viejobonifaz escribió:Ya os avisé al empezar con estas historias, que me llaman el abuelo zebolleta, y como me deis alas, largo una historia por semana. Un salud.
Lárgala, lárgala que aquí estaremos esperando
Bueno, vale ya que insistis, empiezo a prepara la siguiente historia, esta ya os anticipo que con misiles y creo que por lo menos me van hacer falta 6 capítulos, en fin que se le va hacer, os toca sufrir. Un saludo.
Estupenda historia viejobonifaz. Y parece que aún no ha acabado
Opino como armagedoncan que aunque cada uno puede guardarse lo que le apetezca, se acaban perdiendo en el foro estas intervenciones que podrían recopilarse en una sección especifica.
Algo como la sección de artículos militares pero en ficción.
ñugares escribió:Si lo leemos y a alguno ya no nos quedan uñas . Enhorabuena por el magnifico relato . Esperando el resto
Estimado ñugares, tendrás queja, tu esperas el resto y automáticamente ahí va. Y como veo que hay alguien que los lee, amenazo con una nueva intentona, eso si no con torpedos que no controlo casi nada. Ya os avisé al empezar con estas historias, que me llaman el abuelo zebolleta, y como me deis alas, largo una historia por semana. Un salud.
Gracias por ser tan rápido y buen desenlace . A la espera del siguiente relato . Los de la F-100 son unos fieras
Aquí va el comienzo de la nueva batallita, en otro momento mandaré una breve reseña de algunas cosas que para algunos puedan ser desconocidas, espero que guste.
Tercera breve historia “Como derrotar a un Sistema Aegis, con misiles 2”. En la Cámara de Oficiales de la F100 todo estaba en calma, nadie hablaba, varios miraban, sin ver, alguna revista y otros aparentaban dormir sentados en el sillón con la cabeza hacia atrás, todo mentira, todos tenían la cabeza en la Santa María, todos tenían la cabeza en lo que había pasado, todos tenían ganas de tener alas y llegar allí volando…, pero en la mar no hay alas para los tristes marinos, sólo barcos y la triste realidad de que más allá de los 28/29 nudos no hay nada, sobre todo si eres un barco como Dios manda…. Todo esto y algunas cosas más, pasaban por la cabeza de aquellos hombres, uno de ellos era el Oficial del Aegis, las últimas horas un verdadero desconocido, ahora andaba de mal humor, hasta en un momento dado, le había levantado la voz al suboficial de cargo electrónico, en público, delante de todo el mundo, con el que todos sabían que mantenía una amistad de muchos años, de la época en la que él, que ahora era Oficial respetado en la Fragata, compartió destino en la fragata Cataluña, ambos como suboficiales recién ascendidos, sin razón, casi le escupió las palabras, en aquel momento todo el personal del centro de combate se quedó en silencio, oficiales, suboficiales y marineros, todos estaban consternados, dos baluartes de la fragata que siempre estaban de broma y a los que todos giraban la cabeza cuando las cosas se ponían feas para ver su semblante, si era preocupado, si estaban tranquilos…., ahora así, enfrentados a voces. En ese momento el Oficial de guerra submarina, otra institución en la fragata se levantó, era el más antiguo, aquello había que cortarlo, pero no fue necesario. -Mi oficial, si cree que gritándome se arregla lo de Emilio, adelante, no me grite solamente, además deme un par de hostias, no me importa, por Emilio eso y mucho más, pero desgraciadamente, a Emilio eso ya no le sirve de nada, Emilio si estuviera aquí nos pondría a todos a trabajar, con orden, con unión, como un equipo, era el mejor y ni usted ni yo ni ninguno de los aquí presentes le llegará a la suela del zapato, pero ya está, está muerto, ahora lo que hay que hacer es trabajar, y llegar allí lo mejor preparados posible, y para eso hay que estar descansados, con los cinco sentidos despejados, y usted, si me lo permite, lleva más de 14 horas despierto y sin parar, va a conseguir que todos lleguemos agotados a la zona caliente y eso es un error que Emilio nunca le perdonaría, se lo digo con todo le respeto y cariño que le tengo, que sabe que le tengo-dicho allí en medio de la estancia, con hombres y mujeres curtidos aquello no sonó cursi ni desentonado, el Oficial de guerra submarina ya había llegado a su altura y le habló él también. -Don Pedro tiene razón, ahora mismo, tu y yo, vamos a tomar un café a la Cámara y después te vas a acostar un par de horas, Don Pedro puede hacerse cargo de todo durante ese tiempo y después ya vienes tu para hacer lo que hay que hacer, sacar de allí a la Santa María. -Perdona Pedro, no se que me pasa, tal vez es la falta de descanso.. -el oficial de guerra submarina cortó de raíz lo que amenazaba con ser un derrumbe de José Luis, lo cogió por el codo y le llevó hacia la Cámara de Oficiales, mientras lo hacía se giró hacía Don Pedro y este inclinó levemente la cabeza, con una clara alusión a que todo estaría bien, que él se encargaba. Ahora ya había pasado más de veinte minutos y José Luis, el oficial del Aegis, seguía allí mirando el café, Miguel, el Oficial de guerra antisubmarina, se había ido a los cinco minutos, estaba de guardia y no podía abandonarla por más tiempo, eso si, de paso que volvía a su puesto pasó por la Chaza del Comandante y pidió permiso, este, el Comandante estaba colgando el teléfono y lo miró a la cara.. -¿Cómo lo viste Miguel?-no hizo falta más explicación, estaba claro que el Comandante ya sabía lo que pasaba y no cabían paños calientes. -Mi comandante, sólo lo conozco desde hace 2 años, desde que embarqué aquí, y el primer año casi no teníamos trato, ya sabe como es, al principio me pareció un chulo, creyéndose por encima de nosotros, con su inteligencia, su ingenio, pero después con el tiempo, puedo decir que es un amigo, una persona especial, alguien al que siempre puedes recurrir, muchas veces nos ha echado una mano en averías muy jodidas, sin nunca comentarlo, ni buscar que usted lo supiera, tengo claro que es un fuera de serie y es una suerte que esté con nosotros, un poco toca huevos algunas veces, pero bueno, si ese es el precio que hay que pagar por tenerlo aquí yo lo pago gustosamente, pero lo de hoy ha superado todos los límites, ha traspasado todas las barreras, el destino de electrónica ha estado trabajando sin parar más de 14 horas, hace menos de 2 horas agarró al encargado del pañol de suministro de repuestos, porque un cabo electrónico le dijo que no encontraban una lámpara de un indicador, ¡Mi Comandante una lámpara!, el cabo estaba acojonado, creyó que lo pateaba, el hombre ya tenía la lámpara en la mano y cuando se la dio, se giró para el cabo, se la dio y le dijo que la quería instalada en diez minutos, al del pañol, ni lo miró salió dando un portazo y jurando por el pasillo como si esa lámpara fuera, yo que se, la solución de todos los problemas…- el comandante levantó la mano, el oficial se cayó, permanecieron en silencio un rato y después, por fin, el Comandante habló.. -La verdad, si lo pienso un poco, es totalmente lógico, ha hecho de esto una cuestión personal, es él contra esos enemigos, esos que le han metido tres misiles a la Santa María y que ahora la tienen como un puto rehén, un barco de guerra de nuestra Armada, y que para colmo le matan a su mentor, su referencia, le voy a contar una cosa para que pueda entender la dimensión del dolor que sufre ahora mismo, cuando le daba clase en al ETEA yo ya no tenía nada que enseñarle, entonces se me ocurrió nombrarlo mi ayudante, le encargaba temas muy concretos sobre los que tenía que prepara clases especiales, clases de una hora, de puertas abiertas, mi idea era ver el grado de interés de los alumnos, ver sus reacciones desde los puestos de atrás, no me voy a enrollar, sólo le diré que a la primera clase especial asistieron los alumnos de mi clase, sabían que yo iba a estar allí, y cuatro de otras clases, al cabo de 2 meses, las clases especiales de ese hombre se anunciaban en la orden del día y hubo que empezar a darlas en la clase más grande de la escuela, en horario que permitiera asistir a todos los alumnos de los cursos superiores, profesores incluidos, pasaron de una hora de duración con cinco minutos de preguntas, a una hora de presentación por su parte y una hora de preguntas, nunca, mire bien lo que le digo, nunca lo vi nervioso, hasta el Comandante de la Escuela y el Jefe de Estudios vino un día, no estuvieron todo el tiempo, pero si un buen rato y me llamó a su despacho proponiéndome que animara a otros alumnos o profesores a hacer lo mismo, huelga decir que nadie consiguió su éxito, bien pues como le decía nunca se puso nervioso, era exactamente el mismo que se pavonea por el centro de combate ahora, en nuestra fragata, pero casualidades del destino, un día, Don Emilio estaba en Vigo con la Santa María, y vino de visita a la ETEA, sus compañeros en la Cámara de Suboficiales le comentaron que uno de sus pupilos era ahora la estrella de la escuela, que si daba unas