Anexo: desarrollos en el universo de "El Visitante"
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Anexo: desarrollos en el universo de "El Visitante"
La producción de los cañones de 45mm en Plasencia se inicio durante la Guerra Civil, creo que en el 38, al menos recuerdo que se complementaron las Bia´s anticarro con piezas de fabricación propia.
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.
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Anexo: desarrollos en el universo de "El Visitante"
De Globalpedia, la Enciclopedia Total.
Panzer 41 Lince
El Panzerkampfwagen 41 Lince fue un tanque ligero diseñado por el grupo Europanzer para sustituir a los tanques Panzer 38 del Ejército Español, y que fue utilizado intensamente por el Pacto de Aquisgrán en la Guerra de Supremacía y en varios conflictos coloniales de la posguerra.
Desarrollo y producción
En 1941 el Ejército Español recibió gran cantidad de tanques Panzer 38 checos, parte nuevos y parte dados de baja por Alemania, que fueron llamados Pardillos por lo sespañoles. Con ellos se equiparon varias unidades blindadas. En los combates de Portugal quedaron en evidencia sus limitaciones, tanto por su ligero armamento como por la escasa protección. Parte de los Panzer 38 supervivientes fueron rearmados con un cañón de 75 mm instalado en una torre abierta (Super Pardillo). Sin embargo la solución no era por completo satisfactoria, por lo ligero del chasis y por la escasa protección, por lo que se solicitó a la empresa italiana Ansaldo, que junto con la francesa Renault acababa de formar el grupo Europanzer, que diseñase un sustituto.
Los requerimientos españoles eran difíciles de cumplir: el nuevo tanque tenía que estar armado con un cañón de 75 mm que pudiese utilizarse tanto para la lucha antitanque como para el apoyo táctico. Tenía que estar mejor protegido que el Panzer 38; tenía que pesar menos de 25 toneladas. Finalmente, la producción en serie debía iniciarse antes de un año.
Para conocer las necesidades y capacidades industriales españolas, el equipo diseñador de Ansaldo trabajó en estrecha relación con el comandante Verdeja, inventor del tanque de su mismo nombre. Ansaldo diseñó una versión a escala del tanque Jaguar, con un motor V8 que era una versión acortada del HS-51 de doce cilindros en V que llevaba la versión francesa del Jaguar. Llevaba la misma transmisión, y una suspensión simplificada derivada del sistema Horstmann que utilizaban varios tipos de tanquetas inglesas. Fue escogida por ser sencilla, fácil de mantener y de reparar, y tener buenas prestaciones todoterreno. La protección del nuevo tanque era limitada, de tan solo 40 mm en el frente y en el escudo de la torre. Como armamento principal se escogió un cañón ligero de 75L39 derivado del cañón checo vz.30 que se estaba fabricando en España bajo licencia.
El prototipo, que fue llamado Lince, fue presentado a las autoridades españolas en febrero de 1942, que lo aceptaron, aunque exigiendo el aumento de la protección, que llegó a 60 mm en la parte superior del glacis y a 75 mm en escudo de la torre, lo que elevó el peso del carro hasta las 27 Tn. Afortunadamente tanto la suspensión como la transmisión habían sido diseñadas para admitir pesos de hasta 30 Tn, por lo que los cambios no conllevaron retrasos.
Varios ejércitos del Pacto de Aquisgrán se interesaron en el nuevo tanque, idóneo para sustituir a los tanques ligeros a los que se encomendaban las misiones de apoyo a la infantería. Mientras que el ejército alemán destinaba a dichas misiones (y también a la lucha contracarro) el StuG, un blindado sin torre derivado del Panzer III, los ejércitos francés o italiano preferían tanques convencionales con armamento en torre. El Lince tenía similar potencia de fuego que el StuG, y aunque tenía menos protección, se compensaba por la flexibilidad que suponía disponer de torre giratoria.
Italia solicitó 3.000 unidades para sustituir a los tanques M11, M13 y M14, y Francia otras tantas, que debían sustituir a los Renault R-35 y Hotchkiss H-35 y H-39. Yugoslavia pidió 800, y Suecia adquirió la licencia de producción, fabricando 600 tanques, llamados Stridvagn 41, que fueron entregados a partir de 1943. También se interesó Finlandia, al considerar que el nuevo tanque era ideal para combatir en terrenos difíciles, y solicitó otras 400 unidades del Stridvagn 41. La industria pesada española, hasta entonces, solo había fabricado pequeñas series de blindados, y aunque había iniciado la producción de 1.000 tanques Verdeja (cuya producción se anuló tras finalizar 60 unidades), no podía afrontar todos los pedidos, por lo que tuvo que solicitar la asistencia de Europanzer. Se agrupó la industria armamentística pesada española en la empresa Santa Bárbara, que fue admitida como tercer socio en Europanzer.
El desarrollo del prototipo progresó sin problemas, y en agosto de 1942 se inició la producción de una corta preserie en la factoría Ansaldo de Turín. En noviembre de 1942 empezó la producción en la Unión Naval de Levante de Valencia, y seguidamente en la fábrica SOMUA de Saint-Ouen, que pasó a ser la principal línea de producción, ya que la fábrica de Valencia apenas tenía capacidad para las demandas españolas, y Ansaldo estaba comprometida con la producción del Jaguar. Los Lince fabricados en Saint-Ouen se distinguen fácilmente por tener la torre fundida. El Lince entró en combate en febrero de 1943, en manos francesas, en la batalla de Dahla.
El Lince era una versión acortada del Jaguar, y resultaba difícil de distinguir de su hermano mayor desde lejos. La placa frontal del chasis tenía una inclinación de 45º, siendo los costados rectos, y en la parte posterior había amplias rejillas de ventilación: en las versiones anfibias las rejillas estaban cubiertas, y en su lugar se instaló un esnórquel (un tubo vertical) con un ventilador auxiliar. La torre era hexagonal, y en la parte frontal tenía un escudo troncocónico, similar al de los Jaguar con torre Henschel. El comandante disponía de una cúpula Blomberg que daba visibilidad de 360°.
El tanque estaba armado con un cañón de 75L39, sin freno de boca; aunque era un derivado del cañón Skoda vz.30, la recámara fue modificada para poder utilizar casquillos que eran una versión acortada de los del cañón KwK 40 utilizado por el Pz-IV y por las primeras versiones del Jaguar. El Lince disponía de dos ametralladoras MG34, una coaxial con el cañón principal, y otra para el comandante del carro. Como en el Jaguar, se prescindía del ametrallador en la barcaza, lo que permitía disminuir la dotación a cuatro hombres y aumentar el almacenamiento de munición.
En 1943 se diseñó una versión que mejoraba la capacidad antitanque del Lince. Se sustituyó el cañón por un KwK 40/43 75L46, que se diferenciaba del KwK 40 por su llamativo freno de boca de dos etapas. Se aumentó la protección, que pasó a ser de 75 mm en el glacis y de 90 mm en el escudo de la torre, y se reforzó la suspensión. Para compensar el mayor peso del cañón, se colocó una gran caja de almacenaje en la parte posterior de la torre. La nueva versión complementó a los Lince de versiones anteriores en los ejércitos español, italiano y francés, y fue suministrada a las unidades de montaña y anfibias alemanas.
Se proyectaron versiones especializadas: portador de armas (con obuses de 105, 122 o 150 mm), cazacarros con cañón 88L70 en casamata abierta, de ingenieros con obús de 105 mm, y de recuperación. La infantería de marina adaptó algunos de sus Lince como lanzallamas o barreminas. A cierto número de Linces de versiones iniciales se les retiró la torre y fueron convertidos en tractores de artillería, en vehículos de recuperación, o en morteros autopropulsados.
