No me queda muy claro quien financia la operación, ni qué gana Francia con este trueque, ni mucho menos quienes van a pilotarlos si es que se da. Sin ninguna de estas respuestas se me hace una noticia un tanto rara y loca.
Toda esta idea de reequipar a Ucrania con cazas occidentales se ha mostrado sumamente difícil de llevar a cabo, porque no se trata solamente de entregarles los cazas sino de entrenar a sus pilotos, tarea sumamente importante que se ha convertido en un cuello de botella y que esta significando mucho tiempo y muchos retos a todos los implicados.
Todavía recuerdo a quienes tomaban este asunto del entrenamiento como un tema menor...
