MELILLA, 29 DE NOVIEMBRE DE 1916Con algunos días de retraso sobre los planes previstos, el General Marina recibía de Madrid la orden de atacar Nador en apoyo de los rifeños.
La disposición adoptada por Marina para una primera fase era sencilla. Desde el Cuartel del Hipódromo, apoyados por la artillería fija situada en los altos del Gurugú, y de campaña, la I Brigada de Melilla, penetraría en territorio del Protectorado Italiano, haciendose con Beni Ensar, para pasar a atacar las posiciones italianas de Nador, a orillas del Barranco Buasien.
Una fuerza de entidad batallón reducido compuesta en torno a la Compañía de Mar, se haría con la franja norte de tierra de la Mar Chica, conocida como Boukana, impidiendo que Nador fuera suministrada por Mar, y el promontorio del Atalayón
El General Marina, dispuso de tiempo suficiente desde que recibió las ordenes de MAdrid hasta la declaración de Guerra a Italia, para enviar tres vapores a la bocana de la Mar Chica, escoltados por el cañonero
Bonifaz, el arrastrero armado
Galga y el yate
Giralda. Una vez en la bocana o sus inmediaciones, las tripulaciones abandonarían sus naves, antes de haber abierto los grifos de fondo; siendo rescatadas por las embarciones militares, que aprovecharon para abrir fuego contra las posiciones italianas conocidas.
La II Brigada de Melilla, cubriría la línea entre las estibaciones del Gurugú, hasta el ala derecha de la I Brigada, quedando como reserva. La artillería, sometería a fuego las posiciones italianas, con el objeto de fijarlas, y proteger el flanco de la I
La Brigada de Voluntarios Catalanes, en el Cabo Tres Forcas, se adentraría en el Protectorado Italiano, en dirección a Alhucemas, contactando con los rifeños, pero solo combatiendo en situaciones de franca superioridad.
Beni Ensar fue rapidamente ocupado por fuerzas de la I Brigada, tras algunos combates callejeros. Todo hacía pensar que los italianos habían sido cogidos por sorpresa.
La Compañía de Mar había alcanzado sus objetivos, son escasa dificultad. Ante el avance, y el fuego naval, las pocas fuerzas italianas en el brazo de tierra setreptional, se rindieron. La entrada a la albufera estaba inutilizada gracias a las embarcaciones hundidas.
Desde su puesto de mando, el General Marina pensaba que tal vez se había precipitado ordenando el cierre de la Mar Chica.
En Cabo Tres Forcas, el General Macià, comandante de la Brigada de Voluntarios, recibía los primeros informes de sus patrullas de descubierta. Tras los primeros bombardeos y tiroteos, las pocas fuerzas italianas habían abandonado sus posiciones.
Macià no podía sustraerse a su éxito inicial, así que puso a su Brigada en movimiento hacia el interior del Rif. Enterado Marina del avance desde Tres Forcas, ordenóa a uno de los batallones de la II Brigada unirse a los Voluntarios Catalanes, para después avanzar hacia Zelouan, contactar con Mizzian, y tomar a los italianos entre dos fuegos; en lugar de unirse a éstos en la Bahía de Alhucemas.
http://adrianapolis.com/blog/wp-content ... sur_b1.jpg CONTINUARÁEl enlace muestra desde la frontal de la MAr Chica el área de las operaciones