Ucronia España vs EE.UU., Duelo de aguilas

[Llanero]

Seamos realistas. Pedir Missisipi, Alabama y Florida es querer comer más de lo que podemos “digerir”.

Pedir estados, es una locura... como mucho algún territorio no incorporado como Hawái o Alaska... o zonas concretas y reducidas como Cod o el sur del Misisipi, por ejemplo a partir de los fuerte St Philip y Jackson. Los aranceles cobrados a cualquier mercancía que cruzase esa zona serían

Hace 23 páginas un servidor ya se atrevió a sugerir lo de Hawaii:

ucronia-espana-vs-ee-uu-duelo-de-aguilas-t36355-615.html#p1433122

… pero no con una anexión, sino estableciendo un protectorado, lo cual nos daría un escenario mucho más manejable a la hora de buscar complicidades locales entre la población indígena. La monarquía hawaiana había sido derrocada por los yankees no hacía mucho, y tras ello hubo alguna resistencia armada contra lo que los EE.UU pretendían, que no era otra cosa que la anexión del territorio proclamada finalmente en julio de 1898 al rebufo de nuestras derrotas. Así que el tema podría ser factible. Habría que pensar en destacar permanentemente unidades navales en el nuevo Apostadero de Bahía de la Perla (alias Pearl Harbour).

Seria una opción, desde luego

Personalmente, cuantos menos puertos intermedios tuviesen en el Pacifico, más seguras estarían las Filipinas

Por supuesto se podría plantear la anexión de Wake (o sea, la Isla San Francisco descubierta por navegantes españoles siglos atrás) junto con Midway y el Atolón Johnston… Sin olvidar el islote de Navassa (entre Cuba y Haití) que Gaspacher se acordó de dejar bien ocupado aunque no vale para gran cosa.

Esas islas menores si podrían ser solicitadas, salvo mejor opinión.

Por lo demás, quizás la cesión perpetua de algún punto de apoyo en Florida como base avanzada para proteger Cuba… y Cabo Cod y Nueva Orleans quizás en prenda hasta que nos paguen la correspondiente indemnización de guerra, pero ni un minuto más.

Dudo mucho que podamos imponer condiciones al desarrollo de una nueva US Navy como las del Tratado de Versalles con Alemania…

Pero, en cualquier caso, no nos ilusionemos mucho porque seguro que habrá quién quiera una vuelta al statu quo (UK?) y presione fuerte para ello cuando lleguen las negociaciones.

Saludos

Todos sabemos como acabo el imponer un tratado tan humillante como Versalles, así que...

Sii, lo entiendo perfectamente, pero en una negociación, hay que ir con una posición de máximos. Luego, ya se desarrollará el "tira y afloja", "que si amenazo con levantarme de la mesa"..., "que si me levanto y me voy"... ,"regateo de mercado puro y duro", para al final quedarnos con lo que más nos convenga y que podamos sostener y mantener en el tiempo. Que nos interesan islas e islotes, con algún pequeño territorio continental añadido más una compensación económica. Pués ese será nuestro objetivo, pero de inicio solicitaremos más, para al final, quedarnos a "regañadientes" con lo que verdaderamente queramos .

Me "muero" de curiosidad (alias onicofagia ) por saber que políticos o militares encabezarán la negociación por nuestra parte, y cual será el contenido del tratado naval con los pérfidos.

Cordiales saludos,

[seper33]

Todos sabemos como acabo el imponer un tratado tan humillante como Versalles

También está el espinoso asunto del canal en la América central... en Nueva Granada (Colombia). Asunto que yankees y británicos tenían controlado, Tratado Clayton-Bultler, y que ahora cambia las tornas. En mi opinión uno de los principales motivos de la guerra (“Los beneficios y ventajas del canal son grandes para los europeos, pero incalculables para los estadounidenses. Ulises S. Grant”)
.

[huarlot]

Buenas a todos

Pedir estados, es una locura... como mucho algún territorio no incorporado como Hawái o Alaska... o zonas concretas y reducidas como Cod o el sur del Misisipi, por ejemplo a partir de los fuerte St Philip y Jackson. Los aranceles cobrados a cualquier mercancía que cruzase esa zona serían

Parace ser que el Sr Gaspacher a pillado bien mis intenciones sobre todo a lo referente al golfo de Mexico, por pedir en las negociaciones hasta la luna, otra cosa es lo que luego consigamos en la negociacion pero si consegimos tierra en la desembocadura del Misisipi como dice Gas en derechos arancelarios nos forramos..

