¿Que había perdido 2/3 partes de su ejército en Sicilia?
Por lo demás es interesante eso que señalas de los elefantes. Si efevctivamente no resultasen adecuados para unatque nocturno por sorpresa -cosa que no me atrevo a asegurar en este momento- entonces la intención de Pirro no hubiese sido atacar por la noche, sino por la mañana y la marcha nocturna no pretendía sorprender a los romanos, sino simplemente "plantarse frente a ellos". En ese contexto el ataque al campamento no es una "solución de última hora", sino la continuación lógica del plan de Pirro.
También he pensado eso de "extraviarse por la noche" ¿No estaban en tierras samnitas y con tropas samnitas? Una cosa es que los samnitas aportasen pocas tropas y otra que no aportasen ningún guía capaz. La verdad es que las circunstancias de esta batalla son un poco extrañas.
Aunque me reafitrmo en que de ninguna forma puede deducirse miedo en Pirro a los romanos, ni que la capacidad combativa de su sjército se viese mermada tras las dos primeras batallas
Miedo, temor, prudencia al saberse inferior en numero, el caso es que no se atrevió a plantear la batalla para la mañana siguiente, cosa que había hecho siempre.
Las legiones penetran el linde del bosque en la persecución, y allí son rechazadas. En los días siguientes, sin batalla ni enemigos, pasean por el bosque con la seguridad que proporciona que no haya batalla y que los enemigos se hayan marchado.
Sin oposición porque no se atrevieron sus enemigos, no porque se hubiesen teleportado.
Me temo que no sea así. La provincia romana del norte de África era enormemente rica y no palidecía en absoluto frente a Egipto. La refundada Cartago, Leptis Magna, Sabrata y un largo rosario de grandes ciudades dan fe de su riqueza y prosperidad. Por lo demás, no existen esos signos de decadencia demográfica en el Imperio de Occidente a los que hacías mención.
Decadencia económica, demográfica, moral, todo ello afecto muchísimo más al imperio de occidente, y el norte de África era más rico que el resto del imperio de occidente, pero en absoluto que el de oriente.
¿Y qué más da la distancia?
¿Dónde estaban los exploradores de Varo? Porque que la marcha sea larga no es motivo para no destacar exploradores, sino, precisamente para hacerlo.
Filipo subió a lao collados confiado en los informes de sus exploradores, y se encontró con que la situación había cambiado y los romanos se le echaban encima. No había exploradores los que preguntar
Eso me pregunto yo, pero las situaciones no son comparables, él no se dirigía a una batalla.
Filipo llego a la cima y aun tuvo tiempo de alegrarse al ver a sus fuerzas ligeras persiguiendo a las romanas hasta las afueras de su campamento, la decepción vino después cuando las legiones atacaron .
No "se encontró". Vio una formación enemiga organizándose en lo alto y la atacó. Filipo tuvo el tiempo justo de hacer formar a sus tropas antes de que llegasen los romanos. Evidentemente Flaminio vio a las tropas macedonias llegando y comenzando a organizarse, y atacó sabiendo perfectamente lo que hacía.
Flaminio ataco a las fuerzas ligeras que presionaban a las suyas, y las persiguió hasta la cima.
¿Cómo no van a saberlo?
Polibio/ Historia Universal Bajo la Republica/ Libro III Tomo XVIII:
Filipo, con el anhelo de lograr su propósito, se puso en marcha con todo el ejército; pero incomodado en el camino por la oscuridad, después de haber andado un corto trecho, se atrincheró y envió un destacamento a ocupar la cumbre de los collados que le separaban del romano. Flaminio, acampado en Tetidio y sin saber dónde paraba el enemigo, destacó por delante diez escuadras de caballería y mil hombres de infantería ligera, con orden de explorar y recorrer con cuidado la campiña.
No. Flaminio no lanza "la mitad de su ejército sobre el puesto". Flaminio rechaza a las tropas macedonias frente a su campamento y carga con la mitad de su ejército contra las tropas macedionias que empiezan a aparecer sobre el colaldo.
