Ucronia España vs EE.UU., Duelo de aguilas

[reytuerto]

Islas Dongsha, 20°43′N 116°42′E, 08 Marzo 1919

Luego de repartir las municiones y vituallas en dos agitadísimos días, habiendo dejado los talleres improvisados en Pag Asa cubiertos por el velamen dejado por la Providencia, con los mecánicos poniendo a punto tanto aviones como lanchas motoras, la Flotilla Auxiliar de Kalayaan se hizo a la mar para su primera misión ofensiva: una incursión sobre los caladeros japoneses en las Islas Dongsha, al sur de Formosa. Pese a la guerra, las aguas alrededor de los territorios japoneses se mantenían con poca vigilancia pues la Armada Imperial nunca había sido confrontada en sus aguas territoriales y el mar cercano a las Dongsha se consideraba como un lago nipón.

Azlan organizo su pequeña escuadra en dos divisiones, la primera formada por el Zulog, y los dos sloops, se interpondrían entre la isla Prata y las presas que intentasen tomar puerto en ella, la segunda división encabazada por la veloz Prueba, lideraría a los dos praos y tres sampanes armados que avanzando desde el sureste, empujarían la mayor cantidad de pesqueros japoneses hacia el norte, donde los esperarían sus vapores.

En el puente del Daigo Fukuryu Maru, un trawler a vapor de 140 toneladas, el patrón Sakamoto Sho calculaba los días que faltaban para terminar de llenar su bodega, mientras el resto de su tripulación recogía redes con la última captura de bonito. En una extensión de pocas millas, faenaban 8 pesqueros a vapor, siendo el suyo propio el más pequeño. Miraba a la lejanía, no sin cierta envida, las 650 toneladas del Chitose Maru, o al flamante trio de Kagoshima, Wakatake Maru, Wakakusa Maru y Wakaba Maru de 380 toneladas cada uno. Al ser el más alejado de los trawlers, a Sakamoto no dejaba de molestarle tener que compartir el caladero con los casi veinte juncos pesqueros de las Ryukyu, que no solamente pescaban el bonito, también lo evisceraban, salaban y secaban en las largas pértigas que tenían entre los aparejos, y grandes bandadas de aves marinas eran atraidas por los restos que arrojaban por las bordas.

Casi de repente, aparecieron las velas de 3 juncos, millas atrás se veían otras velas. Cuando pudo apreciar las líneas del casco, se dio cuenta que eran juncos chinos. Que atrevimiento! Desde 1895 no se acercaban a estos caladeros, tanto es así, que la comunidad de pescadores japoneses llamaban a la isla con otro nombre: Nishizawa Shima. Su indignación se convirtió en sorpresa primero y miedo después, cuando una detonación, un silbido y una tromba, le hizo comprender que estaban siendo atacados. Piratas chinos! Fue lo primero que pensó ordenando al maquinista sacar la mayor cantidad de revoluciones para dejar atrás a sus atacantes.

En el alcázar del Ma Zu, el junco más retrasado de la línea, el alférez Lazaga desesperaba, la formación se había descompuesto malamente y se obstruían los campos de tiro. El despliegue había sido igualmente defectuoso pasando de la formación de columna a la de línea con desesperante lentitud, ahora que los buques tenían que guiñar para tener más amplitud de tiro, las obstrucciones eran continuas y temía lo peor: daños por fuego amigo. Muy a su pesar, izó la señal “persiga al enemigo” que autorizaba romper la formación y cazar al enemigo por su cuenta.

Se inició una carrera desordenada, los praos tratando de detener la mayor cantidad de los pequeños juncos que en su sorpresa se habían detenido, los juncos de guerra disparando para intimidar a cualquiera que intentase huir y la Prueba, con una suave brisa de popa, persiguiendo al Daigo Fukuryu que se dirigía hacia Formosa, dejando a las Dongsha hacia el sureste.

