En mi opinión los plazos serían diferentes.
Para empezar la propuesta de adoptar una estrategia indirecta empezó a tomar forma en julio, pero pongamos que en esta ocasión la desarrollan más profundamente para convencer a Hitler, lo que les lleva como mínimo un mes, y ya estamos en Agosto.
Ahora Hitler ha decidido adoptar esa estrategia, pero necesitara convencer a Mussolini y a Franco. El primero posiblemente no adoptaría ninguna decisión hasta el fracaso de su ofensiva de Egipto en septiembre. Así que se pierde otro mes, aunque la presión sobre GB en la BdI se mantiene centrada en las industrias, puertos y aeródromos.
La Operazione E se detiene el 16 de septiembre al fortificarse los italianos, que quedan en evidencia. Es el turno de negociar y lograr el permiso para operar en la zona con las panzer divisiones, aunque posiblemente Hitler tenga que hacer algunas concesiones como en el caso real, mando supremo italiano, y tal vez algunas cosas más (tecnología, suministros, concesiones territoriales, etc). Eso nos coloca en octubre que es cuando la estrategia periférica puede empezar a tomar forma.
En octubre por fin empiezan a llevarse a cabo los primeros pasos para la intervención alemana. Los italianos reciben ayuda técnica y de construcciones alemanas y empiezan a mejorar los puertos y aeródromos libios y del Dodecaneso. Mientras tanto las unidades alemanas empiezan a preparar su traslado.
Mientras tanto las negociaciones con España han continuado. Franco ya sabemos que era correoso y no estaba muy dispuesto a jugarse el tipo sino estaba seguro de su ventaja, así que tal vez hubiese que empezar con algunas concesiones a cambio de algo inocuo como preparar los campos de aviación del estrecho. Este movimiento aun de ser detectado por la inteligencia británica no pasaría de ser confundido con el de mejora de las defensas del estrecho que se llevó a cabo en la realidad, sobre todo porque no implicaría a ninguna unidad real.
Cuando tiene lugar la reunión de Hendaya, Hitler acepta todas las condiciones de Franco, un millón de toneladas de trigo, cien mil de combustible, petróleo, carbón, y rearmar a las fuerzas armadas (en mi opinión el material de origen francés es la mejor opción alemana pues no repercute en sus arcas y es el mismo tipo de material ya en servicio en España). Franco acepta, lo que solo es conocido por su camarilla intima.
Ahora Hitler tiene que reunirse con Mussolini para poner las últimas fichas diplomáticas en movimiento. Justo entonces se produce la invasión de Grecia por los italianos, Hitler monta en cólera al enterarse, sin darse cuenta que eso despista a los británicos que centran su atención en los Balcanes olvidando la Entrevista de Hendaya. También ayuda a este despiste la situación de Rumanía, donde con la excusa de proteger los pozos de petróleo se produce una ocupación alemana.
Por lo tanto la reunión de Hendaya se pierde entre la sucesión de acontecimientos de los días siguientes. Los británicos ven la ofensiva italiana en Grecia, y como los alemanes empiezan a trasladar grupos de ataque de la LW al Dodecaneso, Sicilia, y personal de tierra a Bardia y Tobruk, incluyendo cañones AA. Tras ellos llegaran los aviones y los panzer que ya empiezan a moverse hacia el sur por los ferrocarriles italianos.
En el haber británico han logrado asestar un duro golpe a la flota británica en Tarento.
En noviembre empieza la faceta militar de la estrategia indirecta.
La Luftwaffe empieza a atacar Alejandria, y a desarrollar misiones para negar el control de Mediterráneo oriental a la Mediterranean Fleet, mientras los dos grupos de Stuka estacionados en Sicilia StG 1 y 2, con la ayuda de los bombarderos italianos y la protección de cazas italo-alemanes, empiezan los bombardeos de Malta.
Estas operaciones despejan el Mediterráneo central lo suficiente como para que los convoyes italianos puedan cruzar con seguridad al norte de África. Gracias a los agentes desplegados en la Línea saben cuándo la MF está allí y cuando puede suponer una amenaza, y la MF está siendo acosada, por lo que es más difícil la intromisión naval británica.
Un Rommel recién ascendido y no Guderian, pues esto crearía tiranteces con la cadena de mando italiana (para que vamos a buscar dificultades políticas), toma el mando del África Korps, una fuerza de una división panzer y otra ligera. Para su desgracia aun no puede atacar pues lo tiene terminantemente prohibido por el OKW. Por un lado Hitler quiere esperar a que el AK este al completo, y por otro no quiere que un ataque apresurado impida la destrucción de la Fuerza H en Gibraltar. De todos modos no se ha dado ninguna intervención en Grecia, así que Wavel tiene sus fuerzas al completo.
En 1941 empiezan los ataques.
El día 6 de enero se da luz verde a la operación Felix. Durante ese tiempo España ha hecho acopio en la medida de lo posible de materiales y suministros comprados en el extranjero (tampoco es que pudiese permitirse mucho), se trasladan municiones españolas a los aeródromos del estrecho pero no tropas. Tan solo falta confirmar la presencia de la FH en el puerto para el ataque.
A partir de ese momento cuando se confirme la presencia de la FH en Gibraltar a última hora de la tarde, a ser posible efectuando tareas de reaprovisionamiento o con las calderas apagadas, se ordena el ataque.
