What if? La Victoria del Eje
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ABISINIA
Tras haber permanecido en segundo término durante los combates de primavera y verano, por fin le había llegado su turno al VII Ejército de los EEUU, que recibió la orden de avanzar hacia el norte a través del valle de Asawa para liberar Addis Abeba. Los ataques empezarían el 21 de octubre y contarían con un amplio apoyo de la aviación, que atacaría de forma continua las líneas del frente, realizando frecuentes incursiones tras las líneas del EJE en busca de sus rutas de suministros y centros de mando. Mientras en Sudán el V Cuerpo de Ejército atacaría a las fuerzas italianas con el fin de aumentar la presión sobre su frente.
Precedidos por los carros del 70º batallón de carros, las divisiones 4, y 9ª de infantería atacaron las posiciones italianas defendidas por la división Pistoia, que apoyada por los alemanes, resistió con bravura. Tras unos breves combates, desde las montañas llovían proyectiles de 88mm sobre las columnas aliadas causando decenas de bajas, mientras el Kampfgruppe Abisinia utilizaba sus Marder como artillería móvil aumentando los efectos del bombardeo. Con el avance bloqueado por la defensa italiana la infantería italiana se vio obligada a solicitar una y otra vez el apoyo de los aviones de los grupos 31 y 52, que acudirían una y otra vez a Asawa para bombardear las posiciones italianas. Sin embargo estas descansaban sólidamente en las montañas y habían sido hábilmente camufladas, además se habían dispuesto numerosas posiciones falsas que atraían el fuego enemigo como imanes librando a los verdaderos defensores de sus efectos. Gracias a ello los apoyos de la aviación y de la artillería norteamericana serían ineficaces y los italianos lograrían resistir los primeros embates del enemigo pese a la escasa presencia de sus fuerzas aéreas, que se reducían a dos docenas de cazas G-55.
Los ataques continuarían durante tres semanas en los que se lograría avanzar 25km, tras lo cual las divisiones de vanguardia serían relevadas por la 33, y la 90ª, que continuaron los ataques castigando duramente a la división Pistoia, en cuya ayuda habían acudido fuerzas del XII Cuerpo de ejército Alpini situado a su izquierda. En los aires mientras tanto y pese a la ayuda proporcionada por la Luftwaffe que desplazo varios cazas a la zona, y a las fuertes bajas que estaban sufriendo frente a cazas y antiaéreos del EJE, la balanza se fue decantando lentamente hacia el bando aliado. Poco después las fuerzas del EJE se vieron obligadas a circunscribir los movimientos de vehículos cerca del frente a las horas de oscuridad, pues los ataques de los cazabombarderos norteamericanos, especialmente de sus P-47, se habían demostrado devastadores.
No sería hasta el 21 de diciembre cuando el 2º batallón ranger lograría flanquear las defensas italo-germanas durante la noche tras una dura marcha que culmino con la conquista de Kofele. Con el flanco izquierdo de sus defensas expuesto, las fuerzas del EJE abandonarían sus posiciones la noche siguiente retirándose a una nueva línea de defensa situada tras los lagos Shala, Langano, y Abijata, que esperaban sirviesen para encauzar una vez más los ataques norteamericanos y facilitasen la defensa dificultando las maniobras de flanqueo. No todas las tropas se retirarían sin embargo, pues a retaguardia quedarían varios grupos de paracaidistas que durante tres días retardarían eficazmente los avances aliados, destruyendo 27 de sus carros y 31 vehículos de diversos tipos por medio de sus panzerfaust. En navidad sin embargo las fuerzas aliadas habían avanzado entre 60 y 80km llegando a las cercanías de Hosaena.
Los ataques se reanudarían en año nuevo por medio de las divisiones 3, y 9ª, que habían recibido nuevos reemplazos, extendiéndose los combates en un frente de 50km en el que las fuerzas del EJE emplearon las arboledas, cursos de agua, y elevaciones del terreno para moverse de posición en posición llevando a cabo una defensa flexible que causo graves quebraderos de cabeza a los aliados. Sin embargo toda la defensa era una táctica dilatoria para permitir finalizar la siguiente línea de defensa situada en la propia capital, Addis Abeba, a la que se retirarían a principios de febrero. Sin embargo este avance había provocado también la retirada del XII Cuerpo Alpini, y del XXIII Cuerpo de Ejército, que se situaron a izquierda y derecha de la capital respectivamente, donde contarían con la ayuda de la división panzer Goering, que había sido enviada a esta zona desde Dire Dawa. Mientras las castigadas divisiones Pistoia y Lupi se desplazaron más al oeste donde serían la conexión entre estas fuerzas y las fuerzas desplegadas en Sudán, que también se habían retrocedieron para evitar que su flanco quedase expuesto.
Los casi tres meses de combates habían supuesto para los norteamericanos la pérdida de 50.000 hombres incluyendo 9.000 muertos. Además se habían perdido 214 bombarderos, 137 cazas, 189 cazabombarderos, 97 cañones, 187 carros, y 600 vehículos de diversos tipos. Pero a cambio habían logrado avanzar más de 300km, tomando un área de 300.000km² de Sudán y Etiopia. Sus líneas sin embargo se habían extendido mucho más, alcanzando los 1.900km.
Los alemanes por su parte habían perdido 4.000 hombres y los italianos otros 26.000, perdidas que se sumaban a los 47 cazacarros, 145 cañones, 350 vehículos, 81 cazas, y 124 bombarderos.
Tras haber permanecido en segundo término durante los combates de primavera y verano, por fin le había llegado su turno al VII Ejército de los EEUU, que recibió la orden de avanzar hacia el norte a través del valle de Asawa para liberar Addis Abeba. Los ataques empezarían el 21 de octubre y contarían con un amplio apoyo de la aviación, que atacaría de forma continua las líneas del frente, realizando frecuentes incursiones tras las líneas del EJE en busca de sus rutas de suministros y centros de mando. Mientras en Sudán el V Cuerpo de Ejército atacaría a las fuerzas italianas con el fin de aumentar la presión sobre su frente.
Precedidos por los carros del 70º batallón de carros, las divisiones 4, y 9ª de infantería atacaron las posiciones italianas defendidas por la división Pistoia, que apoyada por los alemanes, resistió con bravura. Tras unos breves combates, desde las montañas llovían proyectiles de 88mm sobre las columnas aliadas causando decenas de bajas, mientras el Kampfgruppe Abisinia utilizaba sus Marder como artillería móvil aumentando los efectos del bombardeo. Con el avance bloqueado por la defensa italiana la infantería italiana se vio obligada a solicitar una y otra vez el apoyo de los aviones de los grupos 31 y 52, que acudirían una y otra vez a Asawa para bombardear las posiciones italianas. Sin embargo estas descansaban sólidamente en las montañas y habían sido hábilmente camufladas, además se habían dispuesto numerosas posiciones falsas que atraían el fuego enemigo como imanes librando a los verdaderos defensores de sus efectos. Gracias a ello los apoyos de la aviación y de la artillería norteamericana serían ineficaces y los italianos lograrían resistir los primeros embates del enemigo pese a la escasa presencia de sus fuerzas aéreas, que se reducían a dos docenas de cazas G-55.
Los ataques continuarían durante tres semanas en los que se lograría avanzar 25km, tras lo cual las divisiones de vanguardia serían relevadas por la 33, y la 90ª, que continuaron los ataques castigando duramente a la división Pistoia, en cuya ayuda habían acudido fuerzas del XII Cuerpo de ejército Alpini situado a su izquierda. En los aires mientras tanto y pese a la ayuda proporcionada por la Luftwaffe que desplazo varios cazas a la zona, y a las fuertes bajas que estaban sufriendo frente a cazas y antiaéreos del EJE, la balanza se fue decantando lentamente hacia el bando aliado. Poco después las fuerzas del EJE se vieron obligadas a circunscribir los movimientos de vehículos cerca del frente a las horas de oscuridad, pues los ataques de los cazabombarderos norteamericanos, especialmente de sus P-47, se habían demostrado devastadores.
No sería hasta el 21 de diciembre cuando el 2º batallón ranger lograría flanquear las defensas italo-germanas durante la noche tras una dura marcha que culmino con la conquista de Kofele. Con el flanco izquierdo de sus defensas expuesto, las fuerzas del EJE abandonarían sus posiciones la noche siguiente retirándose a una nueva línea de defensa situada tras los lagos Shala, Langano, y Abijata, que esperaban sirviesen para encauzar una vez más los ataques norteamericanos y facilitasen la defensa dificultando las maniobras de flanqueo. No todas las tropas se retirarían sin embargo, pues a retaguardia quedarían varios grupos de paracaidistas que durante tres días retardarían eficazmente los avances aliados, destruyendo 27 de sus carros y 31 vehículos de diversos tipos por medio de sus panzerfaust. En navidad sin embargo las fuerzas aliadas habían avanzado entre 60 y 80km llegando a las cercanías de Hosaena.
Los ataques se reanudarían en año nuevo por medio de las divisiones 3, y 9ª, que habían recibido nuevos reemplazos, extendiéndose los combates en un frente de 50km en el que las fuerzas del EJE emplearon las arboledas, cursos de agua, y elevaciones del terreno para moverse de posición en posición llevando a cabo una defensa flexible que causo graves quebraderos de cabeza a los aliados. Sin embargo toda la defensa era una táctica dilatoria para permitir finalizar la siguiente línea de defensa situada en la propia capital, Addis Abeba, a la que se retirarían a principios de febrero. Sin embargo este avance había provocado también la retirada del XII Cuerpo Alpini, y del XXIII Cuerpo de Ejército, que se situaron a izquierda y derecha de la capital respectivamente, donde contarían con la ayuda de la división panzer Goering, que había sido enviada a esta zona desde Dire Dawa. Mientras las castigadas divisiones Pistoia y Lupi se desplazaron más al oeste donde serían la conexión entre estas fuerzas y las fuerzas desplegadas en Sudán, que también se habían retrocedieron para evitar que su flanco quedase expuesto.
Los casi tres meses de combates habían supuesto para los norteamericanos la pérdida de 50.000 hombres incluyendo 9.000 muertos. Además se habían perdido 214 bombarderos, 137 cazas, 189 cazabombarderos, 97 cañones, 187 carros, y 600 vehículos de diversos tipos. Pero a cambio habían logrado avanzar más de 300km, tomando un área de 300.000km² de Sudán y Etiopia. Sus líneas sin embargo se habían extendido mucho más, alcanzando los 1.900km.
Los alemanes por su parte habían perdido 4.000 hombres y los italianos otros 26.000, perdidas que se sumaban a los 47 cazacarros, 145 cañones, 350 vehículos, 81 cazas, y 124 bombarderos.
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.