Una hora antes, desde el puente del Malak Mijail que se aproximaba desde el noreste a las Dongsha arrojando las últimas toneladas de antracita a sus calderas, el comandante Azlan ordenaba zafarrancho de combate. Era primera vez que no era un entrenamiento y se notaba que las dotaciones estaban verdes. Azlan cruzó una mirada con Moreno que también se daba cuenta del desorden: a tambor batiente, los artilleros se estorbaban con los marineros, las municiones tardaban en llegar a los cañones, las partidas de abordaje se amontonaban en las bordas, gritos de “Santiago!” se confundían con los de “Allah akbar!”, incluso los sirvientes de las MG08 de las alas del puente estaban en su puesto, pero sin las cajas de balas adicionales cerca! El vigía avistó los humos de los pesqueros y Azlan obvió todo sigilo ordenando alimentar las calderas con el mejor carbón de Cardiff. Los sloops sintieron el cambio, una bocanada de humo negro salió de las chimeneas y lanzados a 12 nudos fueron hacia los pesqueros.

El primer cañonazo de 102 levanto un surtidor 3 cables corto del Chitose, pero el sexto disparo de 88 mojo sus bordas, haciendo que el pesquero parase sus máquinas de inmediato. En tanto, el Malak al Maut se dirigía disparando hacia donde se concentraban los cascos verdes de los pesqueros de Kagoshima, el séptimo disparo de 88, un afortunado tiro alto, destrozó un motón e hizo que el patrón del Wakaba lo detuviese, siendo imitado por los otros dos.

Azlan, vio los humos lejanos de un pesquero y la goleta cada vez más rezagada de su perseguido, cualquier aviso de alarma que llegase a Formosa significaría el fin de la sorpresa. De inmediato izó la orden al Zulog para que diese caza al evasivo pesquero. Kititsyn, que había conservado el mando del aviso, pidió presión con el telégrafo y las calderas respondieron, y a 17 nudos no tardó en dar caza al Daigo Fukuryu. Veden nuevamente se hizo cargo de la pieza de 47, y al segundo disparo, impactó en la obra muerta del pesquero, obligándolo a parar maquinas.

Azlan reunió las presas, no había tenido bajas, tampoco las había causado. Tan solo algunos heridos por contusiones diversas y astillas clavadas. Además del Chitose, los 3 pesqueros de Kagoshima y el Daigo Fukuryu, también habían capturado al Shazikou Maru de 450 toneladas, Kotoshiro Maru, de 240 y Kotoyo Maru de 150. Y 18 juncos que iban desde los 40 hasta las 60 toneladas. En total había capturado a 267 japoneses y más de 300 toneladas de bonito.