Una vez que Filipo vio formada frente a los reales la mayor parte de su ejército, se puso en marcha por un atajo con los rodeleros y el ala derecha de la falange pura subir a las montañas; y ordenó a Nicanor, por sobrenombre el Elefante, que cuidase de que el resto del ejército fuese siguiendo sus pasos. Apenas llegó a la cumbre la vanguardia, la hizo girar hacia la izquierda, y la situó en batalla sobre aquellas eminencias que halló desamparadas, por haber los escaramuceadores macedonios rechazado por largo trecho a los romanos hasta el lado opuesto de los collados. Estaba aún el rey ordenando el ala derecha de su ejército, cuando llegaron sus mercenarios vencidos por los enemigos. Porque, como hemos dicho recientemente, desde que los vélitos romanos se vieran sostenidos y apoyados en la acción por los legionarios, recobraron tal ardor con este refuerzo, que cargando con gran furor sobre el contrario, hicieron en él un gran destrozo. El rey, desde los principios de su llegada, había advertido la refriega, que se había encendido entre los armados a la ligera, no lejos del campo enemigo: espectáculo que le había causado mucha complacencia. Pero cuando vio a los suyos volver la espalda y necesitar de socorro, se vio en la precisión de sostenerlos y arriesgarlo todo, a pesar de que la mayor parte de su falange venía aún en marcha subiendo aquellas alturas. Esto no obstante, recoge a estos combatientes, los reúne todos, infantes y caballos, en el ala derecha, y da orden a sus rodeleros y falangistas para que doblen el fondo y se estrechen sobre la derecha. Efectuado esto, como ya estaban encima los romanos, da la señal a la falange para que ataque bajas las picas, y a la infantería ligera para que ciña las alas del contrario. En este mismo instante Flaminio retira sus vélites por los intervalos de las cohortes y viene a las manos.
A eso me refiero, los refuerzos griegos habían obligado a las fuerzas ligeras romanas a retroceder hasta el campamento, y el avance se ordena para rechazar a esas fuerzas, no para cargar sobre la falange, aunque luego se asume esa función con normalidad.
Flaminio ordena el ataque en el otro flanco, y puesto que los exploradores macedonios habían sido rechazados no hay motivo para que no tuviera informes de los suyos.
En todo caso los exploradores macedonios no estaban donde debían porque Filipo los situó a su derecha.
Filipo estaba en un flanco y fue atacado, no pudo enviar nadie a ninguna parte porque apenas tuvo tiempo para organizar su flanco. Por lo demás, una vez en la cima era indiferente lo que pudiera hacer enviando exploradores: el ya estaba trabado en batalla, el ejérrcto romano ya estaba formado fuera del campamento y la mitad del ejército romano ya estaba atacándole. El fallo de la información de Filipo se produce antes, una vez en batalla ya no tiene herramientas, ni para que las tropas del otro flanco suban con mayor rapidez, ni para retrasar el ataque del otro flanco romano cuando se inicie.
Filipo tuvo tiempo antes de trabarse en combate de doblar sus filas, y en ese momento estaba venciendo en ese flanco, si en ese momento no es capaz de desligarse del combate y mirar alrededor dice muy poco de él.
Una vez la batalla se inicia con medio ejército macedonio fuera del campo de batalla, es imposible que tuviera las cartas ganadoras. Resulta que es Flaminio quien tiene todo su ejército formado, es Flaminio quien inicia la batalla y ataca a los macedonios y se encuentra con que la mitad del ejército contrario no ha llegado al campo de batalla ¿Y el que tenía las cartas ganadoras era Filipo? Yo diría que no. Si el ejército macedonio hubiera tenido tiempo de formar por completo podríamos dicutirlo ¿Pero estando la mitad fuera del campo? Por favor...
Haber si ahora me explico bien.
Flaminio, viendo que no sólo la caballería y armados a la ligera habían vuelto la espalda, sino que por éstos se había comunicado el terror al resto del ejército, saca todas sus tropas y las forma en batalla cerca de los collados. En este mismo instante los macedonios que se hallaban emboscados, marchan unos en pos de otros a Filipo, gritando: «Rey, el enemigo huye, no pierdas la ocasión; los bárbaros no pueden resistirnos; tuyo es el día, tuya la oportunidad.» De modo que Filipo, a pesar de que no le agradaba el terreno, tuvo que salir al combate. Los collados de que se habla se llaman Cinoscéfalos o cabezas de perro. Son ásperos, quebrados y bastante altos. Por este motivo Filipo, atento a la desigualdad del país, había rehusado desde el principio venir a una batalla; pero entonces, estimulado con las buenas esperanzas que le traían, mandó salir el ejército fuera de las trincheras. Flaminio, después de ordenadas en batalla sus tropas, al paso que situaba en sus puestos a los que habían luchado primero, iba recorriendo y exhortando sus líneas; porque les describió el lance tan a lo vivo como si le estuvieran viendo. «Compañeros, les dijo, ¿no son éstos aquellos macedonios que, bajo la conducción de Sulpicio, forzasteis a cuerpo descubierto en las gargantas de Eordea que tenían tomadas, desalojasteis de aquellos elevados puestos y de los cuales matasteis un gran número? ¿No son éstos aquellos mismos que, apostados en los desfiladeros del Epiro, lugar impenetrable en la opinión de todos, arrojó vuestro valor, hizo emprender la huida y tirar las armas, sin parar hasta meterse en la Macedonia? ¿Temeréis ahora a estos mismos, cuando vais a pelear con fuerzas iguales? ¡Qué! ¿Os hará más pusilámines... la memoria de lo pasado o por el contrario os inspirará más confianza? Ea, pues, compañeros, animaos los unos a los otros, y entrad en la acción con denuedo. Vivo en la confianza que el éxito de esta jornada corresponderá al de las anteriores, con la voluntad de los dioses. » (1)Dicho esto, ordenó al ala derecha que no se moviese del puesto, ni los elefantes que se hallaban delante; y él con la izquierda se dirigió arrogante al enemigo. En esta ala estaban los vélites que habían escaramuceado antes, las cuales, viéndose ahora apoyados de las legiones, volvieron a atacar con fuerza al contrario.
