Todo dependería de como se encarase el asunto.
En mi opinión sería tan simple como un recetario con un nombre llamativo y atractivo para la nobleza, algo como "Nuevo recetario de la cocina española, la vanguardia del arte culinario" . Este tendría que constar de un prefacio que diese unas pinceladas en la dirección correcta, haciendo un gran incapie en la limpieza de manos y utensilios, seguido una buena colección de platos; primeros segundos y postres bien balanceados, que siguiesen esa maxima.
Para la nobleza sería tan simple como que la casa del marqués hiciera convites frecuentes a los notables de la ciudad que sirviesen esos platos acompañados de "pasteles de ensueño", con nata, crema pastelera, chocolate y adornos varios, vamos, algo que atrajese a los presentes llevándolos a emularlo (y si el rey hace otro tanto ya paramos de contar). Para el pueblo llano la puerta de entrada podría ser el ejército y las tabernas del puerto y las colonias fabriles controladas por la Compañía.
Eso y que una de las "carreras" enseñadas a los huerfanos en el orfanato-colegio de Valencia es la de cocina. Cualquier noble que quisiera esos platos tendría que acudir a "gente de confianza".
Un saludo.
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. Y ver cómo es la insignia de almirante que pensaste para Cereceda.