Las diferentes oleadas despegan conforme les llega el turno y vuelan durante la noche rumbo a su objetivo. Pueden ser guiados por haces Gerat, o simplemente ser ayudados en su navegación por iluminación terrestre, algo para lo que las tropas encargadas de hacerlo no deben conocer su finalidad, así que el secreto se mantiene.
- Poco antes del amanecer, el radar de Gibraltar capta las grandes formaciones de aviones que se dirigen al peñón y se da la alarma (eso con suerte pues podía haber ecos de radar a causa de las montañas o el clima invernal).
La primera oleada ataca con fuerza el peñón para anular en lo posible la AA y el radar.
La segunda oleada empieza a concentrarse en la flota, lanzando minas para mantenerla atrapada.
Cuando llegan los Stuka la mayor parte atacan a la flota, las bombas de 500 kg dañan seriamente los acorazados y el portaaviones en sus superestructuras. Si en esos momentos hay algún CB en puerto es posible que se diese el fin del Hood, aun de no haberlo los daños son muy extensos y muchas de las bombas caídas en el agua han sido incluso más letales que las que han impactado. Las soldaduras se han quebrado y los remaches han saltado por la presión del agua.
La flota trata de hacerse a la mar para huir mientras los aviones se dirigen a aeródromos españoles para reaprovisionarse. En ellos las fuerzas españolas han sido alertadas esa misma noche, por lo que no ha habido ocasión para fugas de información. Curiosamente los primeros en llegar no son los bombarderos sino aviones de transporte que los han seguido llevando a bordo personal de tierra alemán.
A mediodía los bombarderos regresan al peñón, pero ahora son los españoles que alertados esa mañana se han preparado para bombardear la roca. Tras ellos llegaran una vez más los aviones alemanes. Si para entonces la FH sigue allí es muy difícil que sobreviva, si por el contrario ha logrado hacerse a la mar (en el caso de los destructores y cruceros casi imposible), los esperan una docena de submarinos que posiblemente sean letales atacando a buques ralentizados por los daños y las inundaciones, y de todas formas es posible que aun puedan recibir algún ataque aéreo antes de salir del alcance de los bombarderos. Si alguno sobrevive estará en dique durante meses.
A partir de ese momento en España se desarrolla el asedio de Gibraltar. Tropas alemanas empiezan a entrar por la frontera junto a las armas destinadas al ejército español. Parte de los aviones participantes en el embate inicial se trasladan a diversos puntos para reforzar las defensas españolas. Portugal contiene la respiración aunque recibe garantías de que esto no ira con ellos si los británicos no se meten por en medio. Los preparativos para la conquista llevaran entre uno y dos meses.
Ahora los británicos están hasta el cuello aunque curiosamente parezca que la amenaza de invasión de Inglaterra ha remitido. Tienen que enfrentarse a las crisis de Gibraltar y de Egipto, y en ambos casos es casi imposible enviar apoyos, en el primer caso tendrían que arriesgarse con los bombarderos y submarinos que participaron en Felix, y en el segundo los refuerzos tardarían demasiado para ser decisivos.
Ante esa ventaja de la posición central, Rommel supera El Alemein y llega al Nilo a más tardar en marzo, sus tropas se dividen en dos, una división panzer junto a los italianos se dirige al sur para tratar de enlazar con el AOI mientras el resto permanece junto a él. Alejandria cae y la MF (si aún existe), la ha abandonado. Mientras los ingenieros alemanes reparan el puerto se reciben nuevos refuerzos para compensar a la división que ha acompañados a los italianos.
Mientras tanto en el mar el Scharnhorst y el Gneisenau han paralizado temporalmente los convoyes británicos. Tras su primera campaña cruzan el estrecho y repostan en Málaga. A su alrededor unidades italianas están sembrando de minas y efectuando labores antisubmarinas en apoyo de España. Posteriormente se unirán a estas fuerzas el Hipper y el Scher.
En mayo cuando Rommel pasa al ataque para cruzar el canal, la flota germano-italiana realiza un desembarco por sorpresa similar al de Noruega en Haifa. Cuando los gebirsjager desembarcan Palestina es un hervidero a causa de la rebelión árabe liderada por El Mufti y más allá la rebelión iraquí, ahora apoyada por brandenburgers y paracaidistas. Así que los británicos están en problemas en todo el próximo oriente. En cuanto sea posible los grupos de ataque que actuaban desde el Dodecaneso se trasladan a Palestina para apoyar las operaciones en Iraq y Palestina.
En junio los británicos están en franca retirada en Oriente Próximo, han tenido que evacuar el Sinai para evitar ser atrapados entre los panzer y las tropas que están llegando a Palestina. Egipto ha caído, tropas italo-germanas se dirigen hacia Sudan y las fuerzas de Rommel están pasando el canal que los alemanes empiezan a reparar. Para empeorar las cosas el Bismarck se ha hecho a la mar y ha llegado a Gibraltar (sin la Fuerza H no ha podido ser interceptado). En ese puerto se ira concentrando en las semanas siguientes las flotas italiana y alemana, mientras en Francia se ultiman los preparativos para Seelöwe. Los bombardeos sobre objetivos del sur de Inglaterra continúan.
Las únicas victorias británicas pueden haber sido dadas por la ocupación de las colonias españolas, y tal vez en operaciones Circuss. Si Gran Bretaña no ha pedido la paz, debe enfrentarse a la amenaza de invasión con el agravante de la amenaza que la flota de superficie combinada supone sobre los convoyes. Una doble amenaza a la que la Royal Navy tendría muchas dificultades para enfrentarse, concentrarse en Inglaterra para la defensa supondría dejar desamparados los convoyes---