El Marquesito escribió:las modificaciones que ofreden los rusos sobre el T62, estan muy bien, y los iranies, van incluso por delante. Mi opinion es que serian una buena opcion para el ejercito cubano.
T-62 Basico
Interior
El primer modelo en entrar en la línea de producción a gran escala fue el Obyekt 166, o simplemente T-62. La disposición de los tripulantes, compartimientos (aunque tiene uno más, para ubicar a la transmisión separada del compartimiento del motor), elementos y sistemas eran idénticos al T-55. A pesar de haber crecido exteriormente, el espacio interior era igualmente austero, incómodo y claustrofóbico, condenando a la tripulación a sufrir:
Las exigencias del clima (desde los crudos inviernos de Rusia y Europa Oriental hasta los desiertos de Medio Oriente) por no poseer sistemas de calefacción o aire acondionado adecuados;
Malhumor y bajo nivel de camaradería por el constante roce que se producía con el hombre de al lado;
Espantosa higienización en misiones de combate y operaciones de varios días.
Todo esto terminaba generando estrés, irritación y malestar entre los tanquistas, cuyo rendimiento dejaba mucho que desear. A esto había que sumarle el apretado interior, típica característica de tanque ruso que incluso se puede observar en los modelos actuales, que obligaba a reclutar tripulaciones de muy baja estatura, algo difícil de encontrar en los pueblos eslavos como los de la URSS y las naciones del Pacto de Varsovia. Para ser más preciso, sólo basta mencionar que el cargador tenía un límite de altura máximo de 1,65 metros, ya que de lo contrario no podría moverse dentro de la torreta.
T-62A Casco
Como ya se ha dicho anteriormente, tenía un casco muy similar al del T-55, pero era casi 20 cm más largo y casi 5 cm más ancho. El blindaje lo proporcionaban varias capas de chapas de acero rectangulares soldadas entre sí, que le otorgaban una protección de más de 100 mm en el glacis y un poco menos de 80 mm en los lados del casco, así que el peso total de tanque alcanzaba las 40 toneladas. El conductor se ubicaba en un puesto delantero propio, delante de la torreta y pegado a la oruga izquierda. La entrada al mismo se llevaba a cabo a través de una escotilla ovalada que abría hacia la izquierda, y el interior albergaba dos palancas de dirección, un rústico tablero, dos periscopios para poder ver y manejar desde adentro, y un asiento que podía regular su altura, para que su operario pudiese elevarse y sacar la cabeza por la escotilla cuando lo desease. En el glacis van instalados dos focos de iluminación para la conducción, siendo uno de luz corriente y el otro de luz infrarroja.
Torreta
La torreta era de acero fundido, construida de una sola pieza, y difería bastante de la usada por el T-55. En cuanto a sus dimensiones, mantiene la misma altura pero es más larga y ancha, con un anillo de 2,245 metros de diámetro. Además es más redondeada y ahuevada, y posee una forma parecida a la cúpula de una mezquita; si se la observa desde arriba se podrá notar que es un círculo perfecto, a diferencia de la del T-55 que parece más una mezcla de triángulo circular, de puntas suaves y ovaladas. En el frente de la torreta el grosor del blindaje era mayor a los 240 mm, mientras que en sus lados no llegaba a los 155 mm. Posee un proyector infrarrojo principal L-2G, redondo, bastante grande y visible, que se apoya al igual que en el T-55, arriba y la derecha de mantelete del cañón. Dentro de la torreta se situaban los puestos del comandante (en la izquierda), artillero (en el centro, un poco hacia la izquierda) y cargador (en la derecha). Tanto el comandante como el artillero pueden hacer girar a la torreta. A pesar de ser controlada hidráulicamente (en caso de emergencia hay disponible un sistema manual), su movilidad era muy inferior en relación con las torretas occidentales, tanto que era casi imposible dispararle a blancos que se encontrasen en movimiento por su escasa velocidad de giro, de 17º por segundo, pudiendo desplazarse 60º en 3,5 segundos y dar una vuelta entera de 360º en el ridículo tiempo de 21 segundos o inclusive más. La torreta se encontraba inoperable durante la eyección de los cartuchos vacíos realizado por el extractor de vaina automático, también cuando la escotilla del conductor estaba abierta, y hasta mientras se realizaba la operación de recarga del cañón. En sus laterales, hay dos rieles curvados en los que se pueden cargar equipos personales de la tripulación. El cargador y comandante poseían escotillas propias desde donde ingresar. Éstas eran semicirculares y se abrían hacia atrás. Además, el comandante tenía a su disposición una cúpula, que posee rotación independiente a la de la torreta y que lleva montado un pequeño proyector OU-3GK infrarrojo. El líder del carro también poseía 5 periscopios dentro de su puesto, con la posibilidad de reemplazar uno de ellos por otro que sea infrarrojo.
