Ucronia España vs EE.UU., Duelo de aguilas
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Ucronia España vs EE.UU., Duelo de aguilas
¿Y por qué no darle un buen repaso a los anglosajones?
Históricamente han sido los enemigos seculares de España, usando frecuentemente ardides digamos que en el límite de lo aceptable. Por otra parte, España es aliada de Alemania, y esta le debe bastante por la victoria. Por tanto una Alemania fuerte a corto y medio plazo al menos solo beneficia a España. Mientras que las potencias anglosajonas, si quedan solo tocadas, es seguro que buscarán revanch... Adivinad a costa de quién.
Al fin y al cabo España tiene intereses marítimos y Alemania continentales. Lo que pase en lso Balcanes a España le impota poco. Además se beneficiaría de la desintegración del imperio colonial británico al abrirle grandes mercados ¿de qué me sonará esto?
Al principio a España tal vez le hubiese interesado una solución parcial. Ahora, lo mejor es la victoria total.
E insisto que ceterum censeo Britannia esse delendam
Saludos
Históricamente han sido los enemigos seculares de España, usando frecuentemente ardides digamos que en el límite de lo aceptable. Por otra parte, España es aliada de Alemania, y esta le debe bastante por la victoria. Por tanto una Alemania fuerte a corto y medio plazo al menos solo beneficia a España. Mientras que las potencias anglosajonas, si quedan solo tocadas, es seguro que buscarán revanch... Adivinad a costa de quién.
Al fin y al cabo España tiene intereses marítimos y Alemania continentales. Lo que pase en lso Balcanes a España le impota poco. Además se beneficiaría de la desintegración del imperio colonial británico al abrirle grandes mercados ¿de qué me sonará esto?
Al principio a España tal vez le hubiese interesado una solución parcial. Ahora, lo mejor es la victoria total.
E insisto que ceterum censeo Britannia esse delendam
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zaptor escribió:Hablando de la campaña americana... como veríais, como gole de efecto, tomar el Canal de Panamá?
Creo que antes podemos solventar los asuntos de Haiti, República Dominicana y Nicaragua.
En la LTR hay tropas de EE.UU., si evacuan Cuba también las evacuarán y los gobiernos sostenidos por ellos se derrumbarán.
andrestotal escribió: ¿Podría México movilizar parte de su ejército hacia la frontera con su vecino?
México ya nos apoyaba, había enviado acorazados a Puerto Rico para mantenerla abastecida e incluso se formó la Escuadrilla Quezalcoalt.
Por cierto como acabó la negociación sobre las islas vírgenes donde se había metido México para hacer competencia a EE.UU. (y subir el precio).
- Xenophonte
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Supongo que en caso de prolongarse la guerra, con las consiguientes presiones políticas y la tensión sobre la salud del Presidente Wilson, puede que su incapacidad (por su ACV) suceda antes de octubre del ’19. En todo caso haya o no terminado la guerra en ese momento, es probable que su esposa no pueda ocultar sus condiciones Físico motrices y Mentales e impedir la sucesión constitucional. Cambiando de tema una buena forma de generar ingresos seria convertirse en proveedores de Alcohol para los contrabandistas Norteamericanos.
Por ultimo en Australia y Nueva Zelanda el temor y alarma por una ‘posible’ invasión Hispano Germana será superior al experimentado durante años de Rusia y Francia. Un temor no muy racional pero histórico: por ejemplo en 1909 un Premier Australiano Invito a visitar el Dominio a la Gran Flota Blanca de Teddy Roosevelt (claro que en esta LTA/U, No sucedió, pero es indicativo de la indefensión y la lejania de Londres, percibida por los colonos). Fuentes literarias del “terror a la invasion”:
Neville Meaney, (ed.), Australia and the World: A Documentary History from the 1870s to the 1970s (Melbourne: Longman Cheshire, 1985).
Robert Hyslop, “War scares in Australia in the 19th century”, Victorian Historical Journal, vol. 47, no. 1, febrero 1976.
P.D.: No pude encontrar fuentes en Español.
Por ultimo en Australia y Nueva Zelanda el temor y alarma por una ‘posible’ invasión Hispano Germana será superior al experimentado durante años de Rusia y Francia. Un temor no muy racional pero histórico: por ejemplo en 1909 un Premier Australiano Invito a visitar el Dominio a la Gran Flota Blanca de Teddy Roosevelt (claro que en esta LTA/U, No sucedió, pero es indicativo de la indefensión y la lejania de Londres, percibida por los colonos). Fuentes literarias del “terror a la invasion”:
Neville Meaney, (ed.), Australia and the World: A Documentary History from the 1870s to the 1970s (Melbourne: Longman Cheshire, 1985).
Robert Hyslop, “War scares in Australia in the 19th century”, Victorian Historical Journal, vol. 47, no. 1, febrero 1976.
P.D.: No pude encontrar fuentes en Español.
''Mi autoridad emana de vosotros y ella cesa por vuestra presencia soberana" J. Artigas.
''El ladrón piensa que todos son de su condición'':refrán popular Castellano.
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Es interesante acabar con las ambiciones norteamericanas en el Caribe pero ¿qué ventaja militar obtiene España en Nicaragua? Son operaciones que requerirían muchos efectivos, peligrosas (los submarinos de la Entente van a pulular por el Caribe) y de escaso beneficio. Sin embargo, cerrar Panamá (porque es probable que los norteamericanos lo saboteen) tiene un efecto grave sobre la economía norteamericana… e inglesa. De paso, cuando se reconstruya (ya que la mayor parte de la obra está hecha) será bajo control de la Coalición.
Por otra parte, se ha hablado mucho del “equilibrio”… cuando ese era un concepto inventado por los ingleses para mantener su preeminencia: equilibrio entre potencias continentales y yo hago lo que me dé la gana por los océanos o en las pequeñas naciones.
Lo dicho, ceterum censeo Britannia esse delendam.
Saludos
Por otra parte, se ha hablado mucho del “equilibrio”… cuando ese era un concepto inventado por los ingleses para mantener su preeminencia: equilibrio entre potencias continentales y yo hago lo que me dé la gana por los océanos o en las pequeñas naciones.
Lo dicho, ceterum censeo Britannia esse delendam.
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Condottiero escribió:Lo ideal (luego las cosas irán por otros caminos insospechados) sería que (mi carta a los Reyes Magos para esta ucronía):
No es por nada pero...
¿Te das cuenta que muchas de las opciones que presentas son incompatibles con el resto?
Domper escribió:Si se intenta meter uno en el río James o en el Hudson, malo. Pero si desembarca cerca... las costas son extensísimas. DE lo d elos ejércitos nomerosos, sí y no. Tenía capacidad de alinearlo, pero en este hilo han tenido pérdidas inmensas ¿un millón?, otros dos millones están en Inglaterra, y los de Cuba han vuelto con lo puesto.
Más bien medio millón entre Cuba y Francia, contando unos cien mil muertos, su problema es por supuesto la escasez de armas pesadas y ametralladoras, que dificultara sus operaciones a corto plazo.
Domper escribió:El problema de la costa norteamericana es su enorme extensión. Es la costa de un continente, además con multitud de bahías, estuarios, islas costeras, etcétera. En la LTR se comprendió la imposibilidad de artillarlo todo y por eso se crearon los "montajes Panamá" precisamente para los 155 GPF que ya se han nombrado: una base de hormigón en la que se podía podía poner un cañón de campaña.
Correcto, para saber más sobre la artillería costera norteamericana http://cdsg.org/old/amerdef.htm
y sobre su distribución
http://cdsg.org/old/cdlist1.htm
y dentro de esta y ya en cuanto a las defensas del Golfo se refiere
http://cdsg.org/old/gulf.htm
Como podemos ver Key West, Tampa, Pensacola, Mobile, Mississippi, Galveston, y entre una y otras, cientos de kilómetros de territorio que ahora deberían ser cubiertos por otros medios...
saludos
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.
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APERTURA ESPAÑOLA, primavera en Asia
Durante el resto de la primavera la campaña española en el Indico siguió sin pausa, y tras la conquista de las Maldivas y Seychelles las fuerzas españolas saltaron a las islas Andaman, donde una vez más empezaron a construir una estación de carboneo. Allí esperaría el Almirante Chacón a la llegada de los acorazados Jaime I y los cruceros de batalla, mientras el Tte. general Borja esperaba la llegada del primer cuerpo de invasión, el Cuerpo de Extranjeros. Por fin a finales de abril las fuerzas españolas estuvieron preparadas para pasar a la acción, presentándose entonces un problema para el almirante Chacón.
