tercioidiaquez escribió: ↑14 May 2022, 22:02
Exacto son las posibilidades de procesar grandes datos sobre el campo de batalla en el menor tiempo posible lo que da la victoria y los que llevan el peso son las pequeñas unidades tácticas de infantes ucranianos capaces de derrotar cualquier amenaza gracias a las armas modernas portables y los drones. Y siempre a sido así, las grandes victorias alemanas al inicio de la WWII se debieron a que los generales alemanes conocían los tiempos de la batalla mucho mejor que los enemigos que tomaban decisiones sobre situaciones ya superadas en el campo.
De hecho, se ha dicho del ejército israelí que ha sido el más firme seguidor de la doctrina alemana dando gran autonomía a los mandos de diferentes niveles. En su día, la brillante defensa en el Golán, cuando una brigada acorazada no solo frenó a una fuerza siria diez veces mayor, sino que contratacó (el final, con veinte tanques persiguiendo a los restos de una división mecanizada y penetrando profundamente en Siria, es para nota), fue un enfrentamiento en el que las pequeñas unidades israelíes actuando con su propia iniciativa, derrotaron a la mastodóntica pero anquilosada fuerza siria.
Lo malo de los modernos sistemas de comunicaciones es la tentación de dirigirlo todo desde el centro. Por las pantallitas se ve muy bien, pero lo que dices, no se llega a todo.
Hay más. La mejor manera de paralizar a un ejército es echar brincas (o castigar) a los subalternos, sorbe todo a esos con peligrosa iniciativa, que resultan un peligro... para su jefe y su poltrona. Nada como unos buenos puros para que en lo sucesivo nadie se atreva a intervenir, y pase el muerto al de arriba.
El general Norman Schwarzkopf cuenta en sus memorias que cuando estuvo en un puesto administrativo en e Pentágono, se encontró con la costumbre de los subalternos de no tomar decisiones y pasarle el muerto al de arriba, que repetía la jugada hasta que el mando perecía asfixiado por la montaña de papeles. Schwarzkopf cuenta que curó tal manía ordenando que quien pasara una decisión al superior, tenía que hacerlo adjuntando un memorando en el que explicara los motivos por los que él no había podido resolverlo. De repente el jueguecito perdió atractivo.
No sé como andarán los rusos en esta cuestión. La tradición previa no era muy allá, y quedó sobradamente demostrada en su día en Oriente Medio, cuando los ejércitos árabes seguían el manual al pie de la letra y les daban para el pelo. Claro que la culpa era de los incompetentes árabes, del material ruso de exportación, etcétera, etcétera.
Saludos