La Pugna Continuación de "El Visitante"

[Domper]

De Globalpedia, la Enciclopedia Total.

El rey Abdalá se granjeó la animadversión de los árabes de Oriente Medio al actuar como un rey cliente de Gran Bretaña. Por otra parte Abdalá se consideraba el sucesor de los hachemitas y por tanto con derecho a reinar no sobre la artificial Transjordania sino sobre un renovado califato que incluyese todo Oriente Medio. Eso le enemistó con los notables árabes de las regiones que Abdalá ambicionaba y, especialmente, con los saudíes, que habían expulsado a la familia hachemita de La Meca y el Heda en 1925. Además su tambaleante política exterior y su fama de cobardía hicieron que sus súbditos lo despreciasen.

El ejército del rey Abdalá, cuyo núcleo era la Legión Árabe, un cuerpo de tropas dirigido por oficiales británicos (aunque gran parte de los oficiales subalternos eran árabes), que aunque nominalmente estaba sujeto a la autoridad real, se coordinaba con el ejército británico. La Legión estaba reclutada entre los nómadas beduinos, que estaban unidos al rey por devoción personal. Al empezar la guerra la legión había crecido y en 1941 estaba constituida por una brigada motorizada y otra en periodo de formación. Tras el golpe de estado de Rashid Alí en Irak los amos ingleses de Abdalá exigieron que la brigada motorizada fuese enviada a Mesopotamia.

Cuando Von Manstein derrotó al ejército británico en Suez y cayó sobre Palestina, Abdalá vio peligrar su reino, por lo que decidió unirse al carro de los vencedores: tras recibir instrucciones secretas de Abdalá, militares transjordanos que contaban con la confianza del monarca detuvieron a sus superiores ingleses, y la Legión Árabe cambió de bando, permitiendo que los iraquíes de Rashid Alí recuperasen Bagdad. Sin embargo durante los Cuatro Días de Julio el rey pensó que las tornas habían cambiado. Ordenó la liberación de los militares ingleses y mandó que la Legión se uniese a sus antiguos dominadores ingleses. Esta nueva traición hizo que el rey perdiese el respeto de buena parte de sus soldados, que empezaron a desertar. El rey rellenó las filas de su ejército con voluntarios de la fe, pensando que su número compensaría la falta de entrenamiento y su indisciplina. Parte de esos voluntarios fueron enviados a Palestina con el objetivo declarado de provocar una revuelta antialemana y antihebrea, pero con la misión real de incorporar Palestina a Transjordania.

Sin embargo el general Rommel, en lugar de mantenerse a la defensiva, lanzó una fulgurante invasión de Transjordania. Tras una demostración aérea el rey huyó de la capital, en la que se proclamó la república. Abdalá intentó escapar disfrazado de mujer, pero fue reconocido y asesinado. Su cuerpo fue arrastrado por las calles por la multitud, mutilado y exhibido en el zoco.

[APVid]

No es así, los ingleses enviaron convoyes defendidos por el Mar Rojo sin que los italianos pudiesen hacer mucho.

Cierto, los medios italianos eran limitados y no los usaron todo lo adecuadamente posible.


En la LTU la cosa es peor:
-Eliminado el tráfico y operaciones navales en el Mediterráneo, las unidades italianas y alemanas entrenadas en operaciones antibuque están libres, salvo las pocas que se usen para acabar con los pocos barcos que quedan en Chipre, Creta y Malta.
Eso permite el envió de esas unidades a Egipto y Etiopia.

-Somalia francesa en este caso apoya al Pacto bloqueando el punto más estrecho de salida.

-Las tropas de Sudán solo tienen una línea de retirada y la clave igual que para Gordon era Berber donde empieza la tradicional ruta a la costa, y por donde pasa la línea ferrea.

-Las tropas egipcias del condominio anglo-egipcio han quedado desorientadas, pues Egipto está en manos del Pacto, y puede que exista un gobierno pro-Pacto, por lo que como mínimo estarán poco colaborativas e incluso puede que ataquen a los británicos.

