Desbaratando el mito sobre los cazas chinos En varias publicaciones especializadas, se ha mencionado el supuesto interés de Venezuela en el caza ligero chino-pakistaní JF-17 Thunder (según designación pakistaní) ó FC-1 Xiaolong (según designación china) (Nota), por lo que vamos a realizar un estudio, algo detallado sobre dicho caza, y su impacto en la realidad militar venezolana.
A este supuesto interés, se agrega por un lado la información oficial del gobierno de Bolivia según la cual “han iniciado estudios para la adquisición de un caza bien brasileño, bien chino”. Otros países de la ALBA, Nicaragua y Cuba, requieren igualmente de dichos cazas, aunque no ha habido un pronunciamiento publico sobre ello; el primero para constituir su necesaria aviación de combate negada por el gobierno de Reagan en los años 80, y la segunda para ir pensado desde ya en un sustituto de su amplia flota de cazas ligeros MiG-21. Ecuador, en una situación nacional, militar y geopolítica, algo más comprometida, ha decidido tomar un atajo y comprar a Sudáfrica algunos ejemplares de sus cazas Cheetah, aceptar en donación de Venezuela cazas Mirage-50, e intentar llevar adelante un programa de mejoras en su flota de cazas Mirage-F1 y Kfir; pero que a futuro, no se podría descartar a este país, si un programa sobre este caza chino es asumido por el conjunto de países de la ALBA.
La calidad de los productos chinos: ¿Mito o realidad?Desde hace algún tiempo, los que contribuimos con este blog, hemos participado en foros y hemos expuesto nuestras ideas sobre esto, hemos debatido incluso en privado sobre lo mismo, acerca de la factibilidad, conveniencia y realidad sobre la posible compra de aeronaves de origen chino, y hemos venido sosteniendo que el mito entorno a los productos de origen chino, ya no es tan valido, o nada valido.
Todo es una cuestión de etapas. En los años 60 y 70, los productos de origen taiwanés, eran percibidos como mera “bagatela”, esto se debió a que la industria taiwanesa fue utilizada como una inmensa maquila para inundar el mundo capitalista de productos de fácil acceso pero que crease ciertas dependencias consumistas. Sin embargo, la práctica permite mejorar, y esa otrora industria taiwanesas de mala calidad, ya hoy día no es tal, por poner un ejemplo: varios de los productos electrodomésticos que en las ultimas dos décadas han ganado los premios a la excelencia son de marcas de Taiwán, Sampo por solo citar un ejemplo.
En el ámbito tecnológico e industrial existe una máxima japonesa, que ya ha sido ya ampliamente aceptada: COPIA -> MEJORA -> INVENTA. Podríamos agregarle antes del “Copia”: “Produce”, pues hay que empezar produciendo algo, aunque sea bajo licencia, en cooperación con otras industrias exógenas a la nación.
El caso chino es una mezcla de lo anterior, por un lado se produjo el mismo fenómeno que pasó en Taiwán (la simple “Maquila”, convertida en “Industria Propia y Mejorada”); por otro lado, el mismo “orgullo japonés” que impulsó a la industria nipona a aplicar el principio antes reseñado, impulsó también a China a imitarlo. Pero por otro lado, al ser China una superpotencia (¿Quién lo puede dudar?), sintió la necesidad imperiosa de ser autosuficiente en todo lo que pudiese serlo, por razones de seguridad y estabilidad de dicha superpoderosa nación, lo que vimos en el desfile cívico-militar del 60 aniversario de la Revolución china, el pasado 1ro de Octubre, es un mensaje hacía el propio pueblo chino, de que China ya hoy es autosuficiente (aunque esto tiene sus matices).
No se puede alegar que la industria aeroespacial china es de ayer para hoy, esta nace casi desde el mismo momento que nace la Revolución china, o lo que es lo mismo, tiene mínimo cinco décadas de “investigación frenética”. Prácticamente todos los modelos de aeronaves ex – soviéticas, usadas por las fuerzas armadas chinas en estas ultimas cinco décadas y más, fueron religiosamente copiados. China adicionalmente, pese a sus limitaciones políticas, propias de una potencia que lucha por emerger, contó con determinada ayuda tecnológica de países como Israel, Francia, el Reino Unido, e incluso de los propios Estados Unidos, principalmente en la ultima etapa de existencia de la Unión Soviética, cuando el Pentágono advirtió una buena oportunidad de acercamiento con Pekín, dados los “ruidos” entre Moscu y Pekín. Caído el Muro de Berlín, descuartizada la Unión Soviética, dicha colaboración se fue disipando (como cabía esperar), y ya hoy es casi anecdótica, relativamente hablando pues igual se mantienen convenidos entre China y empresas como Eurocopter y Boeing para la producción de piezas, y para la fabricación incluso de aeronaves bajo licencia.
