
"No estoy volando, estoy apoyando a los demás para que los trabajos salgan bien. Cuídense, pronto estaré con ustedes, un beso..." fueron las últimas palabras que dijo el comandante FAP, Víctor Manuel Maldonado Begazo a su esposa el 10 de febrero. El la había llamado para tranquilizarla, pero en realidad ese día partió para cumplir su quinta misión en la zona de enfrentamientos. El "Pato" Maldonado, como lo conocían sus compañeros, había sido jefe del escuadron elite 111 de los Sukhoi, con sede en Talara. Su nombre de guerra era "Rayo".

El se había entrenado en Rusia, desde donde trajo una de las naves en 1980. También recibió entrenamiento en la base norteamericana de Albrook, en Panamá y en la base aérea Nellys, en Nevada, Estados Unidos.
El "Pato" tuvo una experiencia difícil, cuando volando un A-37B, ante un desperfecto del avión, se eyectó antes que éste se estrellara.
La tarde del 10 de febrero también se vio obligado a saltar del Sukhoi, que fue alcanzado en territorio peruano por tres aviones Kfir, de fabricación israelí, de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, cuando Maldonado regresaba de una misión sobre la zona de Tihuinza. Misiles teledirigidos y fuego de ametralladora impactaron en su nave, derribándola.
Maldonado, aprovechado alumno en el curso de supervivencia, logró resistir durante ocho días en la selva. Pero había sido herido de bala, y a la hora de caer su paracaídas se enganchó en los árboles, quedando golpeado por el impacto.
Esta es una versión de la Revista Caretas N° 1354 del 16 de Marzo, 1995 , deben haberlo encontrado herido de bala y con el paracaidas colgado en un árbol, cerca de Tiwinza.
Saludos
JRIVERA