La ruta hacia Filipinas seguía por el estrecho de Malaca, lugar sin duda idóneo para tender una emboscada a su flota. Para evitarla se puso en contacto con los agentes españoles las Indias Orientales Holandesas que le enviaron importante información sobre la presencia de enemigos en la zona. De todas formas decidió utilizar el estrecho de Sunda situado entre las islas de Sumatra y Java en lugar del de Malaca, pues en ese estrecho ambas orillas pertenecían a las Indias Orientales Holandesas y a la vez era un estrecho mucho más limpio que el de Malaca, en el que una miríada de islas facilitaría las emboscadas. Por lo tanto la flota de operaciones se dirigió hacia el estrecho de Sunda, mientras enviaba varios submarinos a reconocer el estrecho de Malaca, en un intento de destruir a un posible enemigo que tratase de tenderle una emboscada allí.
continuara esta noche si todo va bien...
Durante el resto de la primavera la campaña española en el Indico siguió sin pausa, y tras la conquista de las Maldivas y Seychelles las fuerzas españolas saltaron a las islas Andaman, donde una vez más empezaron a construir una estación de carboneo. Allí esperaría el Almirante Chacón a la llegada de los acorazados Jaime I y los cruceros de batalla, mientras el Tte. general Borja esperaba la llegada del primer cuerpo de invasión, el Cuerpo de Extranjeros. Por fin a finales de abril las fuerzas españolas estuvieron preparadas para pasar a la acción, presentándose entonces un problema para el almirante Chacón.
La ruta hacia Filipinas seguía por el estrecho de Malaca, lugar sin duda idóneo para tender una emboscada a su flota. Para evitarla se puso en contacto con los agentes españoles las Indias Orientales Holandesas que le enviaron importante información sobre la presencia de enemigos en la zona. De todas formas decidió utilizar el estrecho de Sunda situado entre las islas de Sumatra y Java en lugar del de Malaca, pues en ese estrecho ambas orillas pertenecían a las Indias Orientales Holandesas y a la vez era un estrecho mucho más limpio que el de Malaca, en el que una miríada de islas facilitaría las emboscadas. Por lo tanto la flota de operaciones se dirigió hacia el estrecho de Sunda, mientras enviaba varios submarinos a reconocer el estrecho de Malaca, en un intento de destruir a un posible enemigo que tratase de tenderle una emboscada allí.
continuara esta noche si todo va bien...
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.
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Una pregunta tonta ¿ese estrecho no se llama "de la Sonda"? Sé que es una corrupción del nombre indonesio, pero igual sería mejor usar el nombre castellano... suponiendo que sea ese, claro.
Por otra parte, me había hecho a la idea que los "amis", que habían tenido un papel muy importante en las ofensivas de Ludendorff, habían tenido más bajas. Aparte de la gripe, claro.
Saludos
Por otra parte, me había hecho a la idea que los "amis", que habían tenido un papel muy importante en las ofensivas de Ludendorff, habían tenido más bajas. Aparte de la gripe, claro.
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- urquhart
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COLONIA TEXTIL CAN VILADOMIU,GIRONELLA,BARCELONA,MARZO DE 19
COLONIA TEXTIL CAN VILADOMIU,GIRONELLA,BARCELONA, MARZO DE 1919
Joan Bosch observaba la plaza de la Colonia Textil. Allí estaban concentrados la totalidad de los operarios, como sus familias. Las mujeres de los movilizados, habían ocupado sus puestos en los telares, o sus hijos, siempre que fueran mayores de 12 años, y no abandonaran los estudios que recibían en la misma colonia.
Bosch era consciente que los tarbajadores sabían de la interrupción de las labores destinadas a equipar al Ejércto, que había suspendido la entrega de 12 mil uniformes de campaña completos. Lo mismo ocurría con varias factorías del Valle del Llobregat, dedicadas al paño, o como sabía en las del Maresme, dedicadas al punto, y en el Valle del Noya, dedicadas al algodón y la marroquineria.
Enter los congregados, reconoció a varios de los desmovilizados, los que se habían alistado en las Milicias, y los de mayor edad enrolados en el Ejército regular. Algunos vestían sus uniformes reglamentarios. Veteranos del Frente de los Pirineos y del Norte de Africa.
Bosch intentó congraciarse con los allí presentes, pero cuando anunció que en el tablón encontrarían la lista de despedidos, los gritos empezaron a ensordecerle. Ni siquiera ofrecer a los despedidos sin hijos permanecer en la Colonia hasta la primavera, y a los que tuuvieran hijos hasta el fin del curso, pudo evitar los disturbios. Una piedra, lanzada por un veterano impactó contra su megáfono.
Aquella fue la primera piedra, a la que siguieron varias. Los guardas de la Colonia eran incapaces de frenar a aquel gentío enfurecido, mucho menos cuando los veteranos se pusieron al frente de la algarada, Bosch, gerente de la Colonia, acabaría huyendo por la trasera de la Torre dels Amos ante la perspectiva de acbar linchado.
Los alborotadores llegaron a la Plaza de la Villa, donde se unieron a otros procedentes de varias de las colonias cercanas. La Patronal había decidido actuar al unísono.
En varios pueblos de la comarca, las plaazs se llenaban de operarios del textil. Decididos a no permitir la situación, en los sucesivos días, se congregaron en Suria, donde recibieron el apoyo de los mineros de la sal. La minas, también habían reducido su carga de pedidos, lo que conllevó el despido de decenas de minadores. Un coctel explosivo, veteranos y barrenadores.
Los Mossos de Escuadra enviados por la Mancomunitat fueron incapaces de restablecer el orden, ni siquiera con la ayuda de la Guardia Civil. Una larga marcha avanzaba sobre Manresa, lugar de residencia de muchos de los propietarios de las Colonias Textiles.
Viendo desbordadas las fuerzas de orden público, el Gobernador Civil solicitó la ayuda del Gobernador Militar. En Manresa estaba acuartelado uno de los Regimientos de Caballería de la 2ª Brigada, y estaba en proceso de recuperar las plantillas de 1914. Tres de los cinco escuadrones estaban formados por veteranos de 1914, y habían optado por ingresar en el nuevo Ejército profesional. Los otros dos Escuadrones serían desmovilziados, como el Escuadrón de Armas, que pasaría a Sección. Esas fuerzas fueron enviadas a contener a los manifestantes.
Días después en MAdrid, el Ministro Besteiro tuvo noticias de los hechos. Los manifestantes estaban encabezados por los veteranos que vestían sus uniformes, y no portaban banderas, ni rojas, ni negras. Las tropas, a pesar de ser veteranas y de lealtad incuestionable, se negaron a cargar contra sus antiguos compañeros, aunque no les dejaron progresar. Con acierto, el Gobernador Militar ordenó que impidieran que la columna siguiera avanzando. Otras columnas de desempleados se dirigían hacia BArcelona desde la comarca del Maresme y desde el Vallés. Ahora debería acudir a Barcelona, y negociar con los Sindicatos y la Patronal. Luque y Coca refrendó las ordenes del Gobernador Militar. Había que evitar choques armados que pudieran prender la mecha de la Revolución, o algo peor. Los alborotadores, según tenía conocimiento no habían atacado ni a personas ni propiedades, y desde luego, las columnas estaban organizidas por los veteranos. Si mantenían cierta disciplina, había una posibilidad de negociación.
Tendría que hablar con Weyler, y buscar una solución para evitar el mayor número de despidos. Varias ideas le rondaban por la cabeza, algunas con efecto inmediato, otras, deberían esperar a acabar el conflicto. ¿Como enfocarlo a un Presidente que deseaba antes que nada acabar la Guerra? ¿Dispondría de tiempo?
Joan Bosch observaba la plaza de la Colonia Textil. Allí estaban concentrados la totalidad de los operarios, como sus familias. Las mujeres de los movilizados, habían ocupado sus puestos en los telares, o sus hijos, siempre que fueran mayores de 12 años, y no abandonaran los estudios que recibían en la misma colonia.
Bosch era consciente que los tarbajadores sabían de la interrupción de las labores destinadas a equipar al Ejércto, que había suspendido la entrega de 12 mil uniformes de campaña completos. Lo mismo ocurría con varias factorías del Valle del Llobregat, dedicadas al paño, o como sabía en las del Maresme, dedicadas al punto, y en el Valle del Noya, dedicadas al algodón y la marroquineria.
