Tras el fin de la guerra civil la máxima prioridad del gobierno por lo tanto sería la reconstrucción de la economía, así como acabar con la depuración de los elementos hostiles al régimen, pasando a un tercer plano el rearme del ejercito cuando no quedando de lado ante la gran cantidad de armas existentes. Las grandes unidades que había participado en la contienda serían paulatinamente disueltas para permitir a la masa obrera retornar a sus puestos laborales y aumentar la producción tanto industrial como de alimentos.
Posiblemente las armas mas exóticas y de mayor dificultad de mantenimiento serían abandonadas ante la falta de repuestos, o en todo caso disminuidas al usar una parte de estas como repuestos canibalizando las restantes.
Con el estallido de 2ª Guerra Mundial, el gobierno elevaría el grado de alerta, pero entre la Alemania nazi y España se encontraba el que se suponía mejor ejercito de tierra del mundo, por lo tanto la posibilidad de verse sometidos a una guerra contra ella es mas bien remota. Posiblemente se llevase a cabo una movilización limitada a las quintas del 15 en adelante, de esta forma se reforzaría al ejercito pero sin desatender la vital tarea de reconstruir el país.
Por otra parte debería iniciarse la búsqueda de armas modernas, pero el mercado en este momento sería sin duda bastante exiguo al estar copado por los contendientes. Esto nos lleva por supuesto a los EEUU, que sería la única potencia capaz de suministrar armamento que no estaba en guerra. Las compras posiblemente se centrasen en aviones, y antiaéreos dada la existencia de grandes remanentes de armas terrestres en la península. En cuanto a los carros, los EEUU no eran precisamente famosos por sus carros, de hecho durante la jefatura del EM USA por D. Mc Arthur este admitía la existencia de poco mas de una docena de carros, ordenando la disolución de la caballería montada y la formación de unidades acorazadas.
Una de las mayores necesidades del ejercito sería la producción de municiones, para las armas ya existentes, sobre todo para la artillería. Esta misma producción sería de por si un caos debido a la gran diversidad de calibres existentes, así como su posterior distribución.
Asimismo los ingenieros deberían iniciar las obras de fortificación de los pirineos, pero seguramente por la percepción de la fortaleza del ejercito francés, estos trabajos no se iniciarían a gran escala hasta mayo y la fulgurante victoria alemana sobre Noruega ante las narices aliadas. Con la conquista de los Países Bajos los trabajos se acelerarían aun mas, iniciando al mismo tiempo la concentración de tropas en los pirineos, y con la caída de Francia se llamaría a filas a las quintas anteriores.
Mientras en el norte de los pirineos, con la victoria sobre Francia, los alemanes iniciarían la concentración de tropas encontrándose frente a ellos a decenas de miles de hombres de un país potencialmente hostil trabajando febrilmente en fortificarse. Este hecho junto a la posibilidad de un desembarco de GB para apoyarlo debería bastar para iniciar los preparativos de la invasión de forma inmediata, y a expensas de la BdI, aunque a Hitler siempre le convendría mas una nueva victoriosa conquista que una guerra de desgaste, que aun siendo victoriosa nada aportaría a la opinión publica alemana.(¿Fue Kosovo una victoria o una derrota?)
Por ello yo apostaría por una invasión de la península durante julio, tras unas semanas de preparación.
huarlot escribió:Referente a los M3 y Lee te digo que por la situacion tal vez USA nos venda de segunda mano y con mediacion de Churchill alguna partida de los 200 y pico Lee que ya tenia el Ejercito en el 39.
¿De donde sacas esas cifras? yo he leído que este carro se desarrollo junto al Sherman en el 41 en las fechas que ya posteé.
En cuanto a las minas, en la GC española las minas habían sido algo anecdótico, de hecho se mencionan mas las voladuras de hornillos y minas que las minas terrestres.
El bazooka no estaba aun en servicio, en estas fechas el arma contracarro de infantería por excelencia eran los fusiles contracarro, de los que en España había solo unas pocas unidades en total posiblemente entre 100 y 200, y que si bien podían parar a un PzI o II eran ineficaces contra los Pz III y IV, a una distancia media-larga, y los cocteles molotov en terreno abierto serían un suicidio.