T-62A Movilidad
La planta motriz estaba compuesta por el diésel V-55, el mismo motor que propulsaba a su predecesor, capaz de desarrollar 581 caballos de fuerza a 2.000 revoluciones por minuto, de cuatro tiempos, 12 cilindros en V, con una cilindrada de 38,88 litros y refrigerado por agua. La transmisión era obviamente manual, de 6 marchas sincronizadas, 5 hacia delante y una reversa, logrando alcanzar una velocidad máxima de 50 km/h en carretera y 40 km/h a campo traviesa. El motor cuenta con un precalentador para el refrigerante y el lubricante, que en 20 minutos lleva la temperatura a unos 70ºC; también dispone de un dispositivo eléctrico principal de puesta en marcha y uno secundario de aire comprimido para el arranque en frío. Los compartimientos del motor y la transmisión se encuentran protegidos contra el fuego, gracias a unos sensores térmicos que están conectados a una alarma automática. Cuando la temperatura de estos compartimientos sobrepasa el nivel de seguridad estándar, son activados unos extintores que rocían toda la zona con espuma de bromuro de metilo. Este sistema puede ser accionado manualmente por el comandante y el conductor. El sistema de rodado lo componen 5 ruedas dobles de apoyo de gran circunferencia, muy parecidas a las que posee el T-55 pero en una configuración distinta, ya que las primeras tres se encuentran bastante juntas, y a partir de la cuarta se separan notoriamente. En ambos lados, la primera y la quinta se encuentran provistas de un amortiguador hidráulico. Las orugas no poseen rodillos de retorno (antigua herencia del T-34), o sea que la cadena va muerta, y como el motor se ubica en la zona trasera, la rueda dentada de esa posición es la que proporciona la tracción, siendo la delantera la encargada de tensar la cadena de eslabones. Ésta tiene un contacto longitudinal con el suelo de 4,15 metros y su ancho es de 58 centímetros, gozando de una presión sobre el suelo de 0,72 kg/cm2.
La capacidad de combustible interna es de 675 litros, aunque suele estar equipado con tres pequeños depósitos rectangulares de baja silueta, que van aferrados a lo largo del guardabarros lateral derecho. Al ser bastante chatos, ocupan muy poco espacio y suman 285 litros, incrementando la carga a 960 litros. Esto le confiere una autonomía de 450 km en caminos asfaltados y entre 280 y 320 km en campo traviesa (dependiendo del tipo de terreno). La cantidad de combustible puede ser aumentada aún más con la adición de los dos clásicos tanques cilíndricos externos de 200 litros cada uno, totalizando una capacidad máxima de 1360 litros, pudiendo recorrer un máximo de 650 km en carreteras pavimentadas y entre 400 y 450 km en campo traviesa. También era capaz de llevar un depósito de aceite lubricante sobre la parte trasera del guardabarros lateral izquierdo.
Otra característica que conserva de sus predecesores es el snorkel OPVT para vadeos profundos. Antes de instalar este tubo en el techo de la torreta, se procede a sellar todas las posibles aberturas con juntas de goma y tapas metálicas. La operación completa dura entre 15 y 30 minutos, y le permiten al T-62 atravesar cursos de agua de hasta 5,5 metros de profundidad. Mientras se encuentra sumergido el tanque es orientado por un girocompás GPK-59 y ayudado por radio a través de las indicaciones del personal que se ubica en tierra firme.
Defensas
Algo que mantuvo exactamente igual de la serie T-54/T-55 fue la habilidad para crear humo, inyectando combustible vaporizado dentro de los caños de escape, produciendo una combustión imperfecta debido a las altas temperaturas, generando un denso humo negro que es expulsado por el sistema de escape del motor, pudiendo realizar esta operación por un máximo de 10 minutos con una tasa de consumición de 10 litros por minuto.
El T-62 fue también el primer tanque ruso de la era soviética en poseer de fábrica un sistema completo de protección NBQ. Se trata del PAZ, el mismo y simple sistema que utilizan los modelos más avanzados del T-55, y está integrado por un detector de rayos gamma RBZ-1 que se encarga de reconocer a los agentes radioactivos que pudiese haber en el aire, y de ser así se acciona el sistema de defensa que primero sella automáticamente todas las escotillas, luego genera una sobrepresión dentro del vehículo para que cualquier amenaza sea expulsada constantemente si es que se produjese alguna abertura. Por último, un dispositivo filtra el aire puro del contaminado para que la tripulación reciba oxígeno mientras todo el tanque se encuentra totalmente cerrado.
