Hola Carlogratto:
pues sí, pues sí; se trataba de Eduardo VIII, no de su antecesor Enrique VIII.
Este último a quien daría más de una alegría sería a Carlos I, cuando le devolvió a su tía Catalina, creo su Iglesia, y para colmo le dejó en la estacada en el otrora "Plan Ananconda" cañí, destinado a aislar a la Francia de nuestros entonces archienemigos al mando de Francisco I.
Un saludo.
P.D.: felicitarte, o consolarte, por tu amplio conocimiento de la biografía oficial, y de la real del Papíto Georgiano.
Los otros "generales": Hitler, Churchill, Stalin
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- Coronel
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P.D.: felicitarte, o consolarte, por tu amplio conocimiento de la biografía oficial, y de la real del Papíto Georgiano.
Bueno, Roy...ya sabes que en las buenas historias, el papel del malo siempre es el más divertido. A ver si encuentro la referencia exacta de la escena , en que nuestros dos personajes, superhéroe y archivillano, Holmes y Moriarti, Winston y Iosif,se reunen en un aparte, no recuerdo si en Teherán o ya en Yalta, y lápiz azul en mano trazan fronteras y porcentajes en Europa Central. Es digno de leerse.
Enhorabuena a VM a su vez por el artículo de Churchill!
- urquhart
- General de Ejército
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Hola Carlogratto:
Winston presentó, según la leyenda urbana en una servilleta, una especie de reparto de la Europa Balcánica y Central, recuerdo en ese sentido:
Grecia URSS, 10%; R.U. 90%
Hungría, URSS 50%, R.U. 50%
Rumania, URSS 90%, R.U. 10%
Esta reunión tuvo lugar en el otoño de 1944 en Moscú.
En Yalta, Winston y Franklin debieron acceder a mover la frontera sovietico polaca hacia la Linea Curzon, recompensando a Polonia con la linea Oder Neisse. Del mismo modo, Winston deseaba crear una especie de Confederación Danubiana, formada por Baviera, Austria y Hungría. Tuvo que aceptar que los ciudadanos soviéticos y yugoeslavos fueran entregados a sus respectivos gobiernos.
Ahora no recuerdo si fue en Teherán o en Yalta, donde Koba brindó por el fusilamiento de 100.000 oficiales alemanes, cosa que disgustó a Winston, y el hijo de Roosevelt, presto, brindó por el fusilamiento de tan solo 10.000.
Saludos.
Y Gracias
Winston presentó, según la leyenda urbana en una servilleta, una especie de reparto de la Europa Balcánica y Central, recuerdo en ese sentido:
Grecia URSS, 10%; R.U. 90%
Hungría, URSS 50%, R.U. 50%
Rumania, URSS 90%, R.U. 10%
Esta reunión tuvo lugar en el otoño de 1944 en Moscú.
En Yalta, Winston y Franklin debieron acceder a mover la frontera sovietico polaca hacia la Linea Curzon, recompensando a Polonia con la linea Oder Neisse. Del mismo modo, Winston deseaba crear una especie de Confederación Danubiana, formada por Baviera, Austria y Hungría. Tuvo que aceptar que los ciudadanos soviéticos y yugoeslavos fueran entregados a sus respectivos gobiernos.
Ahora no recuerdo si fue en Teherán o en Yalta, donde Koba brindó por el fusilamiento de 100.000 oficiales alemanes, cosa que disgustó a Winston, y el hijo de Roosevelt, presto, brindó por el fusilamiento de tan solo 10.000.
Saludos.
Y Gracias
Tempus Fugit
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- Coronel
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- Registrado: 26 Oct 2007, 02:52
Esta reunión tuvo lugar en el otoño de 1944 en Moscú.
Sí, correcto..en Moscú, 1944. Este es el episodio, según las memorias de Winston:
“El momento era propicio para la negociación, de modo que dije: «Vamos a resolver nuestros asuntos en los Balcanes. Sus ejércitos están en Rumania y Bulgaria. Nosotros tenemos allí intereses, misiones y agentes. No vamos a pelearnos por detalles. En lo que respecta a Gran Bretaña y Rusia, ¿qué les parece que ustedes tengan una supremacía del 90 por 100 en Rumania, que nosotros tengamos la misma supremacía en Grecia y que vayamos a medias en Yugoslavia?» Mientras traducían esto escribí en una cuartilla:
Rumania:
Rusia 90%.
Los demás 10%
Grecia:
Gran Bretaña 90%.
Rusia 10%
Yugoslavia: 50-50%
Hungría: 50-50%
Bulgaria:
Rusia 75%.
Los demás 25%
Le pasé la cuartilla a Stalin, que ya había escuchado la traducción Hubo una fuerte pausa. Entonces, con su lápiz azul, trazó en ella un signo grande indicando su aprobación y nos la devolvió. Todo quedó resuelto en menos tiempo del que se tardó en formularlo. [...]
Después se produjo un largo silencio. El papel con la marca a lápiz quedó en medio de la mesa. Al final dije: «¿No pensarán que resulta demasiado cínico si parece que hemos resuelto estas cuestiones, que afectan a millones de personas, con tanta ligereza? Quememos el papel.» «No -dijo Stalin-, consérvelo usted.»”
Winston S. Churchill. La Segunda Guerra Mundial (II)
Fantásticos, estos dos...
Saludos!
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