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sigue asi
Excelente relato, compañero. Pero volviendo a mi mensaje anterior, yo no me referia a modificar la entrada en servicio de nuavas unidades, sino a crear nuevas. Ten en cuenta que España esta en guerra, y por tanto tiene toda la colaboracion de sus aliados alemanes e italianos. En la practica, por ejemplo, los cañoneros clase Eolo, entraron en servicio a partir del 41, aunque con graves problemas en su sistema de propulsion ( ya estamos, no lo olvidemos, en el 43), por lo que aqui podrias, por ejemplo, desarrollar el proyecto Eolo-Pizarro, en nuevas unidades tipo contratorpedero o destructor, para que España tuviese mayor poder naval, e igual con el armamento aereo o blindado. Al fin y al cabo, en los años de posteriores a la Guerra Civil el Ministerio de Marina aprobo un basto plan de construcciones navales (que finalmente no se llevo a cabo) que hubiese multiplicado por cinco nuestro poderio naval. O sea que en la ficcion puedes perfectamente poner algunas unidades españolas con base en las Canarias o Gibraltar que en la realidad nunca existieron.
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Saludos
Hace poco ví un documental en canal Historia , sobre como hubiera sido la toma de Gibraltar por los alemanes y me recordo mucho lo leido en este foro,pero lo que más me gusto fue al final del documental ,como Hitler se quejaba en su bunker en el 45 de no haberlo hecho.
Divagaciones de un loco o un momento de lucidez
Hace poco ví un documental en canal Historia , sobre como hubiera sido la toma de Gibraltar por los alemanes y me recordo mucho lo leido en este foro,pero lo que más me gusto fue al final del documental ,como Hitler se quejaba en su bunker en el 45 de no haberlo hecho.
Divagaciones de un loco o un momento de lucidez
GRITA DEVASTACION Y SUELTA A LOS PERROS DE LA GUERRA.
Julio César,Shakespeare
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delta 021 escribió:Saludos
Hace poco ví un documental en canal Historia , sobre como hubiera sido la toma de Gibraltar por los alemanes y me recordo mucho lo leido en este foro,pero lo que más me gusto fue al final del documental ,como Hitler se quejaba en su bunker en el 45 de no haberlo hecho.
Divagaciones de un loco o un momento de lucidez
Ya he repetido una y otra vez que me ajusto a la historia en la medida de lo posible, las tácticas, estrategias, y planes son calcados de operaciones reales siempre que puedo.
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Re: sigue asi
alconetar escribió:Excelente relato, compañero. Pero volviendo a mi mensaje anterior, yo no me referia a modificar la entrada en servicio de nuavas unidades, sino a crear nuevas. Ten en cuenta que España esta en guerra, y por tanto tiene toda la colaboracion de sus aliados alemanes e italianos. En la practica, por ejemplo, los cañoneros clase Eolo, entraron en servicio a partir del 41, aunque con graves problemas en su sistema de propulsion ( ya estamos, no lo olvidemos, en el 43), por lo que aqui podrias, por ejemplo, desarrollar el proyecto Eolo-Pizarro, en nuevas unidades tipo contratorpedero o destructor, para que España tuviese mayor poder naval, e igual con el armamento aereo o blindado. Al fin y al cabo, en los años de posteriores a la Guerra Civil el Ministerio de Marina aprobo un basto plan de construcciones navales (que finalmente no se llevo a cabo) que hubiese multiplicado por cinco nuestro poderio naval. O sea que en la ficcion puedes perfectamente poner algunas unidades españolas con base en las Canarias o Gibraltar que en la realidad nunca existieron.
España no precisa al menos de momento construir nuevas unidades navales, ya que la AE ha sufrido un crecimiento exponencial.
3 Destructores reflotados en Gibraltar y posteriormente reparados.
Varios cruceros, incluyendo el pesado Colossus, capturados dañados o a medio construir en GB, al igual que destructores, unidades menores y submarinos.
La escuadra francesa de Alejandría ha pasado a manos del EJE, siendo otorgados a España varios CA.
En total la AE puede haber sido o esta en tramite de ser reforzada con:
4 CA; Colossus, Suffren, Duquesne, Tourville.
4 CL; Argonaut, Cleopatra, Phoebe, Sirius
12 DD; Ulster, Ulysses, Undaunted, Undine, Urania, Urchin, Ursa, Holcombe, Limbourne, Melbreak, Modbury, Penylan
10 SS; Tally Ho, Tantalus, Tantivy, Tapir, Telemachus, Templar, Teredo, Terrapin, Thermopylae, Thorough
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NACE UN NUEVO FRENTE EN PERSIA
Durante meses las fuerzas alemanas y aliadas se habían contemplado mutuamente en las montañas orientales de Persia en las que los alemanes habían establecido sus posiciones defensivas. Mientras en la retaguardia de las fuerzas aliadas miles de ingenieros, con la ayuda de decenas de miles de trabajadores civiles hindúes habían trabajado afanosamente construyendo decenas de miles de kilómetros de carreteras, vías férreas, túneles y puentes que conectaban los puertos de la India con el nuevo frente de batalla. Durante estos meses en los que tan solo se habían librado escaramuzas aéreas sobre las líneas del frente, esporádicamente amenizadas con incursiones de cierta envergadura de los bombarderos estratégicos de la Luftwaffe, que atacaron mediante bombardeos nocturnos los puertos y diversos centros logísticos de la India. Los aliados no permanecerían ociosos, y a partir de primavera del 43 responderían con sus propios bombardeos sobre las refinerías y pozos petrolíferos persas, duramente defendidos por los alemanes que causarían graves daños a las formaciones de bombarderos norteamericanos que volaban de día y sin escolta.
En otoño del 43 sin embargo las fuerzas aliadas ya estaban preparadas para pasar nuevamente a la ofensiva, pues las nuevas carreteras y vías férreas aseguraban un suministro constante y en aumento de los abastecimientos precisos para sostener las ofensivas, 31 divisiones británicas y norteamericanas esperaban la orden de ataque, reforzadas por 3 brigadas aéreas que aportaban 537 cazas, 376 cazabombarderos y 298 bombarderos. Frente a ellos los alemanes alineaban 23 divisiones, de las que 6 guarnecían la frontera rusa y otras 3 las costas del golfo de Omán, lo que dejaba 14 divisiones frente a los aliados. En el aire 200 cazas, 230 bombarderos y 160 cazabombarderos apoyaban a sus fuerzas. Empero, las defensas alemanas se concentraban en la costa y sobre todo en la carretera de Zahedan a Kerman, que se extendía hasta la ciudad aliada de Nork Kundi (Pakistán).
Sería precisamente en este punto el que recibiría los primeros intentos americanos por romper el frente alemán. El 6 de octubre las fuerzas al mando del general Bradley atacaron con fuerza las defensas alemanas, que tras dos años de trabajos de fortificación contaban con densos campos de minas y alambradas reforzados por zanjas y obstáculos antitanques, todos ellos cubiertos por nidos de ametralladoras y morteros. De esta forma la 72 división de infantería trato de ascender las montañas desde Saidak, pero los 1.000mts de desnivel acumulado eran demasiados y pronto se vieron rechazados montaña abajo pese al constante apoyo ofrecido por la artillería y la aviación, que perdería varios aviones frente a diversas baterías de antiaéreos situadas en las montañas. El segundo ataque protagonizado por la 6ª división hindú, cruzaría la frontera y lograría tomar Reig-i-Malik antes de tratar de ascender hacia las montañas desde las que la artillería alemana les castigaba duramente, sin embargo el ataque sería rechazado con fuertes bajas tras dos días de combates. Empero estos ataques solo eran una distracción para impedir a las fuerzas alemanas el acudir en apoyo de las unidades que defendían el valle de Bog, que se adentraba en las montañas en dirección noroeste, hacia la propia Zahedan.
En este valle la 4ª división acorazada norteamericana, apoyada por fuerzas de la 46 división atacaron con fuerza las línea germanas, atascándose en los campos de minas y alambradas que las defendían. A pesar de la intensa barrera artillera que lanzaron para proteger su avance, no tardaron en perder 6 Sherman frente a un panzerstellung, que inmovilizo todo el ataque. Tras ser rechazados trataron de destruir el panzerstellug con fuego de artillería sin resultado, por lo que finalmente emplearon la artillería para lanzar una cortina de humo que protegiese a uno de los Sherman que se aproximaría y destruiría esta posición. El ataque había sido detenido durante 4 horas por una simple torreta, mientras, lo peor del combate lo recibieron los artilleros norteamericanos que se vieron obligados a desplegarse al alcance de la artillería alemana situada en las alturas que rodeaban el valle, sufriendo fuertes bajas. El primer intento de avanzar por los valles dejando las alturas ocupadas por los alemanes a sus espaldas había fracasado, y aun empeoraría el día 11 de octubre, cuando un comtraatque de los panzer alemanes les expulso de las zonas ganadas.
Durante dos meses los combates se sucederían sin tregua en un intento de capturar, las alturas, empleando profusamente tanto artillería como bombardeos estratégicos para castigar las posiciones germanas. Sin embargo cada avance norteamericano fue respondido por feroces contraataques alemanes que los desalojaban de las zonas ganadas rechazándolos más allá del pie de las montañas. En noviembre incluso se intentaría flanquear las posiciones alemanas entrando en Afganistán, sin embargo las líneas teutonas llegaban más al norte y el ataque fue rechazado. Empero el precio pagado por estos ataques sería muy alto perdiendo 25.000 hombres y 214 aviones frente a las 5.000 bajas alemanas. Finalmente el 14 de enero un ataque del II Cuerpo Polaco lograría capturar las alturas orientales, obligando a los alemanes a retirarse varios kilómetros a las cumbres del otro lado del valle. Era necesario volver a empezar, el invierno dificultaba enormemente las operaciones, y ya habían caído 47.000 hombres, incluyendo 11.500 muertos para tomar las alturas.
En la costa mientras tanto las fuerzas blindadas norteamericanas y británicas habían tratado de romper las líneas alemanas atacando con dureza, encontrando la decidida defensa de las divisiones 166, 199, y 340. Estas divisiones habían tejido una tupida red de obstáculos anticarro reforzados por más de 200 cañones de 50mm, y 80 de 75mm, que apoyados eficazmente por el 6º panzergruppe, rechazaron cada uno de los ataques aliados causando graves bajas a sus fuerzas, sobre todo en carros de combate. Incluso muchos de los carros de combate caerían destruidos por los panzerfaust empleados por los infantes alemanes.