Y lo de Cod no habia pensado exigirlo, pero si tambien podemos hacer daño si subimos los arancales a productos americanos de salida en la zona y si ademas bajamos las tasa portuaria de productos entrada de 3 paises, podriamos hacer mucho daño en la zona tanto que tarderia mas tiempo en recuperaese. Es mas seria como un Gran Market donde venderiamos productos mas baratos que en los yankis, si nos ponen aranceles veriamos a los propìos americanos haciendo contravando

[Gaspacher]

Hombre, si es por máximos, podemos pedir...

Hawái, para establecer un protectorado (y quitarles el puerto en medio del pacifico que supone).
Las islas y atolones de; Wake, Midway, Palmira, Jarvis, Johnston, Navaza
La península de Cod (que personalmente revendería a los EEUU cuando acabasen de pagar las compensaciones de guerra por otros 40 ó 50 milloncejos…)
Y antes que la desembocadura del Misisispi, las Aleutianas o una porción de Alaska, total, ya puestos… montamos un protectorado esquimal y expulsamos a los europeos de allí

Y ya que estamos,

300M $ como compensaciones de guerra, a pagar en 10 años (por cada acorazado o crucero acorazado que entreguen les rebajamos 10M del precio)

La cabeza de Hearst y Pulitzer en una pica... bueno esto no que estamos a punto de entrar en el siglo XX

pero bueno, eso sería cosa del gran urquhart

[Gaspacher]

Añado que, si nos entrgan a John Moses Browning para que trabaje para nosotros, les rebajamos otros 40M el precio

[urquhart]

Hola a todos,

tras el artículo de L'Aurore, donde publicó el insigne Emile Zola, había pensado un artículo escrito esta vez en Berlín, que ayudaría en cierto modo a sembar un ambiente propicio a la solución de una Paz Negociada, redactado por un oscuro Contralamirante, nombrado Secretario de Estado de la Reichsmarineamt a principios de 1898....

DIE WELT

LA NECESIDAD DE CREACION DE LA HOCHSEEFLOTTE

Konteradmiral Alfred Tirpitz. Berlín, 15 de diciembre de 1898

Antes de asumir el mando de la Ostasiengeschwader (Escuadra Alemana de Asia) en 1896, mi antecesor en la secretaría de la Reichmarineamt, el Almirante Friedrich von Hollmann, presentó en el Reichstag un programa de construcciones navales, que contó con la oposición del Partido Conservador y del Partido Socialdemócrata. El Canciller Príncipe Hohenlohe-Schillingsfürst, incluso declaró que no tenía ningún sentido la potenciación de la Kaiserliche Marine. La insistencia de Su Majestad Imperial, el Kaiser Guillermo, en la potenciación de nuestras fuerzas navales ha continuado desde aquellos días de 1896. Mientras nuestros vecinos potenciaban sus fuerzas navales, Alemania solo aprobó fondos para la construcción de un navío acorazado y tres cruceros protegidos; insuficientes en n´ñumeroa a la luz de los últimos acontecimientos.

A primeros de este año de 1898, tras ser llamado por el Kaiser, y tras un periplo que me ha llevado de Hong Kong a la Patria, pasando por los Estados Unidos de América de preguerra, he podido observar como el Reino Unido y los propios Estados Unidos de América potenciaban sus escuadras en el Pacífico, e incluso en Hong Kong tuve noticias de los esfuerzos españoles en reforzar su posición en aquellas aguas; dejando a nuestra Ostasiengeschwader en una posición de clara inferioridad frente a otras potencias, y siendo necesario la posesión de una base permanente en Asia, y no depender como hasta ahora del fondeadero británico en Hong Kong. Entre las misiones que me fueron encomendadas en 1896, estaba la de encontrar una base para la Ostasiengeschwader, base que se ha hecho realidad con la ocupación por 99 años de la Bahía de Kiautschou, desde el pasado 27 de abril de 1897.

Pero nuestras naves actuales son inferiores a las de terceras potencias. La Ley Naval, aprobada el pasado mes de junio, y con su horizonte en 1905, proporcionará al Reich una fuerza naval de 16 buques principales.

