respecto al corte de la linea ferrea Mursmask-Sur, su punto más cercano a la frontera fino soviética de 1939 era Salla, el pulgar de Stalin, que se perdió por parte de Finlandia en los acuerdos de paz de 1940. Vale la pena recordar que las operaciones contra la Karelia soviética por parte de los alemanes se iniciaron más tarde del 22 de junio, supongo que consecuencia de la creencia de que el edificio soviético se derrumbaría con la primera patada en la puerta
Más allá de la disposición, observese como la línea férrea se encuentra a menor distancia de la frontera fino soviética de 1939 en el distrito de Salla.
Las operaciones con sentido a la línea férrea, que partirían del frente alemán de Salla, finalizarían en noviembre de 1941, mucho antes de las nevadas y heladas.
Debe considerarse por otra parte, que los fineses tenían como único objetivo recuperar los territorios cedidos en 1940, y finalizaron su avance en el rio Svir, en la orilla oriental del Lago Ladoga. De cruzarlo hubieran cerrado el cerco de Leningrado. Los fineses lograron en 1941 varias acciones de flanqueo, que les llevaron al la línea Ladoga-Onega.; como el rodeo de Viipuri, que obligó a los soviéticos a una retirada desordenada. El 31 de agosto las fuerzas finesas lograban sus últimos objetivos en el Itsmo. Solo faltaba sentarse a la mesa de negociaciones.
La diferencia... ciertamente el moemnto del año para iniciar las operaciones... por algo sería que marzo estaba dedicado a Marte...
urquhart escribió: El 31 de agosto las fuerzas finesas lograban sus últimos objetivos en el Itsmo. Solo faltaba sentarse a la mesa de negociaciones.
Si no recuerdo mal los primeros que atacaron a los Fieneses en 1941 fueron los Rusos una vez que empezo barbaroja no les dejaron margen para decidir si querian entrar en la SGM.
Crees que si no hubiera tropas alemanas en Finlandia hubieran conseguido la paz en 1941?
ACB el Mutie escribió:Sobre la Línea Stalin, en el libro "Barbarroja III", de Osprey, hacían referencia a que en algunas zonas no se habían usado parte de las fortificaciones debido al repliegue desorganizado. Por otra parte, también se habla de una inspección de las instalaciones meses antes de Barbarroja en donde se tildaban de inadecuadas y en mal estado.
El mal estado de muchas fortificaciones era algo consustancial al hecho de que la Linea Stalin había sido abandonada y parcialmente desmantelada en 1939. Y el caos del verano de 1941 no constribuyó precisamente a que las fortificaciones pudieran ser nuevamente ocupadas con eficacia. Fue una decisión bastante irresponsable por parte de Stalin el haber actuado asi ordenando el abandono de la linea, no solo porque se tiraron millones de rublos por la ventana, sino también porque esta seguía siendo válida para la defensa en profundidad que preveía la teoría operativa soviética. Y ese es un error directamente atribuible a Iosif.
Urquhart escribió:respecto al corte de la linea ferrea Mursmask-Sur, su punto más cercano a la frontera fino soviética de 1939 era Salla, el pulgar de Stalin, que se perdió por parte de Finlandia en los acuerdos de paz de 1940. Vale la pena recordar que las operaciones contra la Karelia soviética por parte de los alemanes se iniciaron más tarde del 22 de junio, supongo que consecuencia de la creencia de que el edificio soviético se derrumbaría con la primera patada en la puerta
Personalmente siempre he considerado Laponia, junto al Norte de África, como la gran oportunidad perdida por la Werhmacht. Ya he comentado en alguna ocasión que Dietl me parece "el Rommel del norte" porque de forma paralela a lo que le ocurrió al Zorro del Desierto, combatiendo en un frente secundario pudo capturar un puerto de importancia estratégica si se le hubieran proporcionado los medios. En este caso, Murmansk. Si se le hubieran proporcionado a Dietl más hombres (y no había problemas reales en retirar fuerzas de Noruega), y algo más de apoyo blindado, el objetivo de capturar Murmansk era más que factible. Pero Adolf prefería dejar la guarnición de Noruega instacta, para calmar sus paranoicos miedos a un desembarco inglés. Parafraseando a Halder... "Con muy poca cosa se podría haber ayudado a Dietl a llegar a Murmansk".