-Las tribus y población sudanesa igual que cuando Gordon soltó que venía a organizar la retirada, le quitarán su apoyo a los británicos e incluso intentarán hacer méritos con la nueva potencia que llega al sentirse abandonados (así pasó con el mahadismo).


En resumen los británicos deben organizar una retirada rápida primero a Berber luego hacia Port Sudán y Suakim, en medio de una población y un ejército hóstil, bajo ataques aéreos enemigos; debiendo abandonar dos frentes donde combate en Kassala y el Nilo. Perdiendo en su retirada su material pesado.
Luego tratar de embarcar en los cargueros que hayan llegado a Port Sudán y Suakim y salir del Mar Rojo ante las unidades aéreas del Pacto y frente a los cañones de Yibuti.

Una retirada muy típicamente británica que puede ser un desastre enorme. XX Cuerpo de Ejército ya deberían darlo por perdido, y las unidades de la Royal que entren para apoyar la evacuación van a sufrir fuertes pérdidas.

[Domper]

Paciencia, todo se andará.

Saludos

[kaiser-1]

Como si no supiese Vuestra Merced lo rápidos que somos en elucubrar miles de teorías, suposiciones, posibilidades y varias opciones de futuro (en mi caso mediante consulta de bola de cristal). Todo con tal de pasar el tiempo hasta el siguiente relato.
Si Monseñor Gasparcher debería estar hasta el moño de que le trilláramos todos los caminos antes de que pudiera decir "Y la historia sigue así..."

[Domper]

Es que desde Jartum hay otra posibilidad, que es retirarse hacia el alto Nilo y Uganda. Difícil, pero no menos que escapar desde Birmania hacia Assam.

Saludos

[Gaspacher]

Como si no supiese Vuestra Merced lo rápidos que somos en elucubrar miles de teorías, suposiciones, posibilidades y varias opciones de futuro (en mi caso mediante consulta de bola de cristal). Todo con tal de pasar el tiempo hasta el siguiente relato.
Si Monseñor Gasparcher debería estar hasta el moño de que le trilláramos todos los caminos antes de que pudiera decir "Y la historia sigue así..."

Que va, si al final siempre os acababa sorprendiendo

saludos

[kaiser-1]

Como si no supiese Vuestra Merced lo rápidos que somos en elucubrar miles de teorías, suposiciones, posibilidades y varias opciones de futuro (en mi caso mediante consulta de bola de cristal). Todo con tal de pasar el tiempo hasta el siguiente relato.
Si Monseñor Gasparcher debería estar hasta el moño de que le trilláramos todos los caminos antes de que pudiera decir "Y la historia sigue así..."

Que va, si al final siempre os acababa sorprendiendo

saludos

Lo cierto es que sí, pero siempre habrá quién pensará "Esto ya lo sabía yo " Y habrá otros que digan "será , ni me olí la tostada"

[Gaspacher]

Aun recuerdo las elucubraciones mientras la flota del almirante Cámara se dirigía a Newport y Filadelfia... o cuando se preparaba la invasión de Nueva Inglaterra... y que decir del periplo de la flota española por el Mediterráneo en dirección al Mar Negro

[kaiser-1]

Cuando leí lo de Cámara se me dibujó una sonrisa de oreja a oreja, pero yo intervine en su Opus Magna casi al final.

[Domper]

Capítulo 9

Sebastian Haffner. “El nacimiento de Europa”. Op.cit.

La inesperada invasión británica de Portugal trastornó tanto las operaciones militares del Pacto de Aquisgrán como la política de la Unión Paneuropea.

En Portugal el Doctor Oliveira Salazar dirigía el “Estado Novo”, un estado corporativista, nacionalista y antiliberal, de fuerte inspiración católica, ideológicamente muy cercano al fascismo italiano y al Movimiento Nacional español. Sin embargo el régimen portugués, que mantenía buenas relaciones con Inglaterra, seguía recelando de España. Durante los años treinta el Estado Novo había estado ideológicamente enfrentado con los regímenes populistas de la Segunda República Española, y aunque había firmado un pacto de no agresión con el mucho más afín régimen franquista, en algunos medios lisboetas se consideraba que ese tratado le alejaba de su vieja aliada británica. Intentando mantener las buenas relaciones con Inglaterra, Portugal había rechazado adherirse a la Unión Paneuropea. Aunque se había declarado neutral, su marina había colaborado a la Royal Navy británica vigilando los movimientos de los barcos del Pacto en el Atlántico.

