La última locura de Ferdinand Porsche
Cuando los alemanes se encontraron con los KV soviéticos, la industria germana empezó a trabajar en la idea de crear un carro pesado capaz de enfrentarse con cualquier enemigo potencial, una línea de trabajo diferente a la del carro pesado que estaba en estudio en ese momento y que iba a dar lugar al legendario Tiger I. Dos empresas, Krupp y Porsche empezaron a desarrollar sus proyectos para lo que pronto fue conocido como "carro súper pesado"
El primer proyecto en ponerse en marcha fue el Krupp, que denominó a su proyecto Löwe (León) y partió de un diseño básico que en esencia era una versión agrandada del chasis que estaba diseñando para el Tiger, pero con blindaje inclinado.
El proyecto Löwe se bifurcó en dos líneas de trabajo, el Leichte Löwe (León ligero) y el Schwere Löwe (León pesado), de 75 y 90 tn respectivamente. Estos dos vehículos usarían la misma barcaza, pero el Leichte llevaría un blindaje frontal de 90 a 100 mm, con la torre en posición retrasada, y el Schwere tendría una protección frontal de 120 mm, con la torre en posición central, como el Tigeri (H).
El armamento, similar en ambas versiones, sería un cañón de 105 mm L/70 capaz, en teoría, de atravesar 200 mm de blindaje a 1000 metros, y la planta motriz se basaría en un motor de la Daimler Benz adaptado de un motor de lancha torpedera, capaz de generar 1000 hp. La suspensión iba a ser similar a la del Tiger (H), es decir, FAMO de nueve pares de ruedas. Se esperaba obtener una velocidad en carretera de 25 km/h.
A comienzos del 42 Krupp recibió el visto bueno del Heereswaffenant para su proyecto, pero se les indicó que abandonaran la idea de una versión ligera y se centraran en el Schwere, con algunas modificaciones solicitadas por Hitler: el blindaje debía incrementarse hasta los 140 mm en el frontal y el armamento principal debía pasar a ser un cañón de 150 mm L/40. Además la velocidad del vehículo debía incrementarse hasta los 30 km/h. El proyecto fue designado como PzKpfw VII Löwe.
El proyecto fue definitivamente aparcado en el otoño del 42 ya que la Krupp no veía posible alcanzar esas prestaciones con las características de su vehículo. En cambio propusieron una solución en base al cañón L/71 de 88 mm de modo que el aligeramiento de la torre permitiera incrementar la velocidad del vehículo. Dado que ya se estaba trabajando en dotar al Tiger de ese armamento estaba claro que el proyecto era redundante. De hecho el perfil existente de la propuesta para el Löwe recuerda mucho a la línea definitiva de la barcaza de Henschel.
Perfil del Löwe; las mediadas con el arma serían 7,74 m de largo, 3,08 de alto y 3,83 de ancho
Pero como ya he dicho, el Löwe no era el único proyecto de carro súper pesado. La Porsche también tenía un diseño en marcha. De hecho en febrero del 42 Ferdinand Porsche convenció a Hitler de que su diseño cubriría sobradamente las expectativas del Führer y en marzo recibió el encargo de un nuevo diseño de carro superpesado de 100 tn denominado Porsche Typ 205. La Krupp debió ver que su propio proyecto no iba a tener demasiadas posibilidades de aceptación, y colaboró con el desarrollo de la Porsche. El protoiipo iba a ser diseñado personalmente por el doctor Ferdinand. la Krupp se encargaría de la manufactura de
todos los elementos (barcazas, armamento, torre).
Para el armamento se trabajó inicialmente en la línea del 150 mm L/40 con un cañón automático coaxial de 20 mm, pero se barajaron otros posibles cañones, 128 mm L/55, 105 L/70, 150 L/37, 127 mm naval… finalmente el armamento para el primer prototipo se estableció en base a un 128 mm L/50 y un 75 mm coaxial.
Para entonces el proyecto ya tenía una designación oficial: PzKpfw VIII Maus, y la estimación inicial de 100-120 tn se había disparado a las 190 tn, ya que Porsche había diseñado una barcaza con un blindaje frontal de 200 mm, 24n en el frontal de la torre y laterales que iban desde los 180 mm hasta los 100. El motor era el Daimler Benz MB509 ((el motor derivado del de una torpedera) con 1000 hp y daba una velocidad en carretera de unos 18 km/h. Las dimensiones eran dantescas, incluso comparado con el Löwe, con 10 m de largo, 3,67 de ancho y 3,63 de alto.