Armamento
El cañón de ánima lisa U-5TS de 115 mm y 55 calibres de largo, representaba la mejora más importante y notoria con respecto al T-55. Era capaz de disparar proyectiles HVAPFSDS (munición perforante de hiper velocidad, estabilizada por aletas y de casquillo desechable) a una velocidad de salida de 1.615 metros por segundo, pudiendo penetrar 228 mm de acero homogéneo dispuesto verticalmente a una distancia de 1.000 metros. A 2.000 metros podía perforar 147 mm de blindaje sin inclinación y 129 mm en un ángulo de 60º. Estos proyectiles volaban en una trayectoria muy plana, razón por la cual el U-5TS poseía dentro de los 1.600 metros una precisión extraordinaria para la época, aunque sobrepasando esta distancia su eficacia y rendimiento disminuía notablemente por la repentina depresión de la trayectoria provocada por la pérdida de velocidad. Con munición HEAT (proyectil antitanque de alto explosivo) tenía la capacidad de traspasar a 1.000 metros unos 495 mm de acero vertical y 248 mm con una inclinación de 60º. El T-62 podía albergar 40 proyectiles en su interior, estando la carga comúnmente compuesta por 12 HVAPFSDS, 6 HEAT y 22 HE. El extractor de humo no se encuentra en la boca del cañón como en el D-10, sino que se ubica cerca del centro del mismo, tirándose un poco hacia el orificio de salida, a unos 2/3 de distancia del mantelete del cañón.
La pieza solamente puede ser elevada por el artillero, es controlada hidráulicamente (en caso de emergencia hay disponible un sistema manual), y su radio de movimiento es de +16º/-6º, mejorando sobre todo la depresión en relación a los -3º del cañón D-10 de su predecesor. La tasa de fuego sostenida era de unos escasos 3 disparos por minuto, y la máxima ascendía a 5, mientras que el cañón británico L7 era capaz de realizar como máximo 10 cañonazos por minuto. Este bajo rendimiento en comparación a su oponente se debe principalmente a que el calibre del ruso es considerablemente mayor y porque el interior de la torreta es muy apretado, haciéndose más lenta la recarga por el poco espacio disponible, confinando a los tripulantes a desarrollar un pobre desempeño. Los T-62 básicos estaban equipados con un estabilizador de dos ejes Meteor que permitía efectuar disparos precisos aún en movimiento.
Durante la recarga de sus proyectiles, el cañón debe ser elevado, aunque luego vuelve a la posición del disparo anterior, eliminando la obligación de apuntar otra vez.
El U-5TS cuenta con un extractor de vaina automático, cuyo sistema es accionado por la fuerza de retroceso que se produce cuando el cañón abre fuego, eyectando el cartucho vacío hacia fuera por medio de un pequeño portillo que se encuentra en la zona posterior de la torreta. El sistema es muy simple y seguro, aunque primitivo también ya que en algunas ocasiones el cartucho desechado no logra salir por la compuerta debido a que esta se encuentra pobremente alineada con la posible trayectoria del proyectil inerte, quedando éste dentro de la torreta, y aunque es un defecto menor esta situación termina incomodando a la tripulación (por el escaso espacio en el que debe operar) y en el peor de los casos pudiendo lesionar a algún integrante, encontrándose obligados de deshacerse del proyectil manualmente y desperdiciando tiempo valioso que podría determinar la supervivencia en combate del tanque. El accionar de este sistema también puede causar una peligrosa acumulación de monóxido de carbono, y durante la expulsión del cartucho la tripulación se encuentra expuesta a la contaminación, ya que al abrirse la portezuela de eyección es posible la entrada de cualquier agente NBQ.
T-62 del Ejército Nacional Afgano en Kabul durante el año 2004Entre los sistemas de puntería se encontraban un visor diurno/nocturno TKN-3, visor diurno TSh-2B-41 que poseía una magnificación de x3,5/x7 y un visor nocturno TPN1-41-11. El proceso de adquisición del blanco se inicia cuando el comandante localiza e identifica el objetivo con su visor TKN-3, por lo que luego de hacerlo se apresta a alinear la torreta con el elemento hostil teniendo en cuenta la desviación correspondiente que el TKN-3 indica. Inmediatamente calcula la distancia con un sencillo visor óptico de retícula graduada, y a continuación le informa al artillero la proximidad del objeto enemigo y la conveniente clase de proyectil que deberá utilizar. Por último, el cargador introduce la munición designada y el artillero no tiene más que ajustar la elevación de su cañón con su telescopio articulado diurno TSh-2B-41 y disparar. Este viejo proceso es actualmente obsoleto y hasta en su momento fue también un poco atrasado, más aún en relación con los tanques de la OTAN de esa época que poseían modernos y avanzados telémetros que les ofrecían una precisión y efectividad en largas distancias mucho mayor. La inferioridad rusa en dispositivos de precisión era solventada por el recto recorrido que poseían sus innovadores proyectiles de altísima velocidad que posibilitaban una asombrosa puntería en distancias medias.
El armamento secundario estaba integrado únicamente por una ametralladora media PKT de 7,62 x 54 mm, coaxial al cañón principal, la cual tenía a su disposición 2.500 rondas en total. Ésta es accionada por gas, posee una tasa de fuego de 650 disparos por minutos, un alcance efectivo de 1.000 metros y sus cartuchos tenían una velocidad de salida inicial de 825 m/s.
Asi quedaron.