Por eso, escribí en términos genéricos estimado
Batalla de Matasiete. Soy un asiduo viajero. Prácticamente desde Caracas a Oriente, y de Oriente hasta Caracas, Maracay. Ese viaje lo hago cada semana. Escribiré sobre el caso de la Alcaldía de Sotillo, para los que no conocen, Puerto la Cruz, o la de Urbaneja, Lecherías. ¡Están demasiado deterioradas! Ninguno de los dos alcaldes trabaja la verdad. Magglio Ordoñez fue otro fraude, y bastante que advertí a mis conocidos que el señorito no haría gran cosa. Resultado. Calles más ahuecadas que nunca, áreas verdes que dan lástima, entre otras menudeces. Da tristeza ir a Lecherías, porque se encuentra con la misma situación. Yo no soy partidario de seguir creando las industrias en estos núcleos urbanos, pero eso no implica que no se cuide y actualice lo que ya está allí. El único alcalde por el cual meto las manos al fuego, es por el de Guanta. Convirtió a esa pequeña ciudad, que antes era un basurero en el mejor de los términos, a ser una taza de plata, y actualmente construyendo un hospital a una velocidad vertiginosa.
Yo soy de izquierda, siempre lo he sido. Pero recuerdo que cuando inicié a postear en este foro, lo hice desde la perspectiva gerencial. La legitimidad de los líderes electos por el pueblo, no la pongo en duda, y la defendí a capa y espada cuando iniciaron las guarimbas, pero ello no implica que no seré autocrítico. Están en extremos opuestos.
¿Qué tiene que ofrecer la oposición? Pues que yo sepa, en muchos casos, nada mejor. Pero que eso no sea una excusa para no hacer bien las cosas. Sí la oposición no se desempeña bien, nosotros tenemos
la obligación de hacerlo mejor.