Uso en combate
Las formaciones acorazadas del Pacto de Aquisgrán estaban siendo equipadas con tanques Panzer IV, Panther y Jaguar. El Lince, al contrario, fue distribuido a los batallones de tanques de las divisiones de infantería, de infantería de marina y de montaña. Posteriormente también fue entregado a brigadas independientes de tanques que apoyaban a la infantería en operaciones de gran envergadura. El peso y dimensiones del Lince, solo algo superior a los del Panzer III, sus anchas orugas que permitían que la presión sobre el terreno fuese baja, y sus excelentes capacidades todo terreno, lo hicieron especialmente adecuado para terrenos agrestes o selváticos, o para operaciones anfibias.
El cañón de 75 mm disparaba proyectiles explosivos que eran una gran mejoría respecto a los de 37 o 47 mm de los tanques a los que sustituía. La coraza frontal oblicua proporcionaba protección suficiente contra armas de infantería. El Lince podía resistir a los cañones antitanque de la época, salvo a los pesados.
Al ser el apoyo de la infantería la misión a la que el Lince estaba destinado se prestó especial atención a la coordinación con unidades terrestres. Se instaló una radio de doble canal que podía utilizar la frecuencia de la infantería o la artillería, y se disponía de un teléfono exterior en la parte posterior del tanque. Se instalaron raíles que permitían transportar una escuadra de infantería, aunque fuese una táctica desaconsejada ya que los infantes quedaban muy expuestos al fuego enemigo.
Aunque originariamente la lucha antitanque no era misión prioritaria del Lince, el incremento en cantidad y calidad de los tanques aliados hizo que los batallones de Linces fuesen usados cada vez más en ese papel. Aunque el Lince podía enfrentarse a los tanques medios aliados, no tenía capacidad para enfrentar a los tanques pesados hasta que entró en servicio el Lince mejorado, a veces llamado Lince II, a principios de 1944.
El Lince no tenía velocidad máxima elevada, pero tenía muy buenas capacidades en terreno difícil, distinguiéndose en los difíciles terrenos de África. Las características más apreciadas del Lince fueron la fiabilidad, ya que usaba componentes probados y sobredimensionados, y sobre todo la facilidad de mantenimiento. Mientras que los tanques Panther o Jaguar dañados por minas frecuentemente tenían que ser enviados a la factoría para su reconstrucción, averías similares en los Lince podían ser reparadas en talleres de campaña. Debido a la facilidad de reparar los daños causados por minas muchos Lince fueron convertidos en barreminas, equipados con rodillos de cadenas o con hojas empujadoras.
Sin embargo las dimensiones reducidas de la barcaza limitaron su capacidad de desarrollo. Las versiones portadoras de armas resultaron inferiores a las derivadas del Panzer III o el Jaguar, y fueron rechazadas. Tampoco fueron aceptados los transportes de personal basados en él por ser excesivamente reducidos. Las única versión del Lince aceptada fue la de recuperación, que fue utilizada sobre todo por las unidades de infantería de marina o de montaña (ya que para el resto de las unidades se prefirió el Bergejaguar, más capaz). Sin embargo, muchos Lince anticuados o dañados fueron convertidos en tanques barreminas, tractores de artillería o portadores de armas, sobre todo lanzacohetes o morteros, siendo muy apreciado en las unidades de montaña el portamorteros de 210 mm.
El Lince en la posguerra
Al acabar la guerra los Lince fueron sustituidos por modelos de tanques más avanzados, especialmente por Jaguar, pasando la mayor parte de los carros supervivientes a la reserva. Sin embargo, en los conflictos de guerrillas coloniales los ligeros Lince fueron mejores que tanques más modernos más potentes, pero también más grandes y pesados. Se consideró reiniciar la producción, pero finalmente se prefirió reacondicionar vehículos dados de baja o en la reserva. Los llamados Lince III fueron rearmados con un cañón de baja presión KwK 51 de 88L36, para lo cual fue preciso reconstruir la torre, y su sustituyó el motor por un Maybach HL-520 diésel. La protección no fue modificada, pero en muchos Lince III se instalaron placas exteriores para provocar la detonación prematura de los proyectiles de carga hueca, y un escudo para la ametralladora del jefe del carro.
Uno de los principales usuarios del Lince en la posguerra fue Sion. El nuevo estado, con capacidad económica e industrial limitada, estaba enfrentado a los ejércitos Mau Mau, equipados con material estadounidense. Los sionistas adquirieron gran cantidad de tanques Lince dados de baja, que modernizaron maximizando su capacidad de lucha contracarro. El Lince M50 tenía estaba equipado con un cañón KwK 41/52 de 75L55 (de rendimiento similar al 75L70 de la guerra), protección mejorada al nivel del Lince II y motor Hispano Suiza HS-255 diésel de 450 HP. El Lince M51 o Super Lince era similar al M50, pero armado con cañón KwK 54 105L36. Los M50 y M51 permanecieron en servicio hasta 1975, siendo luego cedidos a naciones aliadas.
Versiones
Lince A: A0: Unidades de preserie fabricadas por Ansaldo. A1: producidos por Hispano. A2: producidos en Saint-Ouen para el ejército francés. A5: producidos en Saint-Ouen para Rumania. Total: 5.300.
Lince B: equivalente al Lince A, preparado para vadeo profundo, utilizado por la Infantería de Marina. Total: 1.400.
Stridvagn 41: Equivalentes al Lince A, con motor Maybach HL-52, producidos en Suecia. Total: 1.000.
Lince C: Conocido también como Lince II. Protección mejorada, armado con cañón KwK 40/43 75L46. Total: 7.200.
Lince D: Lince II adaptado para operaciones anfibias. Total: 2.300.
Bergelince: carro de recuperación con barcaza de Lince I. 420 unidades (150 nuevas, el resto conversiones).
Minenraumunglince: Lince I con equipo de desminado. Unos 1.300, 250 nuevos y el resto conversiones.
21-Panzerfeldhaubitze GrW 69 auf Lince Käfer: Mortero autopropulsado de 210 mm, en montaje externo, sobre barcaza Lince I. Unos 420, conversiones de tanques averiados.
Lince III: versión de posguerra para lucha antiguerrillera. Cañón 88L36, motor Maybach HL-520 diésel. 750 unidades, 320 partiendo de Lince I, 430 de Lince II.
Lince M50: 230 Lince I modernizados por Sion en 1964, con cañón de 75 mm.
Lince M51 Super Lince: 280 Lince II modernizados por Sion con cañón de 105 mm.
Especificaciones (Lince II)
Tipo: carro de combate ligero.
Servicio: 1943 -1946 (Lince, Lince II). 1950 - 1972 (Lince III). 1964 – 1975 (Superlince)
Usuarios: España, Francia, Italia, Rumania, Yugoslavia, Alemania. Posguerra: Sion, Portugal, Irak, Irán.
Diseñador: Ansaldo (Europanzer) - Verdeja.
Diseño: 1942.
Producido: 1942 - 1945.
Número: Lince I: 7.700. Lince II: 10.000.
Peso: 28,3 Tn (Lince II).
Longitud: 5,45 m (sin contar el cañón).
Ancho: 2,55 m.
Altura: 2,60 m.
Tripulación: 4 hombres.
Blindaje: 90 mm.
Armamento: Cañón KwK 40/43 75L46. Dos MG34 de 7,92 mm.
Motor: Hispano Suiza HS-55 de gasolina de 450 HP.
Relación Peso/Potencia: 15,9 HP/Tn
Transmisión: Ansaldo AM-15 semiautomática de siete velocidades adelante y dos detrás.
Suspensión: Horstmann.
Altura sobre el suelo: 470 mm.
