El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Prosigamos con mi moraleja:
Durante toda la década del ´90 se la pasó de novia en novia, conquistando mujeres a diestra y siniestra. La revistas del espectáculo se cansaban de publicar fotos suyas con mujeres bellas en distintas partes del mundo. Un día aparecía en Miami con una rubia pulposa y a la semana siguiente con una hermosa morocha en la “Costa Azul”.
Pero en el año 2.000 siendo ya un hombre maduro conoció a una mujer y quedó cautivado.
Como una regla intrínseca de la naturaleza, fue inevitable que mi amigo se enamorara, pero obviamente no de cualquier mujer, sino de una de las modelos y actrices más hermosas de mi país.
Alta, rubia, de unos ojos cautivadores color turquesa, un rostro de hechicera, unas piernas largas como 2 columnas de mármol y los pechos (senos) más turgentes que había visto en mi vida.
Dicha actriz tenía 4 años más que nosotros y durante años había sido la modelo de una reconocida marca de lencería.
Recuerdo que cuando yo era adolescente, ella era una joven modelo en franco ascenso.
Todos los meses solía comprar las revistas donde ella aparecía en ropa interior, luciendo unas bragas de encaje y mostrando sus pechos cubiertos por la sedosa lencería, en donde se traslucía sus pezones rosados.
La cantidad de veces que me masturbé por esa actriz creo que quizás sería un record “Guinnes”.
Y cuando me enteré que mi amigo estaba enamorado de ella y se iban a casar lo viví con una mezcla de alegría, envidia, orgullo y hasta de reivindicación.
Si bien era una mujer de 35 años, que había atravesado un par de tormentosos divorcios, su belleza y sensualidad no sólo estaban intactos, sino que las manos hábiles de un cirujano estético habían destacado su belleza aún más e inflado sus pechos hasta parecer dos globos sensuales que parecían explotar.
Parecía el guión de una novela, donde un chico humilde, de un pueblo humilde, triunfa y se casa con una reina bella y famosa.
Cuando se casó todas las revistas del espectáculo pusieron en tapa la noticia.
Ellos se fueron a Miami de luna de miel y a su regreso vino con su esposa al pueblo a mostrarla como un trofeo.
Juro que fue una revolución. Todos los habitantes del pueblo estaban enfervorizados y se desesperaban por verlos.
Se armó un cordón policial y tan sólo pudimos verlos pasar en un auto descapotable, sin posibilidad de acceso directo.
En mi fuero interior estaba convencido que mi amigo iba a reunir a sus amigos más íntimos e iba a presentar a su hermosa esposa. Pero grande fue mi desilusión cuando fuimos desairados e ignorados olímpicamente.
De todas maneras la alegría por la felicidad de mi amigo me duró mucho tiempo y no me importó que no se haya acercado a saludar, ya que yo me había ilusionado con que la iba a conocer en persona a la actriz que había sido el motivo de mis apasionadas y fogosas masturbaciones.
Tan sólo hubo algo que no me gustó y que fue una apreciación casi imperceptible, pero que mi sensibilidad alcanzó a captar:
- Pude advertir cierto gesto de hastío en la bella modelo mientras marchaba en el automóvil descapotable.
Fue un “Rictus”, un gesto muy sutil, cierto ademán que parecía opacar su bello rostro, como si estuviera incómoda o despreciara a ese “Populacho” que vociferaba sus nombres.
Con el tiempo olvidé ese hecho (que luego recordaría con meridiana claridad y le daría sentido a lo que pasaría en el futuro).
Al poco tiempo yo también me casé, pero con una mujer terrenal, ni famosa, ni modelo, ni sensual, ni de tetas perfectas.
La fiesta de mi boda fue modesta y no hubieron flashes de reconocidas revistas, ni una fastuosa torta, ni viaje de lunas de miel a Miami.
En el fondo (estúpidamente) no sé porqué comparé mi casamiento con el de mi amigo y me sentí algo deprimido.
Continuará.
Durante toda la década del ´90 se la pasó de novia en novia, conquistando mujeres a diestra y siniestra. La revistas del espectáculo se cansaban de publicar fotos suyas con mujeres bellas en distintas partes del mundo. Un día aparecía en Miami con una rubia pulposa y a la semana siguiente con una hermosa morocha en la “Costa Azul”.
Pero en el año 2.000 siendo ya un hombre maduro conoció a una mujer y quedó cautivado.
Como una regla intrínseca de la naturaleza, fue inevitable que mi amigo se enamorara, pero obviamente no de cualquier mujer, sino de una de las modelos y actrices más hermosas de mi país.
Alta, rubia, de unos ojos cautivadores color turquesa, un rostro de hechicera, unas piernas largas como 2 columnas de mármol y los pechos (senos) más turgentes que había visto en mi vida.
Dicha actriz tenía 4 años más que nosotros y durante años había sido la modelo de una reconocida marca de lencería.
Recuerdo que cuando yo era adolescente, ella era una joven modelo en franco ascenso.
Todos los meses solía comprar las revistas donde ella aparecía en ropa interior, luciendo unas bragas de encaje y mostrando sus pechos cubiertos por la sedosa lencería, en donde se traslucía sus pezones rosados.
La cantidad de veces que me masturbé por esa actriz creo que quizás sería un record “Guinnes”.
