Después de un paréntesis, reiniciamos la serie de encuentros menores de la Regia Marina con la Maditerranean Fleet durante el periodo de 1940 a 1943. Encuentros menores por los resultados immediatos de éstos, no así por el número de unifdades movilizadas.
La BATALLA DE CABO TEULADA
Tras el desatre de Taranto, Supermarina aún pondría en marcha una última operación antes de fin de año, a pesar de las dificultades para aparejar un número significativo de acorazados. Sería la actividad de la Mediterranean Fleet la que proporcionaría a Roma la oportunidad de vengar Taranto.
LOS PLANES BRITÁNICOS
Cunningham, tras la noche de Tarento, quería aprovechar la superioridad naval que habían alcanzado, organizando una compleja operación con el fin de evitar la circunnavegación de África para abastecer y reforzar las fuerzas británicas en Egipto, y de paso suministrar a la guarnición de Malta. Del mismo modo, aprovecharía la ocasión para transferir a Gibraltar el vetusto acorazado HMS Ramillies. La superioridad naval en el Mediterráneo Oriental ya no estaba en peligro y los convoyes navegaban de forma segura a Grecia.
El Plan, incluía un convoy con destino a Malta y Alejandría, partiendo desde Gibraltar, compuesto por los mercantes Clan Forbes y, Clan Fraser , con destino a Malta y el New Zeland Star (a Alejandría), así como cuatro corbetas para el Mediterráneo Oriental, los cruceros HMS Manchaster y HMS Southampton con 1.400 soldados destinados a Egipto, dando cobertura la Force H, formada por el crucero de batalla HMS Renown, el portaaviones HMS Ark Royal, los cruceros ligeros HMS Sheffield y HMS Despatch y 9 destructores bajo el mando del Almirante Sommerville.
HMS Despatch, crucero ligero de la clase Danae.
De Alejandría partiría parte de la Mediterranean Fleet, La Fuerza D compuesta por acorazado HMS Ramillies, cruceros HMS Newcastle, HMS Conventry, HMS Berwick y 5 destructores, siendo el punto de encuentro de las dos formaciones aguas al sur de Cabo Teulada, Cerdeña. Producido el encuentro con la Fuerza H el HMS Ramillies, el HMS Newcastle y el HMS Conventry se dirigirían a Gibraltar y el convoy cruzaría el Canal de Sicilia de noche para reducir el riesgo de encuentros con la Regia Marina.
REACCION ITALIANA
Los buques de la Mediterranean Fleet zarparón de Alejandría en la tarde del 24 de noviembre, mientras que el convoy pasó el Estrecho de Gibraltar en la noche entre el 24 y el 25 de noviembre.
En etsa ocasión Supermarina fue alertada de la actividad británica por agentes situados en el Campo de Gibraltar. Al igual que en ocasiones anteriores un avión civil de la línea Italia-Libia había informado a las 11:30 del 25 de noviembre de que había avistado una formación naval formada por 10 unidades militares curso 330 °, la Fuerza D.
Entre 11,30 y 12,30 zarparían desde Nápoles:
RN Vittorio Veneto y RN Giulio Cesare , Almirante Campioni, con el 13 ª Squadrone de Cacciatorpedineri (4 unidades) y el 7 ° Squadrone (3 unidades)
La I División, Almirante Iachino, RN Pola, RN Fiume y RN Gorizia y el 9 º Sq. Ct (4 unidades)
12:30 zarpado desde Messina:
III División, Almirante Sansonetti, RN Bolzano, RN Trento y RN Trieste y el 12 ° Sq. Ct (3 unidades)
Torpederos RN Vega, RN Sirius, RN Calliope y RN Sagittario.
El 27 las dos flotas sabían que existía una formación enemiga en el área, aunque desconociendo su ubicación exacta. Tras una serie de avistamientos del reconocimiento aéreo, Sommerville conoce la presencia de la poderosa fuerza naval italiana,y ordena al convoy continuar con la protección del HMS Conventry y tres destructores, aprestando el resto de sus fuerzas para el combate contra la Regia Marina.
Anteriormente al avistamiento, la Agrupación Italiana podía considerarse superior a ambas formaciones británicas por separado, pero la concentración de la Fuerza H y la Fuerza D, equilibra la potencia artillera de ambos contendientes, pero con la ventaja para los británicos de la presencia del HMS Ark Royal. Campioni es informado por el reconocimiento de la Regia Aeronautica de la presencia del convoy con dirección al Canal de Sicilia, y posteriormente de la presencia de la Fuerza H, minutos antes del encuentro con la Fuerza D.