Enter los congregados, reconoció a varios de los desmovilizados, los que se habían alistado en las Milicias, y los de mayor edad enrolados en el Ejército regular. Algunos vestían sus uniformes reglamentarios. Veteranos del Frente de los Pirineos y del Norte de Africa.
Bosch intentó congraciarse con los allí presentes, pero cuando anunció que en el tablón encontrarían la lista de despedidos, los gritos empezaron a ensordecerle. Ni siquiera ofrecer a los despedidos sin hijos permanecer en la Colonia hasta la primavera, y a los que tuuvieran hijos hasta el fin del curso, pudo evitar los disturbios. Una piedra, lanzada por un veterano impactó contra su megáfono.
Aquella fue la primera piedra, a la que siguieron varias. Los guardas de la Colonia eran incapaces de frenar a aquel gentío enfurecido, mucho menos cuando los veteranos se pusieron al frente de la algarada, Bosch, gerente de la Colonia, acabaría huyendo por la trasera de la Torre dels Amos ante la perspectiva de acbar linchado.
Los alborotadores llegaron a la Plaza de la Villa, donde se unieron a otros procedentes de varias de las colonias cercanas. La Patronal había decidido actuar al unísono.
En varios pueblos de la comarca, las plaazs se llenaban de operarios del textil. Decididos a no permitir la situación, en los sucesivos días, se congregaron en Suria, donde recibieron el apoyo de los mineros de la sal. La minas, también habían reducido su carga de pedidos, lo que conllevó el despido de decenas de minadores. Un coctel explosivo, veteranos y barrenadores.
Los Mossos de Escuadra enviados por la Mancomunitat fueron incapaces de restablecer el orden, ni siquiera con la ayuda de la Guardia Civil. Una larga marcha avanzaba sobre Manresa, lugar de residencia de muchos de los propietarios de las Colonias Textiles.
Viendo desbordadas las fuerzas de orden público, el Gobernador Civil solicitó la ayuda del Gobernador Militar. En Manresa estaba acuartelado uno de los Regimientos de Caballería de la 2ª Brigada, y estaba en proceso de recuperar las plantillas de 1914. Tres de los cinco escuadrones estaban formados por veteranos de 1914, y habían optado por ingresar en el nuevo Ejército profesional. Los otros dos Escuadrones serían desmovilziados, como el Escuadrón de Armas, que pasaría a Sección. Esas fuerzas fueron enviadas a contener a los manifestantes.
Días después en MAdrid, el Ministro Besteiro tuvo noticias de los hechos. Los manifestantes estaban encabezados por los veteranos que vestían sus uniformes, y no portaban banderas, ni rojas, ni negras. Las tropas, a pesar de ser veteranas y de lealtad incuestionable, se negaron a cargar contra sus antiguos compañeros, aunque no les dejaron progresar. Con acierto, el Gobernador Militar ordenó que impidieran que la columna siguiera avanzando. Otras columnas de desempleados se dirigían hacia BArcelona desde la comarca del Maresme y desde el Vallés. Ahora debería acudir a Barcelona, y negociar con los Sindicatos y la Patronal. Luque y Coca refrendó las ordenes del Gobernador Militar. Había que evitar choques armados que pudieran prender la mecha de la Revolución, o algo peor. Los alborotadores, según tenía conocimiento no habían atacado ni a personas ni propiedades, y desde luego, las columnas estaban organizidas por los veteranos. Si mantenían cierta disciplina, había una posibilidad de negociación.
Tendría que hablar con Weyler, y buscar una solución para evitar el mayor número de despidos. Varias ideas le rondaban por la cabeza, algunas con efecto inmediato, otras, deberían esperar a acabar el conflicto. ¿Como enfocarlo a un Presidente que deseaba antes que nada acabar la Guerra? ¿Dispondría de tiempo?
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Si es ese, en este caso he utilizado Sunda por ser más fácilmente reconocible por la batalla que libraron japoneses y americanos y australianos en la ww2.
No, las ofensivas de Luddendorf tuvieron como protagonista principal a los británicos como ocurrió en la realidad. los americanos han tomado parcialmente el papel de los franceses en la realidad, es decir, tropas de reserva, y como es parcialmente se reparten las bajas de esa fase con los franceses...
No, las ofensivas de Luddendorf tuvieron como protagonista principal a los británicos como ocurrió en la realidad. los americanos han tomado parcialmente el papel de los franceses en la realidad, es decir, tropas de reserva, y como es parcialmente se reparten las bajas de esa fase con los franceses...
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BAHÍA DE BRUNEI, 12 al 25 de mayo
Para principios de mayo los embajadores del Reino Unido negociaban ya a tres bandas en un intento de evitar la derrota total, pues sabían que el fin estaba cercano y únicamente un milagro podía salvar al imperio. Tan solo podían aspirar a controlar los daños si lograban un tratado de paz ventajoso, a pesar de las seguras perdidas territoriales que sin duda les serían impuestas por las potencias vencedoras. Fue entonces cuando tuvieron lugar los dos últimos golpes de gracia, uno en el Atlántico y el segundo en Asia. El día 8 de mayo fuerzas hispano-germanas atacaban en el caribe, y solo cuatro días después un grupo de batalla español se presentaba ante Borneo, desembarcando en Labuan y el protectorado de Brunei.
Las autoridades británicas en Brunei contemplaron la llegada de la flota española con cierta resignación. Las fuerzas de invasión eran evidentemente demasiado poderosas para resistirse a ellas, y toda su esperanza residía en un improbable ataque del reticente aliado japonés sobre sus enemigos. Protegidos por siete acorazados, dos cruceros de batalla, seis acorazados preDreadnought, y una veintena de destructores, la fuerza de desembarco enemiga se desplego, lanzando medio centenar de barcazas hacia las costas malayas, y otras 18 hacia las islas que cerraban la bahía al noreste.
No mucho después de mediodía las barcazas tocaron tierra dando paso al desembarco de la infantería, que avanzó acompañada por una docena de carros de origen francés, Renault FT-17. Por fortuna no encontraron resistencia de consideración, y las escasas tropas británicas se retiraron al interior de la isla tras algunas escaramuzas. Tan solo en Labuan las fuerzas de la estación de carboneo que la Royal Navy mantenía en la isla, combatieron con saña, prendiendo fuego a las reservas de carbón antes de capitular a última hora del día tras una dura resistencia. Por fortuna la pérdida del carbón no revestía especial gravedad pues la escuadra llevaba suficientes carboneros.
A lo largo de todo el día las barcazas siguieron trasladando tropas desde los transportes hacia la costa, permitiendo el desembarco de las primeras tres brigadas transportadas por las fuerzas de invasión. Estas eran las brigadas de extranjeros Gran Capitán, Duque de Alba, y Don Juan de Austria, tropas que bastaron para controlar Labuan y el resto de islas de la entrada de la bahía de Brunei, y el puerto de Muara, en donde al día siguiente desembarcaría la cuarta brigada de extranjeros, la Alejandro Farnesio. Con ello las fuerzas españolas empezaban a contraatacar, siendo curiosamente muchos de soldados no españoles, principalmente checos, serbios, y rusos.
El día 13 el Tte general Borja pudo entrevistarse con el sultán Muhammad Jamalul Alam II, quien no tuvo más remedio que denunciar el protectorado británico declarado por su padre en 1888 y aceptar el español. A partir de entonces Borja se establecería en Labuan, dejando al Sultán el control de la capital, Bandar Seri Begawan, donde permanecería el cte. Aquino, un filipino que llevaba 21 años en el ejército.
A partir del día siguiente, y mientras el ejército creaba un perímetro de defensa alrededor de la bahía, la flota reanudo las operaciones. Los grandes buques de la Armada se refugiaron en la bahía, incluyendo los portaaeronaves Glorioso, Dédalo, e Ícaro, el primero portaaviones y el resto portahidroaviones, tendiéndose redes antitorpedos a su alrededor. Mientras tanto los mercantes Francoli, Begoña nº 3, y 4, y Bakio, que habían sido reconvertidos en minadores, sembraban de minas la entrada de la bahía, dejando pasos bien definidos y protegidos por los cañones de los pre Dreadnought y por baterías de artillería pesada que se instalaron en diversos puntos de las islas de Labuan, Kuraman, Daat, así como en Muara y Menumbok. Con ello la entrada de la bahía quedaba bien protegida, proporcionando un puerto seguro a la flota de operaciones.