Y cuando me enteré que mi amigo estaba enamorado de ella y se iban a casar lo viví con una mezcla de alegría, envidia, orgullo y hasta de reivindicación.
Si bien era una mujer de 35 años, que había atravesado un par de tormentosos divorcios, su belleza y sensualidad no sólo estaban intactos, sino que las manos hábiles de un cirujano estético habían destacado su belleza aún más e inflado sus pechos hasta parecer dos globos sensuales que parecían explotar.
Parecía el guión de una novela, donde un chico humilde, de un pueblo humilde, triunfa y se casa con una reina bella y famosa.
Cuando se casó todas las revistas del espectáculo pusieron en tapa la noticia.
Ellos se fueron a Miami de luna de miel y a su regreso vino con su esposa al pueblo a mostrarla como un trofeo.
Juro que fue una revolución. Todos los habitantes del pueblo estaban enfervorizados y se desesperaban por verlos.
Se armó un cordón policial y tan sólo pudimos verlos pasar en un auto descapotable, sin posibilidad de acceso directo.
En mi fuero interior estaba convencido que mi amigo iba a reunir a sus amigos más íntimos e iba a presentar a su hermosa esposa. Pero grande fue mi desilusión cuando fuimos desairados e ignorados olímpicamente.
De todas maneras la alegría por la felicidad de mi amigo me duró mucho tiempo y no me importó que no se haya acercado a saludar, ya que yo me había ilusionado con que la iba a conocer en persona a la actriz que había sido el motivo de mis apasionadas y fogosas masturbaciones.
Tan sólo hubo algo que no me gustó y que fue una apreciación casi imperceptible, pero que mi sensibilidad alcanzó a captar:
- Pude advertir cierto gesto de hastío en la bella modelo mientras marchaba en el automóvil descapotable.
Fue un “Rictus”, un gesto muy sutil, cierto ademán que parecía opacar su bello rostro, como si estuviera incómoda o despreciara a ese “Populacho” que vociferaba sus nombres.
Con el tiempo olvidé ese hecho (que luego recordaría con meridiana claridad y le daría sentido a lo que pasaría en el futuro).
Al poco tiempo yo también me casé, pero con una mujer terrenal, ni famosa, ni modelo, ni sensual, ni de tetas perfectas.
La fiesta de mi boda fue modesta y no hubieron flashes de reconocidas revistas, ni una fastuosa torta, ni viaje de lunas de miel a Miami.
En el fondo (estúpidamente) no sé porqué comparé mi casamiento con el de mi amigo y me sentí algo deprimido.
Continuará.
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Prosigamos:
Los años pasaron y mi amigo dejó de venir al pueblo a saludarnos. Nosotros (los simples mortales) nos conformamos con seguir sus peripecias amorosas a través de las revistas del espectáculo.
Hasta que un día mi amigo apareció por el pueblo con motivo de cumplir 4 décadas (40 años), sólo, sin la compañía de su sensual cónyuge.
Sin dudar le organizamos una fiesta para celebrar su cumpleaños y no le dimos oportunidad de que se niegue.
La cena fue muy amena y fue inevitable que le preguntáramos por su vida de casado y cómo era despertarse todas las mañanas en compañía de una de las mujeres más hermosas y sensuales de Paraguay.
Mi amigo minimizó el hecho y se mostró más bien parco. Yo lo atribuí a cierta vergüenza o pudor y comprendí que nuestras preguntas eran desubicadas y que mi amigo no podía explayarse sobre cómo era su esposa en la cama.
Pero hubo algo que me llamó la atención:
- Cuando casi todos se habían ido y eran las 3 de la madrugada, traté de sacarle “verde por maduro” a mi amigo, preguntándole cómo era vivir con una mujer tan bella y famosa.
Y la respuesta de mi amigo me dejó descolocado:
- No todo lo que brilla es oro.
Juro que durante varias semanas dicha frase me quedó rebotando en la mente.
El tiempo pasó y los años pasaron y yo me olvidé de esa anécdota.
Pero 2 años después, fue grande la sorpresa cuando en la tapa de una revista, con letras rojas, se leía:
- LA FAMOSA MODELO SE DIVORCIA DEL RECONOCIDO ACTOR. (Evito poner nombres para no vulnerar la intimidad de los involucrados)
Yo no lo podía creer.
- ¿Cómo era posible?.
- ¿Cómo divorciarse de una de las mujeres más hermosas del mundo?
- ¿Cómo un hombre tan bello, con el distinguido porte masculino y una gran bonomía podía dejar de amar o ser despreciado.?
Lo viví como una catástrofe, como un fracaso, como si me hubiera pasado a mí.
Sin dudar me dirigí a la casa de la madre de mi amigo donde había pasado tanto tiempo juntos en nuestra adolescencia y le pedí a su madre un número de teléfono donde ubicarlo.
Pero todo fue en vano.
Estaba pasando por el momento del duelo y había decidido huir de los flashes de la prensa para refugiarse en Argentina donde había empezado a trabajar en una telenovela.
Continuará.
Los años pasaron y mi amigo dejó de venir al pueblo a saludarnos. Nosotros (los simples mortales) nos conformamos con seguir sus peripecias amorosas a través de las revistas del espectáculo.
Hasta que un día mi amigo apareció por el pueblo con motivo de cumplir 4 décadas (40 años), sólo, sin la compañía de su sensual cónyuge.
Sin dudar le organizamos una fiesta para celebrar su cumpleaños y no le dimos oportunidad de que se niegue.