clases magistrales sobre temas raros, etc, etc.. Total que Don Emilio entró en la sala cuando ya llevábamos 30 minutos con la clase, sólo lo voy a decir que se paró, paró de hablar, miró para él, miró para mi, yo no entendía nada, después siguió, pero fue su peor actuación, la peor de todas, con el tiempo me quedó claro que estaba apocado, no era el chulito que todos conocemos, era el alumno que se encuentra con su profesor, no le oculto que me dolió un poco, creía que yo era ese profesor, pero aquel día me quedó claro que Don Emilio era ese profesor, sólo decirle que cuando acabamos, varios oficiales se acercaron a nuestra mesa y comentaron pequeñas cuestiones que no se atrevieron a comentar en público, algo habitual, vi como él miraba para ver donde estaba Don Emilio, ya se había ido, cuando recogíamos las cosas y estábamos solos, reconozco que con un poco de mala leche por mi parte, le comenté que su profesor no había venido a felicitarlo, que a lo mejor no le había gustado, me miro y me dijo, me acuerdo perfectamente “reconozco que lo anhelaba, lo esperaba, me hacía ilusión, pero ahora que lo pienso mejor, si lo hubiera hecho, no sería Don Emilio, créame si hubiera tenido la suerte de conocerlo en un barco entendería a que me refiero”, me dejó alucinado, lo dijo como, como un hijo habla de un padre. En fin, voy hablar con él y ponerle las pilas, estamos llegando a la zona caliente y no podemos permitirnos tonterías, Miguel, quiero que sepa que confío mucho en su criterio, y quiero que me mantenga informado de cualquier cuestión relevante sobre este tema, y ahora vuelva a la guardia, lo mejor para la dotación es que vean normalidad en todas las cuestiones, las excepcionalidades los ponen nerviosos y quiero una dotación alerta, pero no nerviosa. -A sus ordenes mi Comandante, así se hará. El comandante pulsó el avisador y el repostero entró. -Baje a la Cámara de Oficiales y dígale a Don José Luis que quiero verlo aquí inmediatamente, quiero que se lo digas tu y que esperes allí hasta que suba. No dijo nada más, el repostero del Comandante, era la persona más enterada del Barco, sabia todo lo que pasaba y sabía que Don José Luis estaba medio ido, que no hablaba con la gente, bajó las escaleras de dos en dos y avisó a los reposteros de oficiales que iba entrar en la Cámara, que tenía una orden del Comandante para Don José Luis, estos respiraron aliviados de no tener que ser ellos los que se dirigieran al oficial, llevaba más de quince minutos mirando para el café y nadie le decía nada, aunque todos lo miraban de reojo, estaba como dormido con los ojos abiertos. -Mi oficial-era el repostero del comandante dirigiéndose en voz alta al oficial del Aegis- mi oficial, dice el Comandante que se presente inmediatamente en su Chaza. Nada, no se movía, el oficial más antiguo presente en la Cámara resopló y se empezó a levantar, había que hacer algo.. -Mi oficial- ahora el repostero casi gritaba-mi oficial- más alto aún, por fin el oficial giró la cabeza y miró para el repostero. -¿Si? -Mi oficial, el Comandante que lo llama, es urgente. Pareció como si hubiera despertado de un letargo, se levantó de un salto.. -¿Pasó algo?, ¿Pasó algo? -Yo sólo soy el repostero mi Oficial, el comandante lo llama a su Chaza inmediatamente. -Pues venga, vamos rápido, a que esperas, si el comandante llama hay que ir, venga, venga, rápido. En la cámara todos se miraron, bueno parecía que por fin espabilaba, joder lo preferían de chulito y sobrado que medio muerto como andaba ahora, poco a poco todos empezaron a moverse y hablar, primero en bajo y poco a poco en le tono normal, era como si de repente, después de una gran tormenta, descampara. Lo tuvo más de cinco minutos de pie, sin decirle nada, cuando entró, el Comandante levantó la mano, en señal de que permaneciera callado, no le dijo que se sentara y siguió mirando los papeles que tenía en la mano, así pasaron cinco minutos y por fin el oficial habló. -Vale, perdí los papeles, pero sólo le falta ponerme mirando para la pared. El Comandante apoyó los papeles en la mesa, levantó la mirada poco a poco y le miró a los ojos. -La pregunta es muy simple, ¿tengo oficial de Aegis o no?, sólo eso, el resto de cuestiones trascendentales me importan una mierda, es así de sencillo, ¿tengo oficial del Aegis o no?. -En cuanto duerma una hora tiene el mejor oficial del Aegis del mundo, del mundo, y lo digo como lo pienso. -Bien, era lo que quería oír, porque en este barco, para mi, hay doscientos Don Emilios y en la Santamaría otros tantos, y yo soy ahora el responsable de ellos, y no voy a permitir ni una puta tontería, ¿queda claro? -Si mi Comandante, totalmente claro- el oficial se había cuadrado y miraba al frente a un punto por encima de la cabeza del Comandante, sin pestañear. Pasaron unos instantes y ninguno decía nada, hasta que el Comandante habló. -¿Se va a quedar ahí parado?, o va a dormir una hora y así yo puedo seguir con mi trabajo. -Ya me retiro mi Comandante- y cuando iba a salir por la puerta se giró y medio riéndose- gracias mi Comandante. -Gracias, ¿Por qué? -Por el sacudón, por el golpe en la espalda, por, llámelo como quiera, ahora me siento mucho mejor, voy a dormir un poco y prepararme para lo que pueda pasar, voy a ser mi mejor versión. El Comandante se sonrío un poco y echándose hacía atrás en el asiento dijo. -Ahora si que me voy a preocupar de verdad, con la versión que conocemos ya está bien, no quiero otras versiones. -Entendido mi Comandante. Don José Luis se fue para la litera, y se acostó, al momento estaba durmiendo como un tronco. Tres días antes de que todo esto ocurriera, en la Camareta de Suboficiales de la Santa María, Don Emilio y Don José, el suboficial artillero más antiguo y por lo tanto supuestamente el de cargo, estaban tomando el café después de la comida, era lo bueno que tenía ser el de cargo, que no montaban guardia, tenían horario corrido de ocho a once de la noche, pero con ciertas libertades, eso lógicamente si no había averías, en esos casos se trabajaba hasta que quedaba listo o el cuerpo aguantaba, lo que antes ocurriera, aunque si había que ser honesto, cuando había averías, Don Emilio las reparaba y Don José se ocupaba de jurar en arameo por la mala suerte que tenía, era famosa su frase de “otra pena pa mi coñ*” cada vez que un subordinado le daba la novedad de una nueva avería, y a parte de eso se encargaba de la logística culinaria, los que trabajaban en la reparación siempre tenían cervecita fresca y un poco de jamoncito cuando se realizaban pruebas entre sustitución de repuesto. Si había dos personas distintas en el barco, esas eran Don Emilio, suboficial de cargo electrónico, una institución en la Armada, respetado por todos, superiores, iguales y subordinados , tal vez uno de los mejores en su puesto de toda la armada y un magnífico instructor, de hecho tenía más de media docena de pupilos repartidos por otros tanto barcos, pero con uno muy especial, el oficial del Aegis de la F101, del que se contaban historias impresionantes, que los americanos lo llamaban cuando tenían averías jodidas en sus barcos, que si le habían ofrecido un puesto de profesor en la Armada Americana, él cuando oía esas cosas se reía y contestaba, que el día que se hizo oficial, dejó de ser un pupilo suyo, que se dejaran de chorradas, que todo eso eran pamplinas. Y por otro lado don José, el brigada artillero más antiguo de la Santa María, y por lo tanto el suboficial de cargo, un hombre que embarcó para conseguir los días de mar necesarios para ascender, pero que de electrónica no tenía ni idea, siempre contaba que no había nadie como él para dar cañonazos con un mazo en la torreta del Churruca, que cuando todo fallaba, el oficial le soplaba por el teléfono autoescitado “José, fuego joder, fuego” y él le largaba un martillazo al percutor y largaba un pepinazo, con fogonazo incluido, por eso ahora estaba medio sordo y medio sonado, en fin, que nadie le hacía caso, pero como Don Emilio se lo cargó a los hombros, todos callaban y dejaban hacer, y él, Don José, que no era inteligente pero era listo como una centella, tenía a don Emilio entre algodones, Emilio, tu a mandar, como si hay que partirle las piernas a alguien, y ya les dije yo en casa, a don Emilio me lo cuidan como si fuera yo, que si llego a subteniente es gracias a él, en esos casos don Emilio siempre le decía lo mismo, José, joder que no es nada, a mi con llevarme a pegar unos tiritos de cuando en cuando ya me tienes más que contento, y es que Don Emilio sólo tenía un vicio, la caza, que además se le daba fatal y esta era la relación entre estos dos personajes, distintos, pero amigos, a su manera. Entró el repostero de suboficiales y se dirigió a ellos. -Don Emilio, el cabo artillero, ¿Qué si puede salir? Dieron el último sorbo al café y se encaminaron a la salida. -Pero mira que le digo que mientras tomas el café no te