|
95 Años de Blindados en MelillaConferencia ofrecida en el Regimiento de Caballería Alcántara de Melilla autor: Alhucemas |
Melilla,
aunque muchos no lo sepan, es la cuna, al menos la cuna operativa, de los
medios blindados y acorazados españoles. A mi me sorprendió
hace unos años, cuando se conmemoró creo recordar que el
90 aniversario de la creación de estas unidades, que se eligió
la ciudad de Pamplona para ello, cuando creo que
tenía que haber sido nuestra ciudad la elegida. Luego les hablare
otros hechos que para mí son igualmente incongruentes.
Y antes de empezar quiero pedirles disculpas porque a lo largo de la disertación a lo peor cometo alguna herejía lingüística al mezclar indistintamente medios blindados, acorazados o protegidos. Espero que me sepa perdonar aunque les aseguro que no llamare �tanque� a los carros de combate. |
Hace 95 años, casi día
por día al de hoy, estalló en Melilla y sus alrededores la
llamada guerra del Rif, primera de las campañas de Maruecos del
siglo XIX.
A la vista de lo que sucedía en el territorio, la Comisión de experiencias de Artillería redactó una memoria titulada �Modelos de Automóviles blindados propios para la Campaña de Melilla�. Este informe tuvo como efecto inmediato la adquisición de un camión blindado �Schneider � Brillíe modelo 1909�, cuya orden de compra la firmó el Rey Alfonso XIII el 6 de noviembre de ese año. Después de pasar una temporada en Madrid,
para la formación de sus conductores, el 17 de enero de 1912 llegó
a Melila este primer medio blindado español. Tres días después
de su llegada hizo su primera salida, llegando a Nador, y pasados otros
tres días alargó este recorrido hasta Zeluan, siempre por
carretera. Como su llegada coincidió con una temporada de relativa
calma, no llegó a entrar en combate, empleándose fundamentalmente
en realizar escoltas de convoyes, vigilancia y aprovisionamiento de las
posiciones avanzadas. Unos meses después se le unió otro
camión blindado prácticamente igual.
En su interior se acomodaban 16 tripulantes: Jefe del Vehículo, conductor, dos tiradores para las ametralladoras, dos aprovisionadores para las mismas y 10 fusileros, aunque yo no creo que nunca llevara más de diez o doce. Iba dividido en tres cámaras: una delantera que albergaba el motor, al conductor y al Jefe del vehículo. Una segunda cámara era la de combate y la tercera era de carga. Como curiosidad, el primero costó 33.000 FF y el segundo 32.5000. Estos dos camiones blindados fueron los únicos medios de este tipo con los que contó el Ejército español hasta 1921. Ese año, y a raíz del desastre de Annual, se decidió dotar al ejército de los mejores medios de combate disponibles, eso si, dentro de lo limitado del presupuesto. Esta restricción llevó a que en vez de dirigirse al extranjero a buscar estos medios, se buscaran soluciones nacionales. Nacieron así los llamados �CAMIONES PROTEGIDOS�, construidos por las dos únicas Armas del Ejercito que contaban con unidades de automóviles: Artillería e Ingenieros, aunque al final solo los de la segunda dieron los resultados apetecidos. En el plano militar estos vehículos demostraron su gran valor y constituyeron un medio con el que todos los mandos querían disponer. Sin embargo, el verdadero valor de estos ingenios fueron sus tripulaciones, prueba de ello fueron las numerosas condecoraciones que recibieron. De estos camiones protegidos se construyeron numerosos modelos y prototipos. Yo solo me voy a referir a los más importantes. |
El primer camión protegido en aparecer en Melilla fue un �NASH QUAD�. Quiero señalar que esta denominación no es oficial, y corresponde al fabricante del chasis del mismo. Oficialmente se les conocía por Camiones protegidos añadiéndole una cifra correlativa detrás. Este camión llegó el 17 de agosto de 1921, apenas un mes después de los luctuosos sucesos de julio, e inmediatamente demostró su valor en el servicio de protección de un convoy a casabona al mando de una de las figuras míticas de los blindados españoles, el sargento Rancaño, famoso por las arriesgadas misiones que realizó con posterioridad y que le valieron la concesión de la medalla Militar Individual en 1923.
Camión Protegido. Aunque el letrero
indica Latil, en realidad es un chasis Nash-Quad.
De este modelo se construyeron 8 ejemplares. Estaban
armados con una ametralladora y podían transportar a 4 fusileros.
El siguiente modelo en aparecer fue el �FEDERAL�
del que solo se construyó un ejemplar que además fue la primera
�baja� de los medios blindados españoles al resultar gravemente
dañado en una emboscada el 31 de agosto de 1921.
