jandres escribió: josue montero escribió:Si la presion de los paises garantes y la fustración de las FFAA Peruanas de no poder tomar el control de la zona llevo a una pronta y decisiva victoria ecuatoriana.
Victoria decisiva, que se debió plasmar en los despachos...vamos digo yo.
Pues es precisamente ese aspecto en el que trataba de hacer hincapié, estableciendo un diálogo con el estimado
Josue Montero, lamentablemente sin éxito. Inclusive, aún no ha presentado las pruebas de los "400 soldados peruanos fallecidos y los 9 helicópteros derribados".
Como posibles resultados a la coyuntura bélica, yo había planteado dos hipótesis resolutivas con las que Ecuador podría haber llevado agua para su molino. Me auto-cito:
A- Forzar la vigencia de un status quo que le de una posición ventajosa imponiendo condiciones de soberanía territorial en las conversaciones de Brasilia de 1998... lo que en la práctica habría sido posible si una vez finalizadas las acciones militares en Marzo de 1995, Ecuador hubiese mantenido el mismo control estratégico absoluto de las bases militares que Perú denunció haber encontrado infiltradas dentro de su territorio en 1994.
B- Representar un factor disuasivo capaz de mantener un nuevo conflicto militar (léase guerra total) si las conversaciones de Brasilia en 1998 no iban por el camino deseado. Sin embargo, con Perú subsanando algunas deficiencias de operatividad en su capacidad bélica (sobre todo a nivel de su fuerza aérea, con la inclusión de sistemas de armas muy superiores a los que tenía la FAE) la posibilidad era algo menos que remota desde todo punto de vista.
Me parece que no se puede establecer una disgregación de situaciones. El desastre de la comisión diplomática ecuatoriana sustentando la
tesis de soberanía (incluso la de soberanía compartida) obedece a la ley universal de
CAUSA ==> EFECTO.
Yo creo que fue una consecuencia directa de la situación en el teatro de operaciones militares en Marzo de 1995, siendo obvio que
fue una consecuencia adversa para Ecuador... y no favorable.
Llegada la MOMEP para iniciar el proceso de separación de fuerzas, ya existía una re-composición del posicionamiento de ambos bandos. La presencia estratégica militar peruana era concluyente, y era evidente que ya tenía influencia directa en la división y control en el valle del Cenepa. Control que a fines de 1994 era ejercido por Ecuador con bases infiltradas en territorio peruano.
Pienso que esa "re-composición" es una inferencia lógica y deducible, especialmente por el duro revés que sufrió el Ejército Ecuatoriano la última semana de Febrero, por ejemplo.
Incluso se puede argumentar que la cesión del terreno-cementerio de Tiwinza como propiedad privada (qué es en la práctica territorio soberano peruano y por lo tanto sujeto a las leyes peruanas, bajo la normativa de la autoridades policiales peruanas, supeditada con obligatoriedad de consulta al estado peruano para su modalidad de empleo y con una serie de restricciones al tránsito de personal militar ecuatoriano), fue en palabras del propio ex-presidente ecuatoriano Jamil Mahuad, una concesión humanitaria y simbólica que las tratativas a "nivel presidencial" consideraron satisfactorias para las partes.
Un saludo.