gusta que te molesten-era don José el que se explicaba- pero no, tiene que tocar los cojo***, ya se que ahora es tu pupilo, pero estas cosas te ponen de mal humor, que yo te lo noto, y después las pagamos todos-don Emilio paró en seco se giró y lo miró todo serio-vale ya me cayo, pero ves, ya te estás poniendo de mal humor. Con aquel hombre era imposible, salieron de la Camareta y se encontraron al Cabo. -Don Emilio, todas las comprobaciones bien, el sistema MK92 está perfecto, pero tal como usted me enseñó estuve escuchando un rato debajo del sistema CAS (sistema de antenas combinado, que se aloja en la famosa bola de las fragatas tipo Santa María, y que contiene la antena de superficie, en la parte de abajo y una antena parabólica monopulso en la parte superior, todo ello montado en una plataforma estabilizada y con acelerómetros) con la trampilla abierta, el ruido no es el de siempre, por veces, creo que la correa de arrastre de la antena de superficie está tocada, pido permiso para cambiarla. -Otra pena pa mi coñ* – era don José que no faltaba a su cita con la dichosa frase- joder mi mala estampa, no vamos a tener listo el equipo para las pruebas dichosas. -Me metí en la bola y le hice una inspección visual, la vi bien, pero después de la prueba de tiro de la tarde, me quedaba mas tranquilo si la cambiáramos. -Bien, haremos así-era don Emilio el que hablaba- pero encárgate de tener el repuesto en el cic de equipos, pero no lo hagas tu, a ti te quiero en tu puesto desde ya, y tu José ve comprobar que en el cañón todo está correcto, faltan 30 minutos para la prueba. La Santa María acompañaba a un destructor Aegis Americano, y su comandante había conseguido que el destructor Americano se prestara a realizar un ejercicio de tiro contra misil roza olas, usando su señuelo teledirigido, una pequeña maravilla, sólo le había exigido que desconectara la espoleta de proximidad de los proyectiles del Oto Melara. -En cuanto veas el sintético en la pantalla le tiras un poco por delante de la traza, y en cuanto el botón de track se ponga verde pasas el cañón a automático y esperas la autorización para disparar-don Emilio mientras le decía esto al cabo, que estaba en su puesto de la consola del MK92, en la parte antiaérea, le tenía las manos apoyadas en los hombros- ¿Qué más?- -No perder nunca de vista el contacto en la pantalla Alfa, y acostumbrarse a ver como los proyectiles propios van por línea de transmisión de la antena monopulso, como si fueran gusanos. -Exacto, en un caso real, si miras con verdadera atención, deberías ser capaz de determinar que el misil atacante es destruido, porque verás fragmentos, pequeños puntos que salen para delante y para detrás. Don Emilio había pedido permiso al oficial del CIC para poder quedarse allí, y no ir a su puesto en el CIC equipos, para ver mejor como reaccionaba su pupilo, y se lo habían concedido. -A todos los puestos, atención, lanzamiento del simulador misil ahora, ahora, ahora, apagar link, todos los puestos a mi orden destapar pantallas -las pantallas habían sido tapadas para simular la sorpresa de un ataque real, de hecho sólo un operador radarista mantenía contacto con el controlador del señuelo del otro barco, diciéndole cual era su trayectoria. A 25 millas el sps-49 detectó el blanco, en la siguiente pasada le asignó traza, rumbo, velocidad y el oficial de guerra antiáerea lo catalogó como hostil, el iluminador fue designado y 5 segundos después tenías solución de tiro, el lanzador de misiles posicionó el de prueba se giró y apuntó en la dirección correcta, no se hizo lanzamiento, no había autorización, pero todo se había hecho rápido y bien. Pasó el tiempo y a las 12 millas tanto el Ran 12l, como la Mk92 detectaron el blanco, el operador colocó su traza un centímetro por delante del sintético, y designo la antena monopulso, al momento ya vio en la pantalla alfa el blanco, estable en el centro de la pantalla, designó el cañón, pero pese a todo aún tardó 2 segundos en encender la luz verde, que indicaba solución de tiro lista, cuando esto ocurrió el cañón ya estaba en posición, ahora había que esperar a que el blanco entrara en distancia. -A todos los puestos, autorizado a abrir en cuanto esté en dentro del alcance del cañón. En cuanto esto ocurrió, el operador pulsó el botón de fuego, y el cañón empezó a disparar, con una cadencia de mas de un disparo por segundo, consiguió colocar 12 disparos, hasta el alto el fuego, el cabo estaba pletórico, menos los dos primeros y los dos últimos, el resto los había visto perfectamente, como iban por el centro de la transmisión del radar, como un tren que va por railes, no tendía ninguna duda, esos iban a ser blanco, se dieron otras 3 pasadas, y cada una fue mejor a la anterior. Aún no había pasado una hora de la prueba y el oficial de armas estaba en el CIC con las gráficas del tiro, unas marcaban las rutas que había seguido el simulador de misil y otras presentaban una diana con cuatro cuadrantes y un radio máximo de 50 metros, a esa distancia y para esa munición, se consideraba impacto y por lo tanto misil destruido, en las dos primeras pruebas, hubo cinco disparos por debajo de los cinco metros, y el resto dentro de los 50, y en la última sólo tres disparos, pero todos por debajo de los 5 metros. -Señores tengo que felicitarlos, el resultado es impresionante-era el oficial de Armas, el que hablaba, además con esa última pasada ha quedado claro que el sistema está finísimo, en los tiros centrales el error es menor de cinco metros, repito, impresionante, efectivamente como comentamos ayer, en un caso de ataque masivo con misiles, este cañón bien puede ocuparse de dos misiles, él sólo, si, ha quedado totalmente demostrado, sólo necesitamos pillarlo en la franja de las 10/12 millas, bien, cuando nos dirijamos a puerto para descansar, haremos una pequeña fiestecita para celebrar esto, ahora todos a sus puestos y a trabajar- muy en su tónica todo lo soltó de forma fría, era un muy buen oficial, pero no era bueno conduciendo personas, le faltaba un poco de mano izda. -Me cago en sus muertos, si ya lo decía mi compadre, el mejor a un metro del suelo, pero colgado- era Don José el que hablaba, en voz baja mirando a Don Emilio- que te tiraste más de una hora para convencerlo, para que hiciera la última pasada con sólo tres tiros, que se de buena tinta que el Comandante le ha mandado felicitarnos, y el muy jodido no dice nada, en cuanto volvamos a Rota se me va a caer un bote de decapante en el chasis de un coche que yo me se, bueno vale, de decapante nada-Don Emilio se había girado cuando oyó lo del decapante, sabía que su compañero era muy capaz de hacerlo y eso si que no lo permitiría. -Venga, vamos José –Don Emilio aprovechando que el Oficial ya se marchaba, se acercó al cabo y- muy bien, mira bien las gráficas, esos tiros están todos concentrados en el primer cuadrante, sí, ya se que a menos de 5 metros del blanco, pero yo confiaba en un impacto, sí, no me mires así, si el sistema está bien, y las temperaturas de la munición correctamente metidas y es reciente la comprobación doppler del sistema, en esos casos el impacto es posible y frecuente, en los años que llevo, mis equipos lo han conseguido seis veces, hoy pensé que sería la séptima. -Sabes como le llaman a Don Emilio en Cádiz, “el pincha Chucas”- era Don José haciendo la rosca como siempre. -Pero serás armante, no le hagas ni caso, piensa sobre todo lo hecho hoy, es tu primer ejercicio de tiro sobre misil simulado y te han dejado llevar la respuesta a ti, un simple cabo, piensa en ello y saca tus conclusiones. -Pero entonces ¿el sistema está mal?