Combustible: 320 litros.
Autonomía: 210 km.
Velocidad: 44 km/h.
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Interesanteeeee.......
Desiertos, selvas, operaciones anfibias??? más madera...
Desiertos, selvas, operaciones anfibias??? más madera...
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¿Mejor que el Verdeja? Cuando discutíamos sobre él esto ya estaba escrito. También la ficha del Panther, a ver si la cuelgo. Y los comentarios de Luigi Bassi sobre su desarrollo; etcétera.
Saludos
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Representa años diferentes en la LTU, cuando debatimos sobre el Verdeja hablábamos de la necesidad imperiosa que habría en verano del 40 de un carro de combate, y ahora estamos hablando de verano del 42, la necesidad sigue existiendo pero la guerra ha cambiado mucho en dos años...pero eso en el 40 no tenían porque saberlo.
Y el Verdeja tenía otras cualidades que no pasare a enumerar, pero por ejemplo podría dar lugar a Atp´s o a transportes de tropas interesantes gracias a su disposición original con el motor adelantado. Para el APC tal vez bastaría alargar el chasis añadiendo otro conjunto de rodadura para ganar espacio. Por supuesto seria un APC abierto como fue habitual en la ww2, los ejemplos como el M2, 3, Sd Kfz 251 todos los conocemos, así que sería pionero al abandonar el concepto semioruga para convertirse en algo mas.
en fin, mejor lo dejamos que esto son delirios del Dr maligno
Y el Verdeja tenía otras cualidades que no pasare a enumerar, pero por ejemplo podría dar lugar a Atp´s o a transportes de tropas interesantes gracias a su disposición original con el motor adelantado. Para el APC tal vez bastaría alargar el chasis añadiendo otro conjunto de rodadura para ganar espacio. Por supuesto seria un APC abierto como fue habitual en la ww2, los ejemplos como el M2, 3, Sd Kfz 251 todos los conocemos, así que sería pionero al abandonar el concepto semioruga para convertirse en algo mas.
en fin, mejor lo dejamos que esto son delirios del Dr maligno
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Gaspacher escribió:Interesanteeeee.......
Mucho.
Domper escribió:y resultaba difícil de distinguir de su hermano mayor desde lejos.
El viejo truco para que el enemigo piense que todos los carros son Jaguar (en la LTR veían Tiger por doquier).
Domper escribió:Las formaciones acorazadas del Pacto de Aquisgrán estaban siendo equipadas con tanques Panzer IV, Panther y Jaguar.
Es bastante lógico, el Pz III retirado a funciones de instrucción o a reutilizar las barcazas para Stug, el Jaguar nuevo también.
Ahora bien el Panther, ¿y que versión del Panther?, si se coge el proyecto de copia del T-34 mejorado que esta listo de inmediato vale, si no volvemos a los problemas.
¿Y que pasa con el Tiger I? ¿se abandona el proyecto?
Por cierto a Japón le puede interesar una versión propia del Lince.
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- General de Ejército
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Varias cuestiones:
– No son fáciles las relaciones con Japón al dependerse exclusivamente del Transiberiano y de la buena voluntad soviética. Lo que sea planos o enviar expertos, bien. Pero poco más. Con todo, las relaciones con Japón ya saldrán 8es un aspecto crítico).
– Lo lógico es discontinuar la producción de la barcaza del Panzer II, y reservar la del Panzer III para StuG y para autopropulsados. En todo caso, se podría considerar mantener el Panzer II como plataforma para vehículos de transporte de tropas, tractores de artillería, etcétera. Pero parecería más lógico destinar a esas misiones la barcaza del Panzer 38.
– Lo de sustituir los semiorugas por un “todo orugas” no es ninguna tontería. Los semiorugas con más caros que un “todo orugas” equivalente, siempre que entendamos que hablamos de vehículos de similar capacidad: mejor un Universal Carrier o un Loyd Carrier que los SdKfz 251 y 250.
– Del Panther se hablará, aunque tal vez tras el parón vacacional.
– El desarrollo del Tiger I va aparte, estaba muy avanzado en 1941, y no parece lógico interrumpirlo. Otra cuestión el Tiger II, no como el de la LTR, sino una versión simplificada de bajo coste.
Saludos
– No son fáciles las relaciones con Japón al dependerse exclusivamente del Transiberiano y de la buena voluntad soviética. Lo que sea planos o enviar expertos, bien. Pero poco más. Con todo, las relaciones con Japón ya saldrán 8es un aspecto crítico).
– Lo lógico es discontinuar la producción de la barcaza del Panzer II, y reservar la del Panzer III para StuG y para autopropulsados. En todo caso, se podría considerar mantener el Panzer II como plataforma para vehículos de transporte de tropas, tractores de artillería, etcétera. Pero parecería más lógico destinar a esas misiones la barcaza del Panzer 38.
– Lo de sustituir los semiorugas por un “todo orugas” no es ninguna tontería. Los semiorugas con más caros que un “todo orugas” equivalente, siempre que entendamos que hablamos de vehículos de similar capacidad: mejor un Universal Carrier o un Loyd Carrier que los SdKfz 251 y 250.
– Del Panther se hablará, aunque tal vez tras el parón vacacional.
– El desarrollo del Tiger I va aparte, estaba muy avanzado en 1941, y no parece lógico interrumpirlo. Otra cuestión el Tiger II, no como el de la LTR, sino una versión simplificada de bajo coste.
Saludos
Tu regere imperio fluctus Hispane memento
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- Teniente Coronel
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- Registrado: 27 Ene 2009, 18:25
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Y ¿cuál de esos modelos esperas que sea el que cause terror en el enemigo? Que lo vean por todas partes.
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- General de Ejército
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Como la idea es que se produzcan en gran número, pues todos.
Saludos
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Entrevista a Luigi Bazzi, publicada en la Revista Defensa, Febrero de 1981.
Vicente Talón—Don Luigi, temo estar fatigándole con tantas preguntas, pero pocas veces ha tenido DEFENSA la oportunidad de entrevistar a una leyenda viva.
Luigi Bazzi—:¬¬No se preocupe, siempre es un placer conversar con una publicación tan prestigiosa como la que usted representa.
VT—: Gracias por sus amables palabras. Si no fuese demasiada molestia, creo que los lectores estarán muy interesados en el segundo gran éxito de Europanzer.
LB—: Imagino que se referirá al tanque Lince. O Lynx, como lo llamaron nuestros amigos franceses ¿no es así?
VT—: Desde luego, Don Luigi. Llama la atención que Europanzer, que apenas acababa de nacer, se aventurase a diseñar un blindado como ese.
LB—: Tiene usted razón. En su día el Lince fue considerado un proyecto arriesgado. Imagínese: un tanque nuevo que tenía peor protección y estaba menor armado que el modelo precedente. Aun así fue un éxito que, me atreveré a decir, no fue del todo inesperado, y que facilitó la integración en Europanzer del tercer pilar de la empresa: la española Santa Bárbara.
VT—: Por entonces Santa Bárbara aun no existía ¿no es así, Don Luigi?
LB—: Puede decirse que Santa Bárbara nació para el Lince. Ya le he relatado como el Statthalter Goering, en su anhelo de facilitar la integración de la Unión Paneuropea, licenció o encargó a varios países aliados la fabricación de armamento y, en especial, la de ciertos tipos de aviones de combate y de blindados. España recibió un buen lote de blindados Panzer 38 producidos en la factoría BMM de Praga, junto con la licencia de fabricación. Sin embargo, los españoles, tras probar en combate a los Pardillos, como allí les llamaron, consideraron que se trataba de un vehículo que se estaba quedando anticuado. Intentaron potenciarlo, y he de decir que lo consiguieron, ya que el Super Pardillo dio un resultado aceptable. Siempre que tengamos en cuenta las limitaciones que conllevaba partir del Panzer 38, que en 1941 ya estaba mostrando sus límites. Alemania propuso a los españoles que continuasen la producción de ese chasis, que era sencillo de fabricar y muy fiable, para dedicarlo a misiones secundarias, tales como cazacarros, artillería autopropulsada, transporte de personal, etcétera, como se estaba haciendo en las factorías checas. Usted recordará el Kätzchen.
