Estimados todos:
Permitidme un par de reflexiones sobre el uso de la fuerza para establecer fronteras.
Es totalmente cierto que en la época de la toma de las Malvinas por los británicos no había una regla universal, al menos que obligara a los países "civilizados" -mucho menos una regla que rigiera para lso países civilizados con los "no civilizados"; que se lo digan a África y la mitad de Asia-.
Pero también es cierto que a escala continental sí se había establecido esa norma: la uti possidetis. Probablemente sólo se sintieran obligados a ceñirse a la norma de respetar los límites administrativos anteriores aquellos países que se habían independizado de España. La importancia de esta forma de fijar fronteras y resolver conflictos es tal que se dice que ha sido la base de las normas de no agresión, de no uso de la violencia y de no reconocimiento de nuevos territorios adquiridos por la fuerza que hoy asumimos internacionalmente; primero en la Sociedad de Naciones y luego en la Carta de las Naciones Unidas que habéis citado:
http://www.paulhensel.org/Research/iowa06.pdf
Más de un jurista reconoce este principio como origen del derecho internacional moderno sobre la integridad de las fronteras y resolución pacífica de las disputas (ver la cita anterior).
Pero, este principio era sólo regional en el s. XIX. Tan parcial fue la norma que no fue reconocida por Brasil (que se expandió tras la independencia) y mucho menos por los países europeos, como demostraron en Belice, Surinam, la Guayana o las Malvinas. Especialmente el Reino Unido prefiere el derecho de la "libre determinación".
Visto así es posible que el derecho formal de los argentinos sobre Las Malvinas en función del uti possidetis no tenga razón de ser. Pero:
1. Este principio sigue vigente. No sólo ha servido para resolver reclamaciones de soberanía entre países hispanoamericanos. También se ha aplicado en disputas internacionales recientes. Por ejemplo, por el Tribunal Internacional de Justicia para resolver algo entre Burkina Fasso y Mali.
http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=85102106
2. Ha servido para establecer fronteras internacionales entre países recién independizados, como en las antiguas colonias africanas.
3. El principio sigue vigente para defender la integridad territorial de Kuwait contra la agresión iraquí o para establecer las fronteras de los países que nacieron en Europa del Este tras la caída del muro.
http://www.jus.unitn.it/users/nesi/pubblicazioni/resumen.html
4. Por otro lado, no hay que olvidar que el Reino Unido reconoció la independencia e integridad territorial de Argentina en 1825 (muy a su manera..., que puede ser hasta discutible ese reconocimiento):
http://www.fmmeducacion.com.ar/Historia/Documentoshist/1825tratadoconbretana.htm
"TRATADO DE AMISTAD, COMERCIO Y NAVEGACIÓN CELEBRADO ENTRE
LAS PROVINCIAS UNIDAS DEL RÍO DE LA PLATA Y SU MAJESTAD BRITÁNICA (1825)
Febrero 2 de 1825
Habiendo existido por muchos años un comercio extenso entre los dominios de Su Majestad Británica y los territorios de las Provincias Unidas del Río de la Plata, parece conveniente a la seguridad y fomento del mismo comercio, y en apoyo de una buena inteligencia entre Su Majestad y las expresadas Provincias Unidas, que sus relaciones ya existentes, sean formalmente reconocidas y confirmadas por medio de un tratado de amistad, comercio y navegación.
...
Artículo 1º: Habrá perpetua amistad entre los dominios y súbditos de S. M. el rey del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda y las Provincias Unidas del Río de la Plata y sus habitantes.
Artículo 2º: Habrá entre todos los territorios de S. M. B. en Europa y los territorios de las Provincias Unidas del Río de la Plata una recíproca libertad de comercio..."
Para un británico del s. XIX el reconocimiento comercial es lo más parecido al reconocimiento de independencia que se podía dar. El Reino Unido quizá no creyó oportuno firmar un reconocimiento más formal de la independencia de la soberanía argentina sobre todo el territorio porque A) no podía importunar más a España, B) no consideraba a Argentina dentro de los "países civilizados" que decía al principio del mensaje. Quizá esto último es lo que pensaba, tal como se deduce de las cartas y escritos de los británicos de la época:
http://www.clarin.com/suplementos/zona/2008/12/14/z-01822064.htm
"...El cónsul inglés detectó rápidamente las "oportunidades de negocios" que ofrecían estas pampas: "Muy poco se han alterado las costumbres de estos selváticos hijos de las llanuras sudamericanas: medio salvajes, medio cristianos, son casi lo mismo de lo que eran en 1800, con la diferencia de que entonces sólo hacían la guerra a los animales, y que ahora les han enseñado a hacérsela los unos a los otros...
John Ponsonby, barón de Imokilly, enviado extraordinario y ministro plenipotenciario de Gran Bretaña ante las Provincias Unidas tras la firma del Tratado, ... había escrito que "un high aristocrat está poco calificado para tratar a los bajísimos demócratas con quienes debemos alternar aquí"...
Ponsonby fue recibido por Rivadavia el 1º de septiembre de 1826, con guardia de honor y salvas de artillería, lo que no pareció conmover mucho al Lord que un mes después escribía sobre Rivadavia: "El Presidente me hizo recordar a Sancho Panza por su aspecto, pero no es ni la mitad de prudente que nuestro amigo Sancho"..."
Y si Argentina no era un país civilizado... era conquistable.
De cualquier manera, independientemente de las tradiciones jurídicas de cada cual en el s. XIX y de las resoluciones de la ONU pidiendo una solución pactada, la realidad es que las Malvinas están ocupadas por los británicos, los isleños se sienten británicos y quieren seguir siéndolo.
Saludos.
PD.: Estimado Mauricio:
Por ejemplo...
1. Garantizarles autonomía y autogobierno como una entidad Federal, inclusive reconociendo al Inglés como idioma oficial de las Malvinas junto al Español.
2. Facilidades para mantener la doble nacionalidad si lo desean.
3. Generosas leyes que los mantengan extentos de pago de impuestos al Gobierno Central.
4. Una especie de "Ley Reservada del Petróleo" o "Ley de la Pesca" calcada de la Ley del Cobre de Chile, donde el 10% de todas las ganancias de los recursos explotados en las islas van directo al gobierno local.
Eso sí que es un ejemplo de aplicación de la "imaginación" y de "ideas" para ganar a la población de las Malvinas a la causa argentina. Lo decía un intelectual argentino, pero la presidenta prefiere la arengas. Con el éxito acostumbrado, claro.