Ucronia España vs EE.UU., Duelo de aguilas

[Gaspacher]

LA HABANA, 10 de febrero

El desembarco del capitán general Weyler se había completado sin novedad pese a los rumores sobre su posible asesinato que venían acompañándole desde Puerto Rico. Tras desembarcar den Alfonso XII se había dirigido a pie al edificio de capitanía, siendo aclamado por la población que veía en él al hombre capaz de poner fin a la insurrección. Las alocuciones de la toma de mando se dirigieron a todas las fuerzas vivas de Cuba, y serían publicadas en los días siguientes por escrito para reanimar las llamas de la españolidad. Tras estos discursos entro en su despacho, arrojo su sombrero sobre el sillón e indico a su ordenanza que fuesen pasando a los jefes militares y de bomberos.

-Señores, espero reunirme con ustedes mañana mismo para tratar sobre las operaciones en curso. Para entonces espero que ustedes puedan presentarme un informe detallado del número, capacidad, equipo, y estado de sus unidades.

De momento les adelanto que voy a retirar todas las unidades militares de la protección de haciendas e ingenios. Esa labor pueden asumirla los voluntarios, el ejército empezara desde mañana mismo a combatir a los insurrectos, y para ello será necesario que se agrupen las fuerzas de inmediato. No quiero ninguna unidad menor a batallón en el exterior.

Agruparemos a nuestras fuerzas en columnas de maniobra, un batallón de infantería con algo de artillería y un escuadrón de caballería. Eso deberá bastar para mantener una gran movilidad y perseguir al enemigo.

La marina mientras tanto colaborara impidiendo la llegada de voluntarios, suministros y armas desde los EEUU, y trasladando o prestando apoyo de fuego a las fuerzas de tierra.

A continuación pasaron Ramírez, Céspedes, y Bello, lideres de la anterior insurrección, a los que dio seguridad de que solo se castigarían los hechos probados y no se caería en las delaciones por envidias o sin fundamento, tras lo cual se retiraron más tranquilos.

La siguiente reunión fue más complicada, los hacendados de la zona llegaron para felicitarle por el nombramiento, empero las noticias que tenia para ellos no eran ciertamente esperanzadoras. A l retirada de las fuerzas de seguridad destacadas en los ingenios, se unió la amenaza de perseguir y encarcelar a cualquier hacendado que, pagase a los revolucionarios para que respetasen su hacienda, cuando no de expropiar sus bienes, finalizando su alegato con un;

–“No se tolerara la traición”l.

[Gaspacher]

LA HABANA, 11 de febrero

Weyler se reunió con su estado mayor inmediatamente. La situación era harto comprometida pues las partidas mambises habían sido divisadas incluso a pocos kilómetros de La Habana. Era necesario revertir la situación, para lo cual exigió a sus generales que trabajasen hasta la extenuación. Su primera medida sería confirmar al general Suarez en su puesto de Gobernador Militar de La Habana, pues su experiencia y conocimiento de la situación local sería de gran utilidad. El general Ochando, quien le había acompañado desde España junto a los generales Melguizo y Arolas, sería su jefe de estado mayor. En Melguizo, recaería la tarea de perseguir a los insurrectos, mientras Arolas sería el encargado de adecuar la trocha de Mariel para aislar así Pinar del Rió y permitir la destrucción de los insurrectos en la zona.

Antes de empezar recabo de sus oficiales novedades sobre el estado de las tropas y la situación general.

La unidad básica de maniobra era el batallón, los hombres estaban armados mayoritariamente con Máuser, pero existían problemas de equipo y alimentación, aunque últimamente esta había mejorado mucho por el envío de alimentos desde Argentina y México. Las unidades de voluntarios en cambio estaban armadas con fusiles Remington de 11mm, y en muchos casos adolecían de los mismos problemas que las fuerzas regulares. En cuanto a la organización de los batallones, estos estaban formados por unas seis compañías en lugar de las ocho preceptivas. Las cinco primeras de fusiles y la sexta de apoyo, aunque como siempre se adolecía de falta de movilidad.

