre sí con cola vegetal. Los técnicos comprobaron que esta aparente fabricación casera resultaba más idónea para retener el hidrógeno en el globo que las mejores telas recauchutadas producidas por la industria en los Estados Unidos.
Los geólogos que estudiaron la arena contenida en las bolsas de lastre señalaron cinco lugares en el Japón, de donde muy probablemente provendría. Se pidió a la Fuerza Aérea que fotog rafiara dichas áreas. En las fotos de una de estas zonas podía observarse una planta industrial alrededor de la cual se veían esferas de color gris, lo que se interpretó como la presencia de globos. Al poco tiempo se hallaba un globo gris sobrevolando 1 as inmediaciones de una ciudad del oeste de los Estados Unidos.
¡La hipótesis había sido confirmada!
Un piloto norteamericano fue enviado con la misión de capturar ese globo. El aviador decidió empujarlo hacia el campo propulsándolo con las ráfagas de aire que producía su motor a hélice. Los golpes de aire hicieron que el globo perdiera hidrógeno, cayendo lentamente a tierra. Los mecanismos que tenían por fin producir la detonación de los explosivos no funcionaron.
¡Un globo japonés intacto había caído en manos del ejército de los Estados Unidos!
El globo coincidía a grandes rasgos con los diseños que se habían efectuado basándose en deducciones. El ejército descubrió que cada globo estaba provisto de 30 bolsitas que contenían 3 kilogramos de arena cada una. Cumplían ¡a función de lastre. Iban cayendo de a una por un mecanismo guiado por un barómetro, el cual las soltaba cuando el globo volaba por debajo de los 9.300 metros. También estaba provisto de un aparato automático que abría una válvula de escape para el hidrógeno cuando el globo superaba los 11.000 metros.
Cada globo transportaba de 3 a 4 bombas de fragmentación de 15 kilogramos y una incendiaria. Los explosivos estaban controlados por un mecanismo que los arrojaba después de que todas las bolsas de arena hubieran sido lanzadas. Había otro aparato que tenía la función de provocar la explosión del globo, luego de que hubiesen sido arrojadas las cargas mortales. El hecho de que este dispositivo no funcionara en ciertos globos permitió a los americanos incautarse de algunos intactos.
Asimismo, los japoneses lanzaban un globo “guía sin bombas”, provisto de un aparato que emitía señales de radio para indicar a la base en Japón si el itinerario era correcto.
Luego del estudio de los globos capturados y de su contenido, los norteamericanos se dieron cuenta de que eran las bombas incendiarias las que representaban el más grave peligro para ¡a nación. En la época de verano indudablemente producirían incendios forestales. Por consiguiente, se organizaron tropas de paracaidistas para que colaboraran con los guardabosques y bomberos. Sin embargo, silos ataques hubieran sido en gran escala, esta movilización no hubiera servido de mucho. Además, considerando ¡a posibilidad de que los japoneses lanzaran globos provistos de preparados bacteriológicos con el fin de propagar epidemias, tanto humanas como del ganado o de las cosechas, se tomaron los debidos recaudos movilizando médicos, veterinarios y agrónomos. Se formaron equipos de descontaminación y se almacenó -en lugares claves- desinfectantes, medicamentos y máscaras antigás. A la vez se requirió a los ganaderos y agricultores que informasen acerca de cualquier síntoma de enfermedades inusuales en el ganado o sembradío.
Para que los japoneses no tuvieran ningún conocimiento de los resultados obtenidos con su ataque mediante globos, los medios de difusión americanos y canadienses fueron persuadidos de que no mencionasen jamás cualquier noticia referente a los globos nipones.
Si bien en el Japón no se enteraban de sus propios éxitos, este silencio de la prensa y la radio impedía que el pueblo americano tomase conocimiento del peligro que lo amenazaba. En cierta oportunidad, un grupo de chicos que iban de excursión encontraron uno de los globos caídos. Sin conocer el mortal peligro al que estaban expuestos, lo arrastraron para llevárselo. Las bombas explotaron muriendo cinco niños y una mujer. La prensa no publicó nada de lo ocurrido. Su silencio fue total.
De pronto -a fines de abril de 1 945- finalizó la caída de globos en Estados Unidos. Transcurrieron días, meses; hasta que por fin terminó la guerra. ¿Por qué razón había cesado el ataque, cuando era evidente que, de continuar, hubiera provocado grandes desastres?