-preguntó el cabo un poco desconcertado, cuando vio las gráficas se había puesto casi a dar botes y de repente llega Don Emilio y un jarro de agua fría, no entendía nada- con 50 metros se considera impacto, colocamos los tres disparos de esa última tanda en los 5 metros y no está satisfecho. -No hombre no, claro que estoy satisfecho, pero debes mirar siempre un poco más allá, esa gráfica de la última pasada es muy importante, está hecha a una distancia que la tensión del tiro hace que prácticamente el proyectil valla recto y por lo tanto es muy buena para comprobar la alineación de todo el sistema, como el estado de la mar es también muy bueno, esa concentración en el primer cuadrante indica que tenemos unas milésimas que corregir, evidentemente no aquí en la mar, si haces las comprobaciones sobre las marcas de la estructura no vas apreciar ninguna diferencia, pero si vamos a Ferrol, hay que aprovechar para hacer las comprobaciones con la instalación del monte, al aumentar la distancia ese pequeño error aparecerá y hay que corregirlo, si ese error no existiera, los disparos habrían marcado varios cuadrantes, y casi seguro que alguno hubiera impactado, ¿lo entiendes?. -Si lo entiendo- el cabo miraba la gráfica, ahora con sensación de preocupación, siempre había un pequeño pero, nunca se conseguía la perfección. -Ni antes tenías que estar tan animado, ni ahora tan decaído, todo el sistema ha funcionado muy bien, pero siempre debes analizar todo de forma objetiva y fría, si no, no lo harás bien, es así de simple, y desde luego el resumen final es muy bueno, pero que muy bueno. Los dos suboficiales abandonaron el CIC uno al lado del otro, al cabo de un rato Don José no pudo aguantar más. -Eres un jodido aguafiestas Emilio, para una vez que veo al chaval animado de verdad, vas tu y me lo machacas, no hay quien te entienda, siempre me dices que va a ser un profesional como la copa de un pino, podías dejarlo disfrutar un poco digo yo. Emilio ni miro para él, ni se giró, ni hizo ademán de decir nada, se limitó a seguir su camino hacia la Camareta de Suboficiales, era la hora de su café y eso era sagrado. -Suerte que quedaste de Suboficial, si llegas a hacerte Oficial, a ti, a ti te cuelgo de lo más alto, eres un jodido cabrón. Al día siguiente el mar estaba en calma total, la primera guardia estaba en sus puestos y el sol de la mañana lo inundaba todo, Don Emilio estaba en el puente alto tomando un poco el fresco y echando un vistazo a todas las antenas, era una costumbre de viejo, decidió demostrarse a si mismo que era capaz de subir a la plataforma donde estaba el 49, y subió, con trabajo, pero subió, la brisa allí era un poco más fuerte, pero se oía perfectamente el ruido de todos los radares, se puso de espaldas a proa, no era cuestión de que por pura casualidad iluminaran con la antena del canal aéreo del CAS en aquella dirección, cerró los ojos y se puso a oír los equipos, cada uno con su cántico particular, el RAN, el 49 y el Mk92, hasta el 55 se oía un poco, de repente abrió los ojos, ahí había un nuevo sonido, efectivamente el iluminador de misiles se estaba posicionando por el través, y el 49 aumentó sus revoluciones, a la vez que tenía un mal presentimiento, sonó la sirena, zafarrancho de combate…. No es un ejercicio, ataque con misiles, tiempo para el impacto…. 30 segundos, repetición. Su primer impulso fue ir hacia la escalera para bajar corriendo, pero de repente se paró y se puso a reír. -Ni de coña me pescan como un puto pájaro de rama en rama, lo que tenga que ser que sea- lo dijo en alto como si hablara con alguien, pero allí no había nadie, desabrochó el cinto se sentó en la esquina de la plataforma y lo pasó por la barandilla de más abajo, para después volver a abrocharlo- por lo menos que encuentren el cuerpo- volvió a decirlo en alto, como si hablara con alguien, el cañón ya estaba alineado con la supuesta amenaza, no la veía pero allí estaba, tan pendiente estaba del cañón que no se percató del ruido del lanzador, un misil estaba siendo disparado- ahí, ahí, por ahora ganas tu chaval, aguanta, aguanta, tres tiros y por el siguiente- al final fueron cinco tiros y paró, se movió un poco hacia popa y vuelta a abrir fuego, dos nuevos misiles en el aire- pues si que los jodidos estos nos tienen ganas, cuatro misiles- lo estaba diciendo y se quedó pasmado de ver como un misil se estampaba con la parte alta de las chimeneas, parecía de juguete, parecía irreal, pero aquello estalló y ya no vio nada más, desgraciadamente un trozo de metralla le impactó en la frente y lo mató en el acto, desde lejos parecía que estaba sentado, no oyó como el otro misil impactaba en la última parte de la superestructura, como se inclinaba la plataforma donde estaba él y como la protección de fibra del CAS salía volando en mil pedazos del impacto de la metralla, toda aquella zona, quedó acribillada, él como estaba sentado en la plataforma no sufrió mucho castigo, pero si varios impactos pequeños, daba igual ya estaba muerto. Unos metros más abajo la cosa fue todo mucho más intenso, en el CIC, los operadores tenían media tertulia, no dejaban de mirar las pantallas, pero hablaban del mundial de Formula uno, que si Alonso tal, que si Alonso cual,…, de repente el operador aéreo dejó de hablar, había aparecido una traza de la nada, no se movía, fluctuaba un poco pero no se movía, el 49 en tres barridos la marcó en la misma posición, bueno realmente parecían tres contactos, en el siguiente barrido, se empezaron a desplazar lentamente hacía el barco, el sistema les asignó nº de traza automáticamente y símbolo de desconocido, el Oficial de guardia del CIC, que estaba cubriendo unos mensajes, dejó la tablilla y miró su pantalla, un acto reflejo, cuando una conversación animada se corta de repente es que algo pasa, el suboficial radarista de guardia levantó la voz – Ojo pueden ser misiles- y a la vez que lo dijo se fue disparado para el RAN 12L, el cabo de la Mk92 levantó la cabeza de las gráficas y de los manuales de ajuste que se había traído para la guardia, quería tener todo claro cuando Don Emilio decidiera hacer esos ajustes de alineación, casi sin pensarlo, encendió el Oto Melara, que estaba en stanby y remoto, así como con el tambor lleno de pepinos, en total 40, comprobó que todos los controles del sistema estaban correctos y se colocó bien los auriculares, el oficial de guardia también y además comprobó que el personal de armas estaba en sus puestos, el cabo radarista más antiguo estaba a su derecha y con un intercambio de miradas fue suficiente, pasó al puente, la situación, posible ataque de misiles, tres o más, demora 070, por el través de babor, distancia …9 millas, tocar zafarrancho de combate, el comandante que estaba en su asiento del puente, dio un brinco y saltó literalmente de la silla, dijo a gritos mientras iba para el CIC que tocarán zafarrancho de combate ya, en la pantalla del RAN 12L aparecieron cuatro bananas muy hermosas, venían cagando leche, el iluminador de misiles ya hacían un rato que había enganchado uno de ellos y armas subía un misil al brazo lanzador y lo orientaba en la demora del blanco, el oficial, a gritos autorizó a abrir fuego, el cabo del Mk92, gritó también por el canal que él se hacia cargo del 4 y el 5, el oficial pensó un momento y dijo ok, mk92 blancos 4 y 5, el sonido del estándar saliendo lanzado contra los vampiros fue tranquilizador, joder ahora el RAN marcaba seis misiles, el oficial no daba crédito. Al cabo por un momento se le subieron los huevos a la garganta, sintió un miedo tan grande que casi se caga por los pantalones, pero tal como llegó, se fue, sus mano izquierda ya estaba sobre el botón de track y la derecha sobre la rolling-ball ajustando el sintético un poco por delante de la traza del 49, en su radar aún no había crudo, pasó la mirada a la pantalla Alfa de su consola, arriba a la izquierda, de repente apareció el característico ruido, para arriba para abajo, y un pequeño bultito en el borde derecho de la pantalla- joder ya está más cerca- movió la bola un poco para atrás y forzó el track, ahora si mucho más centrado y salió un bulto más grande, el ruido se vino abajo en cuanto el CAG se ajustó al eco del misil, y el sistema de seguimiento lo centró en la pantalla Alfa, era pequeño pero claro, al momento se encendió la luz verde de la tecla de track, eso significaba que los datos de tiro estaban listos, ni se dio cuenta que había pulsado fuego, pero el cañón ya estaba disparando, los disparos de forma sorda, pero el cabo operador del mk92 los oía acompañados de una pequeña vibración, empezó a contar mentalmente, en cuanto el primer proyectil apareció por la esquina y vio que iba por la senda, no esperó más, dejó de mirar la pantalla Alfa y llevó el sintético al siguiente contacto, ahora si aparecía el crudo en su PPI –joder, cinco millas- su mano izquierda pulso el botón de fuego e inmediatamente la track, el cañón paró de disparar y se desplazó a la nueva posición, repitiendo las oscilaciones de la antena monopulso, al momento se encendió la luz y pulsó fuego, ahora miró la pantalla Alfa y al momento ya aparecieron los proyectiles, contó hasta tres y le pareció ver que el misil estallaba, pero daba igual ya intentaba enganchar otro misil, ni crudo ni…, en ese momento un ruido sordo y hasta lejano, y una vibración más grande que la de los disparos de cañón, al momento un estruendo mucho mayor, literalmente se sacudió todo el CIC, todos se miraron, en silencio, las alarmas empezaron a sonar, las pantallas se cegaron, era como si de repente ningún radar funcionara, el Comandante subió corriendo las escaleras hasta el puente de gobierno y de allí al costado, los dos impactos eran totalmente visibles, uno en las chimeneas y otro en la parte alta de la superestructura, había antenas colgando, pero dentro del desastre hasta respiró aliviado, aquello era mucho menos de lo que esperaba haber encontrado, y por la cabeza, hay que joderse, le pasó un pensamiento alucinante “bueno, cuatro de seis, nadie podrá decirme nada”, tal como le pasó, se reprendió mentalmente, se giró y pidió a gritos informe de personal.. Fin Primera Parte.