VT—: Desde luego, Don Luigi. Ha estado en servicio en el Pacto de Aquisgrán hasta hace muy poco.
LB—: Pues el Kätzchen estaba basado en el Panzer 38. El caso era que los alemanes deseaban que en las fábricas españolas se fabricasen vehículos de ese tipo, y a cambio Alemania les suministraría tanques. Pero en España preferían construir, en lugar de un blindado que ya estaba quedándose anticuado, algo más moderno. Temían que los alemanes les entregasen tanques anticuados, y razón no les faltaba tras haber recibido los Pardillos. Por entonces el Pacto de Aquisgrán acababa de aceptar el tanque Jaguar, que dio a Ansaldo un merecido prestigio, y desde Madrid acudieron a nosotros para que les presentásemos una alternativa al Panzer 38. Las condiciones eran duras: el prototipo tenía que estar disponible en menos de seis meses, e iniciarse la producción en un año. Se exigía capacidad para operar en terrenos abruptos, no sobrepasar las 25 toneladas, tener una protección al menos equivalente a la del Panzer III, y estar armado con un cañón de 75 mm, ya que las experiencias con los Pardillos habían demostrado que los calibres inferiores eran insuficientes para el apoyo a la infantería, misión a la que pensaban dedicar sus nuevos tanques.
VT—: De nuevo se enfrentó Ansaldo a condiciones casi imposibles.
LB—: Sencillas no eran. La experiencia alemana con el Panther y el Tiger estaba mostrando que la complejidad no siempre rinde dividendos, e intentamos diseñar un carro lo más sencillo posible. En lugar de usar una suspensión con barras de torsión, como en el Jaguar, escogimos una de diseño británico, el buje Horstmann…
VT—: No pagarían royalties.
Luigi Bazzi ríe y sigue—: Desde luego que no. Como le iba diciendo, escogimos ese tipo de suspensión porque permite que la barcaza del tanque sea poco más que una caja metálica, ya que los muelles van unidos a unos muñones en el exterior de la barcaza, que son fáciles de reparar o de sustituir: basta con cortar la unidad que se quiera cambiar y soldar otra nueva. Además ese tipo de suspensión, aunque no permite velocidades máximas altas, es muy eficaz en terrenos difíciles, tanto que era habitual que los Linces dejasen atrás a los demás vehículos de reconocimiento.
VT—: Con el Lince no se enfrentaron a los problemas que tuvieron con el Jaguar.
LB—: La experiencia adquirida nos resultó muy útil. Además como usamos en el Lince muchos componentes del Jaguar, funcionaron muy bien en un tanque ligero. Sobre todo, evitamos los motores Isotta Fraschini que tantos problemas nos habían dado con el Jaguar. En su lugar se escogió un motor Hispano Suiza, el HS-55, que era una versión de ocho cilindros del HS-51 del Jaguar. El Lince llevaba la misma transmisión de diseño Lancia que su hermano mayor, y fue una decisión afortunada, porque combinó las excelentes cualidades del Jaguar con una solidez a prueba de bomba. Por lo demás, el Lince mostraba claramente su origen: el aspecto de la barcaza era casi como el de un Jaguar a escala, con su placa frontal oblicua. La torre de placas soldadas recordaba ligeramente a la de un tanque ruso, el tipo 34, y era para tres tripulantes e incorporaba cesta. Respecto al armamento, llevaba el mismo cañón 75L39 de origen checo, el vz.30, que se estaba fabricando en Trubia, con el que se estaban rearmando los Tejones y los Super Pardillos.
VT—: Tejones, Super Pardillos… Fueron un hito en la historia del arma acorazada española.
LB—: Por eso se escogió el mismo armamento. Aparentemente era un error, porque ese cañón era bastante menos potente que el Pak 40 que estaban montando los últimos desarrollos alemanes. Sin embargo, antes de criticar la elección, hay que verla en perspectiva: el retroceso del 75L39 era bastante contenido, por lo que no fue necesario poner el aparatoso freno de boca que tantos problemas dio en los Super Pardillos. Con la combinación de ese cañón y el blindaje frontal oblicuo, el Lince era igual o superior a cualquier tanque en servicio, excepto el Panzer IV de cañón largo, y lo conseguía con menos de 25 toneladas. Además, los españoles, con muy buen criterio, no presentaron al Lince como un “tanque de batalla”, especializado en el combate entre carros de combate, sino como un blindado de apoyo: en esa función, era bastante mejor que las versiones iniciales del Panzer IV o del StuG, y muy superior a los cañones autopropulsados como el Tejón. Aunque la silueta del Lince fuese algo más alta, estaba razonablemente protegido, y la torre con un giro de 360º le daba gran ventaja.
VT—: La suspensión Horstmann ¿no era una desventaja para ese tipo de vehículos? Usted me dice que el papel del Lince era bastante parecido al del StuG, es decir, disparar y cambiar rápidamente de posición, y ese tipo de suspensión no era ideal para desplazamientos rápidos.
LB—: No se equivoque, aunque con la suspensión Horstmann no se alcanzasen las altas velocidades que se conseguían con otros tipos, como la Christie que tanto usaban los ingleses, esa rapidez solo se lograba en terrenos muy firmes o en carreteras. Sin embargo, cuando se movían por el campo la suspensión Christie o incluso la de barras de torsión ya no eran tan buenas, y si el terreno era difícil, como en el desierto pedregoso del sur del Sáhara, el Lince podía dejar atrás a cualquier otro tanque: recuerdo como podía ascender por laderas muy empinadas. También era fácil de reparar: si pisaba una mina, solo había que cortar el elemento dañado de la suspensión y soldar otro en su lugar, algo que podía hacer en los talleres de campaña. Por fin, al elegir para el nuevo tanque un cañón ligero, componentes ya en uso, y esa suspensión, conseguimos que el precio no fuese mayor al de un Panzer 38 o un StuG.
VT—: Tal como lo explica, el Lince fue un acierto.
LB—: Desde luego. Hasta tal punto que al poco de presentar el prototipo los españoles se vieron abrumados por los encargos de tanques. El ejército italiano fue el primero, pues quería equipar con Linces sus unidades coloniales y los grupos anfibios, que necesitaban un blindado ligero. Inmediatamente detrás estuvieron las peticiones de franceses, yugoslavos e incluso Suecia adquirió la patente del Lince. Las fábricas españolas tenían poca experiencia en la construcción de vehículos blindados: durante la Guerra Civil habían fabricado algunos blindados que, no voy a engañarle, eran poco más que la transformación de camiones comerciales. Al acabar la guerra habían empezado a fabricar un tanque autóctono de proyecto muy interesante, el Verdeja…
VT—: Fue una lástima que se abandonase.