Von Kleist escribió:El mal estado de muchas fortificaciones era algo consustancial al hecho de que la Linea Stalin había sido abandonada y parcialmente desmantelada en 1939. Y el caos del verano de 1941 no constribuyó precisamente a que las fortificaciones pudieran ser nuevamente ocupadas con eficacia. Fue una decisión bastante irresponsable por parte de Stalin el haber actuado asi ordenando el abandono de la linea, no solo porque se tiraron millones de rublos por la ventana, sino también porque esta seguía siendo válida para la defensa en profundidad que preveía la teoría operativa soviética. Y ese es un error directamente atribuible a Iosif.
Como diría Michael Cole: Y cito textualmente:
Operación Barbarroja III: el invierno ruso - Osprey escribió:Una parte integral del escudo tras el que los soviéticos se prepararían para sus contraofensivas estratégicas era la de las regiones fortificadas. Llamadas <<Línea Stalin>> por los alemanes, no tenían nada que ver con la Línea Maginot, pues sus principales obras consistían en blocaos con artillería ligera y ametralladoras. Una de las dos regiones fortificadas más antiguas era la de Polotsk, a caballo del río Dvina, donde confluían las fronteras soviética, polaca y lituana. Otras, como las de Minsk, Mozyr y Slutsk, databan de la década de 1930.
En 1939, Stalin insistió en que las líneas defensivas avanzasen hacia el oeste, en Polonia. En junio de 1940, un mes después de haber reemplazado a Voroshilov, Timoshenko ordenó nuevas construcciones en esas áreas, incluyendo la mejora de las defensas de la fortaleza de Brest. Para el Barbarossatag, la mayoría de las divisiones que guarnecían la frontera soviético-alemana carecían de sus batallones de zapadores -ocupados construyendo nuevos búnkeres y obstáculos-, lo que degradó de forma importante su capacidad de combat. La construcción progresó lentamente, debido en parte a la misma y lamentable infraestructura de transporte que, al poco, iba a perjudicar también el avance de Von Bock. Antes de <<Barbarroja>>, inspectores del Ejército Rojo calificaron de <<deplorables>> las defensas de Minsk. Los informes alemanes posteriores a los combates decían que sólo 193 de los 1.175 fuertes en todo el sector del Frente Occidental estaban equipados y guarnecidos.
Saludos
Tú dame el tanque y yo haré el resto ;) Las verdades a medias son mentiras
Barbarroja III escribió:En 1939, Stalin insistió en que las líneas defensivas avanzasen hacia el oeste, en Polonia. En junio de 1940, un mes después de haber reemplazado a Voroshilov, Timoshenko ordenó nuevas construcciones en esas áreas, incluyendo la mejora de las defensas de la fortaleza de Brest
Evidentemente, el comentario que citas se refiere no a las fortificaciones de la Linea Stalin original, sino de la nueva linea defensiva (Linea Molotov) que se estaba construyendo en las nuevas fronteras de la URSS, más hacia el oeste de la antigua zona fronteriza. En ese caso, las fortificaciones eran inadecuadas porque estaban situadas demasiado cerca del frente, y además, estaban mayormente inacabadas en junio de 1941. Con todo, algunos puntos como el de la Fortaleza de Brest que cota el libro, ofrecieron una fiera resistencia.
Pero la fortaleza de Brest era una fortificación ya existente desde mediados del siglo anterior, por lo que la decisión de Stalin de adelantar sus defensas a la nueva frontera, tuvo poco que ver con su capacidad de resistencia.
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.
Gaspacher escribió:Pero la fortaleza de Brest era una fortificación ya existente desde mediados del siglo anterior, por lo que la decisión de Stalin de adelantar sus defensas a la nueva frontera, tuvo poco que ver con su capacidad de resistencia.
Es cierto que la fortaleza de Brest databa del S. XIX, pero formaba parte igualmente de la nueva linea defensiva fronteriza que se estableció en el antiguo territorio polaco en 1939. Como dices, su capacidad de resistencia vino dada por la calidad de sus defensas que tenian más de un siglo de antiguedad pero que se mostraron bastante sólidas. El problema es que -como el resto de la Linea Molotov- estaba situada tan cerca del frente que quedó rápidamente cercada sin que las unidades del segundo escalón pudieran hacer nada para reaccionar. Y es que el gran defecto de la doctrina operativa rusa es que basaba sus previsiones en los marcos temporales propios de la I GM, de modo no pudo prever la rápidez y contundencia de la Blitzkrieg.