La cena fue muy amena y fue inevitable que le preguntáramos por su vida de casado y cómo era despertarse todas las mañanas en compañía de una de las mujeres más hermosas y sensuales de Paraguay.
Mi amigo minimizó el hecho y se mostró más bien parco. Yo lo atribuí a cierta vergüenza o pudor y comprendí que nuestras preguntas eran desubicadas y que mi amigo no podía explayarse sobre cómo era su esposa en la cama.
Pero hubo algo que me llamó la atención:
- Cuando casi todos se habían ido y eran las 3 de la madrugada, traté de sacarle “verde por maduro” a mi amigo, preguntándole cómo era vivir con una mujer tan bella y famosa.
Y la respuesta de mi amigo me dejó descolocado:
- No todo lo que brilla es oro.
Juro que durante varias semanas dicha frase me quedó rebotando en la mente.
El tiempo pasó y los años pasaron y yo me olvidé de esa anécdota.
Pero 2 años después, fue grande la sorpresa cuando en la tapa de una revista, con letras rojas, se leía:
- LA FAMOSA MODELO SE DIVORCIA DEL RECONOCIDO ACTOR. (Evito poner nombres para no vulnerar la intimidad de los involucrados)
Yo no lo podía creer.
- ¿Cómo era posible?.
- ¿Cómo divorciarse de una de las mujeres más hermosas del mundo?
- ¿Cómo un hombre tan bello, con el distinguido porte masculino y una gran bonomía podía dejar de amar o ser despreciado.?
Lo viví como una catástrofe, como un fracaso, como si me hubiera pasado a mí.
Sin dudar me dirigí a la casa de la madre de mi amigo donde había pasado tanto tiempo juntos en nuestra adolescencia y le pedí a su madre un número de teléfono donde ubicarlo.
Pero todo fue en vano.
Estaba pasando por el momento del duelo y había decidido huir de los flashes de la prensa para refugiarse en Argentina donde había empezado a trabajar en una telenovela.
Continuará.
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Prosigamos con mi historia:
Pasaron un par de años sin que tenga noticias de él, hasta que sin necesidad de que yo lo busque, mi amigo apareció solito por mi casa.
Cuando golpeó mi puerta y me asomé, pude verlo.
Si bien no había perdido su atractivo, el rostro lucía opaco, sus ojos claros ya no despedían esa chispa de sensualidad ni su porte era elegantemente arrogante.
Más allá de las cirugías estéticas que se había hecho y de su pelo teñido para ocultar las canas, sus 45 años le pesaban en los hombros.
Sin dudar lo abracé y lo invité a pasar a mi humilde hogar.
Mi esposa nos preparó un café y comenzamos a hablar de trivialidades.
Yo no me atrevía a preguntarle sobre su resonante y publicitado divorcio por una cuestión de tacto y ubicación, pero por dentro me “salía de la vaina” por indagar al respecto.
Por suerte no pasó mucho tiempo hasta que él solito se largó a hablar:
- Imagino que te habrás enterado de mi divorcio- me preguntó.
- Imposible no enterarse. Salió en todas las revistas – le dije
Sin necesidad de incentivarlo, él se descargó con una catarata de reproches:
- Me dijo que su esposa era una mujer frívola, mala, artera, manipuladora, superficial. Una mujer egocéntrica que sólo se miraba el ombligo todo el día y que se sentía el centro del Universo. Una mujer que sólo pensaba en su belleza, vana, pobre de espíritu, insustancial, egoísta y ególatra, consumista compulsiva que sólo le interesaba la apariencia y el dinero.
Una mujer vanidosa que gastaba montañas de dinero en joyas, zapatos y ropa, sin la más mínima consideración hacia el otro y sin demostrar ningún tipo de sensibilidad social.
Y que no sólo gastaba su propio dinero, sino que casi lo había llevado a la bancarrota a él mismo.
La verdad que no podía creer lo que me contaba. Desde afuera parecían la “Pareja ideal”, ambos bellos, ambos exitosos, ambos con carreras rutilantes. Pero en la intimidad del matrimonio y dentro de 4 paredes mi amigo no la había pasado bien.
No pude evitar preguntarle:
- ¿Por qué te casaste si era una mujer tan frívola e insustancial?
Me dio una contestación que no me satisfizo:
- Porque era una mujer hermosa y yo me había quedado locamente enamorado ni bien la conocí.
Continuará.
Pasaron un par de años sin que tenga noticias de él, hasta que sin necesidad de que yo lo busque, mi amigo apareció solito por mi casa.
Cuando golpeó mi puerta y me asomé, pude verlo.
Si bien no había perdido su atractivo, el rostro lucía opaco, sus ojos claros ya no despedían esa chispa de sensualidad ni su porte era elegantemente arrogante.
Más allá de las cirugías estéticas que se había hecho y de su pelo teñido para ocultar las canas, sus 45 años le pesaban en los hombros.
Sin dudar lo abracé y lo invité a pasar a mi humilde hogar.
Mi esposa nos preparó un café y comenzamos a hablar de trivialidades.
Yo no me atrevía a preguntarle sobre su resonante y publicitado divorcio por una cuestión de tacto y ubicación, pero por dentro me “salía de la vaina” por indagar al respecto.
Por suerte no pasó mucho tiempo hasta que él solito se largó a hablar:
- Imagino que te habrás enterado de mi divorcio- me preguntó.