LB—: El proyecto del Verdeja estaba bien, ya que se trataba de un tanque relativamente sencillo, que podía medirse con cualquier tanque coetáneo. Pero era demasiado pequeño y apenas hubiese tenido capacidad de desarrollo. El Lince era mucho mejor. Además los españoles se enfrentaron a todo tipo de problemas. Por ejemplo, el Verdeja llevaba un motor de camión que resistía mal la “mala vida” a la que era sometido en un tanque. Las planchas de blindaje tenían problemas de calidad, y se retrasó la construcción de las torres por problemas con las soldaduras. La cuestión fue que cuando se recibieron lo Panzer 38, los Verdeja fueron anulados, y las fábricas españolas se dedicaron a mejorar los tanques de origen checo. Hicieron buen trabajo, pero no tenía nada que ver con fabricar cientos de tanques modernos. Las fábricas españolas no podían atender la demanda de Linces, y fue necesario reorganizarlas: fueron fusionadas en la Empresa Nacional Santa Bárbara, que solicitó su admisión en el grupo Europanzer con un 20% de las acciones. Poco después se inició la producción en serie, primero en las instalaciones valencianas de la antigua Unión Naval, luego en París. En poco tiempo la producción del Lince casi igualó a la del Jaguar.
VT—: Los más renuentes fueron los alemanes.
LB—: En aquellos primeros años Alemania estaba muy orgullosa de sus tanques, con los que había conseguido tantas victorias, y por eso les desagradaba adoptar un tanque diseñado fuera. Habían escogido al Panther en lugar del Jaguar, y prefirieron seguir con el StuG y con un blindado parecido, el Jagdpanzer 38, al que usted conocerá por su apodo, Hetzer. Argumentaban que sus cazacarros estaban mejor armados que el Lince. Al principio solo adquirieron un puñado de Linces para usarlos en Noruega y en las unidades anfibias; pero tras probarlo tuvieron que reconocer que el Lince era mucho mejor que cualquier cazacarros sin torre. Acabaron por solicitar una variante armada con el mismo cañón Kwk 41 de 75L46 de los Stug, con la que equiparon algunos batallones antitanque.
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Anexo: desarrollos en el universo de "El Visitante"
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Panzer V Panther
El Panther es el nombre común de un carro de combate utilizado por el ejército alemán durante la Guerra de Supremacía, que entró en servicio en 1942. Su designación oficial fue Sd.Kfz. 171 Panzerkampfwagen V Panther.
El Panther fue un desarrollo del Panzer IV diseñado como medida de emergencia para contrarrestar los tanques soviéticos KV, reemplazando a los tanques más antiguos Panzer III y Panzer IV. Junto con el Panzer VI Tiger formó el núcleo de las fuerzas acorazadas alemanas en 1943 y 1944, siendo posteriormente sustituido por el Panzer VII Jaguar.
El Panther tenía una barcaza derivada de la del Panzer IV, con suspensión mejorada y motor de gran potencia, siendo más rápido y más fiable que el Tiger. Como desventaja, el anticuado diseño de su chasis limitaba su capacidad de desarrollo, la protección lateral era escasa, y la situación algo adelantada de la torre desgastaba la suspensión delantera y limitaba la movilidad. El Panther estaba armado con un cañón Kwk 42 de 75L70, potente y muy preciso, que podía derrotar cualquier tanque enemig, incluso a los pesados, hasta 1.500 metros, y a los tanques medios como el T-34 o el Sherman a cualquier distancia de combate.
Desarrollo
El Panther fue la respuesta directa al tanque soviético KV-1, al que los alemanes tuvieron acceso tras la deserción de varios ejemplares a Prusia Oriental. A insistencia del general Heinz Guderian, se estudiaron las características del KV-1, apreciándose sobre todo la excelente protección que confería la coraza frontal oblicua, el potente armamento de 76 mm y la eficaz suspensión por barras de torsión.
Por demanda del mariscal Von Manstein se inició con gran urgencia el desarrollo de un carro de combate capaz de superar al KV-1. El nuevo tanque, además, debía estar armado con un cañón de 75 mm de alta velocidad, usar componentes de vehículos ya existentes, y no sobrepasar las 32 toneladas.
Skoda concursó con el Panzer 41, un desarrollo del Panzer 38 con chasis de mayores dimensiones y suspensión por barras de torsión. El consorcio Fiat-Ansaldo presentó una propuesta revolucionaria, el tanque Jaguar, que como principal característica instalaba el motor transversal y no longitudinalmente. Daimler Benz presentó una propuesta basada en otro tanque soviético que se acababa de conocer, el tipo 34. Alkett presentó un desarrollo del Panzer IV, con una barcaza de dimensiones algo mayores, con suspensión por barras de torsión.
La propuesta de Skoda fue rechazada al considerarse que carecía de posibilidad de desarrollo. El vehículo de Fiat-Ansaldo era muy inmaduro y también fue rechazado por el ejército alemán. La decisión estuvo entre Daimler Benz y Alkett, escogiéndose la segunda sobre todo porque podía iniciarse su producción en las mismas cadenas de montaje que el Panzer IV.
El Panzer V llevó la torre inicialmente desarrollada por Rheinmetall para el VK 45.01(H) (que finalmente fue desarrollado como Panzer VI Tiger), en posición ligeramente adelantada. Las primeras unidades estuvieron armadas con el cañón 75L48, que fue sustituido por el 75L70 en cuanto estuvo disponible. Los vehículos de preserie estuvieron disponibles en Marzo de 1942, y las primeras de serie, ya con el cañón de 75 largo, entraron en combate en septiembre de 1942 en las cercanías de Tula.
Producción
Un primer prototipo de acero dulce fue probado en Kummersdorf en diciembre de 1941, siendo comparado con el VK3002 de Daimler Benz y con el Jaguar de Fiat-Ansaldo. El VK3004 de Alkett fue declarado el vencedor, aunque el Jaguar se consideró tan prometedor que fue también seleccionado para ser producido en Francia e Italia. El nuevo tanque sería llamado Panzer V Panther, siendo el primer tanque alemán que recibió nombre propio.
El que el Panther usase muchos componentes del Panzer IV permitió acelerar la producción, aunque la introducción de algunos cambios causó un retraso de dos meses respecto a las previsiones. A lo largo de 1942 el Panther sustituyó al Panzer IV en las cadenas de montaje. El diseño del nuevo tanque, pensado expresamente para la producción en masa, hizo que el precio de cada unidad fuese un 5% inferior a la del Panzer IV, requiriendo también menos materias primas para su producción. La gran demanda hizo que también fuese fabricado por MAN en Essen, Daimler-Benz en Berlín, Maschinenfabrik Niedersachsen en Hanover, y Henschel & Sohn en Kassel.
El objetivo inicial de producción fue de 500 unidades al mes, aumentadas posteriormente a 750, aunque esta cifra nunca fue alcanzada, sobre todo por la cada vez mayor demanda de piezas de repuesto. En 1943 la media fue de 427 unidades al mes, que subieron a 615 en los primeros meses de 1944. A partir de entonces el Panther empezó a ser sustituido por el tanque Jaguar. A finales de 1944 finalizó la producción del Panther, aunque se mantuvo en servicio durante unos años más.
El precio del Panther fue de 97.300 RM (excluyendo la radio y el armamento), comparados con los 82.500 RM del StuG, 96.200 del Panzer III, 103.500 del Panzer IV, 112.300 del Jaguar o 250.800 RM del Tiger, lo que convierte a Panther en uno de los vehículos alemanes con mejor relación coste–efectividad. En todo caso, al comparar el precio con el de otros blindados hay que considerar que la producción del Panther se benefició de las medidas de reorganización industrial de Albert Speer. A partir de 1943 las cadenas de montaje alemanas se acercaron a la eficiencia de las norteamericanas, con lo que el precio unitario de los vehículos disminuyó. Gran parte de los componentes fueron subcontratados a factorías de otros estados de la Unión Paneuropea, lo que abarató aun más los costes, aunque algunos de los componentes, especialmente los fabricados en Hungría o en Eslovaquia, no cumpliesen los estándares de producción y fuesen frecuente causa de averías.