Podemos observar como una fuerza menor en número, la de la Real Armada Española, ha logrado una serie de éxitos frente a una fuerza netamente superior. Si inicialmente las fuerzas terrestres estadounidenses pudieron operar en Cuba y Guam, por su superioridad local, finalmente, y gracias a una inteligente campaña naval española, obligaron a las fuerzas expedicionarias a abandonar ambas islas. España, logrando superioridad naval local, logró en primer lugar destruir la industria naval estadounidense, llegando incluso a hacerse con 3 buques principales, que llegaron al puerto español de Bilbao para ser completados. Rompió el bloque de Cuba, y no solo obligó a retirarse a las fuerzas enemigas, si no que llevó los combates a suelo estadounidense. Mientras leen estas líneas, una fuerza terrestre se mantiene en el noreste del país, y otra avanza por el cauce del Mississippí. Conjurada la superiorida americana, la Real Armada española llevó las operaciones de nuevo al Pacífico, obligando a los estadounidenses a finiquitar sus operaciones en las Marianas y abandonar Guam, conquistada inicialmente a un duro precio.

La superiuoridad naval española, ya sea local, ya sea de doctrina, ha permitido a España a primero defender su Imperio, y posteriormente atacar en su propio territorio a un enemigo que en el momento que se aprobaba nuestra Ley Naval, todos los entendidos suponíamos invencibles. Nuestra Ley NAval supondrá un desembolso de 58 millones de Reickmarken al año, pero asegurará el mantenimiento de nuestro Imperio en Africa y Asia, y sobre todo hará realidad las palabras del NMinistro Von Bulow, reflejo de los deseos del Kaiser, Mit einem Worte: wir wollen niemand in den Schatten stellen, aber wir verlangen auch unseren Platz an der Sonne. el Reino de España, y especialmente sus fuerzas armadas, nos muestran el camino... Mi sagrada misión es ahora dirigirme a los diversos PArlamentos del Reich para conseguir en primer lugar las cantidades aprobadas por el Reichstag, para que en un futuro próximo, nuestro Imperio y la PAtria estén a salvo de lso peligros que puedan llegar del Mar. La improvisación americana, todo y su aparente superioridad numérica e industrial, han sido vencidas en el Mar. Hago votos para que los Parlamentos del Reich, sigan la senda del Parlamento de Baden, del Principe de Baviera, de Sajonia, de las ciudades marítimas de la antigua Hansa y de Olderburg, y que los primeros planos de contrucciones presentados al Kaiser en octubre, reciban los fondos que los materialicen.

En España se dice TU REGERE IMPERIO FLUCTUS HISPANE MEMENTO... tras 1805, parece que vuelven a recordar; pero ahora, a las puertas del nuevo siglo, debe ser Alemania quien forje su Imperio en las aguas.

[fleetinbeing]

OPERACIÓN ROY, día 16 al 21, 26 al 31 de diciembre de 1898

II CdE, Mobile


Cuando poco después los gobernadores demócratas (1) se reunieron con el gabinete presidencial del republicano McKinley, exigieron medidas inmediatas para proteger sus estados. La reunión que fue extremadamente tensa, y tan solo los dos ejércitos reunidos al sur de Jackson, bajo el mando del general Kent, calmaron a los gobernadores .

1. Sí, precisamente todos esos estados eran demócratas y estaban amenazados, siendo el gobierno federal republicano.

Esto podría marcar el devenir de los Estados Unidos durante las próximas décadas, condicionando su actuación como gran potencia. Me explico: En los estados sureños aún quedan rescoldos de la Guerra de Secesión,así que políticos populistas sureños (los hay en todas partes y en todas las épocas, sobre todo en tiempos de crisis) podrían decir algo así como: "mientras nuestros muchachos sufren y mueren a millares en Massachussets y en islas dejadas de la mano de Dios, el gobierno federal permite que nuestros estados sean arrasados acabando con lo que no destruyó Sherman"
Lo más probable es que no hubiera otra secesión, pero sí un poderoso movimiento político que conseguiría una mayor descentralización, sobre todo en materia de defensa, para evitar "los errores del 98" y que sería mucho más reacio a la participación en asuntos internacionales

Saludos

[Gaspacher]

HATTIESBURG, Misisipi 9 de enero de 1899

Tras reunirse el V Cuerpo de ejército al mando de Summers con las fuerzas de milicias procedentes de Baton Rouge, se constituiría el llamdo ejército del Mississipi. Al mando, el general Wheeler, restablecido de la enfermedad contraída en Cuba meses atrás.