Durante meses las fuerzas alemanas y aliadas se habían contemplado mutuamente en las montañas orientales de Persia en las que los alemanes habían establecido sus posiciones defensivas. Mientras en la retaguardia de las fuerzas aliadas miles de ingenieros, con la ayuda de decenas de miles de trabajadores civiles hindúes habían trabajado afanosamente construyendo decenas de miles de kilómetros de carreteras, vías férreas, túneles y puentes que conectaban los puertos de la India con el nuevo frente de batalla. Durante estos meses en los que tan solo se habían librado escaramuzas aéreas sobre las líneas del frente, esporádicamente amenizadas con incursiones de cierta envergadura de los bombarderos estratégicos de la Luftwaffe, que atacaron mediante bombardeos nocturnos los puertos y diversos centros logísticos de la India. Los aliados no permanecerían ociosos, y a partir de primavera del 43 responderían con sus propios bombardeos sobre las refinerías y pozos petrolíferos persas, duramente defendidos por los alemanes que causarían graves daños a las formaciones de bombarderos norteamericanos que volaban de día y sin escolta.
En otoño del 43 sin embargo las fuerzas aliadas ya estaban preparadas para pasar nuevamente a la ofensiva, pues las nuevas carreteras y vías férreas aseguraban un suministro constante y en aumento de los abastecimientos precisos para sostener las ofensivas, 31 divisiones británicas y norteamericanas esperaban la orden de ataque, reforzadas por 3 brigadas aéreas que aportaban 537 cazas, 376 cazabombarderos y 298 bombarderos. Frente a ellos los alemanes alineaban 23 divisiones, de las que 6 guarnecían la frontera rusa y otras 3 las costas del golfo de Omán, lo que dejaba 14 divisiones frente a los aliados. En el aire 200 cazas, 230 bombarderos y 160 cazabombarderos apoyaban a sus fuerzas. Empero, las defensas alemanas se concentraban en la costa y sobre todo en la carretera de Zahedan a Kerman, que se extendía hasta la ciudad aliada de Nork Kundi (Pakistán).
Sería precisamente en este punto el que recibiría los primeros intentos americanos por romper el frente alemán. El 6 de octubre las fuerzas al mando del general Bradley atacaron con fuerza las defensas alemanas, que tras dos años de trabajos de fortificación contaban con densos campos de minas y alambradas reforzados por zanjas y obstáculos antitanques, todos ellos cubiertos por nidos de ametralladoras y morteros. De esta forma la 72 división de infantería trato de ascender las montañas desde Saidak, pero los 1.000mts de desnivel acumulado eran demasiados y pronto se vieron rechazados montaña abajo pese al constante apoyo ofrecido por la artillería y la aviación, que perdería varios aviones frente a diversas baterías de antiaéreos situadas en las montañas. El segundo ataque protagonizado por la 6ª división hindú, cruzaría la frontera y lograría tomar Reig-i-Malik antes de tratar de ascender hacia las montañas desde las que la artillería alemana les castigaba duramente, sin embargo el ataque sería rechazado con fuertes bajas tras dos días de combates. Empero estos ataques solo eran una distracción para impedir a las fuerzas alemanas el acudir en apoyo de las unidades que defendían el valle de Bog, que se adentraba en las montañas en dirección noroeste, hacia la propia Zahedan.
En este valle la 4ª división acorazada norteamericana, apoyada por fuerzas de la 46 división atacaron con fuerza las línea germanas, atascándose en los campos de minas y alambradas que las defendían. A pesar de la intensa barrera artillera que lanzaron para proteger su avance, no tardaron en perder 6 Sherman frente a un panzerstellung, que inmovilizo todo el ataque. Tras ser rechazados trataron de destruir el panzerstellug con fuego de artillería sin resultado, por lo que finalmente emplearon la artillería para lanzar una cortina de humo que protegiese a uno de los Sherman que se aproximaría y destruiría esta posición. El ataque había sido detenido durante 4 horas por una simple torreta, mientras, lo peor del combate lo recibieron los artilleros norteamericanos que se vieron obligados a desplegarse al alcance de la artillería alemana situada en las alturas que rodeaban el valle, sufriendo fuertes bajas. El primer intento de avanzar por los valles dejando las alturas ocupadas por los alemanes a sus espaldas había fracasado, y aun empeoraría el día 11 de octubre, cuando un comtraatque de los panzer alemanes les expulso de las zonas ganadas.
Durante dos meses los combates se sucederían sin tregua en un intento de capturar, las alturas, empleando profusamente tanto artillería como bombardeos estratégicos para castigar las posiciones germanas. Sin embargo cada avance norteamericano fue respondido por feroces contraataques alemanes que los desalojaban de las zonas ganadas rechazándolos más allá del pie de las montañas. En noviembre incluso se intentaría flanquear las posiciones alemanas entrando en Afganistán, sin embargo las líneas teutonas llegaban más al norte y el ataque fue rechazado. Empero el precio pagado por estos ataques sería muy alto perdiendo 25.000 hombres y 214 aviones frente a las 5.000 bajas alemanas. Finalmente el 14 de enero un ataque del II Cuerpo Polaco lograría capturar las alturas orientales, obligando a los alemanes a retirarse varios kilómetros a las cumbres del otro lado del valle. Era necesario volver a empezar, el invierno dificultaba enormemente las operaciones, y ya habían caído 47.000 hombres, incluyendo 11.500 muertos para tomar las alturas.
En la costa mientras tanto las fuerzas blindadas norteamericanas y británicas habían tratado de romper las líneas alemanas atacando con dureza, encontrando la decidida defensa de las divisiones 166, 199, y 340. Estas divisiones habían tejido una tupida red de obstáculos anticarro reforzados por más de 200 cañones de 50mm, y 80 de 75mm, que apoyados eficazmente por el 6º panzergruppe, rechazaron cada uno de los ataques aliados causando graves bajas a sus fuerzas, sobre todo en carros de combate. Incluso muchos de los carros de combate caerían destruidos por los panzerfaust empleados por los infantes alemanes.
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- Coronel
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Una cosa que siempre me ha rondado la cabeza. Qué hubiera pasado si Turquía por X razón deduce que El Eje ganaría y se suma?
Alguien sabe el potencial militar de Turquía en la época?
Hubo mucho coqueteo de ambos lados para atraer a Turquía a uno u otro bando. No creo haya sido solo por el cromo que exportaba (aunque era muy necesario).
Podía Turquía arruinarles al menos una tarde a los británicos?
Sumemos Turquía al Eje, solo para molestar.
Agradecería información sobre el potencial militar turco en esa época.
Alguien sabe el potencial militar de Turquía en la época?
Hubo mucho coqueteo de ambos lados para atraer a Turquía a uno u otro bando. No creo haya sido solo por el cromo que exportaba (aunque era muy necesario).
Podía Turquía arruinarles al menos una tarde a los británicos?
Sumemos Turquía al Eje, solo para molestar.
Agradecería información sobre el potencial militar turco en esa época.
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- Cabo Primero
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Turquía, en 1940, tenía casi 18 millones de habitantes (según datos de su censo). Eso es menos del 30% de la población de Alemania. El país estaba poco desarrollado económicamente. De hecho, durante la guerra, su economía cayó continuamente por los problemas para el comercio internacional y para abastecerse de materias. Así que yo lo veo como una pequeña potencia regional sin capacidad para actuar de forma seria más allá de sus fronteras.
Eso significa que su entrada en guerra, habría sido tan poco útil como la de Italia. Nuevos frentes, más aliados pidiendo apoyo y recursos... la única ventaja sería que tanto la URSS como el Reino Unido se verían obligados a distraer mayores fuerzas en sus fronteras con Turquía.
Hay un extenso post en otro foro sobre el tema en el que se discute esto mismo. Mírate http://forum.axishistory.com. Está en inglés.
Sobre la capacidad del ejército turco:
Ejército de Tierra: composición
http://en.wikipedia.org/wiki/Turkish_Ar ... le_in_1941
Según donde consultes se habla de un ejército de entre 170.000 y más de 500.000 soldados. Por la unidades que son, puedes ver que los medios blindados eran casi inexistentes a nivel de brigada o superior. Además, excepto las escasísimas entregas que les harían los Aliados y el Eje para ganarse su simpatía, se reflejaría en modelos anteriores al inicio de la guerra. Es decir, inútiles frente a un Pz IV o un T-34.
Ejército del Aire:
http://www.globalsecurity.org/military/ ... tory-2.htm
Se habla de unos 500 aviones. En el JANE's Fightinh Aircraft of WW II (de 1989), se describía así la fuerza aérea (la de 1944):
Formada por 2 divisiones aéreas, cada una con 15 alas. Las alas se componen de 2 escuadrones. Cada escuadron tenía entre 6 y 9 aviones. Eso son de 400 a 500 aviones, así que ambas fuentes coinciden.
En todo el país había una única fábrica de aviones (licenciados) y 2 talleres principales. Así que no tenían capacidad real para reponer pérdidas.
Sobre los tipos de aviones, eran principalmente:
Hurricane IIb y IIc, Supermarine Spitfire y Fock-Wulf 190. No tengo las cifras exactas, pero podría buscarlas si hace falta. Como bombarderos, principalmente empleaban el Bristol Blenheim y el Martin 139.
Armada:
http://www.globalsecurity.org/military/ ... tory-6.htm
Aquí se explica un poco la situación de la armada al empezar la guerra. Hay un forero, Torpedodw, que tiene un blog con muchísima información sobre temas navales. Por algún motivo, ahora mismo no funciona, así que no puedo ponerte el link al dato específico.
Sin embargo, del JANE's fighting Ships of WW II (lo sé, no soy muy original), resumiendo mucho, sacamos:
1 Crucero de Batalla de 1911, de 23000 toneladas.
2 viejos cruceros de 1903, de 3500-3800 toneladas.
8 destructores, algunos de ellos, botados durante los últimos años.
10 submarinos , la mayoría botados en los años 30 (o adquiridos).
Yo lo veo como una flota de apoyo costero y poco más. Sin grandes navios ni fuerza aeronaval.
En resumen: Turquía hizo muy bien en no luchar en toda la guerra. Habría sido una distracción para ambos bandos. Terriblemente montañoso y mal comunicado, habría encajado perfectamente en batallas lentas, sin blindados ni grandes fuerzas motorizadas. Y esa es mi opinión
Editado: añado alguna cosa más que he encontrado. Es una descripción en otro debate sobre las fuerzas blindadas turcas. Sebasa en los datos de Jane's Tanks of World War II (y van 3). Lo he traducido con google.
Eso significa que su entrada en guerra, habría sido tan poco útil como la de Italia. Nuevos frentes, más aliados pidiendo apoyo y recursos... la única ventaja sería que tanto la URSS como el Reino Unido se verían obligados a distraer mayores fuerzas en sus fronteras con Turquía.
Hay un extenso post en otro foro sobre el tema en el que se discute esto mismo. Mírate http://forum.axishistory.com. Está en inglés.