Paralelamente otros mercantes empezaron a descargar las cargas que transportaban y almacenarlas en los almacenes de Muara. También los ingenieros se pusieron manos a la obra, y empezaron a construir grandes almacenes con los que complementar la capacidad de almacenamiento del puerto. Durante días los trabajos de fortificación en tierra, y de construcción de infraestructuras ocuparon a cientos de soldados, que recibieron la ayuda de miles de civiles contratados, pues pronto corrió la voz que los invasores pagaban en plata y los nativos acudieron en masa en busca de trabajo.
Una semana después del desembarco, los primeros 20.000 soldados españoles habían tomado tierra. Entonces se pudo empezar la descarga a gran escala de los suministros que llevaban los mercantes. Esos mismos mercantes tan pronto completaban la descarga partían rumbo a España, escoltados por los cruceros auxiliares que habían transportado las tropas para la invasión. Alimentos, municiones, repuestos, suministros médicos, y por supuesto el imprescindible carbón empezaron a acumularse en los almacenes de la isla. Incluso serían desembarcados tres dirigibles y doce hidroaviones adicionales llevados por el mercante Joaquín Mumbru, iniciándose poco después una serie de patrullas aéreas que complementaron las patrullas realizadas por los destructores.
En el puerto de Labuan atracaría el vapor Noviembre, perteneciente a la Compañía Bilbaina de Navegación, ahora reconvertido en un nodriza de submarinos. Pronto llegarían los submarinos clase E Delfín, Jaquetón, Morsa, y Marsopa, los cuatro primeros submarinos del total de doce que se esperaba llegasen en las próximas fechas. Si todo marchaba conforme a las previsiones los submarinos empezarían a operar tan pronto sus tripulaciones hubiesen descansado unos días tras el largo viaje que habían realizado, lo que se esperaba fuese a más tardar a principios de junio.
Para el almirante Chacon, comandante de la flota, era evidente que no pasaría mucho tiempo antes de ver las primeras reacciones niponas. Podían haberlos tomado por sorpresa, pero esta no duraría mucho más, y la única duda era la forma en la que reaccionarían. En su opinión podía ser mediante un ataque naval del grueso de su flota sobre la bahía o enviando sus propios submarinos para tratar de debilitar su flota. Precisamente por ello era tan importante la detección temprana de la flota enemiga, bien por medio de las aeronaves desplegadas por sus fuerzas, bien por medio de los medios de inteligencia repartidos por las islas de la zona que a partir de ese momento habían quedado afectos a su mando naval.
Para principios de mayo los embajadores del Reino Unido negociaban ya a tres bandas en un intento de evitar la derrota total, pues sabían que el fin estaba cercano y únicamente un milagro podía salvar al imperio. Tan solo podían aspirar a controlar los daños si lograban un tratado de paz ventajoso, a pesar de las seguras perdidas territoriales que sin duda les serían impuestas por las potencias vencedoras. Fue entonces cuando tuvieron lugar los dos últimos golpes de gracia, uno en el Atlántico y el segundo en Asia. El día 8 de mayo fuerzas hispano-germanas atacaban en el caribe, y solo cuatro días después un grupo de batalla español se presentaba ante Borneo, desembarcando en Labuan y el protectorado de Brunei.
Las autoridades británicas en Brunei contemplaron la llegada de la flota española con cierta resignación. Las fuerzas de invasión eran evidentemente demasiado poderosas para resistirse a ellas, y toda su esperanza residía en un improbable ataque del reticente aliado japonés sobre sus enemigos. Protegidos por siete acorazados, dos cruceros de batalla, seis acorazados preDreadnought, y una veintena de destructores, la fuerza de desembarco enemiga se desplego, lanzando medio centenar de barcazas hacia las costas malayas, y otras 18 hacia las islas que cerraban la bahía al noreste.
No mucho después de mediodía las barcazas tocaron tierra dando paso al desembarco de la infantería, que avanzó acompañada por una docena de carros de origen francés, Renault FT-17. Por fortuna no encontraron resistencia de consideración, y las escasas tropas británicas se retiraron al interior de la isla tras algunas escaramuzas. Tan solo en Labuan las fuerzas de la estación de carboneo que la Royal Navy mantenía en la isla, combatieron con saña, prendiendo fuego a las reservas de carbón antes de capitular a última hora del día tras una dura resistencia. Por fortuna la pérdida del carbón no revestía especial gravedad pues la escuadra llevaba suficientes carboneros.
A lo largo de todo el día las barcazas siguieron trasladando tropas desde los transportes hacia la costa, permitiendo el desembarco de las primeras tres brigadas transportadas por las fuerzas de invasión. Estas eran las brigadas de extranjeros Gran Capitán, Duque de Alba, y Don Juan de Austria, tropas que bastaron para controlar Labuan y el resto de islas de la entrada de la bahía de Brunei, y el puerto de Muara, en donde al día siguiente desembarcaría la cuarta brigada de extranjeros, la Alejandro Farnesio. Con ello las fuerzas españolas empezaban a contraatacar, siendo curiosamente muchos de soldados no españoles, principalmente checos, serbios, y rusos.
El día 13 el Tte general Borja pudo entrevistarse con el sultán Muhammad Jamalul Alam II, quien no tuvo más remedio que denunciar el protectorado británico declarado por su padre en 1888 y aceptar el español. A partir de entonces Borja se establecería en Labuan, dejando al Sultán el control de la capital, Bandar Seri Begawan, donde permanecería el cte. Aquino, un filipino que llevaba 21 años en el ejército.
A partir del día siguiente, y mientras el ejército creaba un perímetro de defensa alrededor de la bahía, la flota reanudo las operaciones. Los grandes buques de la Armada se refugiaron en la bahía, incluyendo los portaaeronaves Glorioso, Dédalo, e Ícaro, el primero portaaviones y el resto portahidroaviones, tendiéndose redes antitorpedos a su alrededor. Mientras tanto los mercantes Francoli, Begoña nº 3, y 4, y Bakio, que habían sido reconvertidos en minadores, sembraban de minas la entrada de la bahía, dejando pasos bien definidos y protegidos por los cañones de los pre Dreadnought y por baterías de artillería pesada que se instalaron en diversos puntos de las islas de Labuan, Kuraman, Daat, así como en Muara y Menumbok. Con ello la entrada de la bahía quedaba bien protegida, proporcionando un puerto seguro a la flota de operaciones.
Paralelamente otros mercantes empezaron a descargar las cargas que transportaban y almacenarlas en los almacenes de Muara. También los ingenieros se pusieron manos a la obra, y empezaron a construir grandes almacenes con los que complementar la capacidad de almacenamiento del puerto. Durante días los trabajos de fortificación en tierra, y de construcción de infraestructuras ocuparon a cientos de soldados, que recibieron la ayuda de miles de civiles contratados, pues pronto corrió la voz que los invasores pagaban en plata y los nativos acudieron en masa en busca de trabajo.
Una semana después del desembarco, los primeros 20.000 soldados españoles habían tomado tierra. Entonces se pudo empezar la descarga a gran escala de los suministros que llevaban los mercantes. Esos mismos mercantes tan pronto completaban la descarga partían rumbo a España, escoltados por los cruceros auxiliares que habían transportado las tropas para la invasión. Alimentos, municiones, repuestos, suministros médicos, y por supuesto el imprescindible carbón empezaron a acumularse en los almacenes de la isla. Incluso serían desembarcados tres dirigibles y doce hidroaviones adicionales llevados por el mercante Joaquín Mumbru, iniciándose poco después una serie de patrullas aéreas que complementaron las patrullas realizadas por los destructores.
En el puerto de Labuan atracaría el vapor Noviembre, perteneciente a la Compañía Bilbaina de Navegación, ahora reconvertido en un nodriza de submarinos. Pronto llegarían los submarinos clase E Delfín, Jaquetón, Morsa, y Marsopa, los cuatro primeros submarinos del total de doce que se esperaba llegasen en las próximas fechas. Si todo marchaba conforme a las previsiones los submarinos empezarían a operar tan pronto sus tripulaciones hubiesen descansado unos días tras el largo viaje que habían realizado, lo que se esperaba fuese a más tardar a principios de junio.