El modelo fue presentado oficialmente a Hitler en mayo del 43, quedando éste tan satisfecho con la idea que encargó personalmente la producción de 150 ejemplares. El primer prototipo completo debería haber estado completo en diciembre, pero entonces intervino Guderian. Como inspector de la PanzerWaffe el general ordenó cancelar inmediatamente el proyecto por considerarlo contrario a cualquier lógica táctica o industrial. Sí Hitler protestó o no al respecto, no se sabe, pero para entonces la estrella de Ferdinand Porsche ya se había apagado del todo, así que es dudoso que Guderian encontrar demasiada oposición.
La barcaza nº 1 con la torre simulada
El desarrollo del modelo continuó a título experimental y se completó la primera barcaza en la fecha prevista. La monstruosidad de la Porsche usaba unas cadenas de 1.25 m de ancho y un tren de rodaje de 12 pares de ruedas en distribución FAMO para lograr que el monstruoso vehículo tuviera una presión sobre el terreno de 1,4 kg/cm2, y sus dimensiones hacían inútiles la mayoría de los túneles y puentes europeos, por no hablar de la imposibilidad de desplazarlo por ferrocarril: no había vagones con el ancho adecuado. La velocidad obtenida en las pruebas no alcanzó ni en broma las previsiones, y el Maus apenas alcanzaba los 12 km/h por carretera (carretera que por supuesto quedaría impracticable tras el paso de un Maus)
Dado que cualquier puente se hundiría ante uno de estos mastodontes, se decidió que el Maus debía atravesar los ríos sumergido. Para ello se estanqueizó la barcaza y se diseñó un Snorkel. Cómo esperaba el doctor Porsche que un monstruo de casi 200 tn que apenas podía moverse por superficie fuera capaz de moverse bajo el agua, con el peso añadido de la presión de 5 u 8 metros de profundidad, es algo que nunca sabremos. Por suerte para los carristas alemanes jamás se llevó a cabo la prueba.
EL Maus completo (barcaza nº2 con la única torre construida)
La segunda barcaza se construyó en marzo del 44, con un nuevo motor, de nuevo un Daimler Benz, que daba 1200 hp. Al mes siguiente Krupp completó el montaje de la primera torre, aunque realmente algunos componentes de puntería jamás llegaron a instalarse. En teoría el Pak 44 128 mm L/55 debía perforar 200 mm de distancia a 1000 m, pero en las pruebas dio una capacidad de 143 mm. Para poder girar la monstruosa torre el Maus tenía un motor adicional de 500 hp. Algunas ideas presentadas por la Porsche planeaban el diseño de una torre armada con dos cañones coaxiales de 88 mm para su uso como carro antiaéreo.
La torre se montó sobre el segundo ejemplar construido, y el primero permaneció con una torre simulada (de madera, con pesos añadidos para dar el peso de la definitiva). Porsche completó durante el 44 otras dos barcazas y Krupp empezó a montar dos más, pero en julio se les ordenó desmantelar esas cuatro barcazas para reaprovechar los materiales. Krupp recibió una orden en agosto prohibiendo cualquier trabajo posterior en el Maus. Y ahí se cerró finalmente el desarrollo técnico del súper carro.
El ejemplar completo construido (la única torre completa con la barcaza nº 2) fue destinado a pruebas, lo que requirió de la construcción de un vagón especial para trasladarlo por tren. EN las pruebas el Maus demostró lo que ya suponían los militares germanos: era un monstruo inútil y lisiado, incapaz de avanzar más de un par de km sin una avería. En campo a través apenas podía dar 5 km/h, eso cuando no encontraba una irregularidad del terreno infranqueable. Bastaba con un suelo medianamente blando para que embarrancara, y tras tener que remolcarlo algunas veces se estimó que en combate la única forma de sacarlo de un atasco sería remolcándolo con otros dos Maus. La Porsche realizó también pruebas con la barcaza nº1.
Hacia abril del 45 se pensó en trasladar el único Maus completo a Berlín para usarlo en combate, pero nunca llegó. El vehículo fue encontrado por los soviéticos en las cercanías de Kummersdorf (donde habían tenido lugar las pruebas), con la barcaza destrozada y la torre caída a un lado. Si fue destruido por un ataque aéreo, o se averió y lo destruyó su dotación, es algo que se ignora. La torre estaba razonablemente intacta, así que los soviéticos pudieron montar un ejemplar completo con la barcaza nº 3, que todavía estaba en las factorías de Krupp.
El Maus tal y como fue encontrado
Tras algunas pruebas en Kubinka (que debieron despertar grandes risas entre los carristas soviéticos) el carro fue restaurado lo mejor posible y expuesto en el museo del polígono, donde todavía puede vérsele: un monumento de 188 tn de acero en memoria de la megalomanía de dos hombres: Adolf Hitler y Ferdinand Porsche.