La caballería tal vez estuviese incluso peor si tal cosa era posible. Carecían de animales desde que Maceo robase 12.000 caballos al inicio de la revuelta, y sus fuerzas se habían reducido a unos 600 jinetes por regimiento…eso con suerte. A peores, la deficiencia de su equipamiento hacía que incluso su arma de choque fuese, en muchos casos, el machete en lugar del sable.

La artillería e ingenieros tenía los mismos problemas que el resto. Se disponía de dos regimientos de artillería de montaña, equipados con 6 baterías de a 6 cañones Plasencia de 80mm cada uno. El resto de la artillería disponible eran cañones de costa y varias baterías de campaña con cañones Krupp de 80 ó 90mm que adolecían de falta de movilidad en la manigua por lo que se habían destinado a emplazamientos fijos. Los ingenieros se dividían en ferrocarriles, que no estaban mal aunque las voladuras de las vías los tienen abrumados de trabajo, los zapadores y minadores que casi actúan más como infantería que como tales, y los de telégrafos, todos ellos divididos en compañías.

Weyler decidió organizar las columnas de maniobra en base a uno o más batallones de infantería, reforzados por una batería o sección de artillería de montaña, un escuadrón de caballería y unidades de telégrafos y apoyo. Esperaba recibir los cañones Krupp de montaña para uno de los regimientos al cabo de poco,y cuando eso ocurriese sustituirían las armas de uno de los regimientos y emplearían los cañones sustituidos para reforzar las trochas, complementando al resto de la artillería de campaña.

Las necesidades eran muchas, primero debían conseguir suficientes monturas, tanto caballos como mulos para el transporte. No solo para dotar a la caballería de suficientes animales, sino incluso tener suficientes animales para convertir el 5ª compañía de cada batallón de infantería en una guerrilla montada. En cuanto a los mulos, quería disponer de una compañía de transporte dotada de unos 200 animales por división. Además deberían tener suficientes para dotar de mulos de carga a la artillería de montaña y a los ingenieros. En cuanto a las armas, los soldados de caballería deben sustituir de inmediato sus machetes por sables de caballería e implementar los máuser tan rápido como fuese posible.

Tácticamente se controlaban la mayoría de las poblaciones pero no los campos en los que campaban libremente los mambises. Aunque en muchos casos el control se limitaba a aldeas de casas de guano, rodeadas por una empalizada con troneras y una cerca de alambre de espino a unos 50 metros. Durante el día los campesinos cultivan sus huertos entre esa alambrada y la cerca, y pastaban el ganado en el exterior, durante la noche los locales recuperaban el ganado y se refugiaban tras la empalizada, para ser protegidos por las unidades de voluntarios.

-Eso debe cambiar. –Decidió Weyler. –La población necesita paz y estabilidad para poder ser prospera. Debemos batir de inmediato a los sediciosos, para alejarlos de las poblaciones.

Tomada la decisión y a la mayor brevedad posible concentrarían todas las fuerzas disponibles en la trocha desde Mariel a la Ciénaga bajo el mando del general Arolas, en quien recaería la labor de adecuar esa vieja trocha para sus propósitos. Una vez impermeabilizada por tierra y bloqueada por mar con la participación de la marina la provincia de Pinar del Río, las columnas españolas entrarían en ella para buscar y destruir las partidas de insurrectos. Una vez terminadas las operaciones en esta zona, se dejaría una guarnición adecuada en la zona, mientras el ejército se concentraba en operar entre Mariel y la trocha de Jucaro-Moron que, para ese momento, deberá haber sido terminada en toda su extensión.