Una vez que Filipo vio formada frente a los reales la mayor parte de su ejército, se puso en marcha por un atajo con los rodeleros y el ala derecha de la falange pura subir a las montañas; y ordenó a Nicanor, por sobrenombre el Elefante, que cuidase de que el resto del ejército fuese siguiendo sus pasos. Apenas llegó a la cumbre la vanguardia, la hizo girar hacia la izquierda, y la situó en batalla sobre aquellas eminencias que halló desamparadas, por haber los escaramuceadores macedonios rechazado por largo trecho a los romanos hasta el lado opuesto de los collados. Estaba aún el rey ordenando el ala derecha de su ejército, cuando llegaron sus mercenarios vencidos por los enemigos. Porque, como hemos dicho recientemente, desde que los vélitos romanos se vieran sostenidos y apoyados en la acción por los legionarios, recobraron tal ardor con este refuerzo, que cargando con gran furor sobre el contrario, hicieron en él un gran destrozo. (2)El rey, desde los principios de su llegada, había advertido la refriega, que se había encendido entre los armados a la ligera, no lejos del campo enemigo: espectáculo que le había causado mucha complacencia. Pero cuando vio a los suyos volver la espalda y necesitar de socorro, se vio en la precisión de sostenerlos y arriesgarlo todo, a pesar de que la mayor parte de su falange venía aún en marcha subiendo aquellas alturas
(3) Esto no obstante, recoge a estos combatientes, los reúne todos, infantes y caballos, en el ala derecha, y (4)da orden a sus rodeleros y falangistas para que doblen el fondo y se estrechen sobre la derecha. Efectuado esto, como ya estaban encima los romanos, da la señal a la falange para que ataque bajas las picas, y a la infantería ligera para que ciña las alas del contrario. En este mismo instante Flaminio retira sus vélites por los intervalos de las cohortes y viene a las manos.
El choque fue violento por una y otra parte y la algazara excesiva, ya que mientras unos y otros voceaban, los que se hallaban fuera de la contienda animaban con gritos a los combatientes; de suerte que el espectáculo era horrible y espantoso. La derecha del rey peleaba conocidamente con ventaja; como que atacaba desde lugar superior, vencía en la fuerza de su ordenanza, y llevaba mucha superioridad para el lance presente en la calidad de sus armas. Pero al demás ejército, una parte detrás de los combatientes se hallaba fuera del tiro del enemigo, y el ala izquierda, que acababa de subir las alturas, empezaba a descubrirse par las cumbres. (5)Llaminio, viendo que su ala izquierda no podía resistir el ímpetu de la falange, y que arrollada, parte había sido ya pasada a cuchillo, parte puesta en fuga, pasa rápidamente a la derecha, único recurso de salud que le quedaba. Allí, advirtiendo que de los enemigos, unos se iban uniendo a los combatientes, otros venían bajando aún de las alturas, y los demás estaban paradas sobre las cimas; al punto sitúa al frente sus elefantes y lleva sus cohortes al enemigo. Pero los macedonios, que ni tenían quien los mandase, ni se podían reunir y tomar la forma propia de la falange, tanto a causa de la desigualdad del terreno, como porque siguiendo a los combatientes, más venían en orden de marcha que de batalla; sin esperar a venir a las manos con los romanos, emprendieran la huida espantados y desordenadas por sólo los elefantes.
.-1Flamnio ataco a las fuerzas que acosaban a sus exploradores.
.-2 Desde lo alto vio el combate junto al campamento romano (ventajas de la altura).
.-3 Situó a sus exploradores en la línea de batalla, pudo haber enviado al menos a parte de ellos a vigilar el resto del frente.
.-4 Doblo sus filas antes del combate, por lo tanto tuvo tiempo antes de que los romanos se le viniesen encima.
.-5 Es ahí cuando Flaminio ve el campo de batalla en toda su extensión, ya que anteriormente estaba avanzando con su izquierda ¿Dónde estaba Filipo mientras tanto? Seguramente bajando la colina con su media falange mientras presionaba a la infantería romana.