- Imposible no enterarse. Salió en todas las revistas – le dije
Sin necesidad de incentivarlo, él se descargó con una catarata de reproches:
- Me dijo que su esposa era una mujer frívola, mala, artera, manipuladora, superficial. Una mujer egocéntrica que sólo se miraba el ombligo todo el día y que se sentía el centro del Universo. Una mujer que sólo pensaba en su belleza, vana, pobre de espíritu, insustancial, egoísta y ególatra, consumista compulsiva que sólo le interesaba la apariencia y el dinero.
Una mujer vanidosa que gastaba montañas de dinero en joyas, zapatos y ropa, sin la más mínima consideración hacia el otro y sin demostrar ningún tipo de sensibilidad social.
Y que no sólo gastaba su propio dinero, sino que casi lo había llevado a la bancarrota a él mismo.
La verdad que no podía creer lo que me contaba. Desde afuera parecían la “Pareja ideal”, ambos bellos, ambos exitosos, ambos con carreras rutilantes. Pero en la intimidad del matrimonio y dentro de 4 paredes mi amigo no la había pasado bien.
No pude evitar preguntarle:
- ¿Por qué te casaste si era una mujer tan frívola e insustancial?
Me dio una contestación que no me satisfizo:
- Porque era una mujer hermosa y yo me había quedado locamente enamorado ni bien la conocí.
Continuará.
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Prosigamos:
Al igual de lo que me había pasado a mí, él también se había masturbado en la adolescencia y que haberla conocido fue como conocer a nuestra estrella favorita de rock.
Quedó prendado, loco de amor, obnubilado por tanta belleza.
Ese enceguecimiento llevó a idealizarla y a no tener la lucidez como para darse cuenta que detrás de tanta belleza, anidaba una mujer vanidosa, artera y manipuladora.
Mi amigo siempre había sido poco inteligente y esa falta de lucidez mental lo había llevado a pensar más con la bragueta que con la cabeza.
Ese gesto de desagrado que yo había alcanzado a advertir cuando desfilaron en el auto descapotable el día que se casaron y la frase de mi amigo ”No todo lo que reluce es oro” cobró significación y le dio sentido a ese divorcio controvertido.
Mi amigo fue feliz un par de años. Una vez que se terminó la pasión y las sábanas se enfriaron, esa mujer idílica y bella se transformó en una mujer mala y egoísta.
Después, durante casi una década intentó remarla, tratar de sacar a flote su matrimonio, de aguantar o tolerar sus berrinches y frivolidades.
La “Frutilla del postre” fue cuando se enteró que su esposa se estaba acostando con su profesor de Tenis.
Ese hecho fue la gota que rebalsó el vaso y sin aguantar más decidió divorciarse.
Mi amigo se veía realmente acabado y dolido, y yo preferí no ahondar más en el tema y tratar de hablar de otra cosa, recordando nuestros viejos tiempos de la adolescencia.
Cuando se retiró, me dijo con los ojos vidriosos:
- Cuidala a tu esposa, porque vale oro. No se consiguen mujeres así.
Estuve a un paso de decirle que se equivocaba y que mi mujer era una persona normal, del montón, sin ninguna virtud que la destaque, y que existían miles de mujeres como ella. Que mi esposa era común, casi vulgar, sin embargo su extraordinaria y hermosa ex-esposa (aunque traicionera) representaba todo lo que un hombre anhelaba o fantasea con tener aunque más no sea una noche de sexo y lujuria con una mujer tan sensual.
Continuará.
Al igual de lo que me había pasado a mí, él también se había masturbado en la adolescencia y que haberla conocido fue como conocer a nuestra estrella favorita de rock.
Quedó prendado, loco de amor, obnubilado por tanta belleza.
Ese enceguecimiento llevó a idealizarla y a no tener la lucidez como para darse cuenta que detrás de tanta belleza, anidaba una mujer vanidosa, artera y manipuladora.
Mi amigo siempre había sido poco inteligente y esa falta de lucidez mental lo había llevado a pensar más con la bragueta que con la cabeza.
Ese gesto de desagrado que yo había alcanzado a advertir cuando desfilaron en el auto descapotable el día que se casaron y la frase de mi amigo ”No todo lo que reluce es oro” cobró significación y le dio sentido a ese divorcio controvertido.
Mi amigo fue feliz un par de años. Una vez que se terminó la pasión y las sábanas se enfriaron, esa mujer idílica y bella se transformó en una mujer mala y egoísta.
Después, durante casi una década intentó remarla, tratar de sacar a flote su matrimonio, de aguantar o tolerar sus berrinches y frivolidades.
La “Frutilla del postre” fue cuando se enteró que su esposa se estaba acostando con su profesor de Tenis.
Ese hecho fue la gota que rebalsó el vaso y sin aguantar más decidió divorciarse.
Mi amigo se veía realmente acabado y dolido, y yo preferí no ahondar más en el tema y tratar de hablar de otra cosa, recordando nuestros viejos tiempos de la adolescencia.
Cuando se retiró, me dijo con los ojos vidriosos:
- Cuidala a tu esposa, porque vale oro. No se consiguen mujeres así.
