Estimados todos:
Es sorprendente todo el barullo montado por el asunto del Brexit y Gibraltar. Desde luego, ha sido más problemático que otro de los temas espinosos donde quedaban en juego cuestiones de soberanía y de seguridad, como el acuerdo sobre Irlanda del Norte. En ese caso, los irlandeses están más que satisfechos; ni frontera dura, ni aduanas, respeto absoluto a los derechos de los irlandeses en Irlanda del Norte, cooperación Norte-Sur, financiación...
https://www.independent.ie/business/bre ... 30669.html
https://www.irishtimes.com/news/politic ... -1.3697971
Seguramente todo se hubiera resuelto si los observadores españoles hubieran estado atentos a la redacción de la versión definitiva de los acuerdos del Brexit antes de que éste fuera publicada... (qué poco se fusila entre los responsables de asegurar los intereses españoles en Bruselas). Pero, una vez ocurrido el maremoto, hemos asistido a la amenaza del veto, al paripé del cruce de cartas obvias, al tremendismo pepero y a la interpretación más que excesiva y forzada de Sánchez en la que pareció que era inminente el izado de la bandera española en Gibraltar.
En este hilo se ha mostrado que la oposición española brama contra Sánchez, de la misma manera que los unionistas irlandeses, los galeses, escoceses, la oposición y muchos conservadores rechazan al posición de May. Lo que no se había escrito es que también hay reproches en Gibraltar. La oposición del GSD no ve razón para que el alcalde Picardo se muestre tan contento. Para ellos, es el único en todos los territorios británicos que apoya a May. Y se chichan por las concesiones hechas a España relacionadas con la fiscalidad y el control medio ambiental.
http://chronicle.gi/2018/11/azopardi-qu ... exit-deal/
En fin... en todos los lados cuecen habas.
Mi opinión se resume pronto: En realidad, todo ha sido una patada hacia adelante. La mera existencia de cartas reconociendo que el Reino Unido tratará por separado los asuntos gibraltareños compromete las posiciones futuras de las negociaciones bilaterales del Reino Unido y la UE tras el Brexit. Tanto como la ausencia de un texto legal "pata negra" que recogiera las aspiraciones españolas.
Es una patada adelante porque los problemas se presentarán después del Brexit. Seguramente en unos meses/años, cuando May y Sánchez ya no estén en el gobierno. Qué sean otros los que se peguen sobre los tecnicismos aprobados y escritos de la particularidad de Gibraltar. Hoy, sin embargo, ambos tratan de mostrar sólo el lado que les favorece a cada uno.
Saludos.