brenan escribió:Roy, no he dicho que estuviesen en guerra continuamente, sino que estaban acostumbrados a las guerras y eran de por sí belicosos, además tanto astures como cantabros siempre sintieron un especial sentido de su tierra, que les convertía en mas belicosos aún a la hora de defenderla y tradicionalmente se preparaban para la guerra sirviendo como mercenarios, por tanto pueblos cazadores y guerreros que no acostumbraban a rehuir el combate individual, no eran aficionados al combate en campo abierto cuando en número eran inferiores ante enemigos en formación y preferian la guerrilla y la pelea en el monte donde sus tácticas eran mas efectivas y les permitian sus tácticas de retirada y acoso sucesivamente.
Pero en ningun caso les infundirian temor unos drogatas alienados, como de hecho por todo ele norte se rechazaron incursiones vikingas una y otra vez
¿Significa eso que la belicosidad de los pueblos cantábricos viene en su ADN? No sé si las tierras del norte tienen alguna facultad que dote a sus pobladores de una valentía y un arrojo diferente y superior al de cualquier otro pueblo del mundo.
Permíteme recordarte que esa belicosidad es característica de todos los pueblos peninsulares, al igual que la táctica de guerrilla (desde los ataques a las posesiones romanas en la primera mitad del siglo II a. C., pasando por Viriato, las guerras de fuego, etc...). No creo que haya un solo individuo en el planeta que no se enardezca al defender su tierra, unos más que otros, pero de ahí a venir a afirmar que los astures y cántabros, más todavia, pues...
Por supuesto que los pueblos peninsulares han tenido una tradición guerrera de siglos (y el último libro de Fernando Quesada Sanz es un excelente ejemplo de información acerca de este propósito), pero eso no quiere decir que un astur(leonés) del siglo IX tenga las mismas facultades que el astur que en el siglo I a. C. luchó contra los romanos.
En cuanto a los berserkers, estoy seguro que la primera vez que se encontraron no fue moco de pavo, porque al igual que la primera carga de germanos detenida por los romanos, alguno seguro que estuvo a punto de echar a correr. Por supuesto, este "cuerpo de élite" no tiene nada de élite, es más bien una anécdota que ha ganado bastante protagonismo en los últimos años (sobretodo gracias al rol, y no puedo dejar de acordarme de los fanáticos goblin oscuros de Warhammer Fantasy o los fanáticos uruk-hai que inventó Peter Jackson para Las Dos Torres). Los vikingos, de ninguna manera eran guerreros despreciables, y creo que todos estamos de acuerdo. No sólo dieron candela en las islas británicas, incendiaron Sevilla, atacaron Constantinopla, Ostia (la anécdota de este ataque es muy divertida) y prácticamente sembraron el terror por toda Europa (al mismo tiempo que sarracenos y magiares en lo que conocemos como "Segundas Invasiones").
Una gran referencia desde la literatura sobre los vikingos, a modo de off-topic, es el libro de Michael Crichton, "Devoradores de cadáveres" (existe una adaptación cinematográfica llamada "El guerrero número 13", bastante más comercial pero con una puesta en escena encomiable), que deja un buen aunque algo desajustado retrato de las costumbres nórdicas y del carácter de los "vikingos" (el libro son menos de 200 páginas y es bastante fácil de leer, así que si tenéis la oportunidad echadle el guante).
Un saludo.