Sobre la capacidad del ejército turco:
Ejército de Tierra: composición
http://en.wikipedia.org/wiki/Turkish_Ar ... le_in_1941
Según donde consultes se habla de un ejército de entre 170.000 y más de 500.000 soldados. Por la unidades que son, puedes ver que los medios blindados eran casi inexistentes a nivel de brigada o superior. Además, excepto las escasísimas entregas que les harían los Aliados y el Eje para ganarse su simpatía, se reflejaría en modelos anteriores al inicio de la guerra. Es decir, inútiles frente a un Pz IV o un T-34.
Ejército del Aire:
http://www.globalsecurity.org/military/ ... tory-2.htm
Se habla de unos 500 aviones. En el JANE's Fightinh Aircraft of WW II (de 1989), se describía así la fuerza aérea (la de 1944):
Formada por 2 divisiones aéreas, cada una con 15 alas. Las alas se componen de 2 escuadrones. Cada escuadron tenía entre 6 y 9 aviones. Eso son de 400 a 500 aviones, así que ambas fuentes coinciden.
En todo el país había una única fábrica de aviones (licenciados) y 2 talleres principales. Así que no tenían capacidad real para reponer pérdidas.
Sobre los tipos de aviones, eran principalmente:
Hurricane IIb y IIc, Supermarine Spitfire y Fock-Wulf 190. No tengo las cifras exactas, pero podría buscarlas si hace falta. Como bombarderos, principalmente empleaban el Bristol Blenheim y el Martin 139.
Armada:
http://www.globalsecurity.org/military/ ... tory-6.htm
Aquí se explica un poco la situación de la armada al empezar la guerra. Hay un forero, Torpedodw, que tiene un blog con muchísima información sobre temas navales. Por algún motivo, ahora mismo no funciona, así que no puedo ponerte el link al dato específico.
Sin embargo, del JANE's fighting Ships of WW II (lo sé, no soy muy original), resumiendo mucho, sacamos:
1 Crucero de Batalla de 1911, de 23000 toneladas.
2 viejos cruceros de 1903, de 3500-3800 toneladas.
8 destructores, algunos de ellos, botados durante los últimos años.
10 submarinos , la mayoría botados en los años 30 (o adquiridos).
Yo lo veo como una flota de apoyo costero y poco más. Sin grandes navios ni fuerza aeronaval.
En resumen: Turquía hizo muy bien en no luchar en toda la guerra. Habría sido una distracción para ambos bandos. Terriblemente montañoso y mal comunicado, habría encajado perfectamente en batallas lentas, sin blindados ni grandes fuerzas motorizadas. Y esa es mi opinión
Editado: añado alguna cosa más que he encontrado. Es una descripción en otro debate sobre las fuerzas blindadas turcas. Sebasa en los datos de Jane's Tanks of World War II (y van 3). Lo he traducido con google.
EAntes de la guerra blindados militar turca fue construida alrededor de un contrato con la Unión Soviética que se entregaron en 1935 de 60 T-26 modelo 1933 tanques, cinco tanquetas T-27 y 60 BA-6 carros blindados. El estallido de la guerra provocada Francia y Gran Bretaña a la corte de Turquía, y esto dio lugar a la entrega de pequeñas cantidades de más de AFV. Francia obtiene el 50 R-35 tanques de infantería ligera en enero de 1940 y Gran Bretaña Mc 16 tanques ligeros VIB, al mismo tiempo.
Ubicación geográfica de Turquía garantiza que la competencia por su favor continúe. En septiembre de 1942 Churchill ordenó que los tanques de ponerse a disposición en forma de 170 Stuart y de Valentines 200. Las entregas comenzaron en noviembre y continuó hasta 1943. A finales de 1943, los turcos también había solicitado 500 Shermans para formar dos divisiones acorazadas. En ese momento, sin embargo, la indecisión de Turquía a la entrada en la guerra, su recepción de armas de Alemania (22 PzKpfw III y 22 PzKpfw HIV), y una escasez general de los vehículos blindados en el bando aliado había causado a los británicos a perder la paciencia. Las entregas a Turquía fueron detenidos en marzo de 1944, fecha en la que Turquía había recibido casi 400 Stuart y de Valentines, todos los vehículos cansado de Oriente Medio y Persia / teatros Irak y Sherman 34 que no aptos para el servicio. Las entregas no comenzaron de nuevo hasta febrero de 1945, cuando Turquía declaró la guerra a Alemania. El Valentine, el tanque más numeroso en el inventario, estaban casi todas las versiones 2pdr armados, con sólo unos pocos IX Mc.
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Excelente Takao
Muchas gracias de verdad.
Entonces el coqueteo con Turquía de los dos bandos es supongo del lado de los ingleses, para no tener una molestia en la zona del Cercano Oriente y zonas petroleras como Irak e Irán. Y lo de Alemania para distraer recursos rusos e ingleses y asegurarse el paso de los Estrechos? ( aunque eran internacionales si no me equivoco)?
A nivel militar por lo montañosa y dificil sería una Grecia x 3 y podría morder en el momento adecuado en el sur del Caucaso cuando los nazis se lanzaron sobre esa zona.
Aparte sería una base interesante para los Alpini tanto italianos como rumanos y las tropas de montaña nazis para operar en sus fronteras N.E.
Gracias de nuevo Takao.
Igual coincido, sería otro frente y una carga, y eso significa ser invadida por los dos bandos, bien hicieron los turcos en mantenerse neutrales.
Muchas gracias de verdad.
Entonces el coqueteo con Turquía de los dos bandos es supongo del lado de los ingleses, para no tener una molestia en la zona del Cercano Oriente y zonas petroleras como Irak e Irán. Y lo de Alemania para distraer recursos rusos e ingleses y asegurarse el paso de los Estrechos? ( aunque eran internacionales si no me equivoco)?
A nivel militar por lo montañosa y dificil sería una Grecia x 3 y podría morder en el momento adecuado en el sur del Caucaso cuando los nazis se lanzaron sobre esa zona.
Aparte sería una base interesante para los Alpini tanto italianos como rumanos y las tropas de montaña nazis para operar en sus fronteras N.E.
Gracias de nuevo Takao.
Igual coincido, sería otro frente y una carga, y eso significa ser invadida por los dos bandos, bien hicieron los turcos en mantenerse neutrales.
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ISLANDIA V
Tras varias semanas de descanso las fuerzas aliadas por fin estaban dispuestas a volver a la ofensiva en Islandia. Para entonces las flotas de invasión habían regresado a los EEUU, desde donde partieron para cumplir diversas misiones, trasladándose 6 de los portaaviones al pacifico para enfrentar a los nipones. Su falta no sería sin embargo importante, pues los ingenieros norteamericanos por fin habían culminado sus trabajos construyendo otros 3 aeródromos en Islandia. Pese a todo las perdidas aéreas eran 8 a 1 a favor de los alemanes, pues al disponer de radares de alerta temprana y dominar las alturas que rodeaban las posiciones aliadas, podían atacar sus posiciones con casi total libertad mientras los cazas norteamericanos se enfrentaban habitualmente a los alemanes en inferioridad, teniendo que enfrentarse también a los antiaéreos situados en las alturas situadas alrededor de sus posiciones.
La situación de sus suministros sin embargo había mejorado mucho conforme los ingenieros remodelaban y ampliaban diversos puertos de la zona, al mismo tiempo que creaban nuevas instalaciones en la bahía de Thistilfjördur. Para proteger este impresionante despliegue las fuerzas norteamericanas desplegarían la impresionante cantidad de 200 cañones antiaéreos, sobre todo en las playas y puertos, mientras varias naves hundidas como rompeolas serían equipadas con varios cañones más para evitar los ataques procedentes del mar. Mientras, nuevas unidades y reemplazos habían desembarcado permitiendo a las fuerzas aliadas emprender nuevos ataques.
Los gebirgsjäger, perfectamente equipados y adaptados para combatir en estos ambientes extremos, opusieron una eficaz resistencia a fuerzas que les quintuplicaban en numero.
Los alemanes por su parte habían continuado reforzándose lentamente por medios aéreos. Para ello aviones de transporte volaban hasta la isla procedentes de Noruega o Escocia, siendo escoltados en su trayecto por cazas tanto procedentes de estos lugares como de Islandia. Tras descargar en la isla, los aviones de transporte partían de nuevo rumbo a sus bases evacuando heridos y personal no combatiente. Gracias a esto, las fuerzas germanas alcanzaron los 70.000 hombres, de los que 35.000 permanecían rodeando las posiciones aliadas mientras el resto guarnecían el resto de la isla.
La segunda fase de la invasión comenzaría el 11 de octubre, cuando fuerzas de las divisiones 3ª canadiense y la 5ª británica atacaron decididamente el frente de Vopnafjördur apoyados por 56 carros Sherman y 13 Lee. Los combates pronto arreciaron a lo largo de un frente de 12km, siendo especialmente feroces en torno a las dos montañas que se elevaban en el extremo oriental de las defensas alemanas. Enfrentándose a las ráfagas de ametralladoras y las explosiones de los cañones, los infantes aliados pagaron con sangre cada pulgada de terreno, y si bien fueron rechazados en sus intentos de conquistar las dos alturas principales, a última hora del día el frente germano había cedido en algunos puntos del Grimstathir, donde resistirían varios intentos alemanes de reconquistar las posiciones perdidas. Nuevos ataques los días 12 y 15 ampliaron las brechas, logrando avanzar entre 5 y 10km en algunos puntos, sin embargo la artillería situada en las posiciones que habían dejado a sus espaldas causaba graves bajas a las fuerzas británicas, por lo que dedicarían la segunda quincena a la conquista de estas posiciones.
Durante 8 días los asaltos sobre las posiciones defendidas por fallschirmajeger alemanes se sucedieron constantemente, apoyados una y otra vez por feroces bombardeos aéreos que causaron graves daños entre los defensores aun al precio de sufrir 16 derribos. Sin embargo las fuerzas defensoras estaban cada vez más agotadas y las municiones de sus antiaéreos empezaban también a escasear, por lo que finalmente se verían obligados a capitular el 26 de octubre, no sin antes haber destruido todos sus equipos.
Las fuerzas alemanas en Islandia oriental habían perdido el equilibrio, y nuevos ataques lograrían romper sus líneas el 4 de noviembre, logrando llegar a la costa cerca de Seydisfjördur el día 9. Tras ellos en la base de Vopnafjördur habían quedado aislados 9.000 alemanes, principalmente fuerzas de tierra de la Luftwaffe y compañías de fusileros navales o dotaciones de las baterías de costa. Finalmente y tras resistir durante 23 días estas fuerzas también capitularían, cediendo el primer puerto de consideración a los aliados, si bien en su interior habían sido hundidos varios buques de escolta que dificultarían su utilización. Ahora los aliados estaban avanzando no sin dificultad a lo largo de la costa oriental de la isla, pues los alemanes se retiraron empleando tácticas dilatorias hasta más allá de Höfn, donde establecerían temporalmente una nueva línea de defensa apoyando su flanco izquierdo el glaciar.