Características
Los Panther fueron equipados con el motor Maybach HL 210 de gasolina, que desarrollaba 650 HP a 3.000 rpm. La disponibilidad a partir de 1943 de gasolina de mayor octanaje permitió que equipar al tanque con el HL 210 P30, de 700 HP, que incorporaba un filtro de aire mejorado. El tanque tenía una autonomía de 230 km. El motor HL 210 era un motor V12 de diseño muy compacto, con mínimo espacio entre cilindros. Para reducir el tamaño del motor, las bancadas de cilindros estaban desalineadas. Esta disposición causó inicialmente muchas vibraciones y gran desgaste de las bielas, que se solucionó instalando elementos compensadores.
Inicialmente el compartimento del motor era estanco, para facilitar el vadeo, pero dio serios problemas de refrigeración. Otro importante defecto de las primeras series era que las conducciones de combustible no estaban bien aisladas y tenían fugas. Los vapores de combustible se acumulaban en el compartimento del motor y causaban incendios. A partir de la unidad 250 se renunció a la estanqueidad y se reforzaron las conexiones. Asimismo se mejoró el sistema de refrigeración, y se instaló un tabique cortafuegos que impedía que los incendios se extendiesen a la cámara de combate.
La fiabilidad del motor mejoró con el tiempo, pasando de 850 km en las primeras series (intervalo medio sin averías mayores) a 1.500 km en 1943 y 2.500 km en 1944.
La marcha se hacía por cadenas con una anchura un 50% mayor que las del Panzer IV: unido a la mayor longitud hacían que la presión sobre el terreno fuese un 20% inferior, a pesar del mayor peso. Tenía una rueda dentada propulsora posterior, tres rodillos de retorno, y ocho ruedas de acero recubiertas de caucho intercaladas: el llamado diseño Schachtellaufwerk o FAMO, utilizado también por el tanque pesado Tiger y por los semiorugas Sd.Kfz 250 y 251. Un sistema de doble barra de torsión, ideado por el profesor Ernst Lehr, daba amplia carrera a las ruedas, permitiendo que la marcha fuese confortable incluso por terreno quebrado. Sin embargo el peso combinado del cañón y de la torre desgastaba rápidamente los rodillos frontales, siendo preciso sustituirlos por otros de acero, e instalar barras de torsión reforzadas. Aun así, el problema no llegó a solucionarse por completo.
Las dobles barras de torsión, por otra parte, requerían espacio bajo el motor y bajo la cesta de la torre, lo que elevó la altura de la barcaza —y por tanto la total del tanque— e impidió situar escotillas de escape en el suelo. Cuando el Panther era dañado por minas, era habitual que tuviese que ser trasladado a la factoría para retirar el suelo y reconstruir las barras de torsión dañadas.
Aunque el sistema de ruedas intercaladas era efectivo, se bloqueaba con facilidad por el barro o la nieve, y hacía que las reparaciones fuesen más costosas, al ser preciso extraer las ruedas no solo del eje dañado sino las de los dos contiguos. Posteriormente se consideró que la suspensión del tanque Jaguar, similar pero sin ruedas intercaladas, aunque era marginalmente menos efectiva todo terreno, y requería aceros especiales, era en conjunto mejor elección.
El Panther llevaba una caja de cambios de siete velocidades AK 7-200 Synchromesh, diseñada por Zahnradfabrik Friedrichshafen (ZF), y una dirección de palancas. Se esperaba que el conductor cambiase a la marcha adecuada antes de cada giro. Aunque el Panther podía pivotar sobre el terreno, era una maniobra desaconsejada porque causaba gran desgaste en la transmisión. La fiabilidad del conjunto de transmisión y dirección era mediocre, inferior a la del Panzer IV y poco mejor que la del Tiger, sobre todo porque el conjunto fue simplificado excesivamente para favorecer la producción en serie. Como promedio, la vida media de la transmisión era inferior a 500 km. La necesidad de reparar o incluso sustituir la transmisión hacía que la disponibilidad del Panther raramente fuese superior al 60%. El entrenamiento de los conductores disminuyó la tasa de averías, pero durante toda su carrera fue preciso manejarlo con delicadeza.
Se intentó solucionar el problema sustituyendo la transmisión ZF por la Lancia del Jaguar, pero para ello era preciso rediseñar la transmisión italiana. Dadas las otras limitaciones del Panther, se decidió no hacer modificaciones, y disminuir la producción del carro de combate, en favor del Jaguar.
La protección del Panther era un 70% superior a la del Panzer IV, especialmente por haberse adoptado una coraza frontal oblicua que incrementaba en un 40% la resistencia para el mismo grosor, y por el aumento del espesor de la placa frontal. En un primer momento se consideró utilizar en el Panther el mismo concepto que en el Tiger, en el que la protección lateral y posterior era casi igual a la frontal. Sin embargo, un estudio demostró que el 90% de los impactos se producía en el frontal de la torre y en la parte superior del glacis, por lo que resultaba más eficiente elevar la protección frontal que la lateral; una táctica cuidadosa debía evitar exponer los vulnerables flancos.
En las unidades de preserie la coraza era de acero endurecido pero, dado que en esa época era común la utilización de proyectiles perforantes de capacete, que anulaba los beneficios de la superficie endurecida, se prescindió de dicha característica en las versiones de serie. La placa frontal tenía un espesor de 70 mm y una inclinación de 55º, lo que la hacía equivalente a una placa vertical de 110 mm. Estaba machihembrada además de soldada a las placas laterales, para impedir que impactos no penetrantes de proyectiles pesados la hundiesen.
La protección lateral y posterior era menor, entre 40 y 50 mm. La superior era de 15 mm, y la presencia de las rejillas de los ventiladores la hacía vulnerable a ataques aéreos. Se ha criticado la relativa debilidad del blindaje lateral y superior, pero era similar o superior al de otros tanques coetáneos, como el T-34. Algunas dotaciones añadían placas de acero, sacos de arena o elementos de repuesto, como ruedas o eslabones de cadena, al frontal y a los laterales, pero esa práctica fue proscrita porque el aumento de peso dañaba la transmisión, con escasa mejoría de la protección.
La protección se complementaba con las cajas de almacenamiento interno de la munición, con doble puerta y resistentes a las deflagraciones. Aunque al ser propulsado por gasolina el Panther se incendiaba con relativa facilidad, esos fuegos eran lentos y permitían el escape de las dotaciones. Los incendios de propelente, de resultados catastróficos, eran muy poco comunes, y disminuyeron cuando se instaló un sistema de extintores automático, activado por células fotoeléctricas y sensores de presión, que resultó tan efectivo que se instaló en otros carros de combate del Pacto de Aquisgrán.
El armamento principal era un cañón Rheinmetall-Borsig 7,5 cm KwK 42 (L70) con mecanismo semiautomático de eyección de cartuchos. Se transportaban 62 disparos (que aumentaron a 77 en la versión E, que prescindía del ametrallador). Aunque el calibre de 75 mm era habitual en los carros de combate, el Kwk 42 usaba cargas de gran tamaño, que junto con el largo tubo proporcionaban gran velocidad inicial y excelentes capacidades perforantes, superiores a las del Kwk 36 de 88 mm del Tiger. Tenía una trayectoria muy tensa, lo que facilitaba la puntería, y escasa dispersión. Se utilizaban tres tipos de munición: APCBC-HE (perforante - explosivo de capacete), HE (alto explosivo) y APCR (de núcleo perforante y envuelta rígida, similar al HVAP norteamericano). Con estos últimos proyectiles el cañón podía perforar incluso la coraza frontal del tanque pesado M29 norteamericano, aunque las dotaciones preferían el uso del APCBC por causar mayor efecto en el interior de los tanques enemigos.