El general Arolas

[Gaspacher]

LA HABANA, 14 de febrero

-Y esta es la Pirotecnia, la fabrica de municiones aledaña al Castillo del Príncipe. –Estaba diciendo el general Suarez durante la visita que les había llevado a diversas posiciones en los alrededores de La Habana. –Dispone de suministro eléctrico y mientras dispongamos de materiales la producción puede realizarse sin problemas.

-Muy interesante, Gral. Suarez. –Respondió Weyler. –¿Qué capacidad de producción tiene esta fabrica?

-Puede producir 70.000 cartuchos de 11mm para los Remington al día, y un número menor de máuser sin humo.

-¿La pólvora se produce aquí?

-No, mi general, la pólvora se tiene que importar, aunque disponemos de una gran cantidad de pólvora negra alemana.

-¿Podemos producir munición de artillería?

-Poca cantidad, pero si existe cierta capacidad.

-De acuerdo entonces. La factoría precisara de reservas estratégicas de pólvora y latón, así que empiecen a acumularlas de inmediato. En cuanto a la producción, quiero que empiece a concentrarse en munición de 7mm para los Máuser, pronto será el arma mayoritaria y su cadencia de disparo es mucho mayor que la de los Remington.

La pirotecnia de La Habana, imagen ecured

Además quiero que empiece la fabricación de municiones para la artillería de costa. Cada cañón debe disponer de 300 disparos para su uso inmediato y de otros tantos en reserva en un polvorín aledaña a la batería. Si estalla la guerra con los EEUU, debemos estar preparados.

-En ese caso. –Respondió Suarez. –También deberíamos almacenar cuanta munición podamos en la zona oriental de la isla, Manzanillo, Holguín, Santiago de Cuba. Ciudades de difícil acceso por tierra y que evidentemente, quedaran vedadas al tráfico marítimo en caso de conflicto, aquí en cambio podremos continuar la fabricación aun con la guerra.

-Buena idea aprovechemos que ahora podemos enviar los suministros por mar, eso facilitara mucho las cosas. –Dijo cuando ya estaban llegando al Palacio de los capitanes generales, donde les salió al paso el general Ochando.

-General Weyler. –Dijo sin más preámbulos. –Ariza acaba de partir en dirección a Jaruco, pues hay rumores de que Maceo se encuentra en esa zona. Por si acaso precisasen ayuda he puesto en alerta a varias columnas de la zona bajo el mando de Melguizo.

-Bien hecho, esperemos a ver que ocurre. –Y dirigiéndose a Suarez. –Gracias por todo, general Suarez, encárguese de las previsiones de munición. –Dijo mientras entraba en Capitanía con Ochando.

[Gaspacher]

JARUCO, Cuba, 17 de febrero

Las tropas de Maceo entraron en la ciudad aprovechando la noche, sin problemas, casi como si desfilasen, por lo que muchos de los vecinos les confundieron con una columna del ejército que llegaba. Fue un capitán de voluntarios el que se percato del elevado número de negros en la columna y dio la alarma, entablándose un combate de inmediato.

Maceo no sabía que Ariza había llegado horas antes en tren acompañado de su brigada de 300 hombres desplegándose en las cercanías, junto a él dos compañías del Saboya se habían acantonado en la estación para completar las defensas. Debido a esto, mientras desde el cuartel de Voluntarios y desde la estación se disparaba duramente a los asaltantes, los hombres de Ariza atacaron con fuerza a la columna por el flanco causando numerosas bajas. Afortunadamente para la población, los habitantes lograron huir a unos platanales cercanos, porque los combates en las casas fueron brutales y podrían haber causado graves percances a esta. Finalmente los combates remitirían cuando sonó el clarín de retirada Mambí a las 23:00.

Maceo había sido rechazado sin lograr hacerse con el botín que buscaba. El ataque seria contraproducente pues, situado ahora por las fuerzas españolas, el cerco empezó a estrecharse. En Moralitos sufrió una nueva derrota que redujo aun más su brigada al causar nuevas bajas, poco después la columna de Hernández Ferrer acudió avisada por teléfono y les tiroteo durante la noche. Nuevo revés, más bajas, y nueva huida.

