Von Kleist escribió:Vaya, con razon me he encontrado la bandeja de MPs con 5 privados de Eriol con la palabra clave "SARPE" (es la que usamos para situaciones de emergencia como esta, SM, cuando sacas los pies del tiesto, pero tu no digas nada...).
Aplaudo tu sentido del humor.
Estoy soñandoVon Kleist escribió:En fin, hablando ya en serio -y dejando de lado tus habituales fobias obsesivo-compulsivas- la verdad es que me casi da miedo admitirlo , pero concuerdo contigo en el tema de la posible intervencion japonesa contra la URSS, SM. Como tú, considero que era muy poco probable que Japón coordinara de alguna forma su estrategia con Alemania para atacar al ER. Y ello por una sencilla razón, dentro la bicefalia y tensiones existentes en el seno de la FFAA niponas (el ejército imperial por un lado, y la marina por otro) esta tenía la sarten por el mango, dado que el poderio japonés era eminentemente naval. Y Yamamoto ya había delineado, antes de la guerra, su estratagía de "ir hacia el Sur", es decir, hacia el Pacífico meridional y central.
No puedo creer que concuerdes conmigo.
Pues retiro lo dicho sobre los MP de Eriol y pido disculpas públicas por mi odiosa e irrespetuosa insinuación.
En rigor de verdad, es IMPOSIBLE no coincidir conmigo, ya que imaginar a Japón atacando a la URSS me parece muy poco probable. La única forma (remota) de que Japón hubiera llegado a realizar un ataque de "Diversión" en Octubre de 1941 (coincidiendo con la fecha de Taifún) hubiera sido partiendo de la "Interesante y Excelente" información que vertió Chepicoro.
Para ello hubiera sido necesario que ya a finales de 1940 o como mucho primavera de 1941, los 2 cuerpos diplomáticos definan una estrategia cooperativa, un plan en común, los alcances de dicho plan, y por sobre todas las cosas habría que haberle ofrecido una "Zanahoria" (bastante grande) como para que los japoneses acepten los "Enormes" riesgos de atacar a la URSS, abriendo otro frente.
Pero para definir esa afinada y aceitada estrategia en común, como siempre debería respetarse mis 2 axiomas:
1) Viajar en el tiempo y reemplazar a Hitler (Y quizás a Yamamoto también)
2) Contar con un saber previo y amplios conocimientos sobre la SGM y sobre aspectos diplomáticos y Geopolíticos, para valernos de esa información y poder darles una "Zanahoria" a los japoneses que les resulte lo suficientemente convincente como para que se arriesguen a atacar a la URSS.
Eso sí, olvídense de fabricar el Panzer III, formar fuerzas mecanizadas, entrenarlos en el arte de las operaciones combinadas o de posponer Perl Harbor para 1942.
ACLARACIÓN:
- Aún así concuerdo con Eriol que era POSIBLE (NO PROBABLE) fabricar el Panzer III y enseñarles a los japoneses algo sobre la guerra mecanizada. Pero para ello deberíamos viajar en el tiempo a 1939 y contar con un "Diario de mañana" más grande que una Biblia.
Interesante reflexiónVon Kleist escribió:Respecto a los enfrentamientos del Lago Khasan y Kalkhin Gol, no olvidemos que estos no respondieron a una estrategia diseñada desde Tokyo ni a directrices del Cuartel General Imperial, sino que fueron acciones decididas y ejecutadas sobre el terreno por los jefes del Ejército del Kwantung, que operaban de facto como un ejército semiautonomo dentro del propio ejército japonés; pero lo que es claro es que Tokyo, después de Kalkhin Gol, se apresuró a hacer la paces con la URSS. En cuanto a la influencia de esas batallas, en términos numéricos relativos a las bajas (aunque hay disparidad de cifras, según las fuentes), parece ser que las de los sovieticos fueron superiores, siempre teniendo en cuenta que los japoneses contaban con la estimable ventaja de combatir a la defensiva en posiciones preparadas; pero es indudable que los japoneses quedaron impresionados por la potencia de fuego sovietica; simplemente el Ejército Imperial no estaba en condiciones de combatir a un ejército con tales concentraciones de artilleria pesada y blindados... y es palmario que esas experiencias pesaron a la hora de evitar futuros choques con el Ejército Rojo.
Algunas cosas no las sabía y gracias por ilustrarme.
Saludos, estimado Von Kleist, perdón por mi insinuación y gracias por tomarte en tono de solfa.