El armamento se complementaba con dos ametralladoras MG34, una coaxial y otra en el glacis. En la versión E esta última fue retirada para ampliar el espacio de almacenamiento de munición. En muchas unidades se instaló otra MG34 en el techo de la torre para defensa antiaérea. Gran parte de las unidades contaban también con una pistola lanzahumos de 47 mm, instalada en el techo de la torre y que se manejaba desde el interior, que podía disparar también bombas antipersonal para defensa cercana.
El Panther adoptaba con escasas modificaciones la torre diseñada por Rheinmetall para el Tiger, que no había podido montarse en ese tanque por limitaciones del anillo. El escudo frontal estaba formado por una placa redondeada de 100 mm de espesor. La forma del escudo creaba una trampa para proyectiles, pudiendo redirigirlos al techo del glacis. Se consideró sustituirla por un montaje similar al del tanque Jaguar, pero finalmente el Panther mantuvo la placa redondeada durante toda su carrera, aunque la versión final Panther E tenía un reborde inferior para impedir los rebotes. La torre se movía con un motor hidráulico, pero solo alcanzaba la velocidad de giro máxima con el motor principal a altas revoluciones. Disponía de una cúpula para el comandante de siete periscopios que ofrecía una visión de 360º, que resultó tan útil que fue incorporada en el resto de los tanques del Pacto.
Partiendo del Panther se preparó un cazacarros con cañón de 88L71,el Jagdpanther. Considerado inferior al Jagdjaguar, fue fabricado en escasa cantidad.
Uso en combate
Los primeros Panther fueron entregados al Panzer Abteilung 601 en Junio de 1942. Este batallón (junto con los posteriormente creados 602 y 603) fue una unidad de conversión para adiestrar a las dotaciones sobre sus nuevos tanques. Operó con la versión A (armada con el cañón de 75L48), mecánicamente deficiente y que no se consideró apta para el combate.
El 8ª Panzer Regiment de la 8ª Panzerdivision fue equipado con Panther en Septiembre de 1941, utilizándolos por primera vez en la batalla de Tula, en las cercanías de Moscú. Estas unidades eran de la versión A1, armadas ya con el Kwk 42 de 75L70. Sin embargo aun no eran vehículos maduros y sufrieron una alta tasa de averías. Aunque solo se perdieron tres Panther en combate, otros ocho tuvieron que ser dados de baja tras incendiarse por problemas mecánicos.
A partir de Enero de 1943 el ejército alemán empleó un número creciente de Panther, y a pesar de su escasa fiabilidad, la combinación de potente armamento y buena protección consiguió excelentes resultados. Durante el verano de 1943 el Panther se convirtió en el tanque más numeroso del ejército alemán, distinguiéndose en las batallas de Jarkov y Stalingrado. Sin embargo, también mostró sus limitaciones: a la escasa fiabilidad mecánica se unió el peso del blindaje frontal y el largo cañón, que sobrecargaban la suspensión delantera y limitaban la movilidad todo terreno. Además el tanque estaba sobrecargado y no podía aceptar mejoras en el armamento o la protección. Las dotaciones preferían los tanques Jaguar, que se estaban empezando a distribuir, ya que contaban con el mismo armamento y similar protección, pero con silueta más baja y mejor movilidad. Tras una valoración detenida, se decidió sustituir el Panther por el Jaguar, cerrándose las líneas de producción en el otoño de 1944. A medida que se entregaban más tanques Jaguar, los socios de la Unión Paneuropea recibieron tanques Panther dados de baja por el ejército alemán. Mientras que este retiró sus últimos Panther en 1945 de las unidades de primera línea, un número importante permaneció en servicio en los ejércitos yugoslavo y húngaro.
Respuesta aliada
Las cualidades del Panther, así como su presencia en gran número, tuvo un hondo impacto en las potencias aliadas. La URSS descubrió que el cañón de 76 mm que montaban los tanques KV, T-34 y T-34M era ineficaz contra la coraza frontal del Panther, mientras que el Kwk 42 alemán podía batir los tanques soviéticos a cualquier distancia.
Como medida de emergencia varios chasis de tanques T-34 y KV fueron convertidos en autopropulsados, montando obuses de campaña de 122 y 152 mm. Esas armas eran suficientes para destruir un Panther, pero solo un pequeño número de SU-122 y SU-152 habían sido construidos cuando se libraron las grandes batallas de tanques del verano de 1943. También se construyeron dos centenares de tanques T-34-57, equipados con un cañón antitanque ZIS de altas prestaciones, pero solo eran efectivos contra el Panther a corta distancia.
El ejército soviético intentó desplegar cañones de 85 mm de mayor potencia. En Octubre de 1943 se inició la producción del tanque KV-85, y en enero de 1944 se fabricaron los primeros SU-85. Sin embargo la mayor parte de los tanques en servicio eran T-34 y T-34M, cuyo armamento no llegó a potenciarse, y que eran muy inferiores a los tanques del Pacto.
El ejército norteamericano se enfrentó por primera vez con tanques Panther en Febrero de 1943, en los combates de Dahla. Los tanques M3 que utilizaba eran muy inferiores a los Panther, e incluso el nuevo M4 solo podía luchar con ellos a corta distancia. Tanto el tanque medio M4 como el pesado M6 fueron armados por un cañón de 76 mm mejorado, pero solo podían perforar la coraza frontal del Panther a distancias inferiores a 500 metros. Tan solo en noviembre de 1944, con la entrada en servicio del M26, los norteamericanos tuvieron un tanque comparable al Panther.
Como medida de emergencia para conseguir un carro de combate capaz de superar a los nuevos tanques del Pacto, el ejército norteamericano reinició el desarrollo del tanque pesado M6, equipándolo con un cañón de 90 mm. Pero el M6A2, aunque por su peso rivalizaba con el Tiger, era un tanque similar al KV soviético, con protección no superior a la de los tanques medios del Pacto, y escasa fiabilidad mecánica, al llevar el mismo conjunto de motor y transmisión que el tanque medio M4. Los pocos ejemplares empleados en combate dieron mal resultado, por lo que el M6 fue abandonado, pasándose a un tanque pesado derivado del M26. Este vehículo, el M29, solo participó en las fases finales de la Guerra de Supremacía, durante la cual Estados Unidos no dispuso de un tanque comparable a los del Pacto.
Versiones
Panther A: 50 unidades de preserie con coraza de acero endurecido. Panther A1: 320 unidades, similares al Panther A, con cañón de 75L71. Panther A2: con mejoras en el sistema de refrigeración: 420 unidades.
Panther B: versión experimental con cañón de 88L71, no construida en serie.
Panther C: la primera versión completamente apta para el combate, con cúpula panorámica. 3.560 unidades.
Panther D: similares a la C, con mejoras en la transmisión y en la refrigeración. 5.400 unidades.
Panther E: versión final, sin ametrallador frontal y más capacidad de munición. 2.300 unidades.
Bergepanther: tanques Panther A convertidos en vehículos de recuperación. 260 unidades.
Jagdpanther: cazacarros con cañón de 88L71 en casamata, basado en el Panther C. 220 unidades.
Producción total: Panther: 12.050. Jadgpanther: 220.
Especificaciones (Panther D)
Tipo: carro de combate medio.
Servicio: 1942 -1947 (Alemania). 1943 – 1958 (Pacto de Aquisgrán).
Usuarios: Alemania, Hungría, Eslovaquia, Yugoslavia, Finlandia, Rumania, Ucrania, Suecia, Turquía, Irak, Irán, China.
Diseñador: Alkett.
Diseño: 1941.
Producido: 1941 - 1944.