Tras las reclamaciones de la Unión Paneuropea, Salazar ordenó al almirante Mata Oliveira, jefe de la marina portuguesa, que cesase sus provocaciones. Aunque aparentemente Mata Oliveira aceptó la orden de Salazar, la consideró como una intromisión intolerable de la Unión Paneuropea en la política portuguesa, que acabaría con la subordinación de Portugal a su vecino español. Mata Oliveira ofreció a los ingleses su colaboración si estos le ayudaban a derrocar a Salazar.

Sin embargo el Primer Ministro británico, Winston Churchill, estaba planeando una operación mucho más ambiciosa: deseaba que su ejército desembarcase en Portugal para emular la “guerra peninsular”, la campaña que Wellington había dirigido contra Napoleón en la Península Ibérica. Churchill había prestado oídos a exiliados españoles según los cuales el régimen franquista estaba a punto de desmoronarse. Suponiendo que el asesinato de Goering —que creía cometido por un comando que había enviado poco antes a Palestina— iba a causar una crisis interna en Alemania, pensó que era la ocasión para desembarcar en la Península Ibérica y derrocar el régimen del Generalísimo Franco. Churchill aprovechó la oferta de Mata Oliveira para imponer al Estado Mayor Imperial la operación de Portugal. Con el apoyo de los servicios de inteligencia ingleses, y disponiendo de abundantes fondos, el almirante Mata consiguió sumar a su conspiración a varios altos jefes del ejército y de la aviación lusa, que situaron a hombres de su confianza en puestos claves de las fuerzas armadas.

La madrugada del 23 de agosto, aprovechando que los Ministerios estaban casi vacíos, los conspiradores tomaron el de la Guerra y el Estado Mayor del Ejército, apresando al general Miranda Cabral, jefe del Estado Mayor, y a otros oficiales fieles a Oliveira Salazar. Los conjurados controlaron las comunicaciones portuguesas e hicieron correr el bulo de que era inminente una invasión germanoespañola, que iba a contar con el visto bueno de Salazar. Haciendo un llamamiento al republicanismo no olvidado del todo en el ejército, dieron órdenes de resistirse a la supuesta invasión, y colaborar con la fuerza expedicionaria británica que iba a desembarcar en el país. Varios conspiradores se hicieron con el control de puestos claves, como las baterías costeras del estuario del Tajo, la mayor parte de los aeródromos, y de la primera división, acantonada en Lisboa. Asimismo, ordenaron activar los planes hechos para el caso de una invasión española, que contemplaban la retirada de las guarniciones portuguesas a las cercanías de Lisboa. Se aprovecharon los movimientos de las unidades para deponer a los militares que no consideraban afines.

Con la ayuda de los sublevados, el desembarco británico pudo efectuarse sin inconvenientes, a excepción de algunas escaramuzas en Oporto. La mayor resistencia la encontraron en el Atlántico. En las Azores el batallón de infantería 17, de guarnición en Terceira, resistió durante 48 horas el ataque de una brigada británica. En Madeira la guarnición resistió exitosamente el intento de invasión efectuado por fuerzas especiales inglesas, siendo preciso enviar una brigada originalmente destinado a la proyectada y no realizada invasión de Tenerife.

Al no encontrar resistencia, y disponiendo de las instalaciones portuarias portuguesas, especialmente las de Lisboa, la fuerza expedicionaria británica pudo trasladarse rápidamente a Portugal. Siguiendo las instrucciones de Londres el cuerpo de ejército canadiense intentó la invasión del sur de España, pero fue rechazado en Cartaya y estuvo cerca de ser derrotado en Badajoz y Elvás, teniendo que pasar a la defensiva.