Estuve a un paso de decirle que se equivocaba y que mi mujer era una persona normal, del montón, sin ninguna virtud que la destaque, y que existían miles de mujeres como ella. Que mi esposa era común, casi vulgar, sin embargo su extraordinaria y hermosa ex-esposa (aunque traicionera) representaba todo lo que un hombre anhelaba o fantasea con tener aunque más no sea una noche de sexo y lujuria con una mujer tan sensual.
Continuará.
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Hasta aquí los hechos.
No vale la pena ahondar más en el divorcio de mi amigo.
Ahora ustedes se preguntarán:
- ¿Cómo hiciste Super Mario para asociar el Tigre con el divorcio de tu amigo, si no existe ni un hilo conductor entre una mala mujer de lindas tetas y un Carro de combate de 58 toneladas de puro acero?.
Pues se equivocan y no están viendo la moraleja o la metáfora con la cual estoy pretendiendo asociar una mujer hermosa, (pero mala, egoísta, traicionera y frívola) con el mítico Tigre.
Pasaré a explicar en forma simple, concisa y clara:
- El Tigre I representa esa mujer hermosa cuya única virtud es esa: SU DESCARADA BELLEZA. Pero nadie ve todos los demás defectos que subyacen debajo de esa apariencia bonita y sensual..
Vemos la virtud más destacable, más imponente porque está a la vista y es su descarada belleza y su sensualidad sin límites, pero no conocemos la intimidad, ni la personalidad, ni la forma de ser, ni su humor, ni si es buena compañera, cocinera o anfitriona, ni sus valores como ser humano, ni los intríngulis de una mujer compleja, vana, egoísta, manipuladora e infiel.
Y con el Tigre I pasa lo mismo:
- Es un carro imponente para la época, casi indestructible, más poderoso que cualquier tanque del momento, de “exageradas” 58 toneladas que imponen miedo y respeto. Pero desconocemos todos sus defectos, lo costoso que era fabricarlo, las millones de horas hombre que se desperdiciaban, lo complejo que era llevarlo al frente, el dolor de cabeza que representaba su mantenimiento, lo delicado de su mecanismo, la pesadilla logística que representaba mantenerlo en un funcionamiento más o menos aceptable y lo poco útil que era en un frente formado por más de 2.000 kilómetros de malos caminos y un terreno áspero muy poco apto para un carro tan delicado.
Mientras que el Sherman o el Comet o el T-34/85 sería como nuestras simples esposas, fieles, aguantadoras, buenas amas de casa, buenas compañeras, amantes aceptables, anfitrionas cálidas, generosas y excelentes madres.
Nuestras esposas no tienen la belleza de la esposa de mi amigo, ni sus ojos hechiceros, ni su rostro cautivante, ni su cuerpo sensual, ni sus tetas turgentes, ni sus piernas como 2 columnas de mármol, pero tienen otros atributos: Fidelidad, calidez, aguante, sencillez, sentido del humor, sentido común, buena cocinera y excelentes compañeras.
Y no son atributos cualesquiera, sino los más importantes porque son los pilares en los que se basa la estabilidad de todo matrimonio. (Deseo destacar que son los atributos más importantes, por eso los pongo subrayado).
Un bello rostro y un par de grandes tetas no son suficientes para conformar una relación. De la misma manera que 58 Tn de acero no son suficientes para transformar al Tigre en un buen tanque, útil a las necesidades estratégicas de la Wehrmacht, fácil de fabricar y mantener, económico, armónico, equilibrado, ágil, eficiente y rendidor. Y para mí esos son los pilares de un buen tanque, no una mole de 58 Tn como el Tiger o los 200mm de blindaje del KönisTiger.
Los 200mm del KónisTiger son como las tetas turgentes de la esposa de mi amigo. Pero nos dejamos obnubilar por las tetas y no vemos todo el conjunto.
Pues para mí el Tigre sería como esa mujer hermosa y sensual, pero que en el fondo es mala, egoísta, manipuladora, vanidosa, gastadora de dinero, compradora compulsiva y por sobre todas las cosas: INFIEL – Mientras que el Comet es todo lo contrario, pero sin las tetas turgentes.
Esperando que mi metáfora les haya resultado entretenida, pero por sobre todas las cosas ilustrativa y pedagógica, les mando un saludo a todos.
PD: Por favor lean 2 veces la historia.
Si a algún forista le parece ridícula mi moraleja o el ejemplo le parece retorcido, sin asidero o “agarrado de los pelos”, le pido un millón de disculpas.
Fue esa la asociación que yo hice en ese rapto de lucidez.
Juro que no tomé ninguna droga ni estoy loco. (Sigo un poco cansado, quizás, pero no loco).
Salud
No vale la pena ahondar más en el divorcio de mi amigo.
Ahora ustedes se preguntarán:
- ¿Cómo hiciste Super Mario para asociar el Tigre con el divorcio de tu amigo, si no existe ni un hilo conductor entre una mala mujer de lindas tetas y un Carro de combate de 58 toneladas de puro acero?.
Pues se equivocan y no están viendo la moraleja o la metáfora con la cual estoy pretendiendo asociar una mujer hermosa, (pero mala, egoísta, traicionera y frívola) con el mítico Tigre.
Pasaré a explicar en forma simple, concisa y clara:
- El Tigre I representa esa mujer hermosa cuya única virtud es esa: SU DESCARADA BELLEZA. Pero nadie ve todos los demás defectos que subyacen debajo de esa apariencia bonita y sensual..