Trasbordando toda la carga del Chitose y del Shazikou a los demás pesqueros, dejaron a estos libres para recibir a los prisioneros más la tripulación de presa. Los vapores, también con tripulación de presa remolcarían a los juncos hasta las Kalayaan, con la escolta de los veleros. En tanto la primera división, escoltaría al Chitose y Shazikou hasta la Isla Grande (1) de las Paracelso en donde se dejaría a los prisioneros. Durante el trayecto, Azlan se reunió con sus tenientes en la cámara de su insignia. Estaba consciente que pese al éxito, el desempeño de su flotilla había sido apenas suficiente.
- Nuestra primera empresa ha sido exitosa, contra un enemigo desarmado - dijo mirando uno a uno a Moreno, Vierna y Kititsyn – Nuestro despliegue ha sido inadecuado, fuera de tiempo y desordenado. Los veleros perdieron formación apenas intentaron pasar a fila. Los cañoneros tampoco lo hicieron mejor. La cubierta del Malak Mijail era un caos.
- Sí - reconoció Moreno- los diferentes equipos se estorbaban mutuamente, los artilleros que vinieron en el Providencia están entrenados para los cañones de la batería secundaria de un acorazado, una plataforma mucho más estable.
- Y pese a que Li ha entrenado bien a sus hombres en tiro, combate cercano y tácticas, eso sirve más para hacer frente a un intento de desembarco o desembarcar nosotros mismos – apuntó Vierna – pero todos los abordajes han sido lentos y torpes.
- Sin embargo, Ud. Kititsyn lo ha hecho bastante bien – dijo Azlan – la caza del pesquero que se le escapaba al Prueba fue exitosa.
- Señor, nosotros estamos juntos desde que salimos de Petropavlovsk, no sé qué tan bien hubiese disparado nuestra batería de 88, pero Vaden tiene buen ojo para el Hotchkiss. El personal de calderas se portó bien, y los fogoneros filipinos se amoldan a nuestros maquinistas, pese a las barreras de la lengua.
- Eso es lo que no tenemos, tiempo. Debemos entrenar más.
- Que ha pensado hacer con las presas, señor? – Preguntó Vierna.
- El Chitose puede convertirse en nuestro aprovisionador. Los otros pueden emplearse como cargueros ligeros.
- Y los juncos pesqueros?
- No creo que nos vayan a servir de mucho, son de pino, y no muy grueso.
- Los más grandes pueden utilizarse de pontón, o para introducir contrabando. Aunque el olor a pescado lo inundara todo.
- Señor, podemos utilizar los pequeños como blancos y para entrenarnos en los abordajes. Son más de 10 cascos. Después la madera puede reutilizarse.
- Es buena idea, teniente.
- Comandante, ¿por qué decidió dejar a los prisioneros en las Paracelso?
- La Isla Grande (1) puede contenerlos a todos, llueve bastante así que agua no les ha de faltar, y les dejaremos suficiente cantidad de bonito como para que no pasen hambre, también algunas redes y los botes más chicos, sin aparejos, por supuesto.
- Cree que puedan llegar a tierra firme?
- No antes de dos meses. En todo caso, los caladeros de las Paracelso tienen vigilancia francesa, ellos se encargarían de llevarlos a tierra y de repatriarlos. Al menos esa es la idea.
- Cuando será la siguiente operación?
- Debemos de estar más afinados, teniente, porque la próxima vez vamos tal vez no tengamos tanta suerte.


(1) Isla Grande de las Paracel es un nombre ficticio, utilizado graficamente para fines de la ucronía, el nombre real es Woody Island y efectivamente, es la mayor de ese archipielago.

[Gaspacher]

[ASTUR]

Muy buenas,

No le podríamos enviar una flotilla de destructores como apoyo a Azlan y de paso llevar un buen cargamento de minas para atacar las vías de comunicación japonesas?

Un saludo

[Domper]

El problema de esa "guerrilla marítima" es que como los japoneses manden un par de cruceros protegidos (de esos que tanto gustan al SH) la flotilla puede acabar en el fondo en un plis plas. Teniendo ya un puerto seguro relativamente cercano (Brunei) yo creo que una campaña más "convencional", con cruceros (los destructores tenían poquísima autonomía), submarinos, minas, etcétera, se puede conseguir mayores efectos con menos riesgo.

Saludos

[reytuerto]

Estimado Astur:
Sí, la guerra de minas es importante. Se aprovechara la velocidad del Providencia (que es el buque grande, en el aspecto que tuvo en su andadura desde Cadiz hasta las Kalayaan. Una vez llegado a Maldivas, aligerara mastiles, desembarcara el trinquete y embarcara carbon y muchas minas!) y sobre todo, que esta basado en las Maldivas, para dejar "tarjetas de visita" en algunos puertos del Indico. Los destructores de esa epoca aunque algunos eran muy marineros, la mayoria tenian una autonomia insuficiente. Es mucho mas factible que la Armada Imperial Japonesa envie buques de poco porte, por la cercania. La idea es que la AE no distraiga buques de su esfuerzo principal y el enemigo haga exactamente eso, por supuesto, el riesgo de encontrarse con un buque mejor armado y sobre todo, mas protegido, es letal.

Estimado Domper:
Paso a paso. Y si, algunos marinos de la Flotilla tendran un cenotafio en San Fernando! Saludos cordiales a los dos.

[Gaspacher]

Solo un breve apunte.

Entre las narraciones de las aventuras de Azlan y compañía narradas por reytuerto y la ocupación de Brunei existe un lapso de varios meses. De hecho para cuando realiza el ataque a los pesqueros aun faltan dos meses para la llegada de la AE a Brunei, así pues esto podrían ser maniobras de diversión destinadas a agotar al enemigo...


y sí, como aparezca uno de los cruceros protegidos por aquellas zonas adiós flotilla...