Para el almirante Chacon, comandante de la flota, era evidente que no pasaría mucho tiempo antes de ver las primeras reacciones niponas. Podían haberlos tomado por sorpresa, pero esta no duraría mucho más, y la única duda era la forma en la que reaccionarían. En su opinión podía ser mediante un ataque naval del grueso de su flota sobre la bahía o enviando sus propios submarinos para tratar de debilitar su flota. Precisamente por ello era tan importante la detección temprana de la flota enemiga, bien por medio de las aeronaves desplegadas por sus fuerzas, bien por medio de los medios de inteligencia repartidos por las islas de la zona que a partir de ese momento habían quedado afectos a su mando naval.
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.
- reytuerto
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Ucronia España vs EE.UU., Duelo de aguilas
Lima, Hotel Maury.
En los salon-bar del centrico Hotel Maury, antes del almuerzo, mientras el atildado bartender se encargaba de preparar los pisco-sour que habian hecho conocido al hotel, se concretaba la entrevista entre Ramiro de Maeztu y Abraham Valdelomar.
- Sr. Valdelomar, mucho gusto.
- Mucho gusto, Sr. Maeztu. Encantado de conocerlo. He leído algunas obras suyas y he de confesar que me ha gustado “Hacia otra España”.
- Eso era necesario, después de una guerra tan difícil como la del 98.
- Difícil, pero victoriosa. En el Perú, González Prada fue casi un profeta en el desierto después de la catastrófica derrota de 1879.
- Tuve oportunidad de leer sus cuentos, Sr. Valdelomar. La narración de Pisco es casi autobiográfica.
- Es que es autobiográfica, Sr. Maeztu! Pase mi infancia en ese puerto.
- Influencias de Azorin, tal vez?
- Algunas. No he de negarlo – dijo Valdelomar esbozando una sonrisa cómplice - Pero sobre todo, alejarme de ese exotismo bobo del modernismo que lo invadía todo. Había que hacerlo real, cercano.
- Y sus cuentos chinos? No tienen un resabio del exotismo del que quiere alejarse? Sr. Valdelomar, este pisco sour (1) es realmente bueno! –Dijo Maetzu luego de paladear su cocktail.
- Oh, no Sr. Maeztu! Tengo muy cercano el dolor, la grandeza, la cólera y frustración, la crueldad posible y las esperanzas de los chinos. – Y probando su preparado añadió – Si, es un trago muy bueno.
- Como es eso posible, Sr. Valdelomar? Ud. es occidental.
- He hecho amistades profundas con algunos miembros de esta colonia.
- Tan profundas como para poder describir los sentimientos profundos de un pueblo que conoce indirectamente?
- Es que en parte, los sentimientos del pueblo chino sentimientos son semejantes al sentir de algunos peruanos.
- No le comprendo, Sr. Valdelomar.
- No es fácil de explicar. Fíjese, la China que nosotros o nuestros padres conocieron no es la China de siempre. La China de siempre fue el imperio central, el eje de todo un continente, y Asia giraba a su alrededor. Por siglos, China ha estado mas adelantada que Occidente, en ciencia y tecnología, pero también en finanzas e ingeniería. Solamente con el inmovilismo de los Manchues, la economía y armas de Inglaterra y Francia pudieron tener su oportunidad: Una guerra del Opio contemporánea a la Guerra de los 30 años hubiese culminado en una aplastante derrota occidental.
- Si – dijo Maeztu asintiendo con la cabeza – es posible.
- Me atrevería a decir que incluso en la Guerra de Sucesión Española, ni Malborough ni el Príncipe Eugenio hubiesen tenido oportunidad. Además las arcas chinas rebosaban de oro.
- Y es bien sabido que las guerras las ganan el que tiene el ultimo ducado – Maetzu se atrevió a esbozar una discreta sonrisa.
- Así es, así es. En cambio, en el Perú, desde que los Borbones descuartizaron el Virreinato, todo ha sido un continuo languidecer. – Y con una expresión de pesadumbre continuo- Ya no somos el axis mundi de el subcontinente y nos cuesta asumir una posición tan secundaria desde nuestra derrota frente a Chile.
- Entiendo su postura. Dios quiera que las cosas cambien.
- Cambiaran cuando los peruanos cambiemos.
- Y China, China cambiara?
- Si, ciertamente. Conoce los escritos del Dr. Sun.
- Sun Yat Sen?
- Si, precisamente.
- No tan profundamente como quisiera.
- Fíjese, los tres principios básicos del Dr. Sun para su pais son tan aplicables en China, como en Perú. Y si no fuese por las reformas del General Weyler, que han sido muy aplaudidas por la intelectualidad peruana, también en España. Estos principios son muy sencillos: Nacionalismo cívico, democracia y sobre todo, bienestar social.
- Pero eso, en un país enorme como China es muy difícil de implementar.
- Si, sobre todo la democracia. El Dr. Sun cree que no es un trabajo de años, sino de generaciones.
- Seria interesante poder conocerlo de boca de un chino.
- Eso lo puedo arreglar.
- Hay discípulos de Sun Yat Sen en Lima?
- Hay incluso amigos suyos en esta ciudad. El Dr. Edgardo Choy es uno de ellos.
- Cree que lo pueda conocer.?
- El Dr. Choy tiene una agenda recargada, pues aparte de su consulta, es un miembro prominente de la colonia china.
- Que especialidad tiene?
- Estudió en Honk Kong medicina occidental y china tradicional. Se que en su consulta pone una agujitas que son milagrosas. Curan desde un dolor de muelas, hasta dolores de espalda.
- Estaré esperando su respuesta con ansiedad, Sr. Valdelomar…
(1) Pisco Sour: 3 partes de pisco quebranta puro.
2 partes de jugo de limon (en España, lima).
1 parte de jarabe de goma.
1 clara de huevo.
1 taza de hielo.
1 gota de amargo de angostura.
Batir todo, excepto la gota de angostura, en una coctelera por no mas de 10 segundos. Colar y servir con una o dos gotas de Amargo de Angostura.
PS: Si desea malograr la preparación, utilice pisco chileno .
En los salon-bar del centrico Hotel Maury, antes del almuerzo, mientras el atildado bartender se encargaba de preparar los pisco-sour que habian hecho conocido al hotel, se concretaba la entrevista entre Ramiro de Maeztu y Abraham Valdelomar.
- Sr. Valdelomar, mucho gusto.
- Mucho gusto, Sr. Maeztu. Encantado de conocerlo. He leído algunas obras suyas y he de confesar que me ha gustado “Hacia otra España”.
- Eso era necesario, después de una guerra tan difícil como la del 98.
- Difícil, pero victoriosa. En el Perú, González Prada fue casi un profeta en el desierto después de la catastrófica derrota de 1879.
- Tuve oportunidad de leer sus cuentos, Sr. Valdelomar. La narración de Pisco es casi autobiográfica.
- Es que es autobiográfica, Sr. Maeztu! Pase mi infancia en ese puerto.
- Influencias de Azorin, tal vez?
- Algunas. No he de negarlo – dijo Valdelomar esbozando una sonrisa cómplice - Pero sobre todo, alejarme de ese exotismo bobo del modernismo que lo invadía todo. Había que hacerlo real, cercano.
- Y sus cuentos chinos? No tienen un resabio del exotismo del que quiere alejarse? Sr. Valdelomar, este pisco sour (1) es realmente bueno! –Dijo Maetzu luego de paladear su cocktail.
- Oh, no Sr. Maeztu! Tengo muy cercano el dolor, la grandeza, la cólera y frustración, la crueldad posible y las esperanzas de los chinos. – Y probando su preparado añadió – Si, es un trago muy bueno.
- Como es eso posible, Sr. Valdelomar? Ud. es occidental.
- He hecho amistades profundas con algunos miembros de esta colonia.
- Tan profundas como para poder describir los sentimientos profundos de un pueblo que conoce indirectamente?
- Es que en parte, los sentimientos del pueblo chino sentimientos son semejantes al sentir de algunos peruanos.
- No le comprendo, Sr. Valdelomar.
- No es fácil de explicar. Fíjese, la China que nosotros o nuestros padres conocieron no es la China de siempre. La China de siempre fue el imperio central, el eje de todo un continente, y Asia giraba a su alrededor. Por siglos, China ha estado mas adelantada que Occidente, en ciencia y tecnología, pero también en finanzas e ingeniería. Solamente con el inmovilismo de los Manchues, la economía y armas de Inglaterra y Francia pudieron tener su oportunidad: Una guerra del Opio contemporánea a la Guerra de los 30 años hubiese culminado en una aplastante derrota occidental.
