Creo más preocupante para esa clase culta el levantamiento cosaco y el ataque a la Unión de Brest con la iglesia católica ucraniana.Domper escribió:Respecto a la «campaña ideológica». Muy poca gente en España sabrá donde está Japón… o tal vez sí porque sí lo sabrán miembros de la nobleza, burgueses y los pocos lectores de periódicos, que pertenecerán a la minoría culta e influyente. Al resto les bastará con lo que oigan desde el púlpito, y la iglesia será la primera interesada en hablar de mártires.
Si vemos esa rebelión ataca a Polonia, el bastión católico en el este, y supone poner las bases del ascenso ruso que precisamente con el patriarca Nikón y su reforma eclesiástica de esos años se convertirá centro de la Iglesia ortodoxa.
No los subestimes, es el país que más rápido de adapta a las situaciones bélicas de sus vecinos: lo vemos equiparse de forma "moderna" a la china y fortificarse tras el revés en Baekgang en el S. VII, readaptarse tras la primeras incursiones mongolas, volver a modernizarse con rapidez en el uso de armas de fuego en el s. XVI, y sabemos que en una década pasó de un candidato a ser sometido con tratados desiguales a una potencia occidentalizada.Respecto al revulsivo que pueda ser bombardear Edo, España tiene una superioridad tecnológica tal, que además se va a incrementar a medida que se vayan aplicando nuevas técnicas, que poco podrán hacer los nipones ¿contratar exiliados holandeses? De mucho les servirá un galeón armado con mosquetes frente a un acorazado a vapor con cañones de retrocarga, que sería raro que no apareciesen antes de veinte años.
De acuerdo, pero es técnicamente un vasallo de China y del clan Shimazu de Satsuma. Ambas cortes se pueden enfadar.De las Ryukyu, sería el lugar ideal para un protectorado hispano.
Los Qing son expansionistas, es cierto, pero por ahora solo ha habido unos pocos roces y ahora están ocupados en el sur. Japón está metido en lo suyo pero ha cometido la torpeza de atacar a los cristianos y resulta una excelente víctima propiciatoria. Sobre todo, derrotar a los manchúes requeriría enormes medios que España no tiene.
Si nos centramos en la Realpolitik es más peligroso un estado poderoso y expansionista como los Qing, que no van a dejar de mirar a Formosa o al Amur; y que en cuando pueda impondrán el sistema Haijin y el modelo de Cantón.
El asunto de los medios ya lo he dicho, el grueso del ejército se acaba de unir a ellos, son los chinos del norte, gracias a la diplomacia y las ventajas. Solo hay que usar esos recursos, la "caballería de San Jorge" por así decirlo.
Sin los chinos no tienen infantería de mosquetes ni artillería para tomar plazas fuertes (y todos sabemos lo buenas que son las penínsulas del Mar Amarillo para fortificarse).
La operación se puede hacer por fases: el príncipe heredero es convencido (y el competente general también) para que en vez de ir a su muerte en Seúl, viajen con una pequeña fuerza se asienten en Pusan y alcen la bandera de la restauración nacional. La armada coreana a pesar de sus barcos dragón no sería rival a una flota moderna.
La corte reaccionaría enviando los ejércitos del sur y del centro, pero como se vio en la Guerra Imjim las plazas japonesas del extremo de la península les fueron imposibles de tomar a coreanos y chinos. Eso daría un campo para adiestrar un ejército coreano mejorado mientras se hace una labor diplomática y propagandística contra la corrupta corte y las facciones nobiliarias.
La corte no podría permanecer tras los pasos de montaña porque supondría permitir un régimen en el sur que se estaría extendiendo.
Eso obligaría a llamar a los Qing, si estos envían un ejército (¿100.000?) pronto sería un problema por saqueos y devastación (y los coreanos les tienen muchas ganas a los manchúes), aumentando la rebelión en apoyo del príncipe, además en cuanto bajen de Seul el flanco a Inchon queda abierto para una operación marítima, dejando al ejército en medio de Corea frente a las guerrillas.
Los Qing tienen un límite si deben luchar contra otros dos frentes al mismo tiempo y proteger su Manchuria, y la costa del Mar Amarillo.