La situación aun empeoraría más para los mambises. Dos días después Maceo se reuniría con Máximo Gómez en el ingenio El Moralito. Fue entonces cuando en una rocambolesca carambola, Weyler supo de su presencia en la zona a través del ministro de Ultramar que había recibido la oportuna noticia en Madrid de manos del periódico El Imparcial, el cual antes de publicarla dio aviso al ministerio. Ocupado el ingenio por el ejército español, el asalto mambí fue rechazado ocasionando a estos más de 100 bajas incluyendo al general Basilio Guerra.

A continuación en una atropellada huida, Maceo seria hostigado por las columnas de Linares, Tort, Aldecoa, y Segura, además de atacado por la guarnición de Catalina, lugar donde sufrieron nuevas bajas en su fallido intento de capturar y destruir la población para acallar los disparos que desde ella se hacía a su paso.

Para el día 7 de marzo, acosados y perseguidos, las tropas de Maceo se habían reducido a menos de 500 hombres y habían perdido gran parte de sus armas y equipo a manos de Ariza, tras fraccionarse la columna manbí para coger direcciones diferentes a causa de un ataque, sufrido el día 20.

La presión sobre las columnas mambisas era ahora generalizada, el general Bernal, localizo y ataco otra columna de 1.000 hombres al mando de Ángel Guerra, quien ya había sido batido una vez días antes, causándole 25 muertos y capturando 6 insurrectos que serían juzgados y ahorcados días después. Además se apoderaría de un copioso botín de 400 caballos con monturas, a cambio de 3 muertos propios. Los mambises solo se salvaron por la precipitada huida a través de un pantano lleno de insectos, las enfermedades acabarían con muchos de estos posteriormente.

Hacia menos de un mes de la llegada de Weyler, pero en Cuba se respiraban aires de cambio.

Nota: Excepto la intervención de Ariza, el resto es casi calcado a la realidad, extraído de “Las guerras Mambisas”.

[Gaspacher]

PHILADELFIA, EEUU, 23 de marzo de 1896

En el astillero William Cramp & Sons, el acorazado Iowa se deslizaba lentamente hacia el mar. En tierra, el público aplaudía enardecido mientras altos mandos de la marina saludaban a la madrina del buque. No lejos de allí, Julián Gutiérrez, capitán del ejército español en la reserva, observaba el proceso mientras aplaudía junto a la muchedumbre. Por su mente pasaban en esos momentos los recientes ultrajes hacia España cometidos en los EEUU, en Lendwille, Colorado, los ciudadanos habían quemado una bandera española, y en la universidad de Bristol, Nueva York, había habido una manifestación en la que habían quemado la efigie de su majestad el Rey Alfonso XIII.

La opinión pública se estaba caldeando por momentos, siempre al calor de las noticias del The New York Herald, y el The New York Woirld, de los magnates Hearst y Pulitzer respectivamente. Aun peor, esta ya había afectado incluso a los políticos norteamericanos que habían promovido una resolución a favor de reconocer a los Mambises como combatientes, aunque al menos en esta ocasión, el presidente Grover Cleveland había logrado bloquearla.

En opinión de Julián se acercaban malos tiempos para España.

[Gaspacher]

TROCHA MARIEL, CUBA, 1 de marzo de 1896

Bajo el mando del general Arolas, los 12.000 hombres que cubrían los 32km de la trocha Mariel-Majana estaban trabajando hasta la extenuación. Estas fuerzas, divididas en 8 batallones, 14 compañías independientes, 6 escuadrones de caballería, 1 guerrilla montada, y 12 cañones de campaña Krupp de 80mm, aunque, según la opinión de Arolas, aun harían falta al menos otros 5.000 hombres.