[Domper]

Es verdad, no me había fijado en las fechas. De todas formas me sigue pareciendo un negocio bastante peligroso.

Saludos

[Gaspacher]

Por supuesto, pero esto viene a ser más una operación de inteligencia que una militar...

[Domper]

Mezclar inteligencia con hundir pesqueros... tal vez sea alertar prematuramente sobre una debilidad japonesa. Si es inteligencia, hay que pasar desapercibido, y no delatarse hundiendo media docena de sampanes.

Saludos

[urquhart]

Hola a todos,

Domper, enfoquemoslo como una oportunidad de socavar varias capacidades japonesas. En primer lugar, se produce un primer ataque contra unas unidades que carecen de TSH, y dado el lugar donde se ha producido puede entenderse como un ataque de piratas indochinos o chinos... a día de hoy no se producen tanto, pues son aguas altamente militarizadas, por las disputas territoriales. Pero en 1919, digamos que ese sector, con miriadas de islas como toda Insulindia era un hervidero de piratas, contrabandistas y otros.

Te invito a que pongas en San Google Taumaturgo piracy in south China sea... El padre de un amigo, capitán de la marina mercante se las vio en más de una ocasión con piratas malayos, indochinos, tailandeses, filipinos, chinos... Han quedado muy en segundo plano por los ataques de los somalíes, por el hecho de su vinculación a la galaxia yihadista, pero ahí están.

Observemos esta infografía:

http://qzprod.files.wordpress.com/2014/ ... -24-pm.png

Por otro lado, hay que obligar a los japoneses a dividir su esfuerzo... tal vez unas Tm de bacalao sean algo insignificante, pero como dijo aquel, la más larga de las marchas, empieza por un primer paso.. Y los hombres de Azlan, una pequeña representación de cada uno de los pueblos de las Filipinas españolas, deben adquirir experiencia, antes de la aparición de mayores dificultades... como los Commando británicos en la SGM... antes de Chariot, por ejemplo, molestaban en las Lofoten.... de ahí también la paranoia de Adolf de destinar sopetocientas tropas a Noruega, en lugar de otros puntos de mayor interés... Además, no sé que prepara Rey, pero Azlan y sus hombres pueden ser una versión hispanomalaya de The Phantom y sus surcarolinos... una versión no tan romántica ni tan glamurosa como la de Eimmerich, desde luego.

[Domper]

De la piratería china y malaya tenía noticias, pero se trataba más (al menos en el siglo XX) de asaltos a buques mercantes para robar a la tripulación, y se producían especialmente en pasos obligados (creo que el estrecho de Malaca era el lugar donde eran más frecuentes).

Pero esto es completamente diferente. La desaparición de una flotilla pesquera al completo no es algo que pase desapercibido, y no es algo propio de piratas. Aunque hubiesen sido piratas (que en medio de una guerra nada puede descartarse, ya se sabe lo del río revuelto) obligaría a Japón a enviar algo. Contando que para controlar a los piratas (o a los corsarios españoles) no se necesitan acorazados, basta con patrulleros, incluso con pesqueros armados.

Supongo que en la LTR la piratería había desaparecido por completo o casi por completo en áreas de influencia japonesa. La lucha contra los piratas solía ser prioritario para las marinas coloniales, con la ventaja que podía hacerse con medios baratos. De hecho España mantuvo una larga campaña en Filipinas (sobre todo en Mindanao) y los ataques a los pescadores fue uno de los motivos para que España se metiese en el lío del Rif.

Lo de la experiencia, sí, pero. Demasiadas veces con todo eso se arruina la sorpresa, y cuando se va a emprender la operación de verdad resulta un fracaso.

Con todo, coincido en que la situación alimentaria de Japón siempre ha sido delicada, y atacar a su flota pesquera puede tener mucho más efecto que atacar a la flota bacaladera de Terranova (por ejemplo). Un posible papel de los submarinos españoles en el Pacífico puede ser ponerse a liquidar pesqueros, que para eso el cañón de cubierta se las apaña más que bien.