Vemos la virtud más destacable, más imponente porque está a la vista y es su descarada belleza y su sensualidad sin límites, pero no conocemos la intimidad, ni la personalidad, ni la forma de ser, ni su humor, ni si es buena compañera, cocinera o anfitriona, ni sus valores como ser humano, ni los intríngulis de una mujer compleja, vana, egoísta, manipuladora e infiel.
Y con el Tigre I pasa lo mismo:
- Es un carro imponente para la época, casi indestructible, más poderoso que cualquier tanque del momento, de “exageradas” 58 toneladas que imponen miedo y respeto. Pero desconocemos todos sus defectos, lo costoso que era fabricarlo, las millones de horas hombre que se desperdiciaban, lo complejo que era llevarlo al frente, el dolor de cabeza que representaba su mantenimiento, lo delicado de su mecanismo, la pesadilla logística que representaba mantenerlo en un funcionamiento más o menos aceptable y lo poco útil que era en un frente formado por más de 2.000 kilómetros de malos caminos y un terreno áspero muy poco apto para un carro tan delicado.
Mientras que el Sherman o el Comet o el T-34/85 sería como nuestras simples esposas, fieles, aguantadoras, buenas amas de casa, buenas compañeras, amantes aceptables, anfitrionas cálidas, generosas y excelentes madres.
Nuestras esposas no tienen la belleza de la esposa de mi amigo, ni sus ojos hechiceros, ni su rostro cautivante, ni su cuerpo sensual, ni sus tetas turgentes, ni sus piernas como 2 columnas de mármol, pero tienen otros atributos: Fidelidad, calidez, aguante, sencillez, sentido del humor, sentido común, buena cocinera y excelentes compañeras.
Y no son atributos cualesquiera, sino los más importantes porque son los pilares en los que se basa la estabilidad de todo matrimonio. (Deseo destacar que son los atributos más importantes, por eso los pongo subrayado).
Un bello rostro y un par de grandes tetas no son suficientes para conformar una relación. De la misma manera que 58 Tn de acero no son suficientes para transformar al Tigre en un buen tanque, útil a las necesidades estratégicas de la Wehrmacht, fácil de fabricar y mantener, económico, armónico, equilibrado, ágil, eficiente y rendidor. Y para mí esos son los pilares de un buen tanque, no una mole de 58 Tn como el Tiger o los 200mm de blindaje del KönisTiger.
Los 200mm del KónisTiger son como las tetas turgentes de la esposa de mi amigo. Pero nos dejamos obnubilar por las tetas y no vemos todo el conjunto.
Pues para mí el Tigre sería como esa mujer hermosa y sensual, pero que en el fondo es mala, egoísta, manipuladora, vanidosa, gastadora de dinero, compradora compulsiva y por sobre todas las cosas: INFIEL – Mientras que el Comet es todo lo contrario, pero sin las tetas turgentes.
Esperando que mi metáfora les haya resultado entretenida, pero por sobre todas las cosas ilustrativa y pedagógica, les mando un saludo a todos.
PD: Por favor lean 2 veces la historia.
Si a algún forista le parece ridícula mi moraleja o el ejemplo le parece retorcido, sin asidero o “agarrado de los pelos”, le pido un millón de disculpas.
Fue esa la asociación que yo hice en ese rapto de lucidez.
Juro que no tomé ninguna droga ni estoy loco. (Sigo un poco cansado, quizás, pero no loco).
Salud
Última edición por Super Mario el 08 Jun 2015, 06:03, editado 1 vez en total.
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Una última reflexión:
- Sin ánimo de contradecirme o polemizar, vuelvo a plantear la siguiente hipótesis:
Si ustedes me preguntasen:
- ¿Super Mario, si tuvieras que elegir montar en un T-34 o Comet o en un Tiger I, cuál elegirías?
Yo elegiría el Tigre I sin diduralo. (Y si pudiera elegiría el KönisTiger)
E imagino que ustedes me saltarían a la yugular y me tratarían de mentiroso, contradictorio, manipulador y farsante.
Y no es así.
Y pasaré a fundamentar:
- Mi decisión tiene 2 condimentos negativos:
1) Es egoísta.
2) Mi decisión está perturbada o contaminada por el temor psicológico.
Pasaré a explicar una por una:
- Es “Egoísta” por la sencilla razón de que yo estoy pensando en mí y en mi seguridad. No me interesa qué es lo mejor para la Wehrmacht, ni en las necesidades del Frente Oriental, ni en la estrategia a seguir, sino que tan sólo pienso en mí.
- Y mi elección del Tiger está perturbada por el “Temor psicológico”, porque el Tiger por su grueso blindaje representa SEGURIDAD y PROTECCIÓN.
No me interesa que sea un Carro de combate costoso, ni que se desperdicien miles de horas hombres y toneladas de recursos, ni que requiera mucho mantenimiento, ni que no sea el Carro que necesita Alemania, ni que no sea afín a los intereses estratégicos.
Tan sólo me interesa que me va a dar más protección y poder de fuego que un Sherman.
Que “No sea fiable” no me interesa, porque si se descompone tengo la posibilidad de huir.
Ahora si ustedes me preguntasen si yo soy un General alemán que carro elegiría, sin dudar les respondería:
- Prefiero más Panzer IV a un Tiger.
- ¿Por qué esa diferencia de elección y criterio si yo fuese un simple Carrista a un General?:
Porque los intereses de ambos por momentos son divergentes y hasta opuestos.