Sin embargo, la RAF y la Royal Navy aprovecharon las bases portuguesas para atacar a las unidades navales del Pacto presentes en España. La flota tuvo que abandonar Cádiz para refugiarse en el Mediterráneo. Los bombarderos ingleses atacaron las bases de submarinos de Galicia. Aunque los cazas españoles y alemanes infligieron severas pérdidas, en pocos días fueron hundidos tres submarinos, y el puerto de Vigo sufrió daños importantes.

El ejército y la aviación españoles eran muy numerosos y tenían un núcleo de fuerzas veteranas; tras la movilización general decretada el octubre de 1940 tenía clara superioridad numérica sobre los invasores británicos, que en un primer momento no se atrevieron a contar con los portugueses, de lealtad dudosa. Grandes partes del norte y noroeste de Portugal fueron ocupados casi sin oposición, incluyendo algunas de las vitales minas de Wolframio. Pero cuando los españoles se encontraron con resistencia, fueron aparentes sus debilidades: su armamento era viejo, heterogéneo, y estaba muy gastado, ya que databa de la Guerra Civil y procedía en buena parte de capturas al bando republicano. El Ejército Español se encontró con dificultades al enfrentarse a los modernos tanques y aviones británicos. Tan solo en Galicia, donde un grupo de caza alemán reforzaba a los españoles, la R.A.F. sufrió pérdidas importantes. El generalísimo Franco, consciente de la obsolescencia de sus fuerzas armadas, solicitó ayuda a Alemania…

[Gaspacher]

Bombardeos sobre las rias gallegas, sobre todo la de Ferrol en otoño... lluvia y nubes abundantes, viento, un objetivo en una ria de 2km de ancho....

...las bajas entre los bombarderos obligados a volar bajo habran sido pavorosas.

¿Cuantas quintas habran sido llamadas en esa movilizacion? Armas habia y se podian fabricar mas asi como remozar armas gastadas. Por ejemplo tras un año de guerra y calma es muy posible que la mayor parte de la artilleria hubiese sido reentubada...y al ritmo de produccion logrado en la GCE posiblemente se hubiesen fabricado suficientes cañones para unos 8 RACA, esto es unos 300 cañones

Viejas si, pero no obsoletas

[APVid]

Bombardeos sobre las rias gallegas, sobre todo la de Ferrol en otoño... lluvia y nubes abundantes, viento, un objetivo en una ria de 2km de ancho....

Además el gobierno español conocía la situación de sus defensas, el informe de Carrero Blanco de noviembre de 1940 insistía: Ferrol sería principalmente una base de submarinos y se bebía disponer de defensa antiaérea de Ferrol y Bilbao.
También se preveía reforzar a defensa antiaérea de Cádiz y concentrar la fuerza de superficie en Cartagena.

Por tanto se armaría como se pudiera defensas AA para esos objetivos.

Así pues acertar a varios submarinos es complicado.

[Gaspacher]

Supongo que la defensa aaa de esas bases correria ahora a cargo de los alemanes. De todas gormas los 3 submarinos pueden haberse perdido en sucesivos bombardeos

[urquhart]

Hola a todos,

tampoco pude dejarse un triunfo al azar... imaginemos por un momento 3 submarinos abarloados a un tender, y una bomba acierta en éste, produciéndose una serie de explosiones en cadena



En cuanto a la DCA o AAA más allá del problema que puede estar solucionado, como indica Gaspacher, el asunto versaría en relación a los elementos de detección.

[APVid]

Supongo que la defensa aaa de esas bases correria ahora a cargo de los alemanes.

¿Y no habrían construido bunkers como hicieron en Francia, Noruega y Alemania?

En ese caso los ataques aéreos no tendrían éxito contra los bunkers. Por lo que la mejor posibilidad es que cogieran a los submarinos entrando o saliendo.

Pero si hay grandes radares en Galicia y los submarinos ya tienen el snorkell primitivo, sería complicado que los acertasen así, a diferencia del Golfo de Vizcaya el submarino ya sale a mar abierto.
Podrían intentar minar las rías, cosa ya prevista en los planes defensivos, y las rías tienen corrientes muy fuertes (además del aporte de agua fluvial hacia el exterior).

Quizás si fuera un gran barco los atacarían en la espera entre mareas (para evitar las corrientes se espera a la calma).