- Si – dijo Maeztu asintiendo con la cabeza – es posible.
- Me atrevería a decir que incluso en la Guerra de Sucesión Española, ni Malborough ni el Príncipe Eugenio hubiesen tenido oportunidad. Además las arcas chinas rebosaban de oro.
- Y es bien sabido que las guerras las ganan el que tiene el ultimo ducado – Maetzu se atrevió a esbozar una discreta sonrisa.
- Así es, así es. En cambio, en el Perú, desde que los Borbones descuartizaron el Virreinato, todo ha sido un continuo languidecer. – Y con una expresión de pesadumbre continuo- Ya no somos el axis mundi de el subcontinente y nos cuesta asumir una posición tan secundaria desde nuestra derrota frente a Chile.
- Entiendo su postura. Dios quiera que las cosas cambien.
- Cambiaran cuando los peruanos cambiemos.
- Y China, China cambiara?
- Si, ciertamente. Conoce los escritos del Dr. Sun.
- Sun Yat Sen?
- Si, precisamente.
- No tan profundamente como quisiera.
- Fíjese, los tres principios básicos del Dr. Sun para su pais son tan aplicables en China, como en Perú. Y si no fuese por las reformas del General Weyler, que han sido muy aplaudidas por la intelectualidad peruana, también en España. Estos principios son muy sencillos: Nacionalismo cívico, democracia y sobre todo, bienestar social.
- Pero eso, en un país enorme como China es muy difícil de implementar.
- Si, sobre todo la democracia. El Dr. Sun cree que no es un trabajo de años, sino de generaciones.
- Seria interesante poder conocerlo de boca de un chino.
- Eso lo puedo arreglar.
- Hay discípulos de Sun Yat Sen en Lima?
- Hay incluso amigos suyos en esta ciudad. El Dr. Edgardo Choy es uno de ellos.
- Cree que lo pueda conocer.?
- El Dr. Choy tiene una agenda recargada, pues aparte de su consulta, es un miembro prominente de la colonia china.
- Que especialidad tiene?
- Estudió en Honk Kong medicina occidental y china tradicional. Se que en su consulta pone una agujitas que son milagrosas. Curan desde un dolor de muelas, hasta dolores de espalda.
- Estaré esperando su respuesta con ansiedad, Sr. Valdelomar…
(1) Pisco Sour: 3 partes de pisco quebranta puro.
2 partes de jugo de limon (en España, lima).
1 parte de jarabe de goma.
1 clara de huevo.
1 taza de hielo.
1 gota de amargo de angostura.
Batir todo, excepto la gota de angostura, en una coctelera por no mas de 10 segundos. Colar y servir con una o dos gotas de Amargo de Angostura.
PS: Si desea malograr la preparación, utilice pisco chileno .
La verdad nos hara libres
- urquhart
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CONGRESO DE LOS DIPUTADOS, MADRID, ABRIL DE 1919
CONGRESO DE LOS DIPUTADOS, MADRID, ABRIL DE 1919
Tras arduas negociaciones con sindicatos y las diversas patronales, el Ministro de Trabajo, Julián Besteiro, presentaba una serie de leyes al Congreso, con la intención última de reestablecer la paz social, pues el ejemplo de los operarios del textil de Cataluña se había extendido por todo el país a medida que los hombres desmovilizados volvían a sus hogares, buscando el empleo que tuvieron antes del estallido de la contienda.
Entre otras medidas, Besteiro impulsaba la jornada de 8 horas (1), con un máximo de 48 horas semanales, frente a las habituales 11 hras diarias. Esta reducción de horas por operario, obligaría a los patronos a compensarlas evitando despidos, al menos un 20% de éstos. Destacaba también la prohibición de que menores de 14 años, con pagas absolutamente inferiores a las de un adulto, continuaran trabajando, restituyendo a sus padres los puesto de trabajo que ocuparon al ser los segundos movilizados. A cambio, el Estado ampliaría la Educación obligatoria, y se haría cargo del gasto del almuerzo de los estudiantes.
Para mejora de la viabilidad empresarial, ofrecía grandes incentivos fiscales pactados con Alba Bonifaz, Ministro de Hacienda, para aquellas empresas que decidieran fusionarse, reduciendo los costos administrativos, y permitiendo un ahorro que de otra manera hubiran significado despidos.
Se constituía el Instituto Nacional de Colonización, con vistas a poner en explotación nuevos cultivos en zonas deforestadas por las exigencias de la Guerra, y en zonas que anteriormente se consideraban no aptas, introduciendo cultivos novedosos. Especial atención se prestaría en Almería, donde los colonos italianos habían empezado a obtener buenos resultados en cultivos subtropicales. Se ampliarían las zonas de cultivo del arroz en las zonas ya clásicas, mediante técnicas de regadio modernas.
Al mismo tiempo, se ampliaría las dotaciones presupuestarias para el Instituto de Zonas Devastadas de Alcalá Zamora, reconvertido en Instituto Nacional de la Vivienda, con la misión principal de acabar con el barraquismo y chabolismo.
la disponibilidad de petróleo, pero la falta de infraestructura industrial, predisponía aprovechar la neonata CAMPSA, como empresa no solo importadora y distribuidora, si no también como refinadora. Mediante emprésitos estatles, CAMPSA elaboraría una serie de terminales petrolíferas y 3 refinerías en Europa, 1 en Cuba y una última en Filipinas con asistencia Austro Húngara, aprovechando la experiencia de la gran refinería de Pola. Los artesanales avances de las concesiones en Venezuela en relación al transporte de petroleo por vía de oleoductos, serían trasladados a una red en España. Se calculaba que la construcción de estas instalaciones requerirían de unos 100 mil operarios en su primera fase. Por vía de urgencia, el Gobierno acelaría los trámites para iniciar los tarbajos en Cartagena, puerto de destino actual del petróleo azerbayano.
De los subproductos del petroleo, destacaba la brea y el alquitrán. Con estos materiales, se iniciaría un programa de alquitranado de las vías españolas, muchas de ellas de firme compactado, y algunas de pavés. La Contienda había demostrado la prevalencia de los medios autolocomotores como sustitutos de los de tiro animal. Era de preveer un crecimiento exponencial de transporte de personas y mercancías por estos medios. A medioda que aumentara la disponibilidad financiera, se cerarían nuevas vías que fueron calificadas de Gran Capacidad.
Con posterioridad se abordaría la necesidad de contar con un anchio de vía de ferrocarril compatible con las naciones vecinas, facilitando el intercambio comercial.
Aun así, los cálculos del Ministro Besteiro dejaban entrever que no todos los desmovilziados y despedidos lograrían encontrar trabajo en España. Algunos planes, considerados arriesgados, contemplaban la posibilidad de trasladar población a Sahara, Tarfaya e Ifni, pero antes debían concretarse los planes expuestos por el Teniente General Bens, Alto Comisario en estas posesiones de convertirlas en parte del Reino y no en posesiones del Reino. Ifni ya disfrutaba de ser considerada parte del Reino, en agradecimiento a la defensa del enclave por parte de las tropas locales, pero la ocupación francesa hasta fines de 1918 había hecho que este aspecto fuera más formal que práctico. Desde luego la reconstrucción de aquellas tierras necesitaría de mano de obra especializada, pero el Gobierno no deseaba alterar el equilibrio demográfico, todo y la probafda lealtad de saharauis y tarfayitas con España. La ampliación de la colonia de Guinea, para la que también existían programas de naturalización, permitían considerar el establecimiento de colonos en la orilla meridional del Río Muni, una vez Alemania había hecho cesión de este territorio; y crear una industria pesquera en el estuario del Muni y las islas menores.
Escasa oposición podían ofrecer Romanonistas y Mauristas, con la serie de victorias españolas repartidas por todo el Orbe. La Guerra entre las potencias Occidentales estaba a punto de finalizar, y las bajas, escasas excepto en Cuba, las ponían los extranjeros reclutados por Weyler... hasta antiguos prisioneros franceses e italianos se habían enrolado en los Tercios, así como rusos blancos, palestinos, infinidad de rifeños, antiguas tropas coloniales francesas... incluso libios, argelinos y sorprendentemente coptos egipcios, hartos de la administración turca de su país. Ni los sectores más conservadores de De la Cierva o de la Comunión Tradicionalista pudieron que su voz se escuchara, cuando el nuevo Nuncio de la Santa Sede declaró que aquellas medidas entroncaban con la doctrina social de la Iglesia recogida en Rerum Novarum. La Paz Interior volvía a alcanzarse, pero las medidas debían ponerse en marcha de forma inmediata.