Unas pequeñas explicaciones sobre cuestiones que se nombran en el 1er capítulo: Las pantallas, básicamente hay 3 tipos de pantallas, las PPI, las Alfa y las Bravo. Las PPI, son las normales, el origen, normalmente en el centro de la pantalla representa el buque propio, y la línea que va desde ese origen al fondo de la pantalla, es la transmisión del radar, que va girando acompañando el giro de la antena, tenemos distancia y demora de los blancos. La Alfa, realmente sería como la pantalla de un osciloscopio, se usa asociada con los radares iluminadores y de enganche aéreo, en el eje X presentamos distancia y en el eje Y intensidad de la señal, en el caso de la historia, el equipo presenta una ampliación del blanco, estando este, cuando está correctamente enganchado, en el centro justo de la pantalla. Por último las B, que no se mencionan en la historia, porque se usa para el tiro de superficie, es una pantalla cuadrada como la Alfa, a la derecha del operar, donde el eje X representa distancia y el Eje Y ángulo, el blanco de superficie se centra en el medio justo de la pantalla, de tal forma que cuando de se abre fuego, casi instantáneamente, aparece un puntito en el punto previsto de caída del proyectil, si se ven los piques, tiene una función para corregir la desviación, si la hay, además se puede corregir con respecto al blanco. Después otras.
También hay un momento de la historia, donde se habla de la gráfica del tiro y de la alineación del sistema, pues bien:
Sobre la gráfica del tiro: cuando se realiza tiro sobre un blanco simulador de misiles (los hay de muy diversos tipos y capacidades) estos siempre llevan un registrador que es capaz de leer la distancia y la marcación a la que pasa el proyectil o el misil (dependiendo del caso), de tal forma que pintan unas gráficas (las hay de varios tipos) que son como una diana, donde el centro representa el misil atacante, y las cruces los puntos por donde pasaron los proyectiles, dependiendo del tipo de proyectil, la distancia máxima a la que puede pasar considerándose impacto varía, de tal forma que en el caso del cañón de la historia esta distancia son 50 metros, la gráfica tiene unos anillos concéntricos que representan la distancia y unas cuadrículas, cuatro en concreto, si el sistema está totalmente alineado y si los datos de la munición bien introducidos, así como los datos de velocidad inicial desde la última lectura doppler, entonces cuando la distancia es muy corta, 5/6 km, el disparo es muy recto, y por lo tanto los disparos deben aparecer en torno al centro pero por varios cuadrantes, si aparece en un cuadrante en concreto, y todos concentrados, quiere decir que hay un pequeño error de alineación. Sobre la alineación: tenemos por un lado la dirección de tiro, que pasa los ángulos de elevación y demora al blanco, así como la distancia al calculador del sistema, este hace los cálculos y calcula la posición futura a la que debe disparar el proyectil (aquí tiempos de vuelo de 3/4/5 e incluso 6 segundos son normales), una vez realizados esos cálculos se trasladan en forma de ángulo de elevación y demora al cañón. Una pequeña desviación entre los ángulos calculados por la dirección de tiro y/o una pequeña desviación en el posicionamiento del cañón suponen grandes errores, por la distancia. Por eso se realizan ajustes de alineación de forma periódica o cuando se sospecha de un error, los más normales son: Alineación del cañón con el sistema, con las marcas fijas del barco: en las inmediaciones del cañón y sobre la estructura del barco, soldadas, hay unas chapas con un cruz grabada, el centro de esa cruz corresponde a un dato concreto de ángulo de elevación y marcación del cañón, de tal forma que introduciendo ese dato en el calculador del sistema y pasando el cañón a automático se debe posicionar apuntando justamente ahí, para comprobarlo hay en todos los barcos una especie de catalejo graduado que se introduce en la caña del cañón y que al mirar el artillero por el, tiene que aparecer la famosa marca de cubierta en el centro de la mira graduada, si no es así, entonces hay que ajustar. Lógicamente dada la poca distancia, aquí se detectan errores relativamente grandes, pero es un ajuste muy bueno, cuando lo realiza una persona con experiencia. Alineación de todo el sistema: en los arsenales hay unas instalaciones en algún monte cercano, donde hay un respondedor radar muy fino asociado a una diana, de tal forma que se puede designar la dirección de tiro a ese blanco y después el cañón, si por la famosa mira vemos el blanco centrado, entonces esta todo bien (la dirección de tiro, el sistema y el cañón), si no, hay que hacer ajustes, tiene que hacerlo personal con mucha experiencia.
Muy interesante los relatos, pero creo que me perdí la parte en donde explicas en que van embarcado los misiles para que los detecten solo a 15millas (poco más que el horizonte visual)
Saludos.
"Tirale un pedazo de carne a un perro, Y siempre se lo zampara. Dale poder a un hombre... Y se convertirá en una bestia" Editado
tacuster escribió:Muy interesante los relatos, pero creo que me perdí la parte en donde explicas en que van embarcado los misiles para que los detecten solo a 15millas (poco más que el horizonte visual)
Saludos.
No te lo perdiste, simplemente no se dice aún, en los siguientes capítulos, esa misma cuestión se la plantearan los miembros de la dotación de la f100, entre otros.
Wasp To Get Combat System Upgrade, Return to Deployment Schedule
The amphibious assault ship Wasp’s combat system is obsolete, says the U.S. Navy, and has been that way for years, leading to the ship’s withdrawal in 2009 from the regular deployment schedule.
The ship that hasn’t made a major overseas deployment since 2004 is scheduled to receive a major upgrade intended to put it back in the mix by 2014. The acknowledgement of a deficiency with the ship is at odds with previous official statements. Navy officials in June said Wasp had not conducted a major deployment over the past eight years because the ship had been designated a test platform for the F-35B Joint Strike Fighter.
Antes de nada, pedir disculpas por la tardanza en volver a colgar algo de la nueva batallita, se parece mucho a cuando vas a un restaurante y entre plato y plato pasa una eternidad, pero en mi actual vida profesional, los ataques si no son de misil se le parecen mucho y no tengo sistema Aegis para defenderme. Os recomiendo que miréis un poco el capítulo anterior, yo también lo hice, el que mando no está acabado, pero algo es algo (en cualquier caso este rato que pasé escribiendo, bien vale una consulta de siquiatra).
2da parte “Como derrotar a un Sistema Aegis” El teniente miró para la bandeja, hacía unos días que no tenía mucho apetito, aquella situación le estaba acabando con la salud, una cosa era aguantar al Coronel y al bigotes, y otra muy distinta era aquello, levantó la cabeza y vio al triste sentado, como siempre, en la esquina de la mesa, con todos los cubiertos perfectamente colocados y comiendo despacio, tenía toda la pinta de un autómata, no hacía nada fuera del guion, internamente le llamaba el triste, porque es como estaba siempre, triste y aburrido, en la otra esquina de la mesa, el chulo, en vez de comer, parecía que estaba librando una batalla con los alimentos, no los pinchaba para comer, los ensartaba con saña y los masticaba a lo bestia, con su dichosa libreta en frente y constantemente haciendo garabatos y operaciones y joder.. aquello no era vida, no podía hablar con nadie, con nadie normal, aquellos dos estaban para encerrarlos y él si no acababa pronto aquello también estaría para meter en un manicomio pronto, encima el bigotes hacía dos días que no aparecía por allí, empujó la bandeja y se levantó, estaba cansado y pensaba meterse en la cama ya mismo, llevaba unos días que le costaba dormir, la emoción, cada vez necesitaba más esa adrenalina, por su puesto no lo reconocería ante nadie, pero le gustaba esta guerra, no la veía como el matar gente, era como una guerra entre técnicos, como intentar ganarle a los Goliat tecnológicos con ingenio y pocos recursos, y eso le producía un placer enorme. Recorrió el pasillo y al llegar a su habitación se metió en ella, nunca hubiera pensado que existieran aquellas instalaciones, estaba claro que ahora el Coronel tenía poder, que no sólo le daban otra oportunidad, sino que le daban recursos, se aseó un poco y se metió en la cama, una vuelta, otra, otra, era imposible dormir, empezó a hacer un repaso mental de la situación, como siempre las situaciones intensas las recordaba como lejanas, como si le pasaran a otros, cuando estaban en el monte, viendo como la f100 se liaba a cañonazos con la boya, y que al final puso máxima velocidad para escarpar de los torpedos, y que lo consiguió sin dificultad, en aquel momento, el Coronel, le mandó al resto de personal que se marcharan, que nosotros tres nos iríamos en el jeep, solos, se quedaron allí mirando al mar, imaginando a la dotación de la fragata corriendo de un lado para otro, sorprendidos una vez más por ellos, unos pringados, de repente pasó el primer avión, raso, ni lo vimos venir, pasó rompiendo el aire, rugiendo, no exactamente por encima nuestra, pero si por encima del camión de EW, ya nos habían dicho que desde hacía rato nos estaban