Reza el viejo dicho alemán:
Que daño le puede hacer a un viejo y poderoso roble que un pequeño cerdo se restriegue contra el ?
Llorad por él, llorad hasta que mojen, mujeres, vuestras lágrimas la tierra, la tierra que él amó, su idolatría.
Llorad, guerreros ásperos de Chile, acostumbrados a montaña y ola, este vacío es como un ventisquero, esta muerte es el mar que nos golpea.