Los soldados trabajaban a marchas forzadas, despejando amplias zonas del terreno para aumentar la visibilidad y el campo de tiro a ambos lados de la trocha, y construyendo fuertes y blocaos para reforzarla. Con intervalos de un kilómetro a lo largo de toda la trocha, se construían torres de vigilancia, destinando un pelotón de infantería a cada uno de ellas. La línea estaría reforzada por blocaos situados a mitad de camino de los fuertes y 3 puestos de escucha entre cada fuerte y el blocao, todos ellos ocupados por 4 hombres. Además, cada 4 kilómetros dispondría de un cuartel para la compañía encargada de esa zona. El segundo núcleo de reacción lo constituirán los batallones y dispondrán para moverse de la línea férrea, contando con el apoyo de la artillería, coordinándose todos ellos por medio del telégrafo de hilos y óptico.

Los fuertes estarían construidos de mampostería, con una planta baja para la habitabilidad y una torre de señales e iluminación. Los blocaos y puestos de escucha eran de madera, con parapetos de tierra para aumentar su protección. En cuanto a las defensas pasivas, se disponía de una triple alambrada a unos 50 metros a cada lado de la línea, tras la cual, se trataba de despejar el terreno tanto como fuera posible.

Curiosamente aunque los soldados trabajaban hasta la puesta de sol, y eran obligados a dormir es sus puestos sin quitarse los correajes, las enfermedades tropicales eran casi anecdóticas entre ellos.

[Gaspacher]

CUBA, 24 de abril de 1896, cerca de Pinar del Rio

El cañonero torpedero de 500 toneladas Temerario, había llegado al apostadero de Cuba desde Buenos Aires hacia solo 11 días y ya estaba a punto de interceptar su primer grupo de insurrectos junto a la cañonera La Mensajera. Se trataba de una goleta que en esos momentos había soltado varios lanchones que se dirigían cargados a la playa donde eran esperados por numerosos mambises, ignorantes que en esa zona también estaba un destacamento de infantería de marina. Su presencia debió ser advertida, pues de pronto arrecio un duro tiroteo en la costa donde el destacamento de infantería de marina se vio imposibilitado de avanzar.

Menos suerte tuvo la goleta que poco después seria identificada como la Competitor, pues su huida era ya imposible ante la presencia del Temerario que, tras enviar un destacamento de infantería de marina a bordo, avanzo hacia la costa para apoyar a las fuerzas españolas. Pronto el efecto de sus cañones de 120mm y sus ametralladoras de 25mm, se hicieron sentir en las fuerzas insurgentes que corrieron a la espesura abandonando su preciada carga en la playa. Gran cantidad de dinamita, 200 fusiles Remington y sus municiones, quedarían abandonados en la playa.

En ella también quedarían los cuerpos de 7 hombres de la tripulación filibustera y una veintena de los mambises del coronel Carlos Socarras, 9 de ellos heridos aunque 4 morirían en los días siguientes. La totalidad de los prisioneros tomados a bordo de la goleta y en las fuerzas de tierra ascendería a 17 hombres. Algunos de ellos serían fusilados tras juicio sumarísimo, pero los capturados en la goleta declararon ser norteamericanos y ello trajo no pocos problemas.

Durante el resto del año continuaría prestando sus servicios allí, entrando en el dique flotante de La Habana para mantenimiento el primer trimestre de 1897. Tras salir de él su actividad de patrulla disminuiría mucho, realizándose en cambio ejercicios de torpedeamiento y esmerándose el mantenimiento hasta la extenuación. Si había guerra el Temerario estaría preparado para ella.

[Luis M. García]

Muy bien, su productividad va en aumento, pero... No podría cambiar el color de fuente de esas notas diminutas a un azul un poco más oscuro? Es que se deja uno la vista y ya no estamos para esos trotes.

Saludos.

[Autentic]

Impresionante relato, Gaspacher.

Muchisimas gracias.