Campioni conoce por los torpederos, que rastrillan la entrada del Canal de Sicilia, la presencia de la Fuerza D, y por la Regia de la Fuerza H, y con buen criterio estima que no cuenta con la superioridad necesaria para enfrentarse a los británicos, y decide retirarse. Justo en ese momento, los cruceros de Iachino se encuentran a 24.000 metros de la agrupación británica, a las 12h. 15’. 5 minutos después, las distancias se han acortado, y Iachinno ordena abrir fuego. Los británicos responden pasados unos minutos.
La acción combativa, y las diversas posiciones relativas obligarían a ambos contendientes a utilizar la mitad de la artillería de los acorazados. El fuego italiano fue intenso, y bien dirigido durante 25’ a 30’, y respondido por los británicos pero en alcance máximo de sus viejos acorazados, finalmente interrumpido por las maniobras evasivas obligadas ante el ataque de aparatos torpederos del HMS Ark Royal.
Las cortinas de humo tendidas por la escolta italiana, y la mayor velocidad de los navíos italianos permitieron romper el contacto con las fuerzas británicas; así como la repentina aparición de un convoy francés, que crearía cierta confusión a bordo del HMS Renown, al confundirlos con los acorazados italianos, apareciendo tras la cortina de humo.
Durante la batalla el crucero HMS Berwick sería alcanzado en dos ocasiones.
HMS Berwick
El único barco italiano alcanzado fue el destructor RN Lanciere
Cortinas de humo italianas, protegiendo al RN Lanciere
Después de la batalla de los buques británicos, fueron divididos, la Fuerza H con los buques entregados por la Mediterranean Fleet se dirigirían a Gibraltar; mientras que el resto del convoy durante la noche a través del canal de Sicilia.
Los torpederos rastrillaban el Canal de Sicilia, junto a 12 M.A.S. El RN Sagittario , a medianoche atacó al enemigo y dando aviso del descubrimiento al resto de la formación de torpederos. Sin embargo, esta señal se recibió con retraso, impidiendo el ataque de toda la formación. La Fuerza Británica no supo que fue atacada.
Más tarde RN Calliope fue el único capaz de lanzar sus torpedos sin consecuencias. Los submarinos Smb Dessiè y Smb. Tembien también lanzarían ataques de forma independiente, al coincidir la ruta del convoy con sus cuadrículas correspondientes.
Ruta del convoy británico, y posición de los ataques italianos.
Conclusiones
Muchos historiadores italianos consideran que la fuerzas de Campioni podrían haber batido a los británicos, especialmente a la Force D, de haber conocido su salida de Alejandría con tiempo. Una especie de Waterloo naval, vencer en primer término a la Force D, fuerte en un viejo acorazado armado con 6 x 381 mm, para pasar después a enfrentarse con la Force H en el Canal de Sicilia.
Supermarina efectivamente conocía la salida de la Force H de Gibraltar, y podía exponer sus 9 x 381 mm. y 10 x 320 mm. frente a los 8 x 381 mm., pero en este caso embarcados en un crucero de batalla, poco protegido frente a la artillería de grueso calibre como demostraría el hundimiento del HMS Hood; y aún mantenía confianza en que la Regia Marina podría hacer frente a los aparatos del HMS Ark Royal, pero conocemos que la Regia Aeronautica sólo dedicó un puñado de viejos CR-32 a hostigar el convoy de los Clanes en su ruta a Malta.
Estas consideraciones posteriores a la SGM, fueron similares a las realziadas en Roma en 1940, pasando la Flota del mando de Campioni a Iachinno, que cuanto menos había roto el fuego con sus cruceros.
Otras conclusiones, contemporáneas al combate se refirieron a los torpederos, y a sus infructuosos ataques contra embarcaciones enemigas, dado que como anteriormente los excelentes torpedos italianos no habían alcanzado sus blancos. Se consideró correctamente que las distancias eran bien apreciadas, al igual que las derivas, pero la velocidad estimada era incorrecta. Fallos en los lanzamiento de los submarinos concluían en el mismo sentido.
Angelo Iachino, en su obra Tramonto di una grande marina, de 1959, escribiría:
De nuevo los británicos arriesgaron ser sorprendidos en desventaja por nuestras fuerzas. De no ser por nuestro pobre reconocimiento aéreo y a los fallos de nuestras fuerzas sutiles en el Canal de Sicilia, de nuevo podríamos haber conseguido una victoria que contrapesase la desafortunada noche de Tarento.
MEDIOS AÉREOS BRITANICOS:
Durante el encuentro Cabo Teulada, el HMS Ark Royal embarcaba 24 Fulmars (800 y 808 Sqn de la FAA) y 30 Swordfish (810, 818 y 820 Sqn); en contraposición a la nula presencia de aparatos italianos durante el combate.
Saludos.