Eso es, el Seiner Majestät Schiff UB-65... el de la leyenda fantasmal. Padeció tantos accidentes y muertes inexplicables entre la tripulación que muchos creen que estuvo encantado.
Fue un submarino de la clase UB-III perteneciente a la II Flotilla de Flandes en el momento de su hundimiento. Fue uno de los submarinos costeros encargados de machacar los barcos y convoyes en aguas próximas a las islas británicas (incluida Irlanda).
Entregado en 1917 estuvo en servicio menos de 1 año antes de hundirse en julio de 1918 al mando del capitán Martin Schelle. Fue un comandante con la Cruz de Hierro de 1ª Clase con experiencia en la caza de buques aliados que comandó dos submarinos en la guerra. Al mando del UC-33 y del UB-65 en año y medio hundió 39 buques, con casi 20.000 Tn echadas a pique.
El submarino acumuló desgracias desde antes de su botadura:
- Una viga caída mató a un obrero antes de botadura.
- Antes de ser entregado, durante las primeras pruebas, los gases de combustión en la sala de máquinas mataron a 3 tripulantes en un accidente que nadie entendió porque, aparentemente, los accidentados tuvieron tiempo para salir del submarino.
- Ya en servicio, durante unas maniobras, durante las operaciones de inmersión uno de los marineros que debían asegurar las escotillas del submarino salió a cubierta y se lanzó contra las hélices del barco. Murió despedazado.
- Las maniobras no se suspendieron y ese mismo día ocurrió otro incidente: Mientras permanecía a 30 pies de profundidad el submarino repentinamente fue incapaz de mantenerse estable y cayó al fondo. Después de 12 h sumergido, cuando empezaba a fallar el oxígeno y se habían producido filtraciones de agua que habían producido gases tóxicos, el submarino de manera igualmente inexplicable, se recuperó y subió a superficie. Dos marineros murieron asfixiados.
- Nuevamente en puerto fue revisado y dado el visto bueno. Durante la carga de los torpedos a bordo una explosión de uno de ellos mató al segundo oficial y otros 8 marineros.
- Durante las nuevas reparaciones que necesitó el submarino, las murmuraciones sobre la maldición del mismo corrían entre la tripulación. Algunos marineros afrontaron un consejo de guerra al negarse a servir en el UB-65. Hubo quien afirmó que el fantasma del segundo oficial se le había aparecido en la proa con los brazos abiertos. Antes de hundirse hubo -supuestamente- nuevas apariciones. El jefe de artillería enloqueció y otro marinero se suicidó durante las reparaciones debido al miedo a los fantasmas.
La leyenda dice que las autoridades militares alemanas mandaron a sacerdotes a hacer una ceremonia de exorcismo.
El UB-65 se cobró la vida de 16 tripulantes y un operario por accidentes o suicidios antes de hundirse al O de las costas irlandesas.
Incluso el hundimiento del UB-65 es confuso y estuvo sujeto a interpretaciones. En los últimos momentos de actividad el UB-65 hundió el Maria Jose, un mercante portugués, el 14 de julio de 1918. Se dice que luego se reunió con otro submarino alemán -aunque quizá sea incierto- antes de ser visto por un submarino norteamericano en patrulla antisubmarina por esas aguas.
Las fuentes norteamericanas dicen que su submarino, el AL-2, fue testigo del hundimiento del UB-65. Se dice que el AL-2 lanzó un torpedo contra el UB-65 y también se dice que el AL-2 vio como el UB-65 estallaba fortuitamente mientras los norteamericanos se preparaban para lanzarle un torpedo.
En esa escena final también se dice que el capitán del AL-2 vio momentos antes de la explosión del UB-64 la figura del fantasma del segundo oficial en cubierta mirándolo fijamente.
La leyenda:
La leyenda de los fantasmas del UB-65 empezaron a publicarse en EE.UU en los 60, en la revista Blackwood’s. Otros atribuyen el origen de la leyenda al escritor Charles Berlitz, conspiranioco y creyente en asuntos paranormales. Otros a Hector Charles Bywater, un antiguo oficial de la Royal Navy y ex-espía durante la I Guerra Mundial.
La realidad:
El UB-65 tuvo muy mala suerte y un montón de incidentes, lo que explica la leyenda de la existencia de fantasmas. Sin embargo hay un error que los norteamericanos no corrigieron. Atribuyeron el hundimiento del UB-65 al submarino AL-2. De hecho, el Secretario de Marina Josephus Daniels contó en el National Press Club de Washington en el otoño de 1918 que el AL-2 hizo frente a un torpedo alemán antes de hundir al UB-65. Su capitán, el entonces teniente Paul L Foster recibió la medalla de Servicios Distinguidos por ello. Llego a vicealmirante y un destructor recibió su nombre, el USS Paul L Foster.
Ver: "Submarine Stories: Recollections from the Diesel Boats", de Paul L. Stillwell.
La verdad, sin embargo, fue descubierta por la TV británica en 2004. Localizaron los restos de un submarino al O de Irlanda. Fue identificado como el UB-65 por los números grabados en el bronce de la hélice. El submarino no tenía el impacto de ningún torpedo y tenía las escotillas abiertas. Todo sugiere que hubo un accidente a bordo que lo hundió y que parte de la tripulación trató de salir del submarino antes de morir.
El vídeo con la identificación del submarino aquí.
https://www.youtube.com/watch?v=exVGFYPqFbM
No se habla tanto, sin embargo, de heroísmo del capitán del único buque de guerra hundido por el UB-65, el balandro HMS Arbutus, un barco Q. Soportó un par de torpedos por parte del UB-65. El primero mató a nueve tripulantes y daño seriamente al barco. Parte de su tripulación pudo ser traspasada al destructor USS O'Brien. Sin embargo, el capitán Charles H. Oxlade volvió al Arbutus para tratar de hacerse con el barco. Recibió el segundo torpedo horas después y murió con otros 6 tripulantes.
http://www.southribble-greatwar.com/hal ... rston.html.
Más datos en:
https://uboat.net/wwi/boats/?boat=UB+65
La clasificación queda así:
Gaspacher, 15
Albertopus. 14
Tercioidiaquez. 8
Mig43. 5
Reytuerto. 2
Aponez. 2
Jandres. 1
Tu turno, Gaspacher.
Saludos.