Saludos

[APVid]

También opinó que no hay que levantar la liebre demasiado pronto y sería mejor desviar la atención de por donde vendrá el golpe.

Así sugeriría realizar alguna misión de corsarios en el Pacífico Oriental partiendo de las Malvinas y aprovechando que las Hawaii son neutrales y benévolas con España y que las islas francesas han quedado neutralizadas por el armisticio.
Si empiezan a caer las Pitcairn, Samoa,... los australianos y neozelandeses que ya están bastante descontentos ordenarán retirar de Europa sus tropas.


Creó que la guerra debe decidirse en las negociaciones con Gran Bretaña, incluso sin batalla.
Por ejemplo se ordena concentrar una parte importante de la flota de los IC quizás para un supuesto desembarco en Irlanda o una operación naval, cuando la Great Fleet se prepare para zarpar se filtra a la prensa británica y entre la población que el gobierno británico está negociando bajo mano la paz.
A las tripulaciones (ya bastante nerviosas y con un país afectado por el agotamiento, el hambre y la influencia comunista) les sentaría fatal y podrían hacer lo que sucedió con las alemanas en la LTR: amotinarse algunas dotaciones.

Eso sentaría en la mesa de paz a los británicos, al recordar los motines de la Royal Navy.

[reytuerto]

Estimado Domper:

La desaparicion de una flota pesquera entera no es de sorprender. En esa zona del Pacifico, las mega-olas repentinas son frecuentes, de hecho, en fechas tan recientes como 1979 y 1984 hubo desapariciones de barcos mercantes modernos sin dejar rastro. Igualmente, se han hecho mediciones de olas de mas de 30 mts, que aparecen subitamente y que con facilidad pueden hacer zozobrar un barco de 18,000 tm (como el desaparecido en 1979). Justamente, esa es la razon por la cual se apoderaron de todos los buques y capturaron a todos los pescadores (y son llevados a unas islas con vigilancia gala). Durante 2 meses no se sabra nada de esta flota pesquera... la supesrsticion natural de los hombres de mar (de esa y todas las latitudes) hacen el resto.

La idea del corso es precisamente llevar a IJN a mirar a otro lado. Y sobre todo con los pesqueros de alta mar (el problema es que para 1914 casi toda la flota pesquera nipona era costera. De hecho, incluso hoy, en el Japon el pescado congelado no es tan apreciado como el que viene de aguas cercanas. Supuestamente los pesqueros a vapor tienen la capacidad teorica de poder fabricar hielo, pero necesariamente los veleros tienen que salar y secar su pesca. En la isla Prata/Dongsha hubo un saladero japones para mojama de bonito. Paciencia! Seran dos meses de campaña intensa (intensidad dictada por la rapidez de las maquinas alternativas de triple expansion), antes volver al "juego grande". Saludos cordiales.

[reytuerto]

Arcchipielago Kalayaan, Isla Pag Asa, 18 Marzo 1919.

Los días posteriores al regreso de la expedición a las Dongsha fueron de mucho trabajo y reflexión. En primer lugar, el teniente Li organizó a sus fusileros en tres compañías: 1era. Compañía de Guarnición, 2da. compañía de Desembarco y 3era. compañía de Instrucción. Dentro de la 1era, el sargento de Infantería de Marina Manuel Goreiro se afanaba con los destacamentos de abordaje, en los sloops y el aviso estarían compuestos por 4 naranjeros, 4 Mondragón y 12 máuser, en los veleros, el tamaño sería menor, pero siempre con no menos de 2 naranjeros y 1 Mondragón. Utilizando un par de pesqueros capturados, entrenaban incansablemente la manera más rápida de abordar, tanto desde una chalupa a remos, una lancha motora o las bordas de otro buque. Azlan contemplaba los progresos.
- Como están los hombres, sargento?
- Señor, avanzando. Los naranjeros son intimidantes, y muy manejables. El fuego del Mondragón es vivo, los máuser están de apoyo sobre todo.
- No se olvide de la práctica con sables.
- Señor, dedicamos una hora diaria a entrenar con arma blanca, sable y bayoneta. Señor, la mayoría de filipinos prefiere utilizar sus propios sables – dijo Goreiro, con un leve trasfondo de queja.
- Así es, sargento - Azlan sonrió al fornido sargento gallego – incluso yo prefiero la espada y daga (1), que los sables chinos. No me sorprende que prefieran el sansibak (2).
- Señor, sus filipinos son buenos con el sable, pero espero no llegar a utilizarlos.

