Este comentario del propio autor del blog, que creo que no habrá problema en cortapegar, creo que es lo suficientemente ilustrativo de la situación actual del ministerio, en manos de quienes estamos y a donde nos dirigimos.
Muchas gracias a Andrés Galán, Anónimo 14:06 y Anónimo 12:52, por el respectivo comentario. Don Andrés, me temo que aún suscribiendo lo dicho por el Sr. Serra, siempre con mucho sentido, lo que seguramente significaba ese "con los presupuestos de Defensa se construye una casa de paja y no de piedra" no es lo que piensa. Por su trayectoria y negocios el Sr. Serra suele pensar lógicamente en el negocio armamentista que es, por otra parte, lo que ahora inunda todo en Defensa.
Ayer — y contesto en parte a lo que pide Anónimo 14:06 (y otros lectores) asistí a una mesa redonda en el CESEDEN. Curiosamente era el Instituto Elcano quien ponía "la ciencia" y el CESEDEN meramente el local. Qué cosas se ve uno obligado a hacer, mi general. Se presentaba un buen "policy paper" del Instituto sobre "la defensa que viene". En los ponentes hubo varios niveles. Y, en las gradas, además de parlamentarios relevantes como el Sr. López Garrido, nutrida representación de las industrias de de defensa (y fauna agregada). Ya casi habría que denominar este conjunto como industria del corretaje de defensa. Se habló mucho, y con especial énfasis, de la importancia de esa industria en España. Tanto que alguien que no supiera de estas cosas concluiría que la razón de ser de las FAS españolas es la promoción y desarrollo de la industria de defensa/corretaje, y no a la inversa que es lo que yo creo que debe ser.
En el coloquio intervine para señalar dos puntos, para mí fundamentale,s que se habían prácticamente obviado en las presentaciones : lo de las "FAS sostenibles" y la falta de operatividad de las unidades militares. Por lo que respecta al primero, dije lo que vengo repitiendo: que el gasto de defensa en sus distintos capítulos es una cuestión de prioridades del gobierno. Añadí, como mero ejemplo, que la industria de defensa es una prioridad de elevado rango cuando, además de lo presupuestado, por vía de decreto-ley se soltaron a esa industria más de 1500 millones de euros entre 2012 y 2013 y se han anunciado otros 915 para 2014. Para mi sorpresa -no voy a contar toda la película-, dos de los ponentes, el Sr. García Vargas, presidente de TEDAE (y, por tanto, el gran representante de las industrias de defensa) así como la Sra. Rodríguez-Salmones del PP, tiraron al unísono de argumentario, al parecer común, para decir que las deudas hay que pagarlas. Y se quedaron tan frescos. Caramba, habrá que ir pagando las deudas, pero no cargándose lo fundamental. Digo yo.
Con respecto a la operatividad la cosa fue, si cabe, todavía peor. Volví a argumentar lo que siempre mantengo: sin unidades plenamente operativas todo el resto del tinglado de la defensa sobra. El Sr. García Vargas dijo algo monumental en un ex-ministro de defensa: que la falta de operatividad era algo que se podía resolver en un pispás (no es textual) si había dinero, pero que la falta de industria de defensa era más grave y necesitaba más tiempo. Estaré equivocado pero, aun habiendo dinero, o mucho me equivoco o sería lo contrario. Además, es bien sabido que en España comisionistas hay legión, empresarios, industriales de defensa, muy poquitos. La Sra. Rodríguez-Salmones se parapetó detrás de la comparecencia del JEMAD del pasado día 7 en el Congreso (y esto enlaza con lo que decía Anónimo 12:06 en su comentario) para decir que la operatividad estaba asegurada porque según el JEMAD no se había cruzado la línea roja de la falta de operatividad. Ergo es el JEMAD el responsable de no atacarse urgentemente y en profundidad el más esencial y grave de los problemas de las FAS hoy: su falta de operatividad por falta de presupuesto. Qué cosas. Almirante.
Hubo algunas cosas más que, de momento, me callo.
Este es el ministerio que tenemos, donde unos lobbies son los que marcan las pautas y el centro superior de estudios solo pone las sillas, un ministerio donde lo único que importa es la industria y la defensa militar se ha convertido en la última prioridad. En la que un exministro reconvertido en industrial de la mano de un industrial convertido en ministro y una política profesional que ha sido ninguneada por su propio partido dictan las prioridades.
Y todavia algunos lo considerais un buen ministro. Que no nos pase nada.