No le busques tres pies al gato, que no va de palabras sino de tratamientos. Tampoco la nariz aguileña o la alopecia son enfermedades, y mucha gente se las trata.
Un poco de sensatez. NI el diagnóstico de la disforia de género es como el de la gripe, ni el tratamiento como tomarse un Paracetamol. Para muchos cuadros se requiere no solo un diagnóstico, sino que este sea posteriormente refrendado por un comité (por ejemplo, para tratamientos con Somatotropina). De lo contrario llegaríamos al absurdo de que se requiera autorización paterna para un tatuaje o para operar un defecto estético, pero no para un tratamiento que puede tener importantes efectos secundarios si el diagnóstico es incorrecto.De todas formas si no es una enfermedad, la transición debe ser totalmente libre y no debe precisar de diagnostico psicológico sea un menor o no.
Como dije, hay guías clínicas. No me protestes a mi sino a los que las confeccionaron. Por ejemplo:
https://www.endocrinologiapediatrica.or ... 0-A283.pdf
En esa guía se delimitan claramente los tratamientos reversibles (el frenado puberal), los parcialmente reversibles (el tratamiento hormonal cruzado) y el irreversible (cirugía de reasignación de género), y los criterios de elegibilidad. Para el tratamiento hormonal cruzado, es tener más de dieciséis años (los llamados «menores maduros», que tiene relevancia judicial), y para el quirúrgico, ser mayor de edad.
En el programa verdoso no se hace ninguna de esas matizaciones. Pone, literalmente, «Garantizaremos la imposibilidad de los tratamientos hormonales y de la cirugía de "cambio de sexo" en los menores de edad». Punto.
Si buscamos otras declaraciones voxeras, hablan de «explosión de casos» cuando los estudios epidemiológicos hablan de 1/9.685 a 1/21.031 varones biológicos y de 1/15.456 a 1/48.096 mujeres biológicas (la publicación es de 2015, y los estudios anteriores, pero de este siglo).
Saludos