El general Wilbur logró develar el misterio cuando, luego de firmado el armisticio, viajó al Japón. Allí tuvo oportunidad de dialogar con el general Kusabc,, quien había estado encargado de dirigir el ataque mediante globos. Kusabciv explicó al militar norteamericano que en total se habían lanzado 9.000 globos, considerando el ejército japonés que al menos el 1 0 por ciento de los mismos llegarían al continente americano. Los primeros globos que atravesaron sin novedad el Pacífico fueron lanzados el 1 de noviembre de 1944. Los mandos japoneses se enteraron del globo que cayó en Montana. Sin embargo constataron con asombro el silencio de los periódicos y de la radio americana.
Al tener noticias únicamente del arribo a los Estados Unidos de un solo globo, el Estado Mayor japonés comenzó a desaprobar el plan de Kusaba. Los superiores le expresaron que la idea había sido buena, pero en la realidad se había revelado un fracaso. El argumento más decisivo que presentaban los mandos consistía en que se estaban despilfarrando las reservas de hidrógeno y de los demás materiales, cuando precisamente el Japón se encontraba exhausto de reservas. Todo este esfuerzo -decían- se desperdiciaba en un ataque que no daba fruto alguno.
Por último, a fines de abril de 1 945, se ordenó al general Kusaba detener definitivamente los lanzamientos. El mando superior le reprochó: “Sus globos no han llegado a los Estados Unidos. Si hubieran llegado, la prensa daría noticias de ello. Los yanquis no pueden estar tanto tiempo callados”.
¡Qué equivocados estaban los altos oficiales del Mikado! Las causas del fracaso no eran atribuibles al general Kusaba sino a que las nevadas de invierno en Norteamérica imposibilitaron el incendio de bosques. Si el ataque con globos hubiera continuado hasta el verano, cuando las zonas boscosas del oeste se encuentran secas, y silos nipones hubieran sostenido la cantidad de 1 00 lanzamientos por día, como lo hicieron en marzo de 1945, quizás hubieran producido una gran catástrofe de destrucción y pánico. Por último, el silencio de ¡a prensa fue la jugada psicológica maestra que cumplió su cometido a la perfección, haciendo fracasar todo el plan japonés".
Fuente Consultada: "Los Sucesos Más Insólitos" de Herry B. Lawfort
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- Recluta
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- Registrado: 14 Dic 2009, 01:11
bueno....me gustaria darte una opinion mia, que si no se tanto como van kleist, si te puedo decir que he visto varios documentales recientes sobre este tema y me he leido las memorias de raeder,jefe de la krtzmarine alemana.
alemania causo una importante baja en convoyes en las mismas costas de new york, delante de la estatua de la libertad.
fueron 3 veces , nada mas que 3 en esa costa de new york, realizados por los submarinos alemanes y fueron justo en el momento en que alemania declaro la guerra a eeuu.
alemania tiene exactamente, gracias a estas memorias, muy buenas por cierto, a la vez que muy antiguas, 23 hundimientos de submarinos alemanes en lo que es la costa americana.
Vamos que ademas de esos 3 hundimientos en las costes de new york,
estos submarinos se encargaban de destruir cualquier convoy que veian y que iban a dar suminisitros a los aliados en puntos de mar cercanos a eeuu pero lejanos como para ser vistos por las costas e interceptarlos.
estos submarinos acabaron siendo destruidos, alemania los utilizo como una manera de generar miedo en eeuu, despues del miedo en el mundo generado por el ataque y posterior gran superficie conquistada en la urss y el ataque en 6 semanas a una de las principales potencias del mundo, francia.
ese fue el unico ataque que tuvo eeuu en sus costas, un ataque para crear miedo y para detener el suministro mas que para otra cosa, pero un ataque premeditado con todos los objetivos bien definidos,
ademas de este , comentarte que en canada, alemania mando un submarino con 10 tripulantes , encargados de torpedear la producción en las principales fabricas canadienes y creando el terror en el pais y saboteando todas las fabricas posibles para verse obligados a aceptar una paz.
este plan les salio mal, desgraciadamente para ellos alguien vio el submarino y a ellos a la noche, denuncio el hecho, y los llegaron a capturar a 8 de ellos y a su munición , 2 quedaron desaparecidos.(x cierto los ahorcaron a estos 8)
y ya hablando de eeuu, que sepas que hubo una batalla en Alaska, una batalla que se intento ocultar a la opinion publica, donde tropas japonesas conquistaron un territorio alli y dnd los americanos llevaron tropas desde seattle y los acabaron eliminando, eso si con muchas bajas americanas.
fue algo que se evito debido a que la cantidad de bajas contra un enemigo inferior en aquella batalla y el saber que habian invadido tan facilmente suelo americano podia minar la moral americana.
espero haberte sido de ayuda
alemania causo una importante baja en convoyes en las mismas costas de new york, delante de la estatua de la libertad.
fueron 3 veces , nada mas que 3 en esa costa de new york, realizados por los submarinos alemanes y fueron justo en el momento en que alemania declaro la guerra a eeuu.
alemania tiene exactamente, gracias a estas memorias, muy buenas por cierto, a la vez que muy antiguas, 23 hundimientos de submarinos alemanes en lo que es la costa americana.
