Se puede establecer la compañía franco-alemana del Congo para explotar las riquezas de Katanga por ejemplo. Si Bélgica desaparece repartida entre sus vecinos sus colonias pasarán a ellos al igual que las empresas públicas que existan en el Congo (y los contratos con las empresas privadas).Domper escribió:Por una parte, en esta historia Bélgica no desaparece sino que se integra en Francia, y es de suponer que será con sus riquezas; de otra manera es improbable que Francia acepte.
No tiene valor en ese momento, pero hay bastante experiencia en apuestas de futuro y en burbujas financieras sobre castillos de aire (véase la Compañía del Mississippi francesa). Igualmente las Alemania había emitido las Letras Mefo sin solvencia.
En otras guerras se vió emisiones de deuda o promesas de pago con base a activos futuros o posibles: cosechas de algodón por los confederados, promesas de feudos,... o incluso no me extrañaría que durante la Guerra Mundial Africana los diversos bandos estuviesen sufragados por empresas bajo la promesa de concesiones precisamente en Katanga. Es arriesgado, si, es peligroso, también. Pero si sale bien la jugada el inversor saca un beneficio suculento por lo que siempre habrá personas interesadas.
Pensadlo de otra manera, el gobierno británico está emitiendo bonos de guerra y deuda del Tesoro británico para sufragar sus gastos. Y por ahora las cosas no le van bien, por lo que su valor frente a los adquirentes cae, lo que lo obliga a endeudarse más. Y si pierde la guerra serán sus inversores los que se arruinen.
A todo inversor le gusta diversificar riesgos por lo que si Alemania empieza a ofrecer a inversores de EE.UU. lugares donde invertir podrán pensar en repartir (si Gran Bretaña gana yo gano, si Alemania gana yo gano; cubriendo en ambos casos la pérdida de la otra inversión con creces así que porqué meterme, mejor que se alargue).
Por otro lado, ¿qué pasó con la Operación Bernhard? Gran Bretaña no puede reconocer la falsificación so riesgo de hundir el valor de la libra esterlina.