[Gaspacher]

MADRID, 26 de marzo de 1896

Desde que el general Weyler ocupase su cargo en Cuba el tono de la prensa norteamericana había subido unas octavas, siendo rara la semana en la que no se acusase a España de criminal y Weyler de asesino. Esto no hacía sino conferir mayor urgencia a las labores de reorganización de las fuerzas españolas que, sin embargo, se estaban encontrando en graves dificultades por la falta de dinero. Aun así las reuniones de coordinación eran constantes, y los envíos de armas a ultramar se realizaban en muchos casos aun a costa de la propia península.

De esta forma, San Juan de Puerto Rico que, ya contaba con una artillería de costa más que respetable, aunque de calibre medio, sería reforzada por 2 cañones Krupp de 305mm y otros 2 de 260mm, así como 2 obuses Ordóñez de 240mm y 2 más de 305mm procedentes de Cartagena.


Uno de los Krupp de Cartagena

También de Cartagena se retiraran dos Ordóñez de 260mm que con otros dos Krupp del mismo calibre, y dos Krupp de 305mm procedentes de Ceuta, partirían destino a Santiago de Cuba.

Por su parte, en Cádiz se prescindiría de los Armstrong de 305 y 254mm que tantos quebraderos de cabeza habían causado 1. Destinándolos a Manila junto a los dos cañones Ordoñez reformados de 305mm, y otros dos Krupp de 305mm.

No serían estos los únicos cañones empleados para reforzar las plazas de Ultramar, pues también la marina participo mediante la cesión de cañones procedentes de los dos cruceros Reina Regente, y las fragatas Vitoria y Numancia, cuya modernización fue así aparcada.


MANILA, 3 de abril de 1896

>Madrid, 2 de abril de 1896, 15:20 hora local.<
>Asignados Capitanía Gral Filipinas siguientes cañones. Dos Armstrong 30.5cm, dos Armstrong 25cm, dos Ordoñez 30.5cm, dos Krupp de 305mm, seis Hontoria 20cm 2. Primer envió dos piezas 20cm, dos de 25cm llegara octubre. Prioritario preparar asentamientos para inmediata puesta en servicio.
Ministro de la Guerra, Marcelo Azcárraga Palmero.

-Vaya, si que se lo toman en serio, pensó el general Blanco al acabar de leer el telegrama.

1. No cumplieron las expectativas prometidas por Armstrong, y se renegoció su contrato, logrando una rebaja por cada libra de presión de menos.
2. En lugar de instalarlos en la Numancia, y Vitoria, los otros dos cañones irían a Santiago de Cuba.

[huarlot]

hola Gaspacher

Un pero las notas que pones no se leen bien, por lo demas un relato fastinante.

un saludo

[Apónez]

1.- No cumplieron las expectativas prometidas por Armstrong, y se renegocio su contrato, logrando una rebaja por cada libra de presión de menos.
2.- En lugar de instalarlos en la Numancia, y Vitoria, los otros 2 cañones irían a Santiago de Cuba.

Ya está

[Gaspacher]

MADRID, 18 de mayo de 1896

Basil Zaharoff había viajado a Madrid a causa de los rumores que indicaban, un nuevo intento de lograr un arma submarina por parte de España, un proyecto que ya había ayudado a rechazar 5 años antes. Esta vez sin embargo, en el ministerio de Marina negaron saber nada sobre el intento de conseguir un sumergible, no encontrando Zaharoff más que rumores.

Tras los resultados obtenidos en el ministerio utilizo las conexiones del padre de su amante, María del Pilar de Muguiro, para contactar con Cánovas del Castillo. Este, aunque había dado permiso para desarrollar el sumergible desconocía si entre las medidas que se estaban llevando a cabo se incluía su construcción, por lo que le remitió de nuevo a la marina.