Este poderoso ejército que incluía las 3 divisiones originales del V Cuerpo de Ejército, reforzadas por la división de voluntarios de Nebrasca y Virginia, y la división formada por dos divisiones de milicias, con tropas de Louisiana, Arkansas, Texas y Nuevo México. En total, 51.400 hombres, incluyendo 7.000 jinetes. La artillería, eso sí, era muy escasa, con tan solo 34 cañones de campaña Hotchkiss.

Aun así, el general Wheeler estaba dispuesto a aprovechar su oportunidad. Los dos ejércitos españoles estaban muy separados el uno del otro, casi 140km, y no podían apoyarse mutuamente. Por ello considero que, tenía la oportunidad de acabar con el ejército de Mobile, antes de volver para enfrentarse a Ochando en Baton Rouge o Nueva Orleans.

El día 3 de enero, el Ejército del Misisipi partía desde Jackson, tomando rumbo hacia Mobile. El movimiento pronto llego a oídos de Arolas a través de sus exploradores. Obligado a proteger el puerto de Mobile, el II Cuerpo de Ejército se interpuso entre este y su objetivo en las cercanías de Hattiesburg. Al amanecer del día 9 de enero, los ejércitos estaban a punto para librar la última batalla de la guerra.

El general Arolas, había decidido adoptar una actitud defensiva. Tomando posiciones en la pequeña villa de Richton, al Este de Hattiesburg. Al norte, cubriendo el camino de Good Hope, la división de cazadores. Al este, cubriendo el camino de Moselle, la 5ª división de infantería, a su izquierda, cubriendo el flanco de esta división, dos medias brigadas de voluntarios, formadas con los batallones desembarcados recientemente, Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza, y los de extranjeros 1 y 2. El despliegue se completaba con la artillería (1), bajo el mando directo del general Arolas, y la brigada de caballería que, cubría el flanco derecho desde la cercana East Side. En la propia Richton, el regimiento Murcia constituía la reserva.

No hubo tiempo de cavar trincheras, o establecer líneas permanentes. A duras penas pudieron asignarse sectores a los jefes de batallón, y estos tuvieron que delegar a toda prisa en sus jefes de compañía. Los hombres en pequeños grupos de 6 a 20 integrantes, se refugiaron tras los arboles u obstáculos de la zona y aguardaron…

Las fuerzas norteamericanas estaban llegando.

1. 18 cañones Krupp de 90mm, 6 Krupp de montaña de 75mm

[Gaspacher]

Bueno, falta la batalla final ¿Alguien se atreve a escribirla?

La ventaja numérica es del ejército americano, 2.15 a 1 aproximadamente.

Sus desventajas, solo unos 4.000 fusiles de repetición Krag Jorgensen o similares, frente a un ejército armado con armas máuser o similares...

[Llanero]

Es decir, que nuestra potencia de fuego es de 3-1 o 4-1 a nuestro favor.

Cordiales saludos,

[Gaspacher]

HATTIESBURG, Misisipi 9 de enero de 1899/II

El general Wheeler observaba las líneas españolas mientras decidía cual era la mejor forma de proceder. Desde luego debía atacar antes de dar tiempo a los españoles a atrincherarse. Si al menos dispusiese de suficiente artillería como para ablandar las posiciones enemigas de forma adecuada. Pero no podía ser. Tan solo disponía de 34 piezas de artillería distribuidas en 8 baterías. Con ellas trataría de preparar el ataque arrasando las líneas españolas.

El lugar elegido para el ataque sería el punto en el que se unían la 5ª división española con las unidades de voluntarios. Así que, tras instalar la artillería al este de la Richton, los 34 cañones iniciaron un feroz bombardeo de las líneas españolas, mientras tras las baterías las divisiones de Louisiana, Mississipi, y Alabama se preparaban para el ataque.

Empero, si el ataque principal trataría de romper las líneas españolas en esa zona, aun debía distraer al resto del ejército. Por lo tanto las divisiones de Garretson, Wilson y Brooke, se desplazarían hacia el noreste para tratar de flanquear a los españoles.

Pronto se iniciaron los combates. En un paisaje moteado por la nieve, los soldados de uno y otro bando, vestidos con sus uniformes azules, destacaban y eran fácilmente localizados por los tiradores de uno y otro bando, causando innumerables bajas. Tras paralizarse brevemente el avance a causa del fuego de los máuser, nuevas unidades se incorporaron a la batalla, dando un nuevo impulso al ataque. Con todo, no tardarían en ser rechazados, haciéndose necesario retroceder brevemente para reorganizarse.