Noviembre de 1921 ve aparecer en Melilla dos modelos distintos. Por un lado el modelo LANDA, de artillería, que dio tan malos resultados que en marzo de 1922 habían sido desprovistos de blindaje y convertidos en camionetas. En su defensa hay que decir que se trataba de un simple coche de turismo al que se le había sobrecargado con blindaje. También es el mes de la llegada de los modelo �BENZ�, que llevaba 10 tripulantes.
Camión Protegido 1921, uno de los primeros
modelos de Ingenieros.
El incremento de las operaciones en melilla hizo que el Centro Electrotécnico y de comunicaciones echara mano de cuantos vehículos podía. Así entre 1922 y 1923 se blinda a 20 camiones LATL en dos series. La primera contaba con una pequeña torre cilíndrica para observación, que en la segunda serie fue sustituida por una torre armada con una ametralladora. Dentro de esta segunda serie, hay que destacar que el Camión Protegido nº 29 fue construido en su totalidad en Melilla.
Del valor de estos ingenios da prueba el que el Arma Acorazada de los Estados Unidos se interesara de ellos, llegando a solicitar los planos de los mismos para su posible construcción.
Estos son los principales modelos de Camiones Protegidos que participaron en las Guerras de Marruecos, y primeros de los que se dotó el Ejército español. Cundo acabó la contienda africana fueron casi todos repatriados a la península, donde algunos, a pesar de su vetustez, llegaron a participar en la Guerra Civil. Más longevos aun fueron los diez que quedaron en Melilla, de los que al menos tres fueron activados en noviembre de 1942 cuando a raíz de la invasión aliada del Norte de África, se decretó el máximo nivel de alerta. Según parece, en 1970 aun quedaban los restos de uno de ellos en la Maestranza de ingenieros de la ciudad.
Y junto a estos medios �de ruedas�, aparecieron los �de cadenas�, los primeros Carros de Combate españoles, que, al igual que los anteriores, tuvieron su bautismo operativo en Melilla.
Ya en 1919 y ante las lecciones aprendidas en
la IGM, se decidió la compra de carros de combate Renault FT-17,
de los que uno llego a efectuar pruebas en el campamento de Carabanchel
en presencia del Rey Alfonso XIII. El veto del Gobierno galo impidió
la operación.
Ese veto se levantó en septiembre de 1922
cuando se autoriza la compra de una Batería de carros de Asalto
que contaría con el siguiente material:
- 6 carros de asalto Schneider CA-1
- 6 tractores LATIL
- 6 remolques porta carros
- 3 camiones Krupp de 45 cv
- 1 camión aljibe Hispano Suiza
- 1 coche ligero Hopmovil y
- 2 motocicletas Harley Davidson
Schneider CA-1 español
El 6 de marzo de 1922 desembarca en Melilla la primera unidad acorazada del Ejército español aunque aun no había completado su adiestramiento. La unidad viene al cargo del Capitán D. Carlos Ruiz de Toledo. Algunos de los tenientes al mando de los carros son supervivientes del �Desastre de Annual�. Esta batería dependerá, desde su creación, de la Comandancia de Artillería de Melilla, a la que pertenecía todo su personal. A su llegada fueron revistados por los generales Sanjurjo y Fresneda. A los dos días de su llegada se traslada la unidad a la que sería su primera base: el campamento de Batel. En este traslado surgió un inconveniente, que era que los puentes no resistían el peso del tractor con la plataforma y el carro. La cuestión se resolvió desembarcando a los carros que a su vez tomaron a remolque sus plataformas y así atravesaron los ríos campo a través, demostrando sus cualidades.
Al llegar a Batel tuvieron que retomar la instrucción de los carros, ya que los únicos que contaban con experiencia eran los conductores elegidos entre aquellos que habían manejado alguna vez los tractores agrícolas Holt, que eran la base del carro.
Y se tuvieron que dar prisa, ya que una semana después de su llegada entran por primera vez en combate. Es el 14 de marzo de 1922, fecha del bautismo de fuego de los carros de combate españoles. Esta primera actuación, a pesar de que tres de los carros sufrieron alguna avería, fue decisiva, desalojando al enemigo de la meseta de ras Tikermin y de Sbuch Sba, siendo felicitados por el Alto Comisario.
Desde ese día tuvieron una activa e importante actuación en todas las operaciones que tuvieron su momento de mayor intensidad en 1923 en la zona de Tizzi Assa, operaciones que le valieron la concesión de la Medalla Militar Colectiva a la �BATERIA DE CARROS DE ASALTO DE LA COMANDANCIA DE ARTILLERIA DE MELILLA�. Recalco eso porque hoy día esta importante condecoración la luce en su bandera el Grupo de Artillería de campaña autopropulsado XII de la Brigada de Infantería Acorazada �Guadarrama XII� de la DIMZ �BRUNETE� y no el RACA 32 de Melilla, heredero de la Comandancia de Artillería de Melilla. En 1929, los Schneider CA-1 fueron repatriados, ya muy baqueteados a Madrid, donde alguno llego a participar en la Guerra Civil.