Peso: 36,2 Tn. 38 Tn (Jagdpanther).
Longitud: 6,2 m (sin contar el cañón). 9,1 m (con cañón).
Ancho: 3,02 m.
Altura: 2,91 m.
Tripulación: 5 hombres. Panther E: 4 hombres.
Blindaje: 110 mm.
Armamento: Cañón KwK 42 75L70. Dos o tres ametralladoras MG34 de 7,92 mm.
Motor: Maybach HL210 de gasolina 550 HP.
Relación Peso/Potencia: 15,1 HP/Tn
Transmisión: ZF de siete velocidades adelante y dos detrás.
Suspensión: Barras de torsión.
Altura sobre el suelo: 460 mm.
Combustible: 420 litros.
Autonomía: 190 km.
Velocidad: 48 km/h.
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Anexo: desarrollos en el universo de "El Visitante"
Entrevista a Luigi Bazzi, publicada en la Revista Defensa, Febrero de 1981.
Vicente Talón: —Don Luigi, apenas nos ha contado usted nada sobre los otros tanques alemanes de la época, y seguramente nuestros lectores estarán interesados.
Luigi Bazzi—: Mi campo no es la historia militar sino el desarrollo técnico, pero en el diseño del Jaguar o del Lince tuvimos que tener muy presentes las características de los tanques rivales. Alemania era la única potencia que había conseguido desarrollar poco antes de la guerra tanques “completos”, entendiendo como tales los que presentaban un perfecto equilibrio entre los cuatro factores imprescindibles para un tanque eficiente: potencia de fuego, protección, movilidad y ergonomía. Igual que si una mesa tiene una pata más corta o más larga cojea, un carro de combate con deficiencias en uno de esos aspectos es muy inferior a otro de características aparentemente inferiores, pero equilibrado.
VT—: Pero los tanques alemanes hasta 1941 tenían un armamento muy poco potente ¿no fue así?
LB—: Desde luego. Pero no olvide que los otros tanques de la época, salvo los rusos, no estaban mejor armados. Además los tanques alemanes, aunque sobre el papel podrían parecer inferiores a otros muy blindados, como el Char B francés o el Matilda británico, habían sido concebidos para la guerra acorazada, e incorporaban características que eran absoluta novedad, como la torre de tres tripulantes, que permite que el comandante supervise el campo de batalla, o la radio. Pero en 1941, como usted indica, los carros alemanes empezaron a mostrar sus limitaciones. Los Panzer I y II, que seguían componiendo casi la mitad del arma acorazada, eran carros ligeros, apenas aptos para la exploración o el reconocimiento. El Panzer 38 era algo mejor, pero también empezaba a quedarse anticuado. El Panzer III, el tanque principal, llevaba un cañón de 37 mm a pesar de poder llevar armas más potentes; solo a partir del verano se hicieron más numerosos los armados con cañón de 50 mm, y pocos disponían del cañón 50L60, el único apto para la lucha entre tanques. Por esas deficiencias fue por lo que el Panzer IV, que originalmente hubiese debido ser un vehículo de apoyo, tuvo que realizar misiones de lucha contra tanques enemigos, aunque su suspensión no era ideal para operaciones móviles.
VT—: Entonces fue cuando se pudo inspeccionar los tanques pesados rusos.
LB—: Sí, y como le dije la sorpresa fue mayúscula. Incluso el último modelo del Panzer III quedaba anticuado ante los KV y los Tipo 34. Como solución de emergencia se armó el Panzer IV con un cañón más potente, pero el tanque ya estaba al límite de su capacidad de desarrollo.
VT—: Fue entonces cuando se convocó el concurso que llevaría al nacimiento del Jaguar.
LB—: Sí, pero simultáneamente los alemanes tenían otro tanque en desarrollo. Era un tanque pesado, que inicialmente hubiese debido sustituir al Panzer IV, y que ahora fue desarrollado con urgencia aun mayor. Fue el Panzer VI Tiger, un vehículo impresionante para la época, y que tuvo un rendimiento excepcional. Pero había sido diseñado en tiempos de paz, su fabricación era lenta y costosa, y se fabricaron muy pocos, apenas 4.000 en toda la guerra, incluyendo su sucesor el Tiger II.
VT—: El Tiger II ¿no era muy similar al Tiger original?
LB—: Era prácticamente igual, salvo por modificaciones en el blindaje, que era de placas oblicuas, y en el armamento, ya que fue el primer tanque en llevar el cañón Kwk 44 88L60, poco después adoptado por el Jaguar. Como le decía, los Tiger dieron buen resultado, pero al fabricarse tan pocos solo operaron con batallones de tanques pesados, que intervenían exclusivamente en grandes operaciones. Mientras que el Jaguar, que acabó llevando el mismo armamento, estaba disponible en cantidades diez veces mayores.
VT—: No ha citado usted el Panther.
LB—: Espero que los lectores me perdonen la picardía, porque esperaba a ver si usted olvidaba al rival de mi tanque —Don Luigi ríe entre dientes—. Desde un primer momento se vio que los cambios en el Panzer IV solo servirían como medida temporal, y se emprendió el diseño de su sucesor. El mejor de los presentados fue el Jaguar, pero en 1941 aun había muchos en Alemania reacios a aceptar un diseño italiano, por lo que se aceptó una propuesta de Alkett, el Panzer V Panther. Se trataba de un tanque que venía a ser un intermedio entre el Panzer IV y el Tiger. Para acelerar la producción se conservaron elementos de ambos vehículos, y fue un error. Sobre todo, la transmisión no estaba preparada para la gran potencia del nuevo motor, y fue fuente inagotable de problemas. Además el Panther estaba desequilibrado, siendo largo, estrecho y pesado en la parte delantera. Eso significaba, por ejemplo, que si se intentaba superar una trinchera se corriese el riesgo de que el cañón se clavase en el suelo. Al menos, el Panther estaba bien blindado y mejor armado…
VT—: Pero no mejor que el Jaguar.
LB—: Desde luego, llevaba el mismo armamento pero menos coraza. A cambio, tenía otras características que nos apresuramos a incorporar a los Jaguar de producción, como la cúpula panorámica para el jefe del tanque, o el sistema antiincendios. Pero al final se impuso la realidad, los alemanes aceptaron que el Jaguar era mejor que cualquier posible modificación del Panther, y se resignaron a equiparse con él. El Jagdjaguar era infinitamente mejor que el Jagdpanther, y también tuvieron que reconocer que el Schützenjaguar superaba a su transporte de personal Kätzchen. A partir de entonces, contaron con Europanzer para sus nuevos proyectos.
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Anexo: desarrollos en el universo de "El Visitante"
Como nos acercamos a una probable interrupción vacacional, hoy hay propina.
Saludos
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Anexo: desarrollos en el universo de "El Visitante"
¡Y menuda propina!
- “El sueño de la razón produce monstruos”. Francisco de Goya.
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Anexo: desarrollos en el universo de "El Visitante"
¿Dibujos de todos esos modelos no has hecho?.
Ya volvemos a dispersar la producción en cosas
Una duda pensando en el Lince, ¿no se les ocurre un vehículo de ruedas? Estaba pensando en el Panhard, que se fabrica en Francia y que usa el ejército alemán.
Podría desarrollarse un diseño como el Panhard EBR que ya existía sobre el papel aunque aún no fabricado.
Domper escribió:Jagdpanther
Ya volvemos a dispersar la producción en cosas
Una duda pensando en el Lince, ¿no se les ocurre un vehículo de ruedas? Estaba pensando en el Panhard, que se fabrica en Francia y que usa el ejército alemán.
Podría desarrollarse un diseño como el Panhard EBR que ya existía sobre el papel aunque aún no fabricado.
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