Para entonces el invierno estaba llegando, las nieves dificultaban los movimientos de las fuerzas de tierra y los aviones habían visto enormemente limitada su efectividad, sufriendo incluso frecuentes averías al aterrizar en las pistas heladas. Los aliados mantenían ya una fuerza de 96 cazas y 65 cazabombarderos en la isla, donde tenían operativos el aeródromo alemán de Vopnafjördur, y el suyo propio de Langanes. Los alemanes por su parte habían retirado todos sus bombarderos tras agotar las municiones que poseían, e incluso las minas y cargas de profundidad que habían sido empleadas contra objetivos en tierra. De esta forma su apoyo aéreo se reducía a 48 cazas Fw-190 situados en Akureyri, y 17 Me-109F/G situados entre Keflavik y Reikiavik.
Tras varias semanas de descanso las fuerzas aliadas por fin estaban dispuestas a volver a la ofensiva en Islandia. Para entonces las flotas de invasión habían regresado a los EEUU, desde donde partieron para cumplir diversas misiones, trasladándose 6 de los portaaviones al pacifico para enfrentar a los nipones. Su falta no sería sin embargo importante, pues los ingenieros norteamericanos por fin habían culminado sus trabajos construyendo otros 3 aeródromos en Islandia. Pese a todo las perdidas aéreas eran 8 a 1 a favor de los alemanes, pues al disponer de radares de alerta temprana y dominar las alturas que rodeaban las posiciones aliadas, podían atacar sus posiciones con casi total libertad mientras los cazas norteamericanos se enfrentaban habitualmente a los alemanes en inferioridad, teniendo que enfrentarse también a los antiaéreos situados en las alturas situadas alrededor de sus posiciones.
La situación de sus suministros sin embargo había mejorado mucho conforme los ingenieros remodelaban y ampliaban diversos puertos de la zona, al mismo tiempo que creaban nuevas instalaciones en la bahía de Thistilfjördur. Para proteger este impresionante despliegue las fuerzas norteamericanas desplegarían la impresionante cantidad de 200 cañones antiaéreos, sobre todo en las playas y puertos, mientras varias naves hundidas como rompeolas serían equipadas con varios cañones más para evitar los ataques procedentes del mar. Mientras, nuevas unidades y reemplazos habían desembarcado permitiendo a las fuerzas aliadas emprender nuevos ataques.
Los gebirgsjäger, perfectamente equipados y adaptados para combatir en estos ambientes extremos, opusieron una eficaz resistencia a fuerzas que les quintuplicaban en numero.
Los alemanes por su parte habían continuado reforzándose lentamente por medios aéreos. Para ello aviones de transporte volaban hasta la isla procedentes de Noruega o Escocia, siendo escoltados en su trayecto por cazas tanto procedentes de estos lugares como de Islandia. Tras descargar en la isla, los aviones de transporte partían de nuevo rumbo a sus bases evacuando heridos y personal no combatiente. Gracias a esto, las fuerzas germanas alcanzaron los 70.000 hombres, de los que 35.000 permanecían rodeando las posiciones aliadas mientras el resto guarnecían el resto de la isla.
La segunda fase de la invasión comenzaría el 11 de octubre, cuando fuerzas de las divisiones 3ª canadiense y la 5ª británica atacaron decididamente el frente de Vopnafjördur apoyados por 56 carros Sherman y 13 Lee. Los combates pronto arreciaron a lo largo de un frente de 12km, siendo especialmente feroces en torno a las dos montañas que se elevaban en el extremo oriental de las defensas alemanas. Enfrentándose a las ráfagas de ametralladoras y las explosiones de los cañones, los infantes aliados pagaron con sangre cada pulgada de terreno, y si bien fueron rechazados en sus intentos de conquistar las dos alturas principales, a última hora del día el frente germano había cedido en algunos puntos del Grimstathir, donde resistirían varios intentos alemanes de reconquistar las posiciones perdidas. Nuevos ataques los días 12 y 15 ampliaron las brechas, logrando avanzar entre 5 y 10km en algunos puntos, sin embargo la artillería situada en las posiciones que habían dejado a sus espaldas causaba graves bajas a las fuerzas británicas, por lo que dedicarían la segunda quincena a la conquista de estas posiciones.
Durante 8 días los asaltos sobre las posiciones defendidas por fallschirmajeger alemanes se sucedieron constantemente, apoyados una y otra vez por feroces bombardeos aéreos que causaron graves daños entre los defensores aun al precio de sufrir 16 derribos. Sin embargo las fuerzas defensoras estaban cada vez más agotadas y las municiones de sus antiaéreos empezaban también a escasear, por lo que finalmente se verían obligados a capitular el 26 de octubre, no sin antes haber destruido todos sus equipos.
Las fuerzas alemanas en Islandia oriental habían perdido el equilibrio, y nuevos ataques lograrían romper sus líneas el 4 de noviembre, logrando llegar a la costa cerca de Seydisfjördur el día 9. Tras ellos en la base de Vopnafjördur habían quedado aislados 9.000 alemanes, principalmente fuerzas de tierra de la Luftwaffe y compañías de fusileros navales o dotaciones de las baterías de costa. Finalmente y tras resistir durante 23 días estas fuerzas también capitularían, cediendo el primer puerto de consideración a los aliados, si bien en su interior habían sido hundidos varios buques de escolta que dificultarían su utilización. Ahora los aliados estaban avanzando no sin dificultad a lo largo de la costa oriental de la isla, pues los alemanes se retiraron empleando tácticas dilatorias hasta más allá de Höfn, donde establecerían temporalmente una nueva línea de defensa apoyando su flanco izquierdo el glaciar.
Para entonces el invierno estaba llegando, las nieves dificultaban los movimientos de las fuerzas de tierra y los aviones habían visto enormemente limitada su efectividad, sufriendo incluso frecuentes averías al aterrizar en las pistas heladas. Los aliados mantenían ya una fuerza de 96 cazas y 65 cazabombarderos en la isla, donde tenían operativos el aeródromo alemán de Vopnafjördur, y el suyo propio de Langanes. Los alemanes por su parte habían retirado todos sus bombarderos tras agotar las municiones que poseían, e incluso las minas y cargas de profundidad que habían sido empleadas contra objetivos en tierra. De esta forma su apoyo aéreo se reducía a 48 cazas Fw-190 situados en Akureyri, y 17 Me-109F/G situados entre Keflavik y Reikiavik.
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.
- Lucas de Escola
- Capitán
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Turquía, en 1940, tenía casi 18 millones de habitantes...
No digo que no sean cifras ciertas, pero, carajo, ¿cómo ha pasado de 18 a casi 73 millones en poco más de 50 años? Es duplicar su población casi cada 10 años. Hoy, sólo Estambúl tiene casi 15.000.000.
He buscado datos que sugirieran la anexión de algún territorio posterior a la IIGM, pero no lo he encontrado. Tampoco he visto nada con respecto a haber sufrido inmigraciones masivas. Y si las hubo, también de Turquía han emigrado, tal vez, varios millones de turcos, fundamentalmente al norte de Europa y a los países del este.
¡Menuda tasa de natalidad! ¡Qué bárbaros estos turcos!
Un plan que no puede modificarse, no es un buen plan.
- urquhart
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Hola a todos,
en 1961, Turquía según datos de la FAO, tenía una población de poco menos de 30 millones.
Cuadro:
http://en.wikipedia.org/wiki/File:Turkey-demography.png
Según los últimos datos de las NU, la tasa de crecimiento Turco para 2011 será del 1.25%, con una tasa de nacimientos de 18/1000, una tasa de fallecimientos de 6/1000,... ya unque sueñe extraño, el saldo migratorio se espera positivo (retorno, poca afectación de la crisis, deslocalización de empresas europeas...) España tenía tal tasa de nacimientos en 1977, la actual es de 10.7/1000
Saludos.
Turquía no se ha anexionado ningún territorio desde finales de la llamada Guerra de Independencia (1923). Es más, una parte de su población no musulmana, ha emigrado, como los hebreos a Israel, los greco ortodoxos a Grecia, armenios a Estados Unidos... y sin olvidarnos de la importantísima comunidad turca en Alemania.
en 1961, Turquía según datos de la FAO, tenía una población de poco menos de 30 millones.
Cuadro:
http://en.wikipedia.org/wiki/File:Turkey-demography.png
Según los últimos datos de las NU, la tasa de crecimiento Turco para 2011 será del 1.25%, con una tasa de nacimientos de 18/1000, una tasa de fallecimientos de 6/1000,... ya unque sueñe extraño, el saldo migratorio se espera positivo (retorno, poca afectación de la crisis, deslocalización de empresas europeas...) España tenía tal tasa de nacimientos en 1977, la actual es de 10.7/1000
Saludos.
Turquía no se ha anexionado ningún territorio desde finales de la llamada Guerra de Independencia (1923). Es más, una parte de su población no musulmana, ha emigrado, como los hebreos a Israel, los greco ortodoxos a Grecia, armenios a Estados Unidos... y sin olvidarnos de la importantísima comunidad turca en Alemania.
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OFENSIVAS DE INVIERNO
Urano
Tras la derrota soviética en primavera y verano del 43, sus fuerzas habían pasado por momentos de extrema precariedad, en la que tan solo el agotamiento de las fuerzas germanas, que ocuparon posiciones estables atrincherándose, había salvado a la URSS de la derrota. Pese a todo el peligro no había pasado, y Stalin había exigido una y otra vez a los aliados la apertura de un segundo frente que detrajese fuerzas alemanas de sus fronteras. Sin embargo este segundo frente no se había abierto, las amenazas creadas por los aliados en el AOI habían sido enfrentadas con un mayor esfuerzo italiano que alemán, que tan solo había desplazado 2 nuevas divisiones a la zona. La invasión de Islandia había sufrido serios contratiempos, y posiblemente no lograría completarse hasta la primavera del 44 como mínimo, por lo que el frente occidental estaría a salvo de amenazas al menos un año más. Mientras en Persia la ofensiva aliada se había retrasado a causa de las precarias vías de comunicación de la zona, y no podrían empezar hasta ese otoño. Para empeorar las cosas el único movimiento de fuerzas alemán había sido el envió a Iraq de 5 divisiones de las SS, en previsión de un posible movimiento aliado desde Yemen a través de Arabia que amenazase la retaguardia del EJE.