Es cierto que la fortaleza de Brest databa del S. XIX, pero formaba parte igualmente de la nueva linea defensiva fronteriza que se estableció en el antiguo territorio polaco en 1939.
De todas maneras este tipo de fortificaciones era bastante resistente contra la mayoría de piezas de artillería alemanas. Ya a finales del siglo XIX, se diseñaban para hacer frente a piezas de +150mm. Las de Lieja -por dar un ejemplo- podían aguntar hasta 210mm.
En la década de los años 30 el gobierno francés decidió fortificar la frontera oriental de sus territorios coloniales en Tunez para cubrir los accesos desde la vecina Libia, en posesión de los italianos, ante las cada vez menos disimuladas ambiciones expansionistas de El Duce en el Norte de Africa. De este modo, aprovechando las dificultades del terreno en la frontera libio-tunecina se proyectó la Linea Mareth, que sería oficiosamente denominada La pequeña Maginot de Africa. Esta linea, que se extendía a lo largo de 35 kilómetros desde las colinas Matmata en el interior de Tunez hasta la Costa del Mar Mediterraneo, se situaba a caballo entre las ciudades de Gabes y Medenine.
Los trabajos de construcción de la Linea Mareth comenzaron en 1936 y aun no estaban totalmente finalizados en 1940, cuando se produjo la derrota de Francia, de modo que no llegó a ser totalmente concluida. Tras el armisticio germano-francés, la Linea Mareth fue desmilitarizada bajo la supervisión de una comisión germano-italiana. Sin embargo, tras la derrota de el Eje en El Alamein, Rommel emprendió una larga retirada atravesando el desierto Libio, en busca de una posición en la que reagrupar sus mermadas fuerzas, fijando su vista en Tunez, de modo que las fuerzas italogermanas ocuparon las fortificaciones de Mareth a finales de Enero de 1943 dispuestas a detener el avance del VIII Ejército Británico.
B. Estructura
Como hemos apuntado, la Linea Mareth aprovechaba la disposición natural del terreno accidentado de la frontera libio-tunecina, disponiendo una serie de fortines de cemento reforzado construidos en la cima de las colinas que dominaban cualquier aproximación que se intentara hacer desde el este. Además, el flanco izquierdo de la linea que cubría el terreno llano situado entre la costa y las colinas del interior descansaba detrás del cauce (normalmente seco) del arroyo Wadi Zigzaou, cuyas orillas alcanzaban en algunos puntos varios metros de altitud, creando de esta manera un excelente parapeto natural.
Aunque en un principio Rommel confiaba bastante en la fortaleza de la Linea Mareth y en su aptitud para detener el avance aliado, tras inspeccionar sobre el terreno las defensas de la linea, pronto se dio cuenta de sus debilidades. Muchos de los fortines de la linea se habían deteriorado tras años de abandono, la mayoría de emplazamientos de artilleria estaban vacios, y faltaban hombres y armamento pesado para cubrir convenientemente las fortificaciones. Además, como el mismo Rommel advirtió, En el desierto, cualquier linea defensiva puede ser flanqueada. En el caso de Mareth, los ingenieros militares franceses no habían creido conveniente extender las defensas hasta la cara sur de las Colinas Matmata, donde existía un paso abierto que podía ser aprovechado para flanquear la linea, y que fue efectivamente la ruta elegida por Montgomery en el curso de la Operación Pugilist para perfilar las defensas del Eje.
C. Resultado - Analisis
La Linea Mareth tuvo finalmente una eficacia relativa para las fuerzas del Eje, ya que permitió estabilizar el flanco oriental del ejército italogermano durante seis semanas, alargando de este modo la resistencia de las fuerzas del Eje en el Norte de África. Pero no sirvió para detener el avance de Montgomery más allá de la pausa operativa impuesta por el propio comandante del VIII Ejército, ya que la linea fue tomada en el curso del primer asalto serio contra la misma, la ya mencionada Operación Pugilist. Como Rommel había advertido, la posibilidad del flanqueo prácticamente condenaba de antemano las oportunidades de la Linea Mareth para ofrecer una resistencia prolongada.