El segundo carro de combate español operativo fue el ya citado Renault FT-17, del que se adquirieron uno del modelo TSH, de mando, y diez armados con una ametralladora. Este carro fue el primero del mundo en su género, inaugurando el modelo de carro de combate aun vigente en el mundo, con todo su armamento en la torre giratoria.
Con estos carros se formo una Compañía de carros de Asalto de infantería, compuesta por:
- PLMM con el carro TSH de mando
- Dos secciones de carros con 5 FT-17 cada una
- Sección de Tren y taller
Renault FT-17 español
Estos Carros llegaron a Melilla a bordo del vapor �Guillen Sorolla�, el mismo que había traído a los Schneider, el 13 de marzo de 1922. Una vez desembarcados se recibió una nota del Comandante general de Melilla pidiendo un informe acerca del estado operativo de la unidad. En ese informe se estimaba en ocho días como mínimo, los necesarios para su puesta a punto ya que, como pasó con los CA-1, ni había habido tiempo de completar la instrucción del personal. De hecho, algunos de los sargentos jefes de carro se habían incorporado en Melilla ese mismo día.
Pese a todo, a las 24 horas de haber desembarcado.
Recibe la orden de trasladarse a Dar Drius e incorporarse a las fuerzas
allí reunidas.
El bautismo de fuego de la unidad es la operación
de Ambar, en la que participaron todos los medios blindados y acorazados
disponibles: 11 carros de asalto de infantería, 6 de artillería
y 8 camiones protegidos, en la que es la primera operación blindada
�en masa� del Ejército español.
Renault FT-17 españoles
Aunque la operación en su conjunto fue un éxito, la actuación de los medios blindados fue duramente criticada, ya que se perdieron tres de los Renault, que aunque después fueron recuperados, uno de ellos sufrió tales daños que necesito estar un año en reparaciones. En este mal comienzo intervinieron varios factores, entre los que destacaré la falta de un, llamémosle así, �Manuel de Uso� de las unidades blindadas, lo que motivo que hubiera mucha descoordinación entre estas y la infantería que debería apoyarles. De hecho en el parte del combate se lee que unas veces la infantería, en este caso tropas pertenecientes a La Legión, adelantaban a los carros en su impulso, y en otras ocasiones, eran los carros los que se adelantaban mas de la cuenta. Otro factor a tener en cuenta es que algunos de los carros se quedaron sin munición, y al ser sus ametralladoras originales francesas, eran de 8 mm de calibre, distinto al 7 mm reglamentario español, por lo que no pudieron ser reaprovisionados por las tropas e infantería y tuvieron que esperar inermes hasta que llegaban, en motocicleta, los de la sección de municionamiento propia. Este problema se solucionó poco después al dotarlos del mismo tipo de ametralladora que la infantería.
El Estado mayor realizó una investigación, llegando a la conclusión de que la causa de tales resultados fue la falta de cooperación entre carros y fusileros.
Aun así, y pese a contar con importantes detractores, enseguida se vio el potencial de los carros de combate y se hizo abundante uso de ellos, empleándose principalmente en dar protección a las columnas de a pie, especialmente en las retiradas, incursiones en el campo enemigo y otras menos ortodoxas, como servir de enlace entre campamentos y posiciones aisladas (llevando, por ejemplo, el correo), de observatorio y hasta de tractores de remolque de aviones.
Aun hubo otro carro de combate en servicio en nuestro ejército en la Guerra de Marruecos. El siete de agosto de 1923 se recibieron en Melilla siete carros �CHENILLETTE � SAINT CHAMOND�, que contaba como principal característica una propulsión híbrida de cadenas y ruedas. En campo a través se desplazaba con las primeras, y al llegar a carreteras o zonas llanas y firmes, se alzaba el carro con unos gatos y se bajaban las ruedas que se conectaban a la transmisión, alcanzando así mayor velocidad. Sin embargo lo engorroso de su uso y la fragilidad del sistema, que ocasionaba vuelcos en la curvas, por ejemplo, hizo que apenas después de seis meses de uso, fueran devueltos a la fabrica. De este modelo no se conservaba más que una mala fotografía a su llegada a España, pero recientemente, y dentro de un lote que adquirí en Madrid, apareció la que es la única fotografía conocida de este modelo en Marruecos.
Blindado Saint-Chamond español
En 1930 deja de haber en melilla presencia de medios blindados a excepción de los diez camiones protegidos que se encontraban depositados inactivos, y pendientes de grandes reparaciones, en el parque de Ingenieros.