El soldado piensa en su vida. El General piensa en ganar la batalla.
Para un General, el soldado es un mero instrumento en sus manos que le va a permitir alcanzar su objetivo. Que el soldado muera o sobreviva es tan sólo un efecto colateral inevitable y un sacrificio necesario. (Puede sonar brutal, casi inmoral e inhumano, pero es la triste realidad y un axioma explícito de toda guerra).
De allí la anécdota que contó Chepicoro sobre el libro de "Death Traps" de Belton Cooper, de que Patton prefería que se le de prioridad al Sherman antes que perder tiempo en el M-26 Pershing, mientras que los carristas americanos reclamaban por un carro mejor protegido.
Continuará.
- Sin ánimo de contradecirme o polemizar, vuelvo a plantear la siguiente hipótesis:
Si ustedes me preguntasen:
- ¿Super Mario, si tuvieras que elegir montar en un T-34 o Comet o en un Tiger I, cuál elegirías?
Yo elegiría el Tigre I sin diduralo. (Y si pudiera elegiría el KönisTiger)
E imagino que ustedes me saltarían a la yugular y me tratarían de mentiroso, contradictorio, manipulador y farsante.
Y no es así.
Y pasaré a fundamentar:
- Mi decisión tiene 2 condimentos negativos:
1) Es egoísta.
2) Mi decisión está perturbada o contaminada por el temor psicológico.
Pasaré a explicar una por una:
- Es “Egoísta” por la sencilla razón de que yo estoy pensando en mí y en mi seguridad. No me interesa qué es lo mejor para la Wehrmacht, ni en las necesidades del Frente Oriental, ni en la estrategia a seguir, sino que tan sólo pienso en mí.
- Y mi elección del Tiger está perturbada por el “Temor psicológico”, porque el Tiger por su grueso blindaje representa SEGURIDAD y PROTECCIÓN.
No me interesa que sea un Carro de combate costoso, ni que se desperdicien miles de horas hombres y toneladas de recursos, ni que requiera mucho mantenimiento, ni que no sea el Carro que necesita Alemania, ni que no sea afín a los intereses estratégicos.
Tan sólo me interesa que me va a dar más protección y poder de fuego que un Sherman.
Que “No sea fiable” no me interesa, porque si se descompone tengo la posibilidad de huir.
Ahora si ustedes me preguntasen si yo soy un General alemán que carro elegiría, sin dudar les respondería:
- Prefiero más Panzer IV a un Tiger.
- ¿Por qué esa diferencia de elección y criterio si yo fuese un simple Carrista a un General?:
Porque los intereses de ambos por momentos son divergentes y hasta opuestos.
El soldado piensa en su vida. El General piensa en ganar la batalla.
Para un General, el soldado es un mero instrumento en sus manos que le va a permitir alcanzar su objetivo. Que el soldado muera o sobreviva es tan sólo un efecto colateral inevitable y un sacrificio necesario. (Puede sonar brutal, casi inmoral e inhumano, pero es la triste realidad y un axioma explícito de toda guerra).
De allí la anécdota que contó Chepicoro sobre el libro de "Death Traps" de Belton Cooper, de que Patton prefería que se le de prioridad al Sherman antes que perder tiempo en el M-26 Pershing, mientras que los carristas americanos reclamaban por un carro mejor protegido.
Continuará.
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- General de Brigada
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Entonces, resumiendo:
- El Tiger es como esa mujer hermosa, de piernas largas y tetas perfectas, pero cuya única virtud es la belleza por la belleza misma, sin otro sustento, virtud o atributo. Detrás de esa hermosa fachada se esconde una mujer manipuladora, traicionera, infiel, ególatra, vanidosa y egoísta.
Mientras que el Panzer IV (o Sherman o T-34/85 o Comet) es como esa mujer que no se destaca por su belleza ni sensualidad, pero que posee un montón de atributos menos vistosos (pero no por ello menos importantes) como ser la fidelidad, el sentido del humor, la colaboración, compañerismo, honradez y generosidad.
En dicha metáfora, la “Belleza y sensualidad” representa el grueso blindaje, mientras que el egoísmo, la infidelidad, la manipulación representa lo costoso del Tiger y su poca fiabilidad.
De la misma manera que la fidelidad, el sentido del humor, la colaboración, el compañerismo, la honradez y la generosidad representaría la robustez, practicidad, agilidad, fiabilidad y el bajo costo del T-34/85 o del Comet.
El Tiger sería una “Mujer sensual” para una sola noche.
El T-34 (o Comet) sería una compañera para toda la vida.
Saludos a todos y perdón por mi moraleja tan insólita
- El Tiger es como esa mujer hermosa, de piernas largas y tetas perfectas, pero cuya única virtud es la belleza por la belleza misma, sin otro sustento, virtud o atributo. Detrás de esa hermosa fachada se esconde una mujer manipuladora, traicionera, infiel, ególatra, vanidosa y egoísta.
Mientras que el Panzer IV (o Sherman o T-34/85 o Comet) es como esa mujer que no se destaca por su belleza ni sensualidad, pero que posee un montón de atributos menos vistosos (pero no por ello menos importantes) como ser la fidelidad, el sentido del humor, la colaboración, compañerismo, honradez y generosidad.