Vamos que ademas de esos 3 hundimientos en las costes de new york,
estos submarinos se encargaban de destruir cualquier convoy que veian y que iban a dar suminisitros a los aliados en puntos de mar cercanos a eeuu pero lejanos como para ser vistos por las costas e interceptarlos.
estos submarinos acabaron siendo destruidos, alemania los utilizo como una manera de generar miedo en eeuu, despues del miedo en el mundo generado por el ataque y posterior gran superficie conquistada en la urss y el ataque en 6 semanas a una de las principales potencias del mundo, francia.
ese fue el unico ataque que tuvo eeuu en sus costas, un ataque para crear miedo y para detener el suministro mas que para otra cosa, pero un ataque premeditado con todos los objetivos bien definidos,
ademas de este , comentarte que en canada, alemania mando un submarino con 10 tripulantes , encargados de torpedear la producción en las principales fabricas canadienes y creando el terror en el pais y saboteando todas las fabricas posibles para verse obligados a aceptar una paz.
este plan les salio mal, desgraciadamente para ellos alguien vio el submarino y a ellos a la noche, denuncio el hecho, y los llegaron a capturar a 8 de ellos y a su munición , 2 quedaron desaparecidos.(x cierto los ahorcaron a estos 8)
y ya hablando de eeuu, que sepas que hubo una batalla en Alaska, una batalla que se intento ocultar a la opinion publica, donde tropas japonesas conquistaron un territorio alli y dnd los americanos llevaron tropas desde seattle y los acabaron eliminando, eso si con muchas bajas americanas.
fue algo que se evito debido a que la cantidad de bajas contra un enemigo inferior en aquella batalla y el saber que habian invadido tan facilmente suelo americano podia minar la moral americana.
espero haberte sido de ayuda
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raul2424 escribió:y ya hablando de eeuu, que sepas que hubo una batalla en Alaska, una batalla que se intento ocultar a la opinion publica, donde tropas japonesas conquistaron un territorio alli y dnd los americanos llevaron tropas desde seattle y los acabaron eliminando, eso si con muchas bajas americanas.
fue algo que se evito debido a que la cantidad de bajas contra un enemigo inferior en aquella batalla y el saber que habian invadido tan facilmente suelo americano podia minar la moral americana.
Ya me dirás donde y cuando tuvo lugar esa batalla "secreta".
Según la historia real los japoneses invadieron dos de las islas Aleutianas (Attu y Kiska) como parte de la operación que tenía como objetivo Midway. También bombardearon Dutch Harbor. Los americanos las reconquistaron en Mayo y Agosto de 1943: http://en.wikipedia.org/wiki/Aleutian_Islands_Campaign
Espero ansioso tus aportaciones para reescribir la historia
En cuanto a los hundimientos de los U-Boat frente a la Costa Este fueron muy numerosos en los primeros meses de 1942 porque la USN no había tomado nota de las lecciones aprendidas por la RN durante la batalla del Atlántico, así, inicialmente no emplearon el sistema de convoyes para su tráfico costero y además no oscurecían las ciudades costeras, lo cual facilitaba a los submarinos alemanes la tarea de localizar a los buques por la noche (contra el fondo iluminado destacaban).
Sólo en los 3 primeros meses de 1942 se hundieron 216 buques mercantes en las aguas de la costa Este.
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raul2424 escribió:mu buenas,
si es cierto, fue en las islas que has comentado, no lo recordaba, acabo de verlo en wikipedia.
lo que si se es que esa batalla fue ocultada a la opinion publica y salio 40 años despues del fin de la guerra.
saludos
Te equivocas, la batalla se conoce desde hace mucho.
Tal vez te haya llevado a error que se la conozca como "La Batalla Olvidada" porque fue eclipsada en su momento por los combates a mucha mayor escala del Pacífico Suroeste, pero no fue ni mucho menos una batalla clandestina.
Este es el artículo de la revista Time de Mayo del 43 sobre la invasión de Attu: http://www.time.com/time/magazine/artic ... 13,00.html
Y este el de la ocupación de Kiska, que ya había sido evacuada por los japoneses (el artículo es de Agosto del 43): http://www.time.com/time/magazine/artic ... 25,00.html
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