perturbando y que no eran capaces de ver nada, el Coronel, les dijo que grabaran todo y que siguieran intentándolo, la cara de los operadores era un póker, no era necesario saber lo que les pasaba por la cabeza, eran un blanco facilísimo, el Coronel ni para ellos miró, y el bigotes les hizo un ademán que no dejaba lugar a dudas, a joderse tocaba, el operador volvió al camión cabeceando, mi primer instinto fue salir corriendo, pero como si el Coronel lo hubiera intuido, dijo en alto-aquí no se mueve nadie- por su puesto el bigotes como siempre ya les había dicho a los del camión EW, que al que se moviera le pegaba un tiro, el siempre tan conciliador, el caso es que allí nadie se movió y después de cuatro pasadas más nos dejaron en paz y no volvieron, el camión arrancó y salió de allí pitando, me imagino más o menos los juramentos de aquellos muchachos contra el trio calavera que éramos nosotros, que ganas de decirles que allí el único cabrón era el Coronel, bueno y a lo mejor también bigotes, pero yo no, yo sólo había armado todo aquel lio con mis geniales ideas, no, mejor callar y quedarse quieto. -Creo que esta vez sí, esta vez les hemos llegado al corazón-eran el Coronel hablando tranquilamente-si, durante unos días van a trabajar de lo lindo, submarinos de arriba abajo, y todos con los cascos de los sonares calentando sus lindas orejitas, como me gustaría verlo, teniente tengo que reconocer que ha conseguido que últimamente me sienta bien, hasta no me importa mi dichoso ascenso, quiero que valla pensando en otra idea de las suyas, esta vez piense a lo grande, a lo mejor hasta nos hacen un poquito más de caso, lo de los aviones les va a salir caro a los cachorritos estos, eso seguro, eso seguro- y se puso a bajar tranquilamente camino del jeep. -Está contento, como no lo había visto nunca, lo que ha dicho hoy es lo más próximo a una felicitación que puedes llegar a esperar de él, yo por el contrario, te estoy muy agradecido, llevo toda una vida viendo como esos hijos de la gran perra me humillan, y desde que estas con nosotros esto es otra cosa, pase lo que pase, a mi ya me compensó conocerte- el bigotes también se puso a bajar, y yo no pude evitar reírme en bajo, de repente me acordé de una película donde el protagonista se giraba para seguir la cadena, ahora me tocaba a mi decir algo, pero claro ya no había nadie, cabecee varias veces y empecé a bajar yo también, la verdad, la verdad, es que no cambiaba aquello por mi aburrida vida anterior. Pero de eso ya habían pasado más de cuatro meses, y como siempre, cuando la cosa estaba a puntito, no podía dormir, no podía desconectar, oyó la puerta de al lado, como se abría y se cerraba, los ruidos característicos de prepararse para acostarse y de repente, joder, no, joder no, el puto bigotes roncando, era increíble, yo creo que va por el aire y ya empieza a roncar, cabrón, cabrón, ahora si que no podría dormir. La cabeza siguió su orden, un orden cronológico muy especial, estaba claro que le quedaban marcados ciertas cuestiones y otras se le olvidaban, como por arte de magia, lo siguiente que recordaba nítidamente fue la reunión a la que lo llamó el Coronel, tres días después de recibir su informe, un informe donde detallaba su propuesta de nuevo ataque, donde decía que esa era la única forma de hacerlo, a su entender, pero que para fabricar todo lo que se necesitaba hacía falta más gente y por lo menos un año, eso era lo que el calculaba, y conociendo al Coronel, lo de una año, seguro que lo ponía de una ostia que para que, por eso cuando entraron en la sala donde los esperaba le sorprendió su buen humor y el hecho de que allí había otras dos personas, cuando miré para el bigotes, me di cuenta que él ya lo sabía.. -Por fin, por fin estamos todos, bien siéntese señores, vamos a dejar unas cuantas cosas claras y después a trabajar todo el mundo, en cuatro meses quiero el plan del teniente listo para ejecución, ni una palabra- yo ya iba hablar, pero como siempre ya me cortó-entre vosotros tres reunís los conocimientos suficientes para hacer esto- y levantó mi plan- y yo, me voy a encargar de que se haga, usted- y señaló a un hombrecito pequeño y delgado que estaba allí asustado y con la mirada baja- le explicará al teniente su teoría de – puso las gafas y miró el título de un libreto bastante grueso- Sistema de posicionamiento de blancos e identificación de emisores por captación de puntos notables de señales radioeléctricas mediante sensores espaciados y de baja complicación- levantó la cabeza y mirando para el triste-¿es así? O falta algo. -Es así –contestó el triste. -Bien desde ahora yo le llamaré el cacharo, porque a ver quien se acuerda de todo ese nombre, lo dicho, le explicará al teniente esta idea suya, creo que solucionará un problema que él planteaba en su nuevo plan de ataque, y este otro señorito que está aquí, será el encargado de construir los misiles, bueno realmente adaptar una plataforma ya existente a las especificaciones del teniente, teniente no quiero oírlo-joder siempre la misma historia, quería matizar unas cuestiones y ya ni me dejaba hablar- lo primero es que aclare el tema del cacharo con este teórico y confirme mi idea de que con eso solucionamos el problema de la identificación y localización del escolta blanco, mientras tanto nuestro ayudante de siempre- era increíble, nunca sabría como se llamaba el bigotes-se encargará de ir poniendo al día al encargado de los misiles, para después usted darle las instrucciones de detalle, son las nueve, tienen ustedes hasta la comida para confirmarme que estoy en lo cierto con respecto al cacharro, no es necesario que se muevan de aquí, somos nosotros los que nos vamos. Y salieron, uno detrás de otro, y allí quedamos, el triste y yo, con su panfleto encima de la mesa, lo cogí y hojee por encima el documento, aquello era un ladrillo de narices, fórmulas y más fórmulas, mi madre, decidí ir directo al grano. -Me puede explicar de forma coloquial en que consiste su teoría, o mejor, si el Coronel le explicó mi problema, como podemos usar su, su, su –joder no me salía nada y el tío ni levantaba la cabeza- su idea. -El señor Coronel-aquel elemento no era militar, señor Coronel, mi madre, pero con quien nos estábamos embarcando- me explico que ustedes necesitaban controlar una gran extensión de mar, y que en esa extensión de mar, necesitaban identificar positivamente a determinados barcos de guerra y que una vez identificados, necesitaban saber su posición con una exactitud suficiente para realizar lanzamiento de misiles contra ellos, eso fue lo que entendí, ¿es correcto? -Totalmente correcto. -En teoría mi sistema sirve para eso. -Bien, no lo dudo, pero puede explicarme como lo hace. -¿Tengo que explicarlo sin fórmulas? -Sí, tiene que explicarlo sin fórmulas-ya me estaba tocando bien los pinreles aquel tío. -La idea, de forma simple, consiste en la colocación, en la zona a controlar, de “n” elementos de captación de señal, la mayoría de ellos pasivos y unos pocos activos/pasivos, cada uno de estos elementos tienen dos zonas operacionales, una zona para la identificación y otra para el posicionamiento, además los que son activos llevan un pequeño transmisor a mayores. Mediante radiocontrol, se establecen los parámetros de búsqueda en la zona de identificación, de tal forma que el sistema es capaz de identificar un punto notable de la señal recibida y asociarle un tiempo, cada uno de los elementos hace lo mismo y pasa toda esa información a un centro de control, en ese centro de control se calcula matemáticamente la posición del único foco posible de la emisión correspondiente a eses puntos notables transmitidos, de tal forma que además de la identificación tenemos posición del emisor de forma pasiva, además-ya tenía levantada la mano y el triste calló, joder, triste si, pero en cuanto se puso a hablar de aquello el tío parecía una metralleta. -A ver si lo he entendido bien, usted dice que colocando unos cuantos de esos cacharros en la zona que queremos controlar, ¿es capaz de identificar el barco y calcular su posición? -Sí. -No lo entiendo. -Es muy simple, suponga por un momento que esos equipos son capaces de identificar puntos notables de la transmisión radioeléctrica de un barco concreto, ese momento concreto de la identificación tiene un momento temporal asociado a cada uno de nuestros equipos, en nuestro puesto de control recibimos esa información y la posición de cada uno de los equipos, con tres o más equipos que hallan recibido e identificado ese punto notable, es suficiente para calcular la posición del emisor, es un problema matemático, realmente se parece mucho al posicionamiento mediante la lectura de tres o más distancias a puntos conocidos, con un radar, como en ese caso cuanto mejor colocados estén los equipos, y más exacta sea la base de tiempos y la posición de nuestros equipos, mayor será la exactitud de la posición del barco enemigo. -Joder, joder y joder, pues puede funcionar, ya lo creo, pero claro está el tema de los dichosos puntos notables esos, tienen que coincidir todos con el mismo punto, si no, todo a la mierda. -Si va usted a la página 62, verá que dedico a este tema 24 páginas, y demuestro matemáticamente que esto es posible-me cago en las matemáticas, aquello todo era teórico, estábamos apañados. -Pero