Con todo la llegada del invierno y la paralización de las operaciones ofensivas alemanas trajo nuevas oportunidades a los hasta entonces derrotados soviéticos, que pronto se dispusieron a pasar a la ofensiva empleando para ello a los 5.000.000 de soldados permanecían en las posiciones del frente, a los que se sumarian cerca de 400.000 hombres que habían permanecido en reserva por orden expresa del mariscal Zhukov. Junto a ellos 10.000 carros T-34 y KV-1, y 2.000 Sherman, 45.000 cañones, 3.800 cazas, y 2.800 bombarderos constituían la fuerza más poderosa jamás reunida por los soviéticos. Pese a todo no serían empleados en un único ataque, sino en una sucesión de ofensivas a lo largo de todo el frente que debía bascular el centro de gravedad de un extremo al otro para agotar a los defensores alemanes.
El primero de los objetivos serían las fuerzas del grupo de ejércitos Don del mariscal Manstein, a las que esperaban sorprender cuando aún no habían tenido tiempo de reponer sus pérdidas del verano anterior y en posiciones precarias. Para ello emplearían cerca de un millón de hombres, 3.800 carros y 2.400 aviones al mando del general Yeromenko. La ofensiva empezaría el día 12 de noviembre tras la caída de las primeras nieves que endurecieron el barro permitiendo el avance de carros e infantería. Ese día los aviones rusos lanzaron un ataque masivo sobre los aeródromos alemanes de primera línea, tratando así de destruir su capacidad aérea en el suelo, sin embargo serían captados por los radares alemanes que alertaron a sus fuerzas, por lo que serían recibidos por el fuego antiaéreo alemán ya en la línea del frente, y por los cazas alemanes en vuelo. Las bajas recibidas fueron por lo tanto muy elevadas, sobre todo entre los bombarderos que sufrieron una aparatosa derrota. A pesar de todo el dominio aéreo continuaría siendo muy disputado hasta que 14 días después la Luftwaffe lograse asegurar su dominio.
En tierra los primeros asaltos rusos sobre las posiciones alemanas fueron rechazados pese a la gran preparación artillera a la que fueron sometidas, sin embargo el 15 de noviembre la resistencia rumana colapso, huyendo sus fuerzas en desbandada en un frente de 80km entre Liski y Pavlosk. Sería tan solo el principio, pues nuevos ataques en los días siguientes agrandarían la brecha otros 80km hacia el sur, llegando a Boguchar, mientras por el norte se alargaba otros 60km llegando al norte de Novovoronezh. Tampoco estaba mejor el resto del frente, en el que las fuerzas soviéticas sometían a los alemanes a fuertes ataques que fijaban sus principales unidades en el frente, impidiéndoles acudir en apoyo de sus sobrepasados aliados rumanos.
Los carros T-34 y la infantería rusa llevarían el peso de la batalla.
El 22 de noviembre la brecha había alcanzado los 250km de ancho, habiendo penetrado las fuerzas soviéticas más de 200km hacia el sur llegando a las afueras de la ciudad de Donest´k, y amenazando con dividir a las fuerzas del EJE llegando al mar de Azov dejando aislado al Grupo de Ejércitos Don. Sin embargo esto era lo que esperaba el general Manstein, pues las líneas rusas se habían extendido peligrosamente, por lo que en una maniobra en dos fases, en la primera de las cuales utilizaría las divisiones motorizadas 16ª, y 25ª para detener la penetración rusa en Donest´k, y una segunda en la que contraatacaría con el Panzergruppe 1 sobre los flancos de las fuerzas rusas, esperaba poder cercar a su vez a los atacantes. Sin embargo una nueva ofensiva rusa desatada contra el Grupo de Ejércitos Sur el 26, impediría a las fuerzas del 2º panzergruppe acudir en su apoyo como estaba inicialmente previsto, dificultando mucho el desarrollo de la segunda fase de su estrategia.
El día 25 las vanguardias rusas chocaron con las fuerzas de infantería alemanas que habían acumulado un gran número de cañones Pak 40 reforzados por varias baterías Flak de 88mm, con las que lograron detener la primera embestida de los carros rusos destruyendo muchos de ellos. Con el frente paralizado un posterior intento de flanquear la defensa alemana fue detenida por fuerzas rumanas llegadas de refuerzo, que contaron para ello con la ayuda de varios cazacarros alemanes. No todo sería tan sencillo sin embargo, pues los nuevos T-34 ofrecieron una feroz resistencia, apoyados por los cazacarros Su-85, y los cañones de asalto Su-76, y Su-122 entre otros. Producto de esta resistencia el intento de cerco se transformaría en una batalla de desgaste en la que tan solo cesaría con la llegada del contraataque alemán sobre los flancos rusos el día 30 de noviembre.
Pronto los combates, principalmente de carros de combate, se generalizaron a lo largo de todo el flanco izquierdo soviético. Las divisiones panzer alemanas atacaron con fuerza obligando a los carros soviéticos que avanzaban en vanguardia a retroceder para apoyar a su infantería de acompañamiento, que estaba siendo diezmada por las fuerzas alemanas. En los combates que siguieron a lo largo de una semana, los panzer acabarían imponiéndose finalmente gracias al apoyo de la Luftwaffe, que intervino de forma continua incluyendo varias unidades destacadas desde otras Luftflotte, mereciendo una mención destacada la escuadrilla antitanque equipada con los Stuka Ju-87 G1 recientemente desarrollados, que equipados con cañones de 37mm demostraron su valía destruyendo numerosos carros rusos. También fue de gran importancia la actuación de los anticarros, que contaban ya con un gran número de cañones Pak 40, capaces de acabar con cualquier carro existente en el arsenal soviético a una distancia apreciable, así como los cazacarros, uno de cuyos Nashorn, logro destruir un T-34 a la distancia record de 3.400mts.
A principios de diciembre sin embargo la resistencia rusa estaba llegando a su fin, y los panzer alemanes amenazaban con lograr cercar a las fuerzas rusas, cosa que lograrían finalmente el 16 de diciembre tras casi un mes de combates. En la bolsa resultante quedaron atrapados 409.000 rusos, 134 carros de combate, y más de 700 cañones, que serían duramente atacados en las semanas siguientes por las fuerzas rumano-germanas hasta su rendición, el 4 de enero. En total, cuando el frente recupero sus posiciones iniciales en febrero, las bajas soviéticas ascendían a entre muertos, y prisioneros a 830.000 hombres, 2.740 carros, y más de 3.000 cañones, mientras las bajas rumano-germanas ascendían a 250.000 hombres, la mayoría rumanos, 900 cañones y 1.200 carros de combate. Pero tan solo 120.000 de las bajas correspondían a muertos y prisioneros, siendo la mayor parte de ellos rumanos, y muchos de los carros perdidos podrían recuperarse y repararse posteriormente.
Urano
Tras la derrota soviética en primavera y verano del 43, sus fuerzas habían pasado por momentos de extrema precariedad, en la que tan solo el agotamiento de las fuerzas germanas, que ocuparon posiciones estables atrincherándose, había salvado a la URSS de la derrota. Pese a todo el peligro no había pasado, y Stalin había exigido una y otra vez a los aliados la apertura de un segundo frente que detrajese fuerzas alemanas de sus fronteras. Sin embargo este segundo frente no se había abierto, las amenazas creadas por los aliados en el AOI habían sido enfrentadas con un mayor esfuerzo italiano que alemán, que tan solo había desplazado 2 nuevas divisiones a la zona. La invasión de Islandia había sufrido serios contratiempos, y posiblemente no lograría completarse hasta la primavera del 44 como mínimo, por lo que el frente occidental estaría a salvo de amenazas al menos un año más. Mientras en Persia la ofensiva aliada se había retrasado a causa de las precarias vías de comunicación de la zona, y no podrían empezar hasta ese otoño. Para empeorar las cosas el único movimiento de fuerzas alemán había sido el envió a Iraq de 5 divisiones de las SS, en previsión de un posible movimiento aliado desde Yemen a través de Arabia que amenazase la retaguardia del EJE.
Con todo la llegada del invierno y la paralización de las operaciones ofensivas alemanas trajo nuevas oportunidades a los hasta entonces derrotados soviéticos, que pronto se dispusieron a pasar a la ofensiva empleando para ello a los 5.000.000 de soldados permanecían en las posiciones del frente, a los que se sumarian cerca de 400.000 hombres que habían permanecido en reserva por orden expresa del mariscal Zhukov. Junto a ellos 10.000 carros T-34 y KV-1, y 2.000 Sherman, 45.000 cañones, 3.800 cazas, y 2.800 bombarderos constituían la fuerza más poderosa jamás reunida por los soviéticos. Pese a todo no serían empleados en un único ataque, sino en una sucesión de ofensivas a lo largo de todo el frente que debía bascular el centro de gravedad de un extremo al otro para agotar a los defensores alemanes.
El primero de los objetivos serían las fuerzas del grupo de ejércitos Don del mariscal Manstein, a las que esperaban sorprender cuando aún no habían tenido tiempo de reponer sus pérdidas del verano anterior y en posiciones precarias. Para ello emplearían cerca de un millón de hombres, 3.800 carros y 2.400 aviones al mando del general Yeromenko. La ofensiva empezaría el día 12 de noviembre tras la caída de las primeras nieves que endurecieron el barro permitiendo el avance de carros e infantería. Ese día los aviones rusos lanzaron un ataque masivo sobre los aeródromos alemanes de primera línea, tratando así de destruir su capacidad aérea en el suelo, sin embargo serían captados por los radares alemanes que alertaron a sus fuerzas, por lo que serían recibidos por el fuego antiaéreo alemán ya en la línea del frente, y por los cazas alemanes en vuelo. Las bajas recibidas fueron por lo tanto muy elevadas, sobre todo entre los bombarderos que sufrieron una aparatosa derrota. A pesar de todo el dominio aéreo continuaría siendo muy disputado hasta que 14 días después la Luftwaffe lograse asegurar su dominio.
En tierra los primeros asaltos rusos sobre las posiciones alemanas fueron rechazados pese a la gran preparación artillera a la que fueron sometidas, sin embargo el 15 de noviembre la resistencia rumana colapso, huyendo sus fuerzas en desbandada en un frente de 80km entre Liski y Pavlosk. Sería tan solo el principio, pues nuevos ataques en los días siguientes agrandarían la brecha otros 80km hacia el sur, llegando a Boguchar, mientras por el norte se alargaba otros 60km llegando al norte de Novovoronezh. Tampoco estaba mejor el resto del frente, en el que las fuerzas soviéticas sometían a los alemanes a fuertes ataques que fijaban sus principales unidades en el frente, impidiéndoles acudir en apoyo de sus sobrepasados aliados rumanos.
Los carros T-34 y la infantería rusa llevarían el peso de la batalla.