(1) http://www.abc.es/20091008/economia-eco ... 91008.html
Tras arduas negociaciones con sindicatos y las diversas patronales, el Ministro de Trabajo, Julián Besteiro, presentaba una serie de leyes al Congreso, con la intención última de reestablecer la paz social, pues el ejemplo de los operarios del textil de Cataluña se había extendido por todo el país a medida que los hombres desmovilizados volvían a sus hogares, buscando el empleo que tuvieron antes del estallido de la contienda.
Entre otras medidas, Besteiro impulsaba la jornada de 8 horas (1), con un máximo de 48 horas semanales, frente a las habituales 11 hras diarias. Esta reducción de horas por operario, obligaría a los patronos a compensarlas evitando despidos, al menos un 20% de éstos. Destacaba también la prohibición de que menores de 14 años, con pagas absolutamente inferiores a las de un adulto, continuaran trabajando, restituyendo a sus padres los puesto de trabajo que ocuparon al ser los segundos movilizados. A cambio, el Estado ampliaría la Educación obligatoria, y se haría cargo del gasto del almuerzo de los estudiantes.
Para mejora de la viabilidad empresarial, ofrecía grandes incentivos fiscales pactados con Alba Bonifaz, Ministro de Hacienda, para aquellas empresas que decidieran fusionarse, reduciendo los costos administrativos, y permitiendo un ahorro que de otra manera hubiran significado despidos.
Se constituía el Instituto Nacional de Colonización, con vistas a poner en explotación nuevos cultivos en zonas deforestadas por las exigencias de la Guerra, y en zonas que anteriormente se consideraban no aptas, introduciendo cultivos novedosos. Especial atención se prestaría en Almería, donde los colonos italianos habían empezado a obtener buenos resultados en cultivos subtropicales. Se ampliarían las zonas de cultivo del arroz en las zonas ya clásicas, mediante técnicas de regadio modernas.
Al mismo tiempo, se ampliaría las dotaciones presupuestarias para el Instituto de Zonas Devastadas de Alcalá Zamora, reconvertido en Instituto Nacional de la Vivienda, con la misión principal de acabar con el barraquismo y chabolismo.
la disponibilidad de petróleo, pero la falta de infraestructura industrial, predisponía aprovechar la neonata CAMPSA, como empresa no solo importadora y distribuidora, si no también como refinadora. Mediante emprésitos estatles, CAMPSA elaboraría una serie de terminales petrolíferas y 3 refinerías en Europa, 1 en Cuba y una última en Filipinas con asistencia Austro Húngara, aprovechando la experiencia de la gran refinería de Pola. Los artesanales avances de las concesiones en Venezuela en relación al transporte de petroleo por vía de oleoductos, serían trasladados a una red en España. Se calculaba que la construcción de estas instalaciones requerirían de unos 100 mil operarios en su primera fase. Por vía de urgencia, el Gobierno acelaría los trámites para iniciar los tarbajos en Cartagena, puerto de destino actual del petróleo azerbayano.
De los subproductos del petroleo, destacaba la brea y el alquitrán. Con estos materiales, se iniciaría un programa de alquitranado de las vías españolas, muchas de ellas de firme compactado, y algunas de pavés. La Contienda había demostrado la prevalencia de los medios autolocomotores como sustitutos de los de tiro animal. Era de preveer un crecimiento exponencial de transporte de personas y mercancías por estos medios. A medioda que aumentara la disponibilidad financiera, se cerarían nuevas vías que fueron calificadas de Gran Capacidad.
Con posterioridad se abordaría la necesidad de contar con un anchio de vía de ferrocarril compatible con las naciones vecinas, facilitando el intercambio comercial.
Aun así, los cálculos del Ministro Besteiro dejaban entrever que no todos los desmovilziados y despedidos lograrían encontrar trabajo en España. Algunos planes, considerados arriesgados, contemplaban la posibilidad de trasladar población a Sahara, Tarfaya e Ifni, pero antes debían concretarse los planes expuestos por el Teniente General Bens, Alto Comisario en estas posesiones de convertirlas en parte del Reino y no en posesiones del Reino. Ifni ya disfrutaba de ser considerada parte del Reino, en agradecimiento a la defensa del enclave por parte de las tropas locales, pero la ocupación francesa hasta fines de 1918 había hecho que este aspecto fuera más formal que práctico. Desde luego la reconstrucción de aquellas tierras necesitaría de mano de obra especializada, pero el Gobierno no deseaba alterar el equilibrio demográfico, todo y la probafda lealtad de saharauis y tarfayitas con España. La ampliación de la colonia de Guinea, para la que también existían programas de naturalización, permitían considerar el establecimiento de colonos en la orilla meridional del Río Muni, una vez Alemania había hecho cesión de este territorio; y crear una industria pesquera en el estuario del Muni y las islas menores.
Escasa oposición podían ofrecer Romanonistas y Mauristas, con la serie de victorias españolas repartidas por todo el Orbe. La Guerra entre las potencias Occidentales estaba a punto de finalizar, y las bajas, escasas excepto en Cuba, las ponían los extranjeros reclutados por Weyler... hasta antiguos prisioneros franceses e italianos se habían enrolado en los Tercios, así como rusos blancos, palestinos, infinidad de rifeños, antiguas tropas coloniales francesas... incluso libios, argelinos y sorprendentemente coptos egipcios, hartos de la administración turca de su país. Ni los sectores más conservadores de De la Cierva o de la Comunión Tradicionalista pudieron que su voz se escuchara, cuando el nuevo Nuncio de la Santa Sede declaró que aquellas medidas entroncaban con la doctrina social de la Iglesia recogida en Rerum Novarum. La Paz Interior volvía a alcanzarse, pero las medidas debían ponerse en marcha de forma inmediata.
(1) http://www.abc.es/20091008/economia-eco ... 91008.html
Tempus Fugit
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Ucronia España vs EE.UU., Duelo de aguilas
Gaspacher escribió:Borneo, desembarcando en Labuan y el protectorado de Brunei
¿Y que pasa con los Rajas blancos de Sarawak?, cuidado con sus rangers expertos en la lucha en la jungla.
Gaspacher escribió:mayo
En la LTR 13 de abril de 1919, Amritsar, el brigadier general Reginald Dyer ordena abrir fuego y en diez minutos puso fin a cualquier esperanza de conservar la India a largo plazo. Estallando grandes revueltas y proetestas.
En Afganistán Amānullāh Khān sube al trono y en mayo comienza la 3ª guerra afgana.
La situación en la India es insostenible con la escuadra de los IC en el sur y los afganos atacando desde el oeste no saben a donde enviar las tropas, tropas indias de las que no se pueden fiar; la población blanca teme una revuelta cipaya o de la población contra ellos.
Para Gran Bretaña la amenaza de perder la Joya de la Corona, el símbolo y sentido de todo Imperio Británico.
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Ucronia España vs EE.UU., Duelo de aguilas
Lima, Plazuela de la Inquisición.
Tal como habían acordado días antes, Ramiro de Maeztu y Abraham Valdelomar se encontraron a la salida del Senado para dirigirse al cercano consultorio del Dr. Choy en el Jiron Paruro. Caminaron las dos cuadras escasas hasta un despacho con una sala de espera grande y mobiliario espartano y limpio. Edgardo Choy salió en bata blanca a recibirlos, luego de las presentaciones del caso, el cuentista, se retiró discretamente, dejando solos a nuestros personajes.
- Mucho gusto Sr. Maeztu, el Sr. Valdelomar me ha hablado de Ud. Me refiere interés en el proceso revolucionario chino.
- El gusto es mío, Dr. Choy. Si, el Sr. Valdelomar está en lo correcto, aunque en España todo lo referente a China llega con la distorsión británica y francesa, sabemos de la caída del Imperio y la proclamación de la Republica.
- Entonces Sr. Maeztu, aún no se han enterado de todo. Efectivamente, la perniciosa dinastía Qing fue depuesta luego de la revolucion del Doble Diez, el Dr. Sun proclamó la Republica, pero lo hizo desde Nankín, la capital tradicional del Sur.
- Y Pekín está en el norte.
- Y no era controlado por las tropas del Dr. Sun, sino por las de un jefe local, Yuan Che Kai. A los pocos años, este individuo, lejos de seguir impulsando las reformas, se proclamó emperador el mismo.
