El sargento que infiltró a la siniestra banda 'La 95'El turno de la serie 'Infiltrados' es para un suboficial que fingió ser un asesor jurídico.
El solo nombre de la banda delincuencial ‘La 95’ causaba terror entre los habitantes del barrio Bellavista de Kennedy.
Cuando aún eran niños, en el 2005, sus ocho integrantes, liderados por Jaír Moreno López, comenzaron a atracar a sus propios vecinos y a los transeúntes en los alrededores de la calle 42F sur con carrera 95. De ahí el título de la agrupación criminal.
Luego pasaron de los cuchillos a las armas de fuego y de los hurtos a los homicidios. Una de las estrategias de intimidación, muestra del creciente poder criminal, la exhibían con cinismo en sus perfiles de redes sociales: aparecían posando con fusiles y revólveres. Así convirtieron las calles en su territorio. Cuando caminaban por cierto sector las personas tomaban otro rumbo y en las tiendas no quedaba un solo cliente cuando ellos llegaban a tomar licor.
Toda esta información la empezó a recopilar desde febrero del 2013 un sargento de la Sijín de la Policía Metropolitana de Bogotá, asignado a investigar la ola de al menos 10 asesinatos, 15 intentos de homicidio, 230 lesiones e incontables hurtos en el barrio Bellavista.
Sin embargo, hacían falta datos precisos para la identificación de cada uno de los miembros de ‘La 95’.
Asesor jurídico
La oportunidad de infiltrar la banda llegó en junio del año pasado, cuando Jaír terminó en el CAI Bellavista tras protagonizar una riña callejera. “Tuve la idea de hacerme pasar como un asesor jurídico que necesitaba un dato de los policías del CAI. Ellos conocían la estrategia. Allí le pregunté a Jaír por qué lo habían detenido y le hice ver que la razón era injusta. Impedí que se lo llevaran a la UPJ y así comencé a ganarme su confianza”, dice el sargento.
Con el paso de los días, Jaír le presentó a los demás integrantes de la banda; así pudo reconocer los rostros y las identidades de todos. El suboficial, supuestamente experto en leyes, ya era conocido entre ellos como el ‘Doctor Roberto’. El falso jurista iba a los encuentros vestido de paño, con corbata y portando un maletín con agendas y el Código de Procedimiento Penal.
“Yo los sacaba de problemas cuando terminaban en la UPJ o un CAI. Les decía que hacía trámites para tratar de remover a los policías que los molestaban”, recuerda el infiltrado. Fue tal la cercanía que los de ‘La 95’ terminaron invitando al policía encubierto a reuniones familiares. Por supuesto, un patrullero de la Sijín, que fingía ser un taxista, seguía de cerca los movimientos de su compañero en caso de que requiriera ayuda.
“Los de ‘La 95’ solo salían en las noches. Siempre estaban armados y andaban en motos –dice–. Les inventaba que yo había sido como ellos, pero que decidí salir adelante y que por eso me interesaba defenderlos”.
La hora definitiva de la misión llegó el 8 de septiembre del 2013. Ese día, Jaír terminó nuevamente en el CAI por una riña. El asesor jurídico llegó y le pidió a la mamá del delincuente que llamara con prontitud a los otros miembros de la red para que, supuestamente, declararan que él no había sido el responsable y lo soltaran. Y así fue. Allí aparecieron Jampier Suárez, alias ‘Papilín’ (primo de Jaír); José Guiza, ‘Bigotes’; Juan Carlos Árias, el ‘Negro’; y alias ‘Garbanzo’.
Con Jaír, de nuevo libre, todos se dirigieron en el carro del ‘Doctor Roberto’ al Hospital de Kennedy, pues allí estaba el primo de ‘Garbanzo’, quien había resultado herido en la mencionada pelea.
En ese instante el sargento dio la señal: activó las luces estacionarias para avisarles a sus compañeros de la Sijín que era tiempo de ejecutar las capturas. Meses después, en enero de este año, fue detenido en el barrio El Restrepo otro miembro de ‘La 95’, identificado como Sergio López, alias el ‘Paisa’. Los esfuerzos se concentran ahora en ubicar a otros dos criminales, que andan sueltos.
http://www.eltiempo.com/colombia/bogota/sargento-infiltro-banda-la-95_13923135-4