En dicha metáfora, la “Belleza y sensualidad” representa el grueso blindaje, mientras que el egoísmo, la infidelidad, la manipulación representa lo costoso del Tiger y su poca fiabilidad.
De la misma manera que la fidelidad, el sentido del humor, la colaboración, el compañerismo, la honradez y la generosidad representaría la robustez, practicidad, agilidad, fiabilidad y el bajo costo del T-34/85 o del Comet.
El Tiger sería una “Mujer sensual” para una sola noche.
El T-34 (o Comet) sería una compañera para toda la vida.
Saludos a todos y perdón por mi moraleja tan insólita
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Super Mario escribió:La cantidad de veces que me masturbé por esa actriz creo que quizás sería un record “Guinnes”
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- General de Ejército
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Vamos, que es susto o muerte ¿no? Con comparaciones tan simplistas yo te hago escoger fragatas de vela en lugar de acorazados.
No defiendas lo indefendible, y vuelve a tu historia, que la tienes abandonada.
Saludos
No defiendas lo indefendible, y vuelve a tu historia, que la tienes abandonada.
Saludos
Tu regere imperio fluctus Hispane memento
- ACB, el Mutie
- General de Brigada
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Super Mario escribió:La cantidad de veces que me masturbé por esa actriz creo que quizás sería un record “Guinnes”
Saludos
Tú dame el tanque y yo haré el resto ;)
Las verdades a medias son mentiras
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Super Mario escribió:La cantidad de veces que me masturbé por esa actriz creo que quizás sería un record “Guinnes”
Ayy dios...esto ya es el despiporre total
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- General de Ejército
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Sí, creo que se ha salido un poco del tiesto.
Saludos
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- Sargento Segundo
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Super Mario escribió:
Estuve a un paso de decirle que se equivocaba y que mi mujer era una persona normal, del montón, sin ninguna virtud que la destaque, y que existían miles de mujeres como ella. Que mi esposa era común, casi vulgar, sin embargo su extraordinaria y hermosa ex-esposa (aunque traicionera) representaba todo lo que un hombre anhelaba o fantasea con tener aunque más no sea una noche de sexo y lujuria con una mujer tan sensual.[/i]
Continuará.
Estimado Super Mario:
Sin querer entar a comentar estos últimos post, este comentario al igual que algunas comparaciones no es muy afortunado creo yo, o al menos seguro que su esposa así lo pensaría.
Quizás no sea yo el más apropiado para hacer este comentario, pero tambien creo que esto se está saliendo un poco del tiesto como dice Domper.
Y el AMX30 es, como siempre en mi opinion, el mayor fracaso en la historia reciente de los MBT.
Saludos
Los que están siempre de vuelta de todo son los que nunca han ido a ninguna parte. Antonio Machado
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- General de Brigada
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
¿¿De todo lo que escribí en los 8 Post, lo que más le llamó la atención fue la palabra "Masturbar"???
Estimados colegas, deberían centrarse en la metáfora y la alegoría que escribí, y no distraerse con conceptos periféricos e irrelevantes que no hacen a la cuestión.
Lo importante es:
El Tiger es como esa mujer hermosa, de piernas largas y tetas perfectas, pero cuya única virtud es la belleza por la belleza misma, sin otro sustento, virtud o atributo. Detrás de esa hermosa fachada se esconde una mujer manipuladora, traicionera, infiel, ególatra, vanidosa y egoísta.
Mientras que el Panzer IV (o Sherman o T-34/85 o Comet) es como esa mujer que no se destaca por su belleza ni sensualidad, pero que posee un montón de atributos menos vistosos (pero no por ello menos importantes) como ser la fidelidad, el sentido del humor, la colaboración, compañerismo, honradez y generosidad.
El Tiger sería una “Mujer sensual” para una sola noche.
El T-34 (o Comet) sería una compañera para toda la vida.
Mis masturbaciones de adolescente son totalmente anecdóticas e intrascendentes.
Saludos.
Estimados colegas, deberían centrarse en la metáfora y la alegoría que escribí, y no distraerse con conceptos periféricos e irrelevantes que no hacen a la cuestión.
Lo importante es:
El Tiger es como esa mujer hermosa, de piernas largas y tetas perfectas, pero cuya única virtud es la belleza por la belleza misma, sin otro sustento, virtud o atributo. Detrás de esa hermosa fachada se esconde una mujer manipuladora, traicionera, infiel, ególatra, vanidosa y egoísta.
Mientras que el Panzer IV (o Sherman o T-34/85 o Comet) es como esa mujer que no se destaca por su belleza ni sensualidad, pero que posee un montón de atributos menos vistosos (pero no por ello menos importantes) como ser la fidelidad, el sentido del humor, la colaboración, compañerismo, honradez y generosidad.
El Tiger sería una “Mujer sensual” para una sola noche.
El T-34 (o Comet) sería una compañera para toda la vida.
Mis masturbaciones de adolescente son totalmente anecdóticas e intrascendentes.
Saludos.
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- Teniente
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El Panther el Tiger y el KönisTiger, análisis de 3 fracasos
Ten en cuenta que hay expresiones que se nos taladran en el cerebro y no recordamos nada más. Ya puede ser la obra literaria más maravillosa o un "ladrillo" que no leería nadie salvo unos pocos investigadores (que tirarían con bala envenenada), que pones esa palabra y puff, no existe nada más.
- “El sueño de la razón produce monstruos”. Francisco de Goya.
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