- Eso debió significar la guerra.
- No solo la guerra, sino también la fragmentación del país. Hoy China esta tan dividida como antes del Emperador Chin.
- Oh, es terrible! – dijo Maeztu, sin poder oclutar su abatimiento, pues pensaba tener un conducto para contactar con el presidente de China, Sun Yat Sen – eso deja a China en una posición muy débil.
- Asi es, tan débil que los japoneses han presentado ciertas demandas que prácticamente convierten a varias provincias del norte de China en un protectorado, ¡y el miserable de Yuan Che Kai las ha aceptado!
- Pero teniendo múltiples cabezas, no hay forma de enfrentar no solo a Japón, también a Inglaterra que mantiene sus cañoneras en todos los ríos chinos.
- Sí, es cierto – y mirando inquisitivamente a través de sus lentes redondos con montura de oro, Choy le dijo – Ud. Sr. Maeztu, no es solo un intelectual. Al menos, no en el Perú. Su nación está en guerra contra Inglaterra y hasta donde se sabe, su confrontación está siendo exitosa. También los japoneses les han invadido una colonia…
- No es una colonia, Dr. Choy, es tan España como Madrid o Barcelona.
- Disculpe Ud! Decía que los japoneses están en las Filipinas, y los puertos nipones están más cerca que los suyos. Que quiere de mí, Sr. Maeztu?
Ramiro de Maeztu no esperaba un cuestionamiento tan directo, menos de un chino, de quienes sabía que eran más dados a darle muchas vueltas a un asunto antes de plantearlas, sostuvo la mirada y le respondió con toda la honestidad que pudo.
- Dr. Choy, necesito su ayuda para llegar a contactar a los comerciantes chinos del Perú. Tiene razón, España no puede librar una guerra desde aguas atlánticas contra el Japón. Necesitamos erosionar sus líneas de comunicación, distraer sus fuerzas y evitar que estén concentradas.
- España quiere abrir un frente en China.
- No, no Dr. Choy, no tenemos ni la voluntad, ni los medios para hacerlo. Recuerde que no intervinimos con las demás potencias europeas – Maeztu pensó rápidamente que termino usar - para atacar a las fuerzas chinas que cercaban las Legaciones occidentales.
- Si, fue la alianza de Europa y Japón contra China. Si no desean enfrentarse en China y por una tajada de China contra el Japón, que desea?
- De momento, ayuda para nuestros agentes. Contactos con el gobierno chino. Y sobre todo, facilidad para mover dinero sin que se entere Londres, Tokio o Washington.
- Y la colonia china del Perú es su mejor baza.
- No, Dr. Choy. Es mi única baza.
Ante esa inesperada muestra de sinceridad, la tensión de Choy se relajó un poco. Esbozó una ligera sonrisa y le dijo.
- Sr. Maeztu, estoy en la directiva de la Sociedad Nam Yoy, si me gustasen los juegos de envite, podríamos ir al Club Tayouk, pero evito esos lugares. A la brevedad lo contactaré con las persona indicadas.
- Demás está decir, que urge la máxima discreción, Dr. Choy.
- Los chinos somos discretos por naturaleza, Sr. Maeztu. Le sugiero más bien que tenga cuidado con quien habla y donde habla, pues las paredes tienen orejas grandes, y se dirigen con rapidez a la Embajada del Japón. Cuide sus pasos.
Tal como habían acordado días antes, Ramiro de Maeztu y Abraham Valdelomar se encontraron a la salida del Senado para dirigirse al cercano consultorio del Dr. Choy en el Jiron Paruro. Caminaron las dos cuadras escasas hasta un despacho con una sala de espera grande y mobiliario espartano y limpio. Edgardo Choy salió en bata blanca a recibirlos, luego de las presentaciones del caso, el cuentista, se retiró discretamente, dejando solos a nuestros personajes.
- Mucho gusto Sr. Maeztu, el Sr. Valdelomar me ha hablado de Ud. Me refiere interés en el proceso revolucionario chino.
- El gusto es mío, Dr. Choy. Si, el Sr. Valdelomar está en lo correcto, aunque en España todo lo referente a China llega con la distorsión británica y francesa, sabemos de la caída del Imperio y la proclamación de la Republica.
- Entonces Sr. Maeztu, aún no se han enterado de todo. Efectivamente, la perniciosa dinastía Qing fue depuesta luego de la revolucion del Doble Diez, el Dr. Sun proclamó la Republica, pero lo hizo desde Nankín, la capital tradicional del Sur.
- Y Pekín está en el norte.
- Y no era controlado por las tropas del Dr. Sun, sino por las de un jefe local, Yuan Che Kai. A los pocos años, este individuo, lejos de seguir impulsando las reformas, se proclamó emperador el mismo.
- Eso debió significar la guerra.
- No solo la guerra, sino también la fragmentación del país. Hoy China esta tan dividida como antes del Emperador Chin.
- Oh, es terrible! – dijo Maeztu, sin poder oclutar su abatimiento, pues pensaba tener un conducto para contactar con el presidente de China, Sun Yat Sen – eso deja a China en una posición muy débil.
- Asi es, tan débil que los japoneses han presentado ciertas demandas que prácticamente convierten a varias provincias del norte de China en un protectorado, ¡y el miserable de Yuan Che Kai las ha aceptado!
- Pero teniendo múltiples cabezas, no hay forma de enfrentar no solo a Japón, también a Inglaterra que mantiene sus cañoneras en todos los ríos chinos.
- Sí, es cierto – y mirando inquisitivamente a través de sus lentes redondos con montura de oro, Choy le dijo – Ud. Sr. Maeztu, no es solo un intelectual. Al menos, no en el Perú. Su nación está en guerra contra Inglaterra y hasta donde se sabe, su confrontación está siendo exitosa. También los japoneses les han invadido una colonia…
- No es una colonia, Dr. Choy, es tan España como Madrid o Barcelona.
- Disculpe Ud! Decía que los japoneses están en las Filipinas, y los puertos nipones están más cerca que los suyos. Que quiere de mí, Sr. Maeztu?
Ramiro de Maeztu no esperaba un cuestionamiento tan directo, menos de un chino, de quienes sabía que eran más dados a darle muchas vueltas a un asunto antes de plantearlas, sostuvo la mirada y le respondió con toda la honestidad que pudo.
- Dr. Choy, necesito su ayuda para llegar a contactar a los comerciantes chinos del Perú. Tiene razón, España no puede librar una guerra desde aguas atlánticas contra el Japón. Necesitamos erosionar sus líneas de comunicación, distraer sus fuerzas y evitar que estén concentradas.
- España quiere abrir un frente en China.
- No, no Dr. Choy, no tenemos ni la voluntad, ni los medios para hacerlo. Recuerde que no intervinimos con las demás potencias europeas – Maeztu pensó rápidamente que termino usar - para atacar a las fuerzas chinas que cercaban las Legaciones occidentales.
- Si, fue la alianza de Europa y Japón contra China. Si no desean enfrentarse en China y por una tajada de China contra el Japón, que desea?
- De momento, ayuda para nuestros agentes. Contactos con el gobierno chino. Y sobre todo, facilidad para mover dinero sin que se entere Londres, Tokio o Washington.
- Y la colonia china del Perú es su mejor baza.
- No, Dr. Choy. Es mi única baza.
Ante esa inesperada muestra de sinceridad, la tensión de Choy se relajó un poco. Esbozó una ligera sonrisa y le dijo.
- Sr. Maeztu, estoy en la directiva de la Sociedad Nam Yoy, si me gustasen los juegos de envite, podríamos ir al Club Tayouk, pero evito esos lugares. A la brevedad lo contactaré con las persona indicadas.
- Demás está decir, que urge la máxima discreción, Dr. Choy.
- Los chinos somos discretos por naturaleza, Sr. Maeztu. Le sugiero más bien que tenga cuidado con quien habla y donde habla, pues las paredes tienen orejas grandes, y se dirigen con rapidez a la Embajada del Japón. Cuide sus pasos.
La verdad nos hara libres
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Ucronia España vs EE.UU., Duelo de aguilas
Hola a todos
Una pregunta: No se acordo que esta ucronia Japon no exigio las 21 demandas a China ya que se centraria en las Filipinas?
Un saludo
Una pregunta: No se acordo que esta ucronia Japon no exigio las 21 demandas a China ya que se centraria en las Filipinas?
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