Sombra escribió:Vamos a ver, la causa de que los Talibanes sean a hostiles Occidente, no se debe a que las mujeres sean un cero a la izquierda en la sociedad Afgana. La mujer no cuenta en ningún país mulsulmán y en cambio la mayoria de ellos no nos son hostiles. Al contrario, muchos paises musulmanes se declaraban abiertamente aliados de Occidente.
Yo no digo que sea la causa. Lo que digo es que el efecto de la educación a las mujeres será positivo para nosotros. Que no nos sean hostiles no quiere decir nada. De Juana no es hostil hacia mí directamente, pero la manera de conseguir sus objetivos me repugna...
Sombra escribió:Lo que debemos de preguntarnos és, si es eso lo que realmente quieren los Afganos o por el contrario, es lo que queremos nosotros. No podemos imponerles la liberación de la mujer porque es muy probable que ese intento provoque el rechazo de la mayoria de la población Afgana.
Yo, sin embargo, desde mi misma mismedad de lo único que puedo opinar es de lo yo quiero. Y lo que quiero es un mundo lo suficientemente culto para que no venga un tipo (sea con tiara o con kipa o con turbante) y jame el coco a cualquiera para que se inmole en nombre de Dios, llevándose por delante a unos cuantos miembros de mi sociedad de paso. Si además consigo que vivan mejor y que sus intervenciones en un foro militar sean mucho mas interesantes, miel sobre hojuelas. Y la manera mas eficaz de hacerlo en un tiempo razonablemente corto es actuando sobre las mujeres. Tu dices que son un cero a la izquierda, y yo te digo que estoy por conocer una mujer que sea un cero a la izquierda. Tienen poder, aunque no lo creas. Sólo que no es un poder que se manifieste "a la occidental".
Sombra escribió:Una cosa es educar y otra muy distinta adoctrinar a la gente en unos valores y una moral que le son ajenos historica y culturalmente. No podemos pretender que un país musulmán y medieval como Afganistan se convierta en unos pocos años en un país de corte Europeo, donde exista la democracia, la libertad de la mujer etc. Esto es una pretensión absurda y peregrina y si me apuras hasta infantil.
Ya. Lo que podemos hacer es meternos la cabeza en el cul* e ignorar lo que pasa por ahí, ya que, fatalmente, están en la edad media y para satisfacer sus creencias nos tienen que matar de cien en cien. Y de paso, que violen y lapiden un poco, que hay que ver como nos ponemos, si sólo son costumbres medievales. Eso sí que es infantil, como lo de que las mujeres son un cero a la izquierda. Díselo a tu amatxu, a ver que opina. Y te aseguro que la censura de una madre tiene poder. Tiene MUCHO poder.
Sombra escribió:Para llegar hasta donde hemos llegado nosotros, los Occidentales, hemos tenido que pasar un largisimo proceso político, social, cultura y económico que ha durado siglos. Pretender saltarnos todo este proceso en Afganistan y plantar allí la liberación de la mujer, de la noche a la mañana, como si si te tratase de montar un McDonals, es absurdo y esta destinado al fracaso, porque en cuanto se marchen los Occidentales, con sus tropas y su dinero, los afganos volverán inmediatamente a la situación anterior.
¿Alguien ha dicho que sea facil? ¿Alguien ha dicho que queramos plantar la "liberación de la mujer"?. Por que yo hablaba de educación, y no de "nosotras parimos, nosotras decidimos", que es otro caracol bien distinto. Edúcalas, que ya encontrarán su camino. Y seguro que es mejor que el que llevan ahora.
Sombra escribió:Esos logros sociales, como la liberación de la mujer, tienen que ser fruto de un largo proceso de reformas politicas, economicas y culturales mucho más amplio y no se puede estrablecer bajo bases tan endebles como se está pretendiendo hacer en Afganistan.
Largo en el espacio. Y corto en el tiempo. Y lo que digo para la mujer Afghana sirve para la mujer Española, y Brasileña o para la Lapona, por si tenéis dudas.
Por lo demás, de acuerdo en esto último. Lo que nos pasa es que tu hablas de culturas, y yo hablo de civilización (que no de civilizacion
es). Y si su cultura es incivilizada, pues lo siento mucho, pero para convivir hay que ser civilizado... o no convivimos. Vale para las relaciones de vecios y vale para las relaciones entre países. La fuerza que se deba aplicar en unos y otros casos es distinta, pero las soluciones pasan siempre por ese dilema. O convivimos o uno sobra.
Saludos
Nosotros somos los países auténticos, no las fronteras trazadas en los mapas con los nombres de hombres poderosos.
Katharine Clifton en "El paciente Inglés"