vamos a ver ¿no ha probado el sistema? -En la mar nunca he tenido ocasión, pero-maldita sea mi suerte, para una vez que había algo que valía, era todo teórico, por lo menos era obediente y se callaba cuando uno levantaba la mano. Me fui a la dichoso página 62 y empecé a leer aquel ladrillo, desde luego había fórmulas allí que yo no tenía el gusto de conocer y otras que recordaba muy vagamente de mi época de estudiante, dos horas más tarde, vi una anotación en la parte baja de la página, ponía “probado con el vecino” no pude resistirme más. -¿Qué es esto de probado con el vecino? -Pues eso, que lo probé con la emisora del vecino. -A ver explíquese mejor. -Yo tengo un vecino que tiene una emisora de radioaficionado, así que coloque 4 equipos caseros de los míos en unos montes que circundan mi pueblo, yo es que vivo en un pueblo del interior, bien ya veo que eso le da igual, como decía coloqué mis equipos y empecé a trabajar en el software de identificación de puntos notables hasta que conseguí un acierto superior al 90%, y una tasa de falso punto notable prácticamente 0. -O sea que probó usted el sistema y funciona. -Bueno, probé la parte de puntos notables, como no tenía dinero para el resto de los circuitos, la base de tiempo no es muy exacta, pero aun así, el error era menor del 1.8kms en todos los casos. Me estaba empezando a sudar la cabeza, aquel hurón con gafas había solucionado un problema de la leche, en un pueblo de sabe Dios donde y con unos medios de mierda, y me lo contaba como si nada, una de dos, o todo aquello era una tomadura de pelo, o aquel tipo era un tipo genial al que la parte del cerebro que regia todo lo que no eran las matemáticas, estaba atrofiada, lo miré un rato más y concluí que efectivamente era aquello, todo lo que tenía de genial para unas cosas, lo había perdido para el resto, menuda vida le esperaba en manos del Coronel, por un momento hasta me apiadé de él, sólo fue un momento, porque volví al tema inmediatamente. -O sea que hizo una comprobación con los medios de que disponía y la idea funciona ¿es así? -Si y no. Por momentos empezaba a entender al Coronel cuando se ponía furioso con mis respuestas. -O es si o es no pero las dos cosas no puede ser. -Sí, hice una comprobación con los medios de que disponía y no, la idea no funcionó….. del todo. Conté mentalmente hasta veinte y con mi mejor cara -Que parte de la idea funcionó y que parte no funcionó. En ese momento el Coronel y el bigotes entraron de nuevo, el Coronel me miró con una media sonrisa de la que nunca creí que fuera capaz de hacer. -Bueno teniente, lo veo un poco congestionado, dígame, que conclusiones sacó en estas seis horas, bueno no, para ser exactos seis horas y media. Increíble, hubiera jurado que llevábamos un par de horas, a lo sumo tres, me di cuenta que se estaba cachondeando de mi, dándome un poco de mi propia medicina, reflexioné sobre todo lo hablado, miré a aquel pequeño hombre, y miré la hoja que tenía abierta del documento que estaba mirando y lo tuve claro, por primera vez en toda la mañana lo vi claro como un día radiante, como cuando iba con mi madre a la compra al mercado y todo estaba bien. -Mi Coronel, creo que este cacharro funciona, por supuesto hay que hacer ajustes y realizar pruebas reales en la mar, pero creo que funciona y sirve para lo que queremos hacer- y hasta me permití sonreír un poco. Mi sonrisa y la del Coronel debían ser incompatibles, porque en cuanto me sonreí yo, el paró. -Bien pues a comer y después siguen, tiene dos días para marcar un plan de trabajo sobre este tema. Y comimos, y hablamos y sometí a aquel personaje a un interrogatorio en toda regla, el sistema era genial de puro sencillo, la clave era la parte del software encargada de marcar los puntos notables, pero esa parte era la que estaba más desarrollada, bien es verdad que como el vecino sólo tenía una decamétrica, funcionaba de maravilla para ese tipo de transmisiones, pero como una patata para los radares, pero a grandes problemas grandes soluciones, decidí sobre la marcha que usaríamos la parte de identificación para determinar el barco y la parte de puntos notables para su posicionamiento, además hay frecuencias y actividad peculiar de un barco de guerra que facilita mucho su identificación positiva. Sí decididamente centraríamos el tiro en las comunicaciones, le expliqué las diferencias fundamentales entre las comunicaciones de los barcos de guerra y las de lo mercantes y pesqueros, y con esos datos se puso a trabajar, yo por mi parte puse mi equipo de boyas a trabajar en la integración del equipo del triste en nuestra boya de referencia, teníamos que sembrar el mar con ellas, al final tardé una semana en quedar libre para ir a ver al Comandante. -Y bien, Teniente. -Mi Coronel, el cacharro creo que funcionará. -Cree, viene con cinco días de retraso a verme y dice que cree que funcionará. -Mi Coronel, el cacharro funcionará. -Eso me gusta más, hay que modificar mucho, o vale más o menos lo que trajo ese hombre. -Mas bien, son trabajos de adaptación, hay que mejorar los circuitos para un menor consumo de energía y hay que mejorar la parte receptora para ampliar su rango de frecuencias, pero lo fundamental está hecho y funciona. -¿y que es lo fundamental? -El software encargado de marcar los puntos notables de las transmisiones radioeléctricas, eso si, sobre las comunicaciones, no sobre los radares. -Bueno, si a usted le vale a mi me vale, pero en su plan habla constantemente de la identificación de los radares. -Los radares son el elemento diferenciador por excelencia de un barco de guerra del que no lo es, pero en este caso ese sistema de reconocimiento de puntos notables no es capaz de trabajar bien con ellos, por el contrario sobre las comunicaciones trabaja muy bien, así que he decidido adaptarme y tomar lo que ya funciona. -Eso es lo que me gusta de usted, es un técnico que piensa como militar, nunca pierde de vista el objetivo, y si el pasillo tiene poca altura se agacha y ya está, no como los teóricos esos, que se pondrían a romper el techo del pasillo para darle más altura. Aquel hombre no dejaba de sorprenderme, en mi puta vida había oído sandez más grande y el muy jodido decía aquello y se quedaba más ancho que nada. -Cuento tener los primeros prototipos en tres semanas, y entonces podremos hacer pruebas. -Tiene dos semanas para los prototipos y otras dos para las pruebas, no quiero ni oírle respirar, drogue a sus ayudantes si es necesario, pero necesito el sistema completo funcionando en menos de cuatro meses, ahora lo único que quiero oír, es la puerta al cerrarse cuando usted salga. Increíble, no me dejó hacer ni una de las aclaraciones que tenía en mi mente, nada, salí de allí cagándome en su madre y en todo su familia, eso si, mentalmente. A los dos o tres días, el bigotes apareció con el chulito de los misiles, hacía días que me había olvidado de ese tema, así que cuando los vi entrar en mi puesto de trabajo, me costó reconocer aquel hombre, en cuanto lo hice. -A, los misiles. -Sí, los misiles, mis misiles, sin los que todo ese plan suyo no valdría para nada. Miré para el bigotes, para ver si tenía que callar o podía mandar a la mierda aquel chulo, el bigotes no decía ni hacía nada, se limitaba a mirar para mi y con un gesto señaló las sillas que estaban delante de ellos. -Por favor siéntense-fue como si recuperara el juicio y me colocara en la nueva situación-tiene que perdonar pero entendí que el tema de los misiles era algo que ya no requería mi atención, dado que está usted con el tema- a ver si aquel tipo se pensaba que yo no sabía largar una andanada. -Todo marcha bien- era el bigotes el que hablaba-velocidad, tamaño, lanzamiento vertical, poca carga explosiva, buena electrónica de guiado, pero.. -Siempre hay un pero-dije yo. -Pero, creo que el ataque concentrado en una demora, es un error-aquel chulo me ponía enfermo-es mejor mandar varios grupos de misiles por varias demoras a la vez, todos a un tiempo. La verdad es que no tenía argumentos sólidos para insistir en la concentración del ataque en una demora, era parte intuición y parte razonamiento, decidí hablar en voz alta con aquel tipo, con el bigotes de testigo. -Pensé durante mucho tiempo sobre el tema, la información de la que disponemos es poca, lo que se puede sacar de internet y lo que podemos suponer aplicando el sentido común, la clave está en el número de elementos de cada antena, unos cuatro mil, dependiendo de la finura del haz transmitido, los elementos que tienen que intervenir, irán desde unos 60 hasta los 200, en la fase de seguimiento imaginemos que utiliza 4 haces por blanco y que utiliza 100 elementos por haz, esto da 400 elementos por blanco, total unos 10 blancos por antena, si se coloca en la posición adecuada y puede utilizar dos antenas, 20 blancos, la clave está en usar una demora, y distintas elevaciones, separar suficientemente los misiles de forma que cada transmisión sólo pueda calcular los datos de un misil, si somos capaces de poner unos 20 misiles en vuelo directos a la fragata en una demora concreta y a distintas alturas, yo creo que saturaremos su capacidad, si dispersamos el ataque les facilitamos las cosas, ya son 40 los blancos que pueden seguir sin problemas, 10 como mínimo por antena-todo lo dije con poco convencimiento, realmente