Ya he explicado largo y tendido que de haberse separado del combate Filipo, o haber enviado exploradores a las alturas que dominaba, y cuyo dominio no perdería hasta la carga de la derecha romana, podría haber usado esa segunda fila para sostener el frente hasta completar el despliegue del resto de sus fuerzas. Todo ello sin perjuicio de su derecha que ya estaba ganando apoyada en su posición superior.
[mod irónico on] Eso a no ser que las falanges no estuviesen entrenadas para este tipo de movimientos de reformación, y resultase que si eran rígidas.[mod irónico of]
Sí, cuando se gana
Cuandose pierde es desobediencia frente al enemigo ;)
Pero lo llames como lo llames, Flaminio no se percató de la posibilidad de esa maniobra.
En ese flanco los romanos ya estaban en persecución, así que la orden ya estaba cumplida, y en todo caso y lo llames como lo llames funciono y es iniciativa.
La mayoría de los romanos se pusieron a seguir el alcance sin perdonar a ninguno. Pero un tribuno, que no tenía consigo más que veinte compañías, reflexionando mejor sobre lo que había que hacer en tal coyuntura, contribuyó en gran manera a la consecución de la victoria. Viendo que Filipo a larga distancia del ejército estrechaba vivamente el ala izquierda de los romanos, deja el ala derecha donde ya era conocida la victoria, se revuelve contra los que estaban luchando, llega por detrás y ataca por la espalda a los macedonios.
No digo que lo fuera, pero Flaminio tampoco -y lo de "la ocasión" mejor lo dejamos pasar-. Flaminio tampoco observó el conjunto, sino cada flanco por separado y no ordenó ninguna acción tendente a llevar la inciativa de uno al otro.
Filipo ni siquiera se preocupo de su flanco izquierdo y eso que estaba ganando en el derecho.
BAGRADAS
Todo lo contrario, estoy seguro de que hostigaron a los elefantes y se retiraron... y fueron víctimas, no de los elefantes, sino de la caballería y la infantería ligera cartaginesa. Pero para los romanos era mucho más gloriso decir que los velites habían caido luchando contra los mostruosos elefantes. De hecho, me temo que la formación en profundidad no era para "contener la carga de los elefantes", sino para dejar pasillos por los que los elefantes pasaran. Pero, una vez más, al narrar la batalla la épica y la "propaganda" triunfa sobre la historia y queda mucho mejor decir que los velites fueron derrotados por elefantes que por soldaditos cartagineses; y que las legiones aguantaron formadas en profundidad la carga de los elefantes (¿?)
Mi particular reconstrucción de Bagradas -ajustándose en lo posible a las fuentes- supone que los velites hostigaran a los elefantes, y que para darles sitio para hacerlo y dejar sitio para que los elefantes pasaran entre las filas sin causar grandes daños, los romanos formaron al resto del ejército en profundidad, no solo para formar los "pasillos de elefantes", sino con la intención de tener potencia suficiente para romper rápidamente el centro cartagines -no olvidemos que tenían superioridad en infantería- . Los elefantes pasarias por esos "pasillos" siendo hostigados, antes durante y después por los -cada vez menos- velites. Esa parte "salio bien", como nos dice Polibio, pero cuando la falange chocó contra las legiones y la caballería derroto a la romana y rodeó a la infantería, el ejército de Régulo se vino abajo rápidamente sin tener posibilidad de romper el centro adversario.
Ahora estas adelantando las acciones romanas en la batalla de Zama y suponiendo que el Cónsul Regulo era igual de bueno que el Escipion de postrimerías de la segunda guerra púnica.
Por cierto, sí hay una cuestión que creo resulta relevante a la hora de enjuiciar la supuesta "rigidez" del ejército macedonio frente al romano.
Un importante cantidad de grandes victorias romanas se producen en la defensa de zonas fuertes, en zonas elegidas por sus generales para reducir la maniobrabilidad de un enemigo superior en número -Aquae Sextiae, Alesia etc...- Sin embargo, el supuestamente menos flexible ejército macedonio de Alejandro lo que hacía era ir a la batalla en campo abierto y demostrar más velocidad y maniobrabilidad que el ejército enemigo.
César en Alesia se refugia tras sus fortificaciones
Alejandro en Gaugamela e Issos derrota al enemigo en campo abierto
¿Cuál de los dos ejércitos demostrós ser más flexible en batalla?
Estoy seguro que en Gaugamela e Issos a Alejandro le preocupaba enormemente el ejército enemigo que tenía a retaguardia, o la bisoñez de sus tropas. Así como estoy seguro que en el caso de los galos o germanos el líder huiría dejando al ejército en la estacada o su muerte significaría el fin de este.
A todo hombre tarde o temprano le llega la muerte ¿Y cómo puede morir mejor un hombre que afrontando temibles opciones, defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?" T. M.