Al acabar la Guerra Civil española, el Ejército español era, casi sin duda, la mayor maquina de guerra que nunca había tenido España a lo largo de su historia. Formaban en sus filas más de un millón de hombres encuadrados en 3 Ejércitos, 14 Cuerpos de Ejercito, 58 Divisiones de Infantería y dos Divisiones de caballería, estando armados con 1.090.000 fusiles, 35.000 ametralladoras, 7.600 morteros, 3.500 piezas de artillería, 651 carros de combate y vehículos acorazados de combate y casi 4000 vehículos de otros tipos.
Pero era un Ejército nacido de una guerra y había que adecuarlo a la paz.
En una primera reorganización se redujo
a 10 Cuerpos de Ejercito, de los que dos estaban en Marruecos.
De estos dos últimos, el Xº CUERPO
DE EJERCITO, también llamado del Maestrazgo, estaba encargado de
la guarnición de la Zona Oriental del Protectorado con sede en Melilla.
Contaba este C.E. con dos divisiones, la 101 y la 102, la primera en Melilla
y la segunda en Alhucemas.
Y dentro de las Tropas de Cuerpo de Ejercito se encuadraba una unidad blindada. Y la principal característica que tenía esta unidad, era que era de caballería, no como las que hemos visto hasta ahora que eran de Ingenieros, Artillería o infantería.
Esta unidad de caballería era el GRUPO DE EXPLORACIÓN Y EXPLOTACIÓN Nº 10, que contaba con un Grupo de Escuadrones a Caballo y un Grupo Mecanizado con diez auto ametralladoras CHEVROLET � 1937.
En 1944 se constituye la Brigada Mixta de Caballería de Marruecos, de la que forma parte el renacido REGIMIENTO DE DRAGONES DE ALCANTARA Nº 10 que absorbió a la unidad anterior.
El Regimiento contaba con:
� Escuadrón de PLMM
� Escuadrón Blindado con tres secciones,
dos de A.A.C y una con A.A.A.
� Escuadrón Mecanizado con tres secciones,
una de motos BMW-75, otra con Guzzi Triacce y otra con Gilera Marte.
� Escuadrón Acorazado con una sección
de 5 carros T-26 y otra de 5 carros CV-33/35.
� Escuadrón Mixto de Apoyo con secciones
de cañones anti carro de 45 mm, ametralladoras anti aéreas
de 20 mm y morteros de 81 mm.
Tanques T-26 y Carro Veloce CV-33 nacionalistas
El carro más potente era, sin dudas, el T-26B, de origen soviético, llego a España durante la Guerra Civil. En su momento era un buen carro ligero, pero en 1944 estaba ampliamente superado. Armaba un cañón de 45 mm y dos ametralladoras. Con respecto al CV-33/35, algunos autores anglosajones dicen que no merece el nombre de carro de combate. Se trataba de un pequeño carro, adecuado para misiones de reconocimiento o de acompañamiento a la infantería, pero no indudablemente para combatir contra otros carros. Su armamento constaba de dos ametralladoras Breda 35 de 8 mm.
Con respecto a los auto ametralladoras Chevrolet 1937, fueron vehículos construidos por el ejército republicano durante la GC. Eran vehículos de buena calidad, existiendo dos modelos, el AAC, equipado con la torre del T-26, y el AAA, con una torre en la que originariamente llevaban un cañón de 37 mm, que posteriormente se sustituyo por una ametralladora pesada.
Con esta organización y estos vehículos, cada vez más obsoletos, permanece el Regimiento hasta su traslado a Jaén. El material blindado paso a Segovia para su baja.
Y de nuevo se queda Melilla sin presencia blindada hasta que se constituye el Grupo Blindado de caballería II que fue equipado con 17 camiones blindados C-15, cariñosamente llamados �Trumpis�, vehículos canadienses de transporte de personal que, por ejemplo, llevaban el volante a la derecha. En España fueron reformados mejorando su capacidad de carga y estiba.
Tanque M47 Patton
En 1966 vuelve a melilla el renacido Regimiento Ligero Acorazado de Caballería �ALCANTARA� nº 15, que llega con nuevo material, entre los cuales se encuentran los primeros carros de combate modernos, los M-47 que conviven con los C-17 hasta 1974 en que son sustituidos por los TOA M-113.
Posteriormente llegaran los M-48 y los actuales M-60. Y los Trompis no fueron los últimos medios de ruedas del Regimiento antes de la llegada de los VEC y BMR. Antes que ellos llegaron los Panhard de origen francés, en sus versiones AML 60 y AML 90, así como en la versión de transporte VTT.
Tanque M60 Patton
0
0 | 0 | |||