La ultima guerra a la que China concurrió fue contra Vietnam, y de eso ya hace más de dos décadas, mas sin embargo, esto no puede ser usado como excusa para decir que los productos chinos no son de buena calidad bajo la excusa de que “no han sido probados en combate”. Dicha excusa es muy vaga, porque para algo se han hecho las matemáticas, 2 + 2 siempre será cuatro, y si bien en las guerras concurren muchos hechos fortuitos, y un buen estudio científico puede verse comprometido con la realidad (le esta sucediendo hoy a los propios Estados Unidos, y la noticia reciente de la vulnerabilidad de sus UAV, Nota 1, Nota 2), no menos cierto es que los números son los números. A menos que una empresa este falsificando sus datos (ha pasado), cualquier estudio serio debe necesariamente, aceptar los datos que proporcionan las empresas, solo las instituciones gubernamentales pueden ir más allá de la simple verificación de estos datos, pues para eso tienen una serie de parámetros de prueba, que realizan antes de cada negociación, pero nosotros no somos un ente gubernamental, y solo nos basamos en los datos públicos proporcionados por las empresa del sector, en este caso aeronáutico.
Además, para cualquier persona que tenga conocimientos de “empresas” sabe perfectamente, que una táctica muy recurrente, y hasta éticamente aceptada hoy día, es la de lanzar propaganda contraria a la empresa rival. No debemos por lo tanto, extrañarnos de estos rumores sobre la industria china, menos aun en el contexto mundial de hoy, donde vemos a un Estados Unidos económicamente en caída libre, y a una China económicamente disparada como un cohete aeroespacial.
En conclusión, afirmamos que es un mito, pues no ha sido una industria aeroespacial forjada de la noche a la mañana, sino con una progresión natural, evidente.
Consideraciones preliminaresLa Nueva Fuerza Armada Nacional (asumimos las consecuencias de utilizar este slogan), la Bolivariana, requiere de decisiones audaces, nacionalistas, “practicas y pragmáticas” hasta donde haya espacio para ello (y no el “pragmatismo” como un fin en si mismo), debe ser una Fuerza Armada, consciente de sus limitaciones y amenazas (la amenaza no son solo las fuerzas lacayas colombianas), y sobretodo debe ser diligente en reconocer el “Tiempo” y los “Recursos” disponibles. Desde nuestra opinión, se deben establecer ETAPAS, unas más inmediatas que otras. Debe morir finalmente, el "Sifrinismo" militar venezolano.
Cuando la extinta Unión Sovietica entró a la "Gran Guerra Patria" contra las fuerzas nazistas germanas, en 1.942, equipo por equipo, estas ultimas lo superaban en calidad tecnologica de forma abrumadora, ademas de contar con unas fuerzas armadas (las nazis) que venían de una campaña ininterrumpida y exitosa desde hacía cuatro años, por lo tanto poseian tropas mejor preparadas que las sovieticas. Este es otro punto que se debe considerar: las guerras pueden perderse si nos menospreciamos desde antes de iniciar la misma.
Así mismo, proponemos ver estas decisiones ya no solo considerando la realidad de Venezuela, sino considerando la realidad de la ALBA toda, como instancia geopolítica de suma importancia para nuestra seguridad nacional. ¿Qué caza ligero de Generación 4 ó 4.5, pudiera estandarizarse y masificarse hacia el seno de la ALBA? ¿el Rafale? ¿el MiG-35? ¿el JF-17/FC-1? ¿el J-10/FC-20?...
También queremos aclarar que los que nos conocen a través de nuestra participación en los diversos foros de temática militar (una participación cada día menor, gracias a las estupidas murallas mentales del “tercermundismo” de algunos), saben que hemos defendido igualmente todo producto no objeto a veto, sea ruso, chino o iraní, o de cualquier otro país que no este negado para nuestras adquisiciones, es una cuestión de realismo y no de “lobbismo”. Así que lejos de hacerle un lobby a este caza chino en cuestión, valga la aclaratoria, queremos introducir en el computador, sin temor alguno, los datos públicos de dichos aparatos que están disponibles en la red de redes, INTERNET, y ver que arrojan estos cálculos. Pudiéramos, llevarnos una pequeña sorpresita, y quizás este caza chino en cuestión, no sea en el fondo una “mala idea”.