En la operación, se había visto que los palos y chimeneas de color amarillo del Zulog resultaban demasiado visibles, por lo que optaron por pintarlos del gris mate estándar, igual tratamiento recibió el Chitose Maru, rebautizado como “Puerto Princesa”, y el Shazikou Maru, ahora “Reina Isabel” (3), aunque conservando el casco negro de mercantes japoneses. Los 3 pesqueros de Kagoshima conservaron el color verde de sus cascos, pero cuando hubiese oportunidad sus superestructuras serian pintadas también de gris.

El piloto Kao Di recibió el mando de los sampanes y praos. Embarcando en cada velero una dotación mixta, los artilleros peninsulares recibieron la orden expresa de obedecer a los oficiales de circunstancia nativos como si fuesen de oficio. Igual sucedió con los infantes de marina. En la cubierta del Malak Mijail había que solucionar otro problema:
- Señor, la tripulación desea hacer una solicitud – El contramaestre Aniscal se dirigía a Moreno.
- Hable, nostramo.
- Señor, la tripulación desea permanecer descalza en las cubiertas.
- Moreno miro sorprendido al contramaestre filipino que hacia la petición, y cruzo miradas con Azlan, que asentía – Sí, pueden permanecer descalzos, si así desean.
- Gracias, señor.
- Bien hecho, Tte. Moreno – dijo Azlan con una sonrisa – eso no quitara la eficiencia de la tripulación en sus desplazamientos por vergas y jarcias, tampoco por cubiertas.
- En realidad, en la generación de mis abuelos la mayoría de tripulantes estaban descalzos en todas las marinas europeas.
- Teniente, hay otra cosa que debemos tener en cuenta, y es que antes de entrar en batalla, no debemos invocar al apóstol.
- Y con todo respeto, señor, tampoco al profeta.
- No, por supuesto, tampoco al profeta.
- Que sugiere, señor?
- “España” a secas.
- O “Cierra España”.
- También sirve – respondio Azlan asintiendo.
- Señor, Ud. no lleva pistola?
- No, prefiero el revólver. Y por lo visto, los rusos también.

Kititsyn debió ceder a dos de sus guardiamarinas para que fungiesen de segundos en los sloops, quedándose tan solo con Veden. Tarnawieki embarcó como jefe de máquinas del Malak Mijail, Lazaga pasó a comandar el Reina Isabel, y Ristori obtuvo el comando del Puerto Princesa. El piloto López, gaditano de experiencia, que había embarcado en la goleta en Galapagos recibió el mando de la Prueba. Previamente, los 3 juncos fueron habilitados para lanzar minas por la borda de babor mediante un ingenioso sistema de listones de teca ideado por el polaco. A escasa velocidad, en una noche, los tres juncos podían sembrar un campo no muy extenso, pero lo suficientemente denso como para cobrar varias presas. Ah! Lástima que el estrecho de Malacca estuviese siempre tan vigilado!

Sin embargo la siguiente operación ofensiva estaría protagonizada por los praos. Al mando del primo de Azlan, Alí, el Pag Asa y el Matalas atravesarían el Mar de China Meridional, y bordenado el extremo noreste de Borneo, se dirigirían desembocadura del rio Labuk, para enlazar con el grupo encabezado por Iskandar Samal, nieto de un amigo de Azlan padre que prefirió quedarse en Sabah, que harto de los excesos británicos, veía ahora una rendija de oportunidad para sacudirse de la tiranía de los rajas blancos.