Un poco más al norte, las unidades enviadas a flanquear a las fuerzas españolas no estaban teniendo más suerte. Si bien en esta zona los defensores carecían de artillería, las unidades de cazadores estaban más acostumbradas a combatir en orden abierto, por lo que se adaptaron mejor a este tipo de combates. Como en la carretera de Moselle, las fuerzas atacantes se vieron incapaces de hacer prosperar su avance.

En Richton, los disparos de la artillería alcanzaron el hospital de campaña, siendo heridos varios de los médicos. Uno de ellos sería José Rizal, quien pese a sus dolorosas heridas, continuó el tratamiento de los heridos sin abandonar su puesto, hasta el fin de la jornada.

Durante 6 horas, los combates se sucedieron sin tregua. Una y otra vez, el general Wheeler envió a sus hombres a la carga, y una y otra vez, los ataques fueron detenidos por los defensores que, pronto tuvieron que solicitar la ayuda de las reservas. Tan solo gracias a la llegada de estas unidades y de la batería de Krupp de montaña que, arrojo un vendaval de fuego y metralla sobre los asaltantes, lograrían mantenerse las líneas españolas.

La situación empezaba a ser extremadamente complicada para las fuerzas españolas, habiendo tenido ya que retirar reforzar la zona de Moselle con varias unidades procedentes de otros lugares de la línea, e incluso con los zapadores y parte de las compañías de transporte y telégrafos. Aun así, sería precisa la intervención de la brigada de caballería, cuyos hombres, llegados pasadas las 13:20, sumaron el fuego de sus carabinas al combate.

Peor aún era la situación en el campo norteamericano. Aunque disponían de una clara ventaja numérica, las constantes descargas de las armas españolas evidenciaban la ventaja tecnológica de sus adversarios. En esa situación, unos soldados obligados a hacer fuego con fusiles monotiro que, empleaban pólvora negra, empezaron a ver su moral afectada.

A las 14:30, agotados los atacantes tras la dura jornada, los ataques languidecerían hasta desaparecer. Las bajas norteamericanas sumaban 23.780 hombres, siendo las españolas de 11.382. Sin embargo al quedar las fuerzas españolas dueñas del campo pudieron tratar a sus heridos sin problemas, mientras muchas de las bajas norteamericanas eran totales, al sumarse los numerosos prisioneros a los muertos.

El ataque había sido rechazado, y el ejército de Misisipi seriamente dañado tras perder casi el 45% de sus fuerzas. El porcentaje de bajas español sería similar, pero el general Arolas, convencido de la necesidad de mantener Mobile a salvo, permaneció en el campo pese a todo.

La batalla había terminado, Wheeler no tuvo más remedio que retroceder de vuelta a Jackson, siendo acosado por la caballería española y varias unidades de guerrilleros durante el viaje y por la amenaza de las fuerzas de Ochando desde el oeste, lo que causo nuevas perdidas y numerosas capturas entre sus rezagados.

En Washington los efectos de la batalla fueron devastadores.

[urquhart]

Hola a todos,

Gaspacher, tal vez los efectos de la batalla no sean los buscados por Wheeler, pero con las bajas que otorgas al bando español, las fuerzas de Arolas solo podrán proteger Mobile, que no es poco.

Si los memos del War office hubieran fijado a Weyler en Cape Cod y enviado un CE del Army of the Hudson a unirse al del Mississipí, hubieran finiquitado al bueno de Arolas... salvo mejor opinión.

Fracasadas las invasiones de Cuba y Guam, y con tropas españolas fuertemente asentadas en Nueva Inglaterra y la desembocadura del Mississippí, a Mc Kinley solo le queda que solicitar el armisticio, o esperar a la llegada de la primavera para continuar las operaciones....

Espero que el Embajador Francés lleve al presidente McKinley las condiciones del Reino de España, que deberían incluir el juicio de los señores Hearst y Pullitzer por alguna Corte Internacional (la de Comercio de la Haya se creó en 1899) acusados de Conspiración contra la Paz y a algún mando por contravenir los artículos del Primer Convenio de Ginebra, y a algún político responsable de crimenes de lesa humanidad por el bloqueo a Cuba.

