No es ni mucho menos así de sencillo si no mucho más complejo La división entre las dos ramas principales del Islam, el chiismo y el sunismo, se remonta al año 632, cuando murió el Profeta Mahoma. El origen del conflicto fue la oposición entre los que querían escoger al siguiente líder (sunitas) y los que creían que el poder debía pasar al primo y yerno de Mahoma, Ali (chiitas). Actualmente, entre el 10 y 15 por ciento de los musulmanes en todo el mundo son chiitas, mientras que la mayoría son sunitas. Superioridad numérica en el mundo musulmán Sunitas: 87% de los musulmanes. Chiitas: 13% de los musulmanes.pagano escribió:Sobre esta medida, hecha la ley, hecha la trampa:
No se tiene intención en Pakistán de moderar las enseñanzas radicales de las madrasas por lo que seguirán sus talibanes (estudiantes religiosos) recibiendo un adoctrinamiento que promulga y venera la violencia como modo de imponer las tesis religiosas. No adoctrinará directamente a extranjeros, pero los nacionales adoctrinados allí, podrán ser los nuevos muláhs, imanes o jeques que organicen y adoctrinen a gente de otros países en los postulados más radicales y violentos. Simplemente, tienen que adoctrinar en el propio Pakistán fuera de las madrasas o en el extranjero a los no pakistaníes. Sí se libran los pakistaníes que están en el extranjero (en los atentados del 7J casi todos eran descendientes pakistaníes (¿podrían mantener la nacionalidad de origen de sus padres?), éstos retornar a su país aprovechando por ejemplo unas vacaciones, recibir adoctrinamiento en las madrasas y volver a su país de destino para organizar/adoctrinar a otros terroristas.
Principales piedras de tropiezo
– Culto del imam. La doctrina del Imamato es una característica clave del chiismo y el principal desacuerdo con el sunismo. Así, los chiitas creen que los imames, líderes espirituales, son infalibles en todos los asuntos, actos, principios y creencias y que son los intermediarios entre el pueblo y Dios. Los chiitas esperan la llegada del duodécimo Imam que se convertirá en líder musulmán, el Mesías, capaz de instalar el Reino de Dios en esta tierra pecaminosa.
Para los sunitas esta concepción es ajena, ya que sostienen el concepto de adoración directa de Alá, sin intermediarios. El imam, desde su punto de vista, es una figura religiosa ordinaria. La importancia que los chiitas conceden al papel de los imames y Ali y pondría en duda el lugar del propio Profeta Mahoma. Por ello los sunitas creen que los chiitas se permitieron introducir en el islam innovaciones “indebidas”.
Hoy en día, esta división religiosa también tiene una vertiente política, que constituye una lucha por la influencia regional entre los poderes políticos chiitas, liderados por Irán, y los poderes políticos sunitas, liberados por Arabia Saudita.