Desconocían que las investigaciones sobre este nuevo tipo de arma estaban siendo llevadas a cabo bajo el patrocinio directo del ministerio de Hacienda, camuflado como un proyecto de guarda y finanzas. Esto se debía a que el ministro Navarro-Reverter, tras haber escuchado los graves problemas políticos del primer intento, decidió apartar este proyecto del ministerio de Marina. Cuando los planos de los nuevos sumergibles estuviesen dispuestos, esperaba poder encargarlos junto a varios torpederos que le sirviesen para ocultar su fabricación.

NEWPORT, EEUU, 30 de junio de 1896

Decididos a seguir ampliando el poderío naval norteamericano, se contrataron dos nuevos acorazados en los astilleros de Newport News Shipbuilding Company, Newport News, Virginia. Puestos en grada este día, estos poderosos acorazados desplazarían 11.500 toneladas, y estarían armados con 4 cañones de 33 cm, 8 de 20 cm, y 14 de 15 cm, desarrollando una velocidad de 16 nudos.

Sin duda cuando estuviesen en servicio romperían todo equilibrio al que pudiese aspirar la marina española, aun si esta lograba poner en servicio los 3 cruceros acorazados Princesa de Asturias.

[Gaspacher]

PINAR DEL RÍO, Cuba, 1 de julio de 1896

Pese a que los últimos meses, las columnas españolas había batido repetidas veces a las partidas insurrectas arrinconándolas y acosándolas cada vez más, la victoria no parecía cercana. Los insurgentes se ocultaban en el campo acercándose a las poblaciones a por suministros y noticias, o para saquearlas si no cooperaban, por lo que el final de la rebelión parecía lejano.

En un intento apartar a los pacíficos de los sediciosos, el general Weyler decreto la reconcentración de la población rural en poblados fortificados designados al efecto. Así toda la población rural abandono sus campos y viviendas tras recoger todo el grano y animales que poseían, trasladándose a las distintas poblaciones habilitadas para ellos.

En estas poblaciones, tropas del ejército o unidades de voluntarios tendieron grandes alambradas rodeándolas, reforzándolas con blocaos y torres de vigilancia, para impedir que los insurrectos contactasen con los reconcentrados. Alrededor de estas poblaciones se llevarían a cabo grandes trabajos de desbroce del monte, tratando de lograr así campos de cultivo o pastos que, completasen la alimentación de los pacíficos, compuesta principalmente por raciones militares y ayudas de la cruz roja y la iglesia.

Pronto el hambre se adueñó de estas poblaciones que tenían una población muy superior a la que podían sustentar. Para escapar de estos campos, varios miles de cubanos aceptaron ser enviados a Guinea Ecuatorial, donde se les concederían tierras de cultivo o trabajo. A pesar de ello miles de cubanos morirían a causa del hambre y las enfermedades, desatando una ola de indignación en los EEUU que, oportunamente olvidaron el trato que daban a los indígenas americanos.

[Luis M. García]

Basil Zaharoff había viajado a Madrid a causa de los rumores que indicaban, un nuevo intento de lograr un arma submarina por parte de España, esta vez, un proyecto que ya había ayudado a rechazar 5 años antes. Esta vez, sin embargo, en el ministerio de Marina negaron saber nada sobre el intento de conseguir un sumergible, no encontrando más que rumores.

Si me permite V.E., algunas cuestiones menores:

1. Creo que con el copy&paste se le ha colado una errata, que le destaco en otro color para que el post quede niquelao...

2. Y quién diablos era el tal Zaharoff que de tanta vara alta disponía?

3.

miles de cubanos morirían a causa del hambre y las enfermedades, desatando una ola de indignación en los EEUU que, oportunamente olvidaron el trato que daban a los indígenas americanos.

No le parece un tanto tendencioso el comentario? Y conste que no es por defender a los yanquis, que como buenos descendientes pérfidos son de lo más hipócrita. Pero aún así y todo, ya sabe, un clavo no saca otro clavo.

Saludos.

PD. Además, como lo vea el Plissken, le trollea el hilo como está mandao...