El 22 de noviembre la brecha había alcanzado los 250km de ancho, habiendo penetrado las fuerzas soviéticas más de 200km hacia el sur llegando a las afueras de la ciudad de Donest´k, y amenazando con dividir a las fuerzas del EJE llegando al mar de Azov dejando aislado al Grupo de Ejércitos Don. Sin embargo esto era lo que esperaba el general Manstein, pues las líneas rusas se habían extendido peligrosamente, por lo que en una maniobra en dos fases, en la primera de las cuales utilizaría las divisiones motorizadas 16ª, y 25ª para detener la penetración rusa en Donest´k, y una segunda en la que contraatacaría con el Panzergruppe 1 sobre los flancos de las fuerzas rusas, esperaba poder cercar a su vez a los atacantes. Sin embargo una nueva ofensiva rusa desatada contra el Grupo de Ejércitos Sur el 26, impediría a las fuerzas del 2º panzergruppe acudir en su apoyo como estaba inicialmente previsto, dificultando mucho el desarrollo de la segunda fase de su estrategia.
El día 25 las vanguardias rusas chocaron con las fuerzas de infantería alemanas que habían acumulado un gran número de cañones Pak 40 reforzados por varias baterías Flak de 88mm, con las que lograron detener la primera embestida de los carros rusos destruyendo muchos de ellos. Con el frente paralizado un posterior intento de flanquear la defensa alemana fue detenida por fuerzas rumanas llegadas de refuerzo, que contaron para ello con la ayuda de varios cazacarros alemanes. No todo sería tan sencillo sin embargo, pues los nuevos T-34 ofrecieron una feroz resistencia, apoyados por los cazacarros Su-85, y los cañones de asalto Su-76, y Su-122 entre otros. Producto de esta resistencia el intento de cerco se transformaría en una batalla de desgaste en la que tan solo cesaría con la llegada del contraataque alemán sobre los flancos rusos el día 30 de noviembre.
Pronto los combates, principalmente de carros de combate, se generalizaron a lo largo de todo el flanco izquierdo soviético. Las divisiones panzer alemanas atacaron con fuerza obligando a los carros soviéticos que avanzaban en vanguardia a retroceder para apoyar a su infantería de acompañamiento, que estaba siendo diezmada por las fuerzas alemanas. En los combates que siguieron a lo largo de una semana, los panzer acabarían imponiéndose finalmente gracias al apoyo de la Luftwaffe, que intervino de forma continua incluyendo varias unidades destacadas desde otras Luftflotte, mereciendo una mención destacada la escuadrilla antitanque equipada con los Stuka Ju-87 G1 recientemente desarrollados, que equipados con cañones de 37mm demostraron su valía destruyendo numerosos carros rusos. También fue de gran importancia la actuación de los anticarros, que contaban ya con un gran número de cañones Pak 40, capaces de acabar con cualquier carro existente en el arsenal soviético a una distancia apreciable, así como los cazacarros, uno de cuyos Nashorn, logro destruir un T-34 a la distancia record de 3.400mts.
A principios de diciembre sin embargo la resistencia rusa estaba llegando a su fin, y los panzer alemanes amenazaban con lograr cercar a las fuerzas rusas, cosa que lograrían finalmente el 16 de diciembre tras casi un mes de combates. En la bolsa resultante quedaron atrapados 409.000 rusos, 134 carros de combate, y más de 700 cañones, que serían duramente atacados en las semanas siguientes por las fuerzas rumano-germanas hasta su rendición, el 4 de enero. En total, cuando el frente recupero sus posiciones iniciales en febrero, las bajas soviéticas ascendían a entre muertos, y prisioneros a 830.000 hombres, 2.740 carros, y más de 3.000 cañones, mientras las bajas rumano-germanas ascendían a 250.000 hombres, la mayoría rumanos, 900 cañones y 1.200 carros de combate. Pero tan solo 120.000 de las bajas correspondían a muertos y prisioneros, siendo la mayor parte de ellos rumanos, y muchos de los carros perdidos podrían recuperarse y repararse posteriormente.
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.
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Advertencia; Dependiendo de cómo corte el texto para irlo posteando, calculo que quedaran unos 10 ó 12 relatos para acabar…teniendo en cuenta que los sucesos de Nihon me desanimaron a seguir con las operaciones en el pacifico.
OFENSIVAS DE INVIERNO II
Turkmenistan
En un intento de apoyar a las fuerzas norteamericanas que combatían en Persia, las fuerzas soviéticas atacaron Persia desde el norte el 13 de diciembre, empleando para ello dos ejércitos de fusileros y 6 brigadas independientes de tanques. Su primer golpe empero llego desde el cielo, empleando 600 bombarderos para bombardear los aeródromos alemanes situados en el norte de Persia, y especialmente en los alrededores de Teherán. sin embargo las necesidades operativas había obligado a Kesselring a desviar todos sus aviones hacia posiciones más al sur para enfrentarse a los norteamericanos, por lo que el ataque tan solo lograría inutilizar temporalmente las pistas, perdiéndose 49 aviones solo en el ataque inicial.
Inmediatamente los hombres del 72º ejército pasaron al ataque bombardeando las posiciones alemanas antes de pasar al asalto. Pero desde las montañas la artillería alemana respondería eficazmente logrando destruir numerosas de las piezas rusas. Mientras los asaltos de infantería quedaron atascados en las montañas, en las que minas y alambradas impidieron los avances, permitiendo a los defensores utilizar sus Mg42 para abatir a cientos de los atacantes. De igual forma los carros de combate sufrirían numerosas bajas ante los cañones Pak-40, que lograrían destruir 39 carros T-34 y 12 Is-2 durante el primer día. A pesar de todo los ataques se sucedieron sin pausa, obligando a los alemanes a emplear sus reservas constituidas por las divisiones 339ª y 342ª, con las que finalmente lograrían rechazar los ataques.
El principal ataque se daba sin embargo en la orilla del mar Caspio, empleándose allí 3 brigadas acorazadas y dos divisiones para atacar la posición de la 215 división alemana. Sin embargo sus posiciones reforzadas por fortificaciones tipo panzerstellug lograron resistir inmovilizando a los atacantes con la ayuda de los 30 cazacarros Nashorn del 88 batallón schwere Panzer Abteilungen. Finalmente tras 7 días de combates en los que perderían 68 carros, los rusos se verían obligados a desistir al ser rechazados a sus posiciones de partida.
Mientras los ataques de la VVS habían encontrado una oposición creciente de la Luftwaffe, al acudir en su ayuda desde la 4ª Luftflotte situada en el Don, los 80 Me-109G de la Sch G-1. Gracias a esta ayuda, las renovadas fuerzas de Kesselring lograron enfrentarse a los aviones soviéticos, proporcionando una eficaz cobertura de sus propias fuerzas en colaboración con los antiaéreos del 23 regimiento Flak situado en el norte.
El 28 de diciembre y tras haber perdido 109.000 hombres, 467 carros, y 392 aviones, el mando soviético desistió de los ataques que a pesar de estar diseñados para apoyar a los norteamericanos y distraer fuerzas alemanas del este de Persia, habían provocado la pérdida de casi el mismo número de hombres en solo una decima parte del tiempo.
OFENSIVAS DE INVIERNO II
Turkmenistan
En un intento de apoyar a las fuerzas norteamericanas que combatían en Persia, las fuerzas soviéticas atacaron Persia desde el norte el 13 de diciembre, empleando para ello dos ejércitos de fusileros y 6 brigadas independientes de tanques. Su primer golpe empero llego desde el cielo, empleando 600 bombarderos para bombardear los aeródromos alemanes situados en el norte de Persia, y especialmente en los alrededores de Teherán. sin embargo las necesidades operativas había obligado a Kesselring a desviar todos sus aviones hacia posiciones más al sur para enfrentarse a los norteamericanos, por lo que el ataque tan solo lograría inutilizar temporalmente las pistas, perdiéndose 49 aviones solo en el ataque inicial.
Inmediatamente los hombres del 72º ejército pasaron al ataque bombardeando las posiciones alemanas antes de pasar al asalto. Pero desde las montañas la artillería alemana respondería eficazmente logrando destruir numerosas de las piezas rusas. Mientras los asaltos de infantería quedaron atascados en las montañas, en las que minas y alambradas impidieron los avances, permitiendo a los defensores utilizar sus Mg42 para abatir a cientos de los atacantes. De igual forma los carros de combate sufrirían numerosas bajas ante los cañones Pak-40, que lograrían destruir 39 carros T-34 y 12 Is-2 durante el primer día. A pesar de todo los ataques se sucedieron sin pausa, obligando a los alemanes a emplear sus reservas constituidas por las divisiones 339ª y 342ª, con las que finalmente lograrían rechazar los ataques.
El principal ataque se daba sin embargo en la orilla del mar Caspio, empleándose allí 3 brigadas acorazadas y dos divisiones para atacar la posición de la 215 división alemana. Sin embargo sus posiciones reforzadas por fortificaciones tipo panzerstellug lograron resistir inmovilizando a los atacantes con la ayuda de los 30 cazacarros Nashorn del 88 batallón schwere Panzer Abteilungen. Finalmente tras 7 días de combates en los que perderían 68 carros, los rusos se verían obligados a desistir al ser rechazados a sus posiciones de partida.
Mientras los ataques de la VVS habían encontrado una oposición creciente de la Luftwaffe, al acudir en su ayuda desde la 4ª Luftflotte situada en el Don, los 80 Me-109G de la Sch G-1. Gracias a esta ayuda, las renovadas fuerzas de Kesselring lograron enfrentarse a los aviones soviéticos, proporcionando una eficaz cobertura de sus propias fuerzas en colaboración con los antiaéreos del 23 regimiento Flak situado en el norte.
El 28 de diciembre y tras haber perdido 109.000 hombres, 467 carros, y 392 aviones, el mando soviético desistió de los ataques que a pesar de estar diseñados para apoyar a los norteamericanos y distraer fuerzas alemanas del este de Persia, habían provocado la pérdida de casi el mismo número de hombres en solo una decima parte del tiempo.
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DESEMBARCO EN BAND JASK
Con la situación estancada en el frente persa, el alto mando aliado decidió tratar de flanquear las defensas alemanas en la costa mediante un desembarco a retaguardia de sus líneas, para a continuación atacar desde dos frentes y provocar la ruptura que permitiese avanzar a sus fuerzas alcanzar los pozos de petróleo persas por fin.
Tras reunir una importante flota en Omán, algunas de cuyas unidades habían participado meses antes en la operación Jubilee en Islandia, y contando con el apoyo aéreo de las brigadas 98ª y 100ª desplegadas desde Yemen, las fuerzas aliadas se consideraban preparadas para la invasión. 3 portaaviones, 4 acorazados, 6 cruceros y 37 destructores y fragatas, que precedidos por numerosas unidades de dragaminas debían abrir paso a las unidades de desembarco, cuya primera oleada estaría formada por 2 divisiones norteamericanas y una británica, reforzadas por un regimiento de ingenieros, un batallón ranger y dos batallones de carros. Además un regimiento paracaidista saltaría poco antes de la invasión sobre Koik-e-Bala tomando la ciudad como medida de defensa de la cabeza de playa.