Cuando en Septiembre de 1943 las fuerzas aliadas desembarcaron en Salerno, poniendo pie en la peninsula italiana, parecía que las fuerzas alemanas, que contaban solo con un puñado de divisiones para defender el sur de Italia, no iban a estar en disposición de detener el avance aliado. En vista de la crisis desatada por el desembarco aliado, Rommel, a la sazón comandante de las fuerzas alemanas en el Norte de Italia, propuso una retirada hasta Los Alpes para establecer alli una sólida línea defensiva. Sin embargo, Albert Kesselring, que tenía bajo su control las fuerzas germanas situadas al sur de Roma, insistió en que era posible defender la parte meridional de la bota italiana. Hitler dudó entre ambas opciones, aunque finalmente la furiosa resistencia que mostraron los hombres de Kesselring en Salerno le convenció de la posibilidad de defender el frente italiano y mantenerlo estabilizado. El el interín las fuerzas norteamericanas se habían abierto paso desde Salerno hacia el interior del país y se habían unido a las fuerzas británicas que avanzaban desde el sur. Kesselring entendió que era el momento de retirarse hacia las sucesivas líneas defensivas que en las semanas previas había estado organizando al sur de Roma, siendo la más importante de ellas la denominada Linea Gustav.
II. Estructura
La Linea Gustav atravesaba la península italiana desde la población de Gaeta, en la Costa Mediterranea, hasta Pescara, en la orilla del Adriático, con una extensión lineal de unos 140 kilómetros. Los hombres de la Organización Todt trabajaron a marchas forzadas para construir una serie de Bunkers y refugios de hormigón, así como para instalar extensos campos de minas protegidos por alambre de espino. Sin embargo, la fortaleza real de la Linea Gustav estribaba en las dificultades naturales que ofrecia el terreno de Los Apeninos, salpicado de montañas y picos, y su estratégica ubicación. Desde el punto central de la Linea Gustav, esto es, Monte Cassino y la abadía del mismo nombre, podía controlarse cualquier aproximación que intentara hacerse desde el sur hacia el Valle del Liri, la única "puerta" practicable en el camino hacia Roma, ya que por dicho valle discurrían las dos principales carreteras y vías férreas que unían el eje norte-sur de Italia. Por esta razón, la Linea Gustav bloqueaba virtualmente cualquier intento de avance aliado desde el sur.
Pero las ventajas defensivas de la Linea Gustav no terminaban ahí, ya que, además de las que ofrecían para los defensores el hecho de ocupar el terreno elevado de los Apeninos, la Linea Gustav presentaba en su parte frontal tres barreras fluviales que habría de ser sorteadas por los atacantes. De este modo, mientras los flancos de la linea se situaban detrás de los Rios Sangro y Garellano, por el sector central discurría el sinuoso Rio Rápido, lo cual aumentaba exponencialmente la dificultad de perforar las defensas situadas en terreno elevado. Se trataba realmente de una línea de formidables obstáculos naturales, sabiamente explotada por Kesselring para detener el avance aliado hacia Roma.
III. Eficacia – Analisis
Puede afirmarse con poco margen de duda, que la Linea Gustav fue una de las más existosas lineas defensivas de la II GM. No solo sirvió para detener durante más de 6 meses el avance aliado hacia el norte de Italia, sino que además obligó a las fuerzas angloaméricanas a comprometer importantes efectivos en el teatro de operaciones italiano e incluso a organizar la audaz aunque fallida operación Shingle, para flanquear la Linea Gustav mediante en el desembarco en Anzio. Se calcula que solo el V Ejército norteamericano sufrió más de 50.000 bajas en el curso de los combates para perforar las defensas alemanas. Por lo que, en ese aspecto, puede decirse que la Línea Gustav cumplió con creces sus objetivos. No obstante, también es reseñable el hecho de que la torpe actuación de los generales aliados en la conducción de las operaciones, -y especialmente por parte de Clark y Lucas- contribuyó en gran medida al éxito defensivo alcanzado por los hombres de Kesselring en el sur de Italia.