todo eran suposiciones, si en vez de 100 elementos sólo necesitaba 50 las cifras se multiplicaban por 2, pero tenía como una certeza extraña de que la clave estaba ahí. - No se que pensar, yo lo haría más tradicional, un ataque masivo en varias demoras y muy coordinados en el tiempo- el chulo también dudaba, lo que decía lo decía sin grandes aspavientos, está claro que tampoco las tenía todas con él- además cada vehículo portador de misiles lleva 12, los tenemos colocados de forma que será imposible que coincidan en demora de ataque, por lo tanto tu idea de atacar en una demora es imposible. Era tontería dedicar horas y horas a escribir los planes de ataque allí nadie los leía, si no a que venía aquello, conté hasta cinco y empecé a hablar. -Si lees bien la parte del plan donde se explica el ataque, verás que se recalca que dado que por diversos motivos se optó por vehículos de 12 misiles, y una colocación de los mismo dispersa, con tres dispositivos, la única forma de hacer un ataque simulado de concentración en demora, es que los dos rumbos de ataque tengan entre ellos menos de 90 grados, en la práctica esto implica que sólo podrán dedicar dos antenas a repeler el ataque y por lo tanto estamos en la situación explicada anteriormente, en la condición óptima de poder lanzar los 24 misiles en una distancia menor de 16 millas, creo la probabilidad de éxito es muy elevada, a medida que aumentamos esa distancia la cosa se complica. -¿Será cierto que en el radio de las 18/20 millas no necesitan iluminar los blancos con las direcciones de tiro? Lo primero que me vino a la cabeza fue contestar –y yo que coñ* se- en cambio. -Creo que a partir de las 15/16 millas la exactitud que pueden lograr dedicando bastantes elementos de la antena es suficiente para no tener que usar los iluminadores, pero claro, eso va en nuestro favor, de hecho, es una pena no haber podido solucionar el problema de la perturbación, si hubiéramos tenido un poco más de tiempo, y hubiéramos podido diseñar un misil perturbador para acompañar los atacantes, eso si hubiera sido bueno, con eso si hubiéramos podido hacer daño, como mínimo su sistema hubiera tenido que dedicar bastantes más haces para investigar toda la zona perturbada, y cuando la relación de su echo contra nuestra perturbación fuera mayor, bien podíamos estar en las 9/10 millas, y a esa distancia con 12 o 13 misiles a 1.8 mach estaban bien jodidos, os lo digo yo-sin darme cuenta había elevado la voy y casi podía imaginar la situación, me di cuenta que tenía una media sonrisa en los labios. -Me has convencido, haremos como dices- dijo el chulito. Me cago hasta en su sombra, pero quien carajo se cree este tipo que es, es un puto mandado, me daban ganas de mandarlo a la mierda, e iba hacerlo cuando el bigotes, tan oportuno como siempre. -Bien, pues todo claro, ahora déjeme con el Teniente, que tengo que comentar unas cosas. El tío cojonudo salió de la habitación, dando cabezazos de afirmación, aquel elemento me ponía a cien, tenía ganas de patearlo.. -Pero que muchacho eres-era el bigote con una media sonrisa- no soy capaz de enseñarte nada, nunca pierdas de vista el objetivo, al final preparará el ataque como tu quieres y además cree que es la mejor forma, si tuvieras un poco más de cabeza hasta podrías hacerle creer que realmente es idea suya. Tuve que acordarme que el labio inferior me colgaba, para no parecer subnormal, de modo que era así como funcionaba aquello, no pude por menos que repasar mentalmente mis decisiones de los últimos dos años.. -Eso y ahora haz un repaso, para ver si contigo es lo que se hizo hasta ahora-aquel jodido siempre dando de pleno en lo que me pasaba por la cabeza- a lo mejor piensas que ya nací con esta edad, pues no, me recuerdas mucho a mi, eso si mucho más inteligente, hazme caso déjate ir y mantén el punto de mira sobre el objetivo, eso es lo que importa, el resto son florituras, jardines, en fin, mariconadas. Se levantó y se marchó, allí quedé yo tratando de recordar en que estaba trabajando, porque desde luego si no lo conseguía rápido, acababa en mariconadas seguro, pero seguro. Cuando el ordenanza me sacudió, no sabía realmente donde estaba, lo miré a la cara como si fuera bobo. -Mi teniente, el Coronel quiere que se presente en su despacho inmediatamente, es urgente. Di un salto y salí del catre, me cago en la leche, otra noche donde apenas dormí unas horas y eran más de las 9 de la mañana y yo allí durmiendo. -Voy ahora mismo. Ni siquiera me afeité, me puse la ropa del día anterior y salí pitando para el despacho del Coronel, en cuanto llegué pedí permiso y entré, me cago en mi sombra, aquel viejo pequeño y nervudo estaba sentado en el sillón del Coronel y yo sin afeitar y hecho un vagabundo. -A sus órdenes-dije mientras me cuadraba lo mejor que pude. El viejo me miró de arriba a bajo y después de un rato. -Gracias por venir tan rápido, espero que el plan de ataque sea a una hora que le venga bien. Y se calló, yo no sabía si tenía que decir algo o no, miré de reojo al Coronel, y por su actitud supe que había que estar callado. -Explíqueme de forma breve este nuevo intento. Intenté ordenar mentalmente lo que iba a contar y como lo iba a contar, el hecho de estar así sin afeitar, de haber llegado tarde y de aquel comentario no ayudaba, pero era lo que había. -Señor, después de los dos últimos intentos, primero el pesquero y después los torpedos desde el vehículo submarino a la deriva, sabía que la única forma de poder hacer un nuevo intento era sacarlos de su zona de patrulla, y llevarlos a una zona donde pudiéramos preparar con tiempo una trampa, el ataque tendría que ser con misiles, estos dan más margen de espacio, así la zona podía ser un triángulo en cuyos vértices posicionamos sendos vehículos submarinos anclados y con 12 misiles de lanzamiento vertical, con ello se pretende que esos vehículos sólo tengan que asomar unos centímetros por encima del nivel del mar para proceder al lanzamiento de los misiles, misiles todos ellos activos, muy veloces, de 1.8 mach y pequeños, para ello sacrificamos el peso del explosivo, su misión es dañar lo más posible toda la zona de antenas, ese triángulo tiene 20 millas de lado y para que la trampa funcionara, había que buscar un cebo, durante un buen tiempo analizamos las rutas que seguían los escoltas de los mercantes para dirigirse a puerto para descanso de personal, y vimos que el puerto-bien el puto viejo dando a la mano, o sea todo aquel trabajo le importaba un pito- bueno abreviando esa parte, colocamos esos porta misiles semisumergidos en una zona concreta que resultó ser acertada, a los 4 días una fragata tipo Santa María pasó por allí, cuando se encontraba casi en el centro de ese triángulo, le lanzamos 6 misiles de uno de los porta misiles, consiguiendo impactar con 2, posteriormente tuvimos que dispararle otros 2 para que tomara en serio nuestras advertencias, la trampa funcionó, tenemos a esa fragata en el centro de nuestro triángulo y la f100 corriendo como una loca para ayudarla, y por lo tanto camino de nuestra trampa, cuando esté llegando a la fragata que tenemos retenida, lanzaremos todos los misiles que nos quedan, 28 en total, a la vez contra ella, a esa distancia es muy probable que varios impacten en la f100- bueno lo había dicho todo sin atrancarme y lo esencial estaba claro y ordenado. -Entonces ese novedoso sistema de posicionamiento ¿funcionó bien?-pues claro que si, gilipollas, sino como íbamos a saber a donde lanzar los misiles, pero claro en vez de decir eso contesté. -Funcionó perfectamente, el sistema es lo suficiente exacto para facilitar los datos de situación del blanco para efectuar un lanzamiento de misiles activos, eso si tiene muy poco alcance, pero eso se suple con muchas boyas. -Hábleme un poco de ese sistema. -bueno, yo realmente lo único que hice fue materializarlo, el desarrollo inicial no es mio-vale otra vez la manita-bien, entiendo eso no es importante, pues como iba diciendo, las mismas boyas que son capaces de identificar y situar el foco emisor de una transmisión de comunicaciones, son capaces de trabajar para la situación activa de un blanco, algunas de esa boyas tienen la capacidad de transmitir en la banda de los 3 Ghz, esta banda es muy usada por todos los sistemas Wifi, y por lo tanto es muy fácil conseguir receptores y todos los elementos necesarios en el mercado industrial normal, sin levantar ninguna sospecha, además hay receptores y transmisores ya desarrollados muy buenos, el trabajo fue más bien de integración de esos sistemas, básicamente tenemos unas cuantas boyas que transmiten de forma pulsada y el resto de boyas reciben la transmisión directa desde la boya emisora, así como los rebotes de los blancos que estén en la zona, toda esa información es transmitida vía Inmarsat a nuestro centro de control, donde por un cálculo de distancia se establece la posición de los blancos, simple, pero funciona, lógicamente a medio plazo, cuando se den cuenta de lo que estamos haciendo pueden perturbar todas esa frecuencias y anular el sistema, pero no creo que se den cuenta en un tiempo, y para entonces ya dará igual, la f100 habrá recibido el impacto de varios misiles y tendremos la prueba gráfica de dicho impacto.
estas intervenciones que podrían recopilarse en una sección especifica. 