Los alemanes por el contrario habían concentrado toda su defensa en las montañas orientales de Persia, y la costa estaba débilmente defendida por unidades dispersas, principalmente de la Luftwaffe. Además Kesselring que esperaba un movimiento anfibio que propiciase un salto de sus líneas, había preparado planes de contingencia y estaba en disposición de emplear 3 divisiones de campaña de la LW, apoyadas por importantes fuerzas de refuerzo en cualquier punto en el que desembarcasen con suma rapidez.
El desembarco tendría lugar el 22 de enero, cuando precedidos por los dragaminas que limpiaron un camino hasta las playas, a pesar de la perdida de los dragaminas Onyx y Jasper, y por el fuego naval y aéreo que barrio las costas, las barcazas de desembarco arribaron a las playas elegidas sin mayores contratiempos. El desembarco había tomado totalmente por sorpresa a los alemanes, que tan solo tenían una guarnición de 200 hombres en las cercanías, que serían capturados esa misma mañana. Sin embargo en lugar de explotar el éxito, avanzando hacia el norte y el oeste para ampliar las cabezas de playa, realizaron tímidos avances atrincherándose tras conectar con los paracaidistas que habían tomado su objetivo. La única oposición una vez rendidos los escasos alemanes que habían sido sometidos sin lucha a causa de la sorpresa, había procedido de la Luftwaffe, que había intervenido de forma somera mediante el ametrallamiento de la playas por varios cazas.
El desembarco se llevaría a cabo sin oposición.
La respuesta empero sería fulgurante. Informado Kesselring del desembarco ordeno a las divisiones de campaña de la LW que se dirigiesen de inmediato a la zona para formar un perímetro. Al mismo tiempo e imposibilitado de enviar fuerzas panzer a la zona, debido a la virulencia de los ataques en el este, reunió varios panzer que se encontraban en reparación en un Kampfgruppe que acudió apresuradamente a la zona. El OKW por su parte accedió a sus peticiones de apoyo mediante al envió desde Iraq de dos de las divisiones SS, que serían sustituidas por sendas divisiones enviadas desde Alemania. Para sorpresa de Kesselring, la excesiva cautela del general Lucas permitió a sus fuerzas rodear la cabeza de playa eficazmente solo 2 días después, por lo que cuando el día 30 trato de salir de la cabeza de playa, sus fuerzas serían rechazadas quedando totalmente destruidos dos batallones ranger, de los que tan solo escaparían con vida 6 hombres. Las fuerzas desembarcadas habían perdido su mejor oportunidad de lograr la victoria.
Ahora había llegado el turno de atacar a los alemanes, utilizando los cazas del JG4, y varios aviones Hurricane II, y He-111F españoles, del Grupo 11 de apoyo a tierra destacados en Iraq, así como cuantos bombarderos del LG1 se lograron disponer, se lanzarían una larga serie de ataques aéreos sobre la cabeza de playa. Tras ellos el día 6 de febrero el general Mackensen lanzo un ataque que obligo a retroceder a unos excesivamente cautelosos aliados varios kilómetros. No lograrían sin embargo dividir la zona de desembarco como era su intención inicial, fundamentalmente gracias al apoyo proporcionado por el fuego naval. La situación se estaba estancando rápidamente ahora, pues ninguno de los contendientes estaba en disposición de romper las líneas de su adversario. Aun así los combates prosiguieron durante semanas, concediéndose un gran protagonismo a la artillería y la aviación.
Por parte alemana se habían transportado a la zona varios meses antes 3 piezas de artillería ferroviaria Bruno de 280mm, que ahora fueron desplegados frente a la costa. Junto a estos cañones, varias baterías de cañones y lanzacohetes bombardeaban constantemente las posiciones aliadas. Por su parte los aliados respondían con su propia artillería y empleaban constantemente a sus buques para proporcionar apoyos de fuego, que impedían los ataques de las fuerzas alemanas. En el aire mientras tanto los cazas alemanes del JG4 disputaban el dominio de los cielos a unos cazas aliados que operaban desde bases situadas a más de 300km o desde portaaviones, permitiendo a sus aviones de apoyo bombardear eficazmente las playas.
También en los mares se vivirían momentos angustiosos, pues la flota anclada frente a las playas fue atacada repetidamente por la Luftwaffe que logro hundir al crucero Cleveland y a las fragatas Fal, y Trent así como 11 transportes con sendos misiles. Además el U-657 se encontraría con un convoy fuertemente protegido el día 3 de marzo, logrando colarse entre sus escoltas para torpedear al portaaviones de escolta Bellau Wood, que se iría al fondo poco después.
A finales de febrero el general Lucas había sido relevado por el general Trescott, siendo ya evidente que el desembarco realizado para desatascar la situación en las montañas orientales se había atascado a su vez. Ambos bandos se vieron obligados a esperar la llegada de refuerzos.
Con la situación estancada en el frente persa, el alto mando aliado decidió tratar de flanquear las defensas alemanas en la costa mediante un desembarco a retaguardia de sus líneas, para a continuación atacar desde dos frentes y provocar la ruptura que permitiese avanzar a sus fuerzas alcanzar los pozos de petróleo persas por fin.
Tras reunir una importante flota en Omán, algunas de cuyas unidades habían participado meses antes en la operación Jubilee en Islandia, y contando con el apoyo aéreo de las brigadas 98ª y 100ª desplegadas desde Yemen, las fuerzas aliadas se consideraban preparadas para la invasión. 3 portaaviones, 4 acorazados, 6 cruceros y 37 destructores y fragatas, que precedidos por numerosas unidades de dragaminas debían abrir paso a las unidades de desembarco, cuya primera oleada estaría formada por 2 divisiones norteamericanas y una británica, reforzadas por un regimiento de ingenieros, un batallón ranger y dos batallones de carros. Además un regimiento paracaidista saltaría poco antes de la invasión sobre Koik-e-Bala tomando la ciudad como medida de defensa de la cabeza de playa.
Los alemanes por el contrario habían concentrado toda su defensa en las montañas orientales de Persia, y la costa estaba débilmente defendida por unidades dispersas, principalmente de la Luftwaffe. Además Kesselring que esperaba un movimiento anfibio que propiciase un salto de sus líneas, había preparado planes de contingencia y estaba en disposición de emplear 3 divisiones de campaña de la LW, apoyadas por importantes fuerzas de refuerzo en cualquier punto en el que desembarcasen con suma rapidez.
El desembarco tendría lugar el 22 de enero, cuando precedidos por los dragaminas que limpiaron un camino hasta las playas, a pesar de la perdida de los dragaminas Onyx y Jasper, y por el fuego naval y aéreo que barrio las costas, las barcazas de desembarco arribaron a las playas elegidas sin mayores contratiempos. El desembarco había tomado totalmente por sorpresa a los alemanes, que tan solo tenían una guarnición de 200 hombres en las cercanías, que serían capturados esa misma mañana. Sin embargo en lugar de explotar el éxito, avanzando hacia el norte y el oeste para ampliar las cabezas de playa, realizaron tímidos avances atrincherándose tras conectar con los paracaidistas que habían tomado su objetivo. La única oposición una vez rendidos los escasos alemanes que habían sido sometidos sin lucha a causa de la sorpresa, había procedido de la Luftwaffe, que había intervenido de forma somera mediante el ametrallamiento de la playas por varios cazas.
El desembarco se llevaría a cabo sin oposición.
La respuesta empero sería fulgurante. Informado Kesselring del desembarco ordeno a las divisiones de campaña de la LW que se dirigiesen de inmediato a la zona para formar un perímetro. Al mismo tiempo e imposibilitado de enviar fuerzas panzer a la zona, debido a la virulencia de los ataques en el este, reunió varios panzer que se encontraban en reparación en un Kampfgruppe que acudió apresuradamente a la zona. El OKW por su parte accedió a sus peticiones de apoyo mediante al envió desde Iraq de dos de las divisiones SS, que serían sustituidas por sendas divisiones enviadas desde Alemania. Para sorpresa de Kesselring, la excesiva cautela del general Lucas permitió a sus fuerzas rodear la cabeza de playa eficazmente solo 2 días después, por lo que cuando el día 30 trato de salir de la cabeza de playa, sus fuerzas serían rechazadas quedando totalmente destruidos dos batallones ranger, de los que tan solo escaparían con vida 6 hombres. Las fuerzas desembarcadas habían perdido su mejor oportunidad de lograr la victoria.
Ahora había llegado el turno de atacar a los alemanes, utilizando los cazas del JG4, y varios aviones Hurricane II, y He-111F españoles, del Grupo 11 de apoyo a tierra destacados en Iraq, así como cuantos bombarderos del LG1 se lograron disponer, se lanzarían una larga serie de ataques aéreos sobre la cabeza de playa. Tras ellos el día 6 de febrero el general Mackensen lanzo un ataque que obligo a retroceder a unos excesivamente cautelosos aliados varios kilómetros. No lograrían sin embargo dividir la zona de desembarco como era su intención inicial, fundamentalmente gracias al apoyo proporcionado por el fuego naval. La situación se estaba estancando rápidamente ahora, pues ninguno de los contendientes estaba en disposición de romper las líneas de su adversario. Aun así los combates prosiguieron durante semanas, concediéndose un gran protagonismo a la artillería y la aviación.
Por parte alemana se habían transportado a la zona varios meses antes 3 piezas de artillería ferroviaria Bruno de 280mm, que ahora fueron desplegados frente a la costa. Junto a estos cañones, varias baterías de cañones y lanzacohetes bombardeaban constantemente las posiciones aliadas. Por su parte los aliados respondían con su propia artillería y empleaban constantemente a sus buques para proporcionar apoyos de fuego, que impedían los ataques de las fuerzas alemanas. En el aire mientras tanto los cazas alemanes del JG4 disputaban el dominio de los cielos a unos cazas aliados que operaban desde bases situadas a más de 300km o desde portaaviones, permitiendo a sus aviones de apoyo bombardear eficazmente las playas.
También en los mares se vivirían momentos angustiosos, pues la flota anclada frente a las playas fue atacada repetidamente por la Luftwaffe que logro hundir al crucero Cleveland y a las fragatas Fal, y Trent así como 11 transportes con sendos misiles. Además el U-657 se encontraría con un convoy fuertemente protegido el día 3 de marzo, logrando colarse entre sus escoltas para torpedear al portaaviones de escolta Bellau Wood, que se iría al fondo poco después.
A finales de febrero el general Lucas había sido relevado por el general Trescott, siendo ya evidente que el desembarco realizado para desatascar la situación en las montañas orientales se había atascado a su vez. Ambos bandos se vieron obligados a esperar la llegada de refuerzos.
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.
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