Como pedir territorios sería una falacia, el Atolón de Johnston pasaría a soberanía española, al subrogarse el Reino de España al Tratado de Reciprocidad entre los Estados Unidos y el Reino de Hawaii, invalidando posteriores acuerdos entre Hawaii y Estados Unidos ( http://morganreport.org/mediawiki/index ... ty_of_1875 ) Se ocuparía Midway, que no fue anexada por EE.UU. hasta 1903.

Saludos

[Gaspacher]

Hola a todos,

Gaspacher, tal vez los efectos de la batalla no sean los buscados por Wheeler, pero con las bajas que otorgas al bando español, las fuerzas de Arolas solo podrán proteger Mobile, que no es poco.

Salvo la caballería y guerrillas, que si podrían actuar de forma más ofensiva. Sobre todo por estar el ejército en retirada.

Además, la división de caballería del III CdE estaba protegiendo el flanco derecho de este, y por lo tanto queda en buena posición para participar en la persecución...

Si los memos del War office hubieran fijado a Weyler en Cape Cod y enviado un CE del Army of the Hudson a unirse al del Mississipí, hubieran finiquitado al bueno de Arolas... salvo mejor opinión.

El problema es que se rompieron los dientes dos semanas atrás, y dejar solo 1 CE frente a un Weyler con superioridad artillera, era demasiado peligroso.

Si te refieres a actuar de forma más comedida, y contentarse con mantener el asedio desde el principio, la cosa cambia. Pero en ese caso el problema lo tendría la Navy, y de todas formas Ochando no hubiese avanzado como lo hizo.

Fracasadas las invasiones de Cuba y Guam, y con tropas españolas fuertemente asentadas en Nueva Inglaterra y la desembocadura del Mississippí, a Mc Kinley solo le queda que solicitar el armisticio, o esperar a la llegada de la primavera para continuar las operaciones....

armisticio...

Espero que el Embajador Francés lleve al presidente McKinley las condiciones del Reino de España, que deberían incluir el juicio de los señores Hearst y Pullitzer por alguna Corte Internacional (la de Comercio de la Haya se creó en 1899) acusados de Conspiración contra la Paz y a algún mando por contravenir los artículos del Primer Convenio de Ginebra, y a algún político responsable de crimenes de lesa humanidad por el bloqueo a Cuba.

¿Para qué? A esos déjaselos a los propios americanos que, sin duda estarán contentos con ellos...

los demás, habría que estudiar caso por caso, de todas formas, como yo estoy haciendo que las fuerzas de Weyler y Ochando actuen cual langostas, mejor pasamos...

Como pedir territorios sería una falacia, el Atolón de Johnston pasaría a soberanía española, al subrogarse el Reino de España al Tratado de Reciprocidad entre los Estados Unidos y el Reino de Hawaii, invalidando posteriores acuerdos entre Hawaii y Estados Unidos ( http://morganreport.org/mediawiki/index ... ty_of_1875 ) Se ocuparía Midway, que no fue anexada por EE.UU. hasta 1903.

Saludos

Desde luego pedir territorios de los estados sería imposible, otra cosa son territorios no incorporados como islas del guano, etc.

[Gaspacher]

WASHINGTON, día 11 de enero de 1899

Los resultados de la batalla de Hattiesburg habían resultado devastadores para el gobierno de McKinley. Con el ejército de Misisipi derrotado y casi desaparecido al ser capturados muchos rezagados en los días posteriores a la batalla (1), las puertas a los estados agrícolas y ganaderos de las regiones del sur y el medioeste quedaban abiertas por entero. En unas semanas a lo sumo era de esperar el avance hacia el norte de las fuerzas del general Ochando que, destruirían las cosechas e industrias a su paso.

Tal vez hubiese sido posible el detraer tropas de la costa Oeste o de Nueva Inglaterra, pero en círculos internacionales se comentaba abiertamente que el siguiente ataque español, tendría lugar contra las ciudades de Seattle, San Diego, y sobre todo, San Francisco y sus astilleros. Era tal la psicosis que se vivía en aquellos momentos que, incluso se hablaba de planes españoles de conquistar Alaska. La aurífera Alaska.

Los problemas se acumulaban sin cesar, un ejército, el mejor de los que disponía, retenido en Nueva Inglaterra. Otro en la costa Oeste, y las ultimas reservas de tropas cediendo terreno en los estados del Sur. El riesgo de ver arruinadas las cosechas de ese año, pendía como un hacha sobre el cuello del gobierno.