Alí, una vez en la bahia de Labuk entregó a Samal 60 Lee-Enfield y 5 (de las 15) ametralladoras Lewis, así como 60 cajas de munición .303 (la mitad de las 3 toneladas en existencia). Samal bien informado de la situación en la costa este de Borneo, le informó que para esa extensa zona la defensa era escasa: 800 hombres de una milicia mal entrenada y equipada (algunas de sus compañías estaban armadas incluso con anticuados Martini-Enfield) del North Borneo Constabulary. Sería difícil encontrarlos y neutralizarlos. Samal también le informó algo de sumo interés: aún quedaban cerca de 10 mil colonos filipinos en Sabah, tantos que el ahora capturado gobernador civil de Manila, Dr. José Rizal, propuso la colonización en gran escala de esa parte de la isla.

Cuando Alí Azlan regresaba a Pag Asa, los tres juncos de guerra con las bodegas rebosantes de minas, partían hacia el oeste del golfo de Lingayen Allí, en la ruta que va desde Yokohama, Nagoya y Osaka a Manila, el piloto Kao Di tenía instrucciones de dejar su carga. El comandante Azlan sabía que sus minas eran ligeras, que sus 5 campos eran insuficientes, pero esperaba que pudiesen hacer daño.

Para el 28 de Marzo, la primera división de la Flotilla Auxiliar de Kalayaan, con la goleta Prueba destacada de la segunda división, con las carboneras a tope, estaba lista para salir en busca del enemigo.

[urquhart]

CONGRESO DE LOS DIPUTADOS, MADRID, MAYO DE 1919

Don Luís de Marichalar y Monreal, Marqués de Ciria, Conde de Ripalda y Vizconde de Eza, regresaba a la Cámara tras más de cuatro años. En 1914 fue uno de los pocos Diputados que abandonó su escaño para incorporarse a filas, recibiendo el mando de la Milicia Provincial de Soria, con el título de Coronel.

Su escaño había sido disputado en unas elecciones parciales, al renunciar Don Luís para incorporarse a filas. Ahora, y a pesar de haber sido nombrado Senador Vitalicio, deseaba recuperar su carrera política dentro del Partido Conservador. A su hoja de servicios militares, añadía una amplia experiencia política y en la Administración, como Director General de Agricultura y Alcalde de Madrid. En 1917 había sido consultado por el Presidente Weyler para incorporarse a su Gobierno como Ministro de Fomento, pero leal a Maura, había declinado el ofrecimiento, expresando su deseo de seguir al frente del Regimiento Virrey Palafox.

Ahora, en la antesal del despacho de Don ANtonio Maura, Luís de Marcichalar veía como debía esperar a ser recibido por el Jefe del Partido Conservador, y todo tener cita acordada, varios jóvenes diputados despachaban con Maura, hacienod éste caso omiso a un pro hombre del Partido. Su esposa ya le había comentado en sus cartas y en sus visitas a Mallorca, los celos que había levantado su actitud en 1914, y las envidías, al haber sido puesto como ejemplo de político verdaderamente entregado a la causa de España.

Disculpe, debo esperar mucho...

Don Luís, Don Antonio sabe de su presencia, pero los despachos con los Señores Diputados le acaparan su tiempo...

Mire Usted jovenzuelo, esta cita fue concertada hace 15 días. Como Senador del Reino sé positivamente que no existe en estos momentos ninguna proposición de Ley que deba ser debatida, entre otras cosas por el que el Presidente Weyler gobierna a golpe de Real Decreto; y las comisiones, que quiere que le diga, solo trabajan en asuntos puntuales, si exceptuamos Tesoro y Guerra... y los Señores Diputados que despachan con el Señor Maura a duras penas ejercen la función de palafraneros.... Haga saber a Don ANtonio Maura que el Coronel Luís de Marichalar y Monreal, Senador del Reino, espera ser recibido...

Don Luís, lamento decirle que Don Antonio me ruega no ser molestado.

CONTINUARÁ

NOTA

Luís de mArichalar aparecía en ucronia-espana-vs-ee-uu-duelo-de-aguilas-t36355-3000.html?hilit=Marichalar#p1548418