En el mar, aunque aún se disponía de una escuadra bastante poderosa, que alineaba 2 cruceros acorazados y 2 acorazados, así como numerosos cruceros protegidos y cañoneros, la ventaja española era más que evidente. Pues estaba cimentada en los 3 nuevos cruceros acorazados y 3 acorazados robados que, avanzaban en su construcción, a los que se sumaba el Texas y los cruceros protegidos recuperados en Guantánamo y Subic (2).

En unos pocos meses, la destrucción de la escuadra se convertiría en una realidad, y con ella, la del propio país.

Apenado y terriblemente afectado por las circunstancias, el presidente McKinley no tuvo más remedio que llamar al embajador francés, representante de los intereses españoles en EEUU.

El día 13 de enero, con los ejércitos españoles avanzando hacia el norte a través de Louisiana, Arkansas, Alabama y Mississippi, y hacia el este rumbo a Pensacola, EEUU solicitaba formalmente la paz.

1. El III Cuerpo de Ejército español acudió a la zona desde el oeste.
2. Se había contratado trabajadores británicos como parte de las medidas que llevaron a la concesión a empresas británicas de la nueva SECN de Ferrol.

[Gaspacher]

MADRID, 13 de enero de 1899

La noticia de la petición del fin de hostilidades fue un motivo de indescriptible alegría para el gobierno español, que exigió a Washington el internamiento inmediato de la escuadra norteamericana en un puerto neutral. Solo cuando pudiesen constatar su internamiento en Bermuda o las Bahamas, darían órdenes a Ochando de cesar en su avance.

Esto obedecía a dos motivos muy simples.

El primero era, evidentemente, el tener la seguridad sobre las intenciones americanas y evitar sorpresas de ultima hora.

El segundo, mucho más ladino, era el permitir a estas fuerzas avanzar al máximo para alcanzar una posición de fuerza desde la que negociar.

Impedidos de partir por el mal tiempo reinante, la escuadra no podría hacerse a la mar hasta el día 15, cuando se dirigió hacia el sur, rumbo a Charleston. Desde allí, los buques se dirigirían a las Bahamas, a donde llegarían el 24 de enero. El mando americano había preferido no arriesgar sus baqueteados buques dirigiéndose a Bermuda directamente en pleno enero.

Esa misma tarde Ochando recibió órdenes de detenerse. Para entonces las fuerzas españolas, reforzadas con guerrillas cubanas, habían llegado a adentrarse en Tennesee, mientras Arolas había alcanzado Pensacola, donde el ejército norteamericano había abandonado la ciudad tras una resistencia simbólica.

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Tres semanas antes, los fuertes St Philip y Jackson habían capitulado tras una épica resistencia. Poco después empezarían a remontar el río los mercantes españoles, en ocasiones con unidades de guerrilleros cubanos a bordo que, se sumarían al avance español. En otras, con estibadores, y trabajadores cubanos que, se emplearían a fondo en tareas de requisa y traslado de materiales a Cuba.

Animales como ganado bovino, tanto de carne como de lácteos, o de tiro, caballos y bueyes. Maquinaria como locomóviles, ingenios de algodón o azúcar, maquinaria ferroviaria, tornos, fresas y bancadas de trabajo de lo más diverso, toda maquinaria susceptible de ser desmontada y trasladada a lomo, en carro, o en ferrocarril, y embarcada a continuación, fue enviada hacia Nueva Orleans y Mobile para su traslado. No por ello olvidarían las materias primas o manufacturadas. Miles de balas de algodón procedentes de los campos de la cuenca del Misisipi, decenas tal vez cientos de toneladas de trigo, o maíz, esperaron su embarque hacia su nuevo destino.

Aun mientras negociaban el tratado de paz, los buques de mercancías realizaron decenas de viajes desde los puertos americanos a Cuba. Desde allí, buques neutrales contratados viajarían a España para trasladar las mercancías.

El 14 de febrero, con el II Cuerpo de Ejército firmemente asentado en Montgomery, Alabama, el III Cuerpo de Ejército en Pine Bluff, Arkansas, y las guerrillas corriendo libremente por los estados de Louisiana, Alabama, Misisipi, Arkansas, y el oeste de Tennessee, los